Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

Señor

IV Rey 16:2 Veinte años tenía Acaz cuando comenzó a reinar, y dieciséis años reinó en Jerusalén . No hizo lo que era agradable a los ojos del Señor Dios suyo, como David su padre;
IV Rey 16:3 sino que siguió las huellas de los reyes de Israel; y además de eso consagró su propio hijo, haciéndole pasar por el fuego, según la idolatría de las naciones que disipó el Señor delante de los hijos de Israel.
IV Rey 16:8 Y habiendo recogido cuanta plata y oro pudo hallarse en la casa del Señor y en los tesoros del rey, se lo remitió como un presente al rey de los asirios;
IV Rey 16:14 Trasladó el altar de bronce, que estaba en la presencia del Señor, desde la fachada del templo, y de su sitio y lugar propio en el templo del Señor, y lo colocó a un lado de aquel altar, al septentrión.
IV Rey 16:14 Trasladó el altar de bronce, que estaba en la presencia del Señor, desde la fachada del templo, y de su sitio y lugar propio en el templo del Señor, y lo colocó a un lado de aquel altar, al septentrión.
IV Rey 16:18 Asimismo quitó el Musac del sábado, construido en el templo; y por causa del rey de los asirios hizo en la parte interior del templo del Señor el pasadizo para ir a él desde su palacio que antes estaba en la parte de afuera.
IV Rey 17:2 E hizo el mal delante del Señor; aunque no tanto como los reyes de Israel sus predecesores.
IV Rey 17:7 La causa fue que los hijos de Israel habían pecado, adorando dioses ajenos, contra el Señor Dios suyo que los había sacado de la tierra de Egipto del poder del faraón, rey de Egipto;
IV Rey 17:8 y siguiendo los ritos o prácticas de las naciones que el Señor había destruido delante de los hijos de Israel, y los ritos o costumbres de los reyes de Israel que habían hecho lo mismo.
IV Rey 17:9 Habían, pues, los hijos de Israel ofendido al Señor Dios suyo con su mal proceder; y habían erigido altares en los lugares altos en todas sus ciudades, desde las torres de guardas hasta las plazas fuertes o grandes ciudades.
IV Rey 17:11 quemando allí incienso sobre los altares, a imitación de las naciones que había dispersado el Señor así que entraron en aquella tierra; y habían cometido acciones muy criminales provocando la ira del Señor.
IV Rey 17:11 quemando allí incienso sobre los altares, a imitación de las naciones que había dispersado el Señor así que entraron en aquella tierra; y habían cometido acciones muy criminales provocando la ira del Señor.
IV Rey 17:12 Adoraron las inmundicias o ídolos contra el precepto con que se lo había prohibido el Señor.
IV Rey 17:13 Sobre lo cual no cesó el Señor de amonestarlos, así en Israel como en Judá, por medio de todos los profetas y videntes diciendo: Convertíos de vuestras pésimas costumbres, observad mis preceptos y ceremonias, conforme a todas las leyes que promulgué a vuestros padres, y como os lo he enviado a decir por medio de mis siervos, los profetas.
IV Rey 17:14 Mas ellos no dieron oídos; antes endurecieron su cerviz, o se obstinaron, imitando la dureza de sus padres, los cuales no quisieron obedecer al Señor Dios suyo.
IV Rey 17:15 Y desecharon sus leyes y el pacto que había concertado con sus padres, despreciando las amonestaciones con que los reconvino; y siguiendo las vanidades o ídolos se infatuaron, e imitaron a las naciones circunvecinas, sobre las cuales les había prevenido el Señor que no hicieran lo que ellas hacían.
IV Rey 17:16 Y abandonaron todos los preceptos del Señor Dios suyo, y se formaron dos becerros de fundición, y bosques y adoraron a toda la mili-cia o constelaciones del cielo; y dieron culto a Baal;
IV Rey 17:17 y consagraron a sus hijos e hijas por medio del fuego; y se ocuparon en adivinaciones y agüeros; en suma, se abandonaron a toda maldad delante del Señor, provocando su ira.
IV Rey 17:18 Por tanto el Señor se indignó altamente contra Israel, y lo arrojó de delante de sí, y no quedó sino la sola tribu de Judá.
IV Rey 17:19 Mas ni aun la misma tribu de Judá observó los mandamientos del Señor Dios suyo; antes bien imitó los extravíos o errores en que había incurrido Israel.
IV Rey 17:20 Y así el Señor desechó a todo el linaje de Israel, y lo castigó y lo entregó en manos de sus opresores, hasta que lo arrojó enteramente de su presencia.
IV Rey 17:21 Enojado ya desde aquel tiempo en que Israel, separándose de la casa de David, eligió por rey suyo a Jeroboam, hijo de Nabat; pues Jeroboam apartó del Señor a Israel, y le hizo cometer el pecado grande de idolatría.
IV Rey 17:23 Hasta tanto que el Señor arrojó de su presencia a Israel, como lo tenía predicho por medio de todos los profetas, sus siervos. Y fue Israel transportado de su tierra a la Asiria, en donde se halla hasta hoy día.
IV Rey 17:25 Mas cuando comenzaron a morar en ellas, no temían al Señor ni le adoraban; por lo que el Señor envió contra dichas gentes leones que las iban despedazando.
IV Rey 17:25 Mas cuando comenzaron a morar en ellas, no temían al Señor ni le adoraban; por lo que el Señor envió contra dichas gentes leones que las iban despedazando.
IV Rey 17:26 Dieron aviso de esto al rey de los asirios y le dijeron: Las gentes que tú has transportado para poblar las ciudades de Samaria, ignoran el culto del Dios de aquel país, y el Señor ha enviado contra ellas leones que las van despedazando, por cuanto no saben ellas el culto del Dios de aquella tierra.
IV Rey 17:28 Habiendo, pues, ido uno de los sacerdotes que habían sido traídos cautivos de Samaria, habitó en Betel, y les enseñaba la manera de honrar al Señor.
IV Rey 17:32 y no obstante todos estos pueblos adoraban al Señor. Crearon del bajo pueblo sacerdotes para los lugares altos, y los colocaban en los adoratorios de las alturas.
IV Rey 17:33 Y adorando al Señor, servían también a sus dioses, según el rito de las naciones de donde habían sido transportados a Samaria.
IV Rey 17:34 Hasta el día presente perseveran en la costumbre antigua; no temen al Señor, ni observan sus ceremonias, ni los ritos, leyes, ni mandamientos comunicados por el Señor a los hijos de Jacob , a quien puso el sobrenombre de Israel,
IV Rey 17:34 Hasta el día presente perseveran en la costumbre antigua; no temen al Señor, ni observan sus ceremonias, ni los ritos, leyes, ni mandamientos comunicados por el Señor a los hijos de Jacob , a quien puso el sobrenombre de Israel,
IV Rey 17:36 sino al Señor Dios vuestro que os sacó de la tierra de Egipto con gran fortaleza y con el poder de su brazo; a ése habéis de temer, a ése adorar, y a ése ofrecer sacrificios.
IV Rey 17:39 sino temed al Señor Dios vuestro, y él os librará de las manos de todos vuestros enemigos.
IV Rey 17:41 Recibieron, pues, dichas gentes el culto del Señor; pero continuaron como antes en servir a sus ídolos; y lo que hicieron sus padres, eso mismo hacen hasta hoy día sus hijos y nietos.
IV Rey 18:3 Hizo Ezequías lo que era bueno y agradable a los ojos del Señor, imitando en todo a su padre David.
IV Rey 18:5 Puso su esperanza en el Señor Dios de Israel; y así no tuvo semejante en todos los reyes de Judá, sus sucesores, como ni tampoco en los que le precedieron.
IV Rey 18:6 Se mantuvo unido al Señor, y no se apartó de sus sendas; sino que observó los mandamientos que el Señor dio a Moisés.
IV Rey 18:6 Se mantuvo unido al Señor, y no se apartó de sus sendas; sino que observó los mandamientos que el Señor dio a Moisés.
IV Rey 18:7 Por eso también el Señor estaba con él, y portábase Ezequías sabiamente en cuanto emprendía. Asimismo sacudió el yugo del rey de los asirios, y no quiso ser tributario suyo.
IV Rey 18:12 porque no quisieron obedecer a la voz del Señor Dios suyo, sino que violaron el pacto, y no escucharon ni practicaron nada de cuanto les tenía mandado Moisés, siervo del Señor.
IV Rey 18:12 porque no quisieron obedecer a la voz del Señor Dios suyo, sino que violaron el pacto, y no escucharon ni practicaron nada de cuanto les tenía mandado Moisés, siervo del Señor.
IV Rey 18:15 Le dio, pues, Ezequías toda la plata que se hallaba en la casa del Señor, y en los tesoros reales;
IV Rey 18:16 y entonces fue cuando Ezequías mandó arrancar de las puertas del templo del Señor las planchas de oro con que él mismo las había guarnecido y las dio al rey de los asirios.
IV Rey 18:22 Que si me decís: Nosotros la esperanza la tenemos en el Señor Dios nuestro: ¿no es ése el mismo Dios cuyos lugares altos y altares ha destruido Ezequías , dando a Judá y Jerusalén esta orden: Desde hoy habéis de adorar a Dios en Jerusalén , y sólo delante de este altar?
IV Rey 18:25 Pues, ¿no es por orden del Señor que yo he venido a ese país para arruinarlo? Marcha contra ese país, me dijo el Señor, y arrásalo.
IV Rey 18:25 Pues, ¿no es por orden del Señor que yo he venido a ese país para arruinarlo? Marcha contra ese país, me dijo el Señor, y arrásalo.
IV Rey 18:30 Ni os inspire confianza en el Señor, diciéndoos: Sin falta nos librará el Señor y no caerá esta ciudad en poder del rey de los asirios.
IV Rey 18:30 Ni os inspire confianza en el Señor, diciéndoos: Sin falta nos librará el Señor y no caerá esta ciudad en poder del rey de los asirios.
IV Rey 18:32 hasta tanto que yo vaya y os traslade a un país semejante al vuestro, a una tierra fructífera y abundante de vino, tierra de pan llevar, y de viñas y de olivares, tierra de aceite y de miel. Con eso viviréis en paz y no moriréis. No queráis escuchar a Ezequías , que os engaña diciendo: El Señor nos librará.
IV Rey 18:35 ¿Cuáles son entre todos los dioses de la tierra los que han salvado su región de caer en mis manos, para que el Señor pueda librar a Jerusalén de caer en las mismas?