Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

Señor

Dan 9:14 Y no se descuidó el Señor de enviar el castigo, y le descargó sobre nosotros, justo es el Señor Dios nuestro en todas las obras que él hace; pues nosotros no quisimos escuchar su voz.
Dan 9:15 Ahora, pues, ¡oh Señor Dios nuestro!, tú que con mano fuerte sacaste de tierra de Egipto a tu pueblo, y te adquiriste un renombre glorioso, cual es el que ahora gozas, confesamos que hemos pecado, que hemos cometido la maldad.
Dan 9:16 Señor, por toda tu justicia o misericordia, te ruego que aplaques la ira y el furor tuyo contra tu ciudad de Jerusalén , y contra tu santo monte de Sión, pues por causa de nuestros pecados, y por las maldades de nuestros padres, Jerusalén y el pueblo tuyo son el escarnio de todos los que están alrededor nuestro.
Dan 9:19 Escucha benigno, ¡oh Señor! Señor, aplácate, atiende, y ponte a obrar nuestra salvación, no lo difieras, ¡oh Dios mío!, por amor de ti mismo, pues la ciudad y tu pueblo llevan el Nombre tuyo.
Dan 9:19 Escucha benigno, ¡oh Señor! Señor, aplácate, atiende, y ponte a obrar nuestra salvación, no lo difieras, ¡oh Dios mío!, por amor de ti mismo, pues la ciudad y tu pueblo llevan el Nombre tuyo.
Dan 10:16 Cuando he aquí que aquel, que era semejante a un hijo de hombre, tocó mis labios, y abriendo mi boca, hablé y le dije al varón que estaba parado delante de mí: ¡Oh Señor mío!, así que te he mirado se han desencajado todas mis coyunturas, y me he quedado sin fuerza alguna.
Dan 10:17 ¿Y cómo podrá el siervo de mi Señor dirigir su palabra al Señor mío? Pues no ha quedado en mí vigor alguno, y hasta la respiración me falta.
Dan 10:17 ¿Y cómo podrá el siervo de mi Señor dirigir su palabra al Señor mío? Pues no ha quedado en mí vigor alguno, y hasta la respiración me falta.
Dan 10:19 y me dijo: No temas, oh varón de deseos; paz sea contigo: Aliéntate, y ten buen ánimo. Y mientras me estaba hablando, yo adquiría valor, y dije: Habla, ¡oh Señor mío!, porque tú me has confortado.
Dan 12:7 Y oí a aquel varón de las vestiduras de lino, que estaba en pie sobre las aguas del río, el cual habiendo alzado su diestra y su izquierda hacia el cielo, juró por aquel Señor que siempre vive, y dijo: En un tiempo, y en dos tiempos, y en la mitad de un tiempo. Y cuando se haya cumplido la dispersión de la muchedumbre del pueblo santo, entonces tendrán efecto todas estas co-sas.
Dan 12:8 Yo oí esto, mas no lo comprendí. Y dije: ¡Oh Señor mío!, ¿qué es lo que sucederá después de estas cosas?
Dan 13:5 Y en aquel año fueron elegidos jueces del pueblo de los judíos dos ancianos de aquellos de quienes dijo el Señor que la iniquidad había salido en Babilonia de los ancianos que eran jueces, los cuales parecía que gobernaban al pueblo.
Dan 13:23 Pero mejor es para mí caer en vuestras manos sin haber hecho tal cosa, que pecar en la presencia del Señor.
Dan 13:35 Ella, deshaciéndose en lágrimas, levantó sus ojos al cielo; porque su corazón estaba lleno de confianza en el Señor.
Dan 13:44 Y oyó el Señor su oración.
Dan 13:45 Y cuando la conducían al suplicio, el Señor manifestó el santo espíritu de profecía en un tierno jovencito llamado Daniel;
Dan 13:53 pronunciando injustas sentencias, oprimiendo a los inocentes y librando a los malvados, a pesar de que el Señor tiene dicho: No harás morir al inocente ni al justo.
Dan 13:55 A lo que replicó Daniel: Ciertamente que a costa de tu cabeza has mentido; pues he aquí que el ángel del Señor, por sentencia que ha recibido de él, te partirá por medio.
Dan 13:59 A lo que repuso Daniel: Ciertamente que también tú mientes en daño tuyo; pues el ángel del Señor te está esperando con la espada en la mano, para partirte por medio y matarte.
Dan 14:4 A lo que respondió, diciendo: Porque yo no adoro a los ídolos hechos de mano de hombres, sino al Dios vivo, que creó el cielo y la tierra, y es Señor de todo viviente.
Dan 14:24 A lo que respondió Daniel: Yo adoro al Señor mi Dios, porque él es el Dios vivo; mas ése no es el Dios vivo.
Dan 14:33 Y dijo el ángel del Señor a Habacuc: Esa comida que tienes, llévala a Babilonia, a Daniel, que está en el lago de los leones.
Dan 14:34 Y respondió Habacuc: Señor, yo no he visto a Babilonia, ni tengo noticia del lago.
Dan 14:35 Entonces el ángel del Señor lo cogió por la coronilla de la cabeza, y asiéndolo por los cabellos lo llevó con la celeridad de su espíritu a Babilonia sobre el lago.
Dan 14:37 Daniel entonces, dijo: Tú, ¡oh Señor!, te has acordado de mí, y no has desamparado a los que te aman.
Dan 14:38 Y se levantó Daniel y comió. Y el ángel del Señor volvió luego a Habacuc a su lugar.
Dan 14:40 Entonces exclamó el rey en alta voz diciendo: ¡Grande eres, oh Señor Dios de Daniel! Y lo hizo sacar del lago de los leones.
Os 1:1 Palabras del Señor, dichas a Oseas, hijo de Beeri, en el tiempo de Ozías, de Joatán, de Acaz, de Ezequías , reyes de Judá, y en los días de Jeroboam, hijo de Joás, rey de Israel.
Os 1:2 El Señor comenzó a hablar a Oseas, y le dijo: Anda, cásate con una mujer ramera, y ten hijos de ramera; porque la tierra de Israel no ha de cesar de fornicar o idolatrar contra el Señor.
Os 1:2 El Señor comenzó a hablar a Oseas, y le dijo: Anda, cásate con una mujer ramera, y ten hijos de ramera; porque la tierra de Israel no ha de cesar de fornicar o idolatrar contra el Señor.
Os 1:4 Y dijo el Señor a Oseas: Ponle por nombre Jezrael; porque dentro de poco yo tomaré venganza de la casa real de Jehú por la sangre que ha derramado en la ciudad de Jezrael, y acabaré con el trono de la casa de Israel.
Os 1:6 Concibió de nuevo Gomer y parió una hija. Y le dijo el Señor a Oseas: Ponle por nombre: No más misericordia ; porque yo no usaré ya en adelante de misericordia alguna con los de la casa de Israel; sino que a todos los echaré en un profundo olvido.
Os 1:7 Pero me apiadaré de la casa o reino de Judá; y la salvaré por medio del Señor su Dios, por mí mismo, y no por medio de arcos ni espadas, ni por medio de combates, o de caballos, ni caballeros.
Os 1:9 Y dijo el Señor a Oseas: Ponle por nombre: No mi pueblo ; porque vosotros no seréis ya mi pueblo, ni yo seré vuestro Dios.
Os 2:13 Y ejerceré en ella mi venganza por los días que sirvió a Baalim, en los cuales le ofrecía incienso, y se ataviaba con sus zarcillos y con sus galas, e iba en pos de sus amantes, y se olvidaba de mí, dice el Señor.
Os 2:16 Y aquel será el día, dice el Señor, en que ella me llamará esposo suyo; y no me llamará más Baalí.
Os 2:20 Y te desposaré conmigo mediante la fe, y conocerás que yo soy el Señor.
Os 2:21 Entonces será, dice el Señor, cuando yo escucharé benigno a los cielos, y éstos escucharán a la tierra.
Os 3:1 Me dijo el Señor: Ve aún, y ama a una mujer que ha sido amada de su amigo y adúltera: así como el Señor ama a los hijos de Israel, y ellos vuelven sus ojos hacia los dioses ajenos, y aman el hollejo de las uvas.
Os 3:1 Me dijo el Señor: Ve aún, y ama a una mujer que ha sido amada de su amigo y adúltera: así como el Señor ama a los hijos de Israel, y ellos vuelven sus ojos hacia los dioses ajenos, y aman el hollejo de las uvas.
Os 3:5 y después de esto volverán los hijos de Israel en busca del Señor Dios suyo, y del descendiente de David, su Rey y Salvador , y buscarán con santo temor y respeto al Señor y a sus bienes en el fin de los tiempos.
Os 3:5 y después de esto volverán los hijos de Israel en busca del Señor Dios suyo, y del descendiente de David, su Rey y Salvador , y buscarán con santo temor y respeto al Señor y a sus bienes en el fin de los tiempos.
Os 4:1 Escuchad la palabra del Señor, ¡oh vosotros hijos de Israel!, pues el Señor viene a juzgar a los moradores de esta tierra, porque no hay verdad, ni hay misericordia, no hay conocimiento de Dios en el país.
Os 4:1 Escuchad la palabra del Señor, ¡oh vosotros hijos de Israel!, pues el Señor viene a juzgar a los moradores de esta tierra, porque no hay verdad, ni hay misericordia, no hay conocimiento de Dios en el país.
Os 4:10 Y comerán, y no se saciarán, han prevaricado incesantemente; han abandonado al Señor, desobedeciendo su santa ley.
Os 4:15 Si tú, ¡oh Israel!, te has entregado a la fornicación, o idolatría, al menos tú, ¡oh Judá!, no peques; y no queráis ir a Gálgala ni subáis a Betaven, para idolatrar, ni juréis diciendo: Vive el Señor.
Os 4:16 Porque Israel se ha descarriado, cual vaca indómita y lozana; mas luego el Señor los conducirá a pacer como tímidos corderos en campiñas espaciosas.
Os 5:4 No dedicarán ellos su pensamiento a convertirse a su Dios, porque están dominados del espíritu de fornicación, o idolatría, y desconocieron al Señor.
Os 5:6 Irán a buscar al Señor con la ofrenda de sus rebaños y vacadas, y no lo hallarán, se retiró de ellos.
Os 5:7 Han sido infieles al Señor, pues han engendrado hijos bastardos, ahora en un mes serán consumidos con todo cuanto poseen.