Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

Señor

Jer 3:14 Convertíos a mí, ¡oh hijos rebeldes!, dice el Señor, porque yo soy vuestro esposo, y escogeré de vosotros uno de cada ciudad y dos de cada familia, y os introduciré en Sión.
Jer 3:16 Y cuando os hayáis multiplicado y crecido sobre la tierra, en aquellos días, dice el Señor, no se hablará ya del Arca del Testamento del Señor; ni se pensará en ella, ni habrá de ella memoria, ni será visitada, ni se hará ya nada de esto.
Jer 3:16 Y cuando os hayáis multiplicado y crecido sobre la tierra, en aquellos días, dice el Señor, no se hablará ya del Arca del Testamento del Señor; ni se pensará en ella, ni habrá de ella memoria, ni será visitada, ni se hará ya nada de esto.
Jer 3:17 En aquel tiempo Jerusalén será llamada trono del Señor; y se agregarán a ella las naciones todas, en el nombre del Señor, en Jerusalén , y no seguirán la perversidad de su pésimo corazón.
Jer 3:17 En aquel tiempo Jerusalén será llamada trono del Señor; y se agregarán a ella las naciones todas, en el nombre del Señor, en Jerusalén , y no seguirán la perversidad de su pésimo corazón.
Jer 3:20 Pero como una mujer que desprecia al que la ama, así me ha desdeñado a mí la familia de Israel, dice el Señor.
Jer 3:21 Clamores se han oído en los caminos, llantos, alaridos de los hijos de Israel, por haber procedido infielmente, olvidados del Señor su Dios.
Jer 3:22 Convertíos a mí, hijos rebeldes, que yo os perdonaré vuestras apostasías. He aquí, ¡oh Señor!, que ya volvemos a ti porque tú eres el Señor Dios nuestro.
Jer 3:22 Convertíos a mí, hijos rebeldes, que yo os perdonaré vuestras apostasías. He aquí, ¡oh Señor!, que ya volvemos a ti porque tú eres el Señor Dios nuestro.
Jer 3:23 Verdaderamente no eran más que embuste todos los ídolos de los collados y de tantos montes, verdaderamente que en el Señor Dios nuestro está la salud de Israel.
Jer 3:25 Moriremos en nuestra afrenta, y quedaremos cubiertos de nuestra ignominia; porque contra nuestro Dios hemos pecado nosotros, nuestros padres, desde nuestra mocedad hasta el día de hoy; y no hemos escuchado la voz del Señor Dios nuestro.
Jer 4:1 ¡Oh Israel, si te has de convertir de tus extravíos, conviértete a mí de corazón, dice el Señor! Si quitas tus escándalos o ídolos de mi presencia, no serás removido de tu tierra.
Jer 4:2 Y sea tu juramento (hecho con verdad, en juicio, y con justicia): Viva el Señor; y bendecirán y alabarán al Señor las naciones todas.
Jer 4:2 Y sea tu juramento (hecho con verdad, en juicio, y con justicia): Viva el Señor; y bendecirán y alabarán al Señor las naciones todas.
Jer 4:3 Porque esto dice el Señor a los varones de Judá y de Jerusalén : Preparad surco barbecho, y no sembréis sobre espinas.
Jer 4:4 Circuncidaos por amor del Señor, y separad de vuestro corazón las inmundicias, ¡oh vosotros, varones de Judá, y moradores de Jerusalén !, no sea que se manifieste cual fuego abrasador mi enojo, y suceda un incendio, y no haya quien pueda apagarle por causa de la malicia de vuestros designios.
Jer 4:8 Por tanto vestíos de cilicio, prorrumpid en llanto y en alaridos; pues la tremenda indignación del Señor no se ha apartado de nosotros.
Jer 4:9 En aquel día, dice el Señor, desfallecerá el corazón del rey, y el corazón de los príncipes; estarán atónitos los sacerdotes, y consternados los profetas.
Jer 4:10 Y yo dije al oír eso: ¡Ay, ay, Señor Dios mío! ¡Ay!, ¿y es posible que hayas permitido que los falsos profetas alucinasen a este pueblo tuyo, y a Jerusalén , diciendo: Paz tendréis vosotros; cuando he aquí que la espada del enemigo ha penetrado hasta el corazón?
Jer 4:17 Se estarán día y noche alrededor de ella como los guardas en las heredades; porque me ha provocado a ira, dice el Señor.
Jer 4:22 El necio pueblo mío, dice el Señor, no me conoció, hijos insensatos son y mentecatos; para hacer el mal son sabios; mas el bien no saben hacerlo.
Jer 4:26 Miré y vi convertidas en un desierto sus fértiles campiñas; todas sus ciudades han quedado destruidas a la presencia del Señor, a la presencia de su tremenda indignación.
Jer 4:27 Pero he aquí lo que dice el Señor: Toda la tierra de Judá quedará desierta, mas no acabaré de arruinarla del todo.
Jer 5:2 Pues aun cuando dicen todavía: Vive el Señor, Dios verdadero; aun entonces juran con mentira.
Jer 5:3 Señor, tus ojos están mirando siempre la fidelidad o verdad; azotaste a estos perversos, y no les dolió; los moliste a golpes, y no han hecho caso de la corrección; endurecieron sus frentes más que un peñasco, y no han querido convertirse a ti.
Jer 5:4 Entonces dije yo: Tal vez éstos son los pobres e idiotas que ignoran el camino del Señor, los juicios de su Dios.
Jer 5:5 Iré, pues, a los principales del pueblo y hablaré a ellos, que sin duda esos saben el camino del Señor, los juicios de su Dios. Pero hallé que éstos, aún más que los otros, todos a una quebrantaron el yugo del Señor, rompieron sus correas.
Jer 5:5 Iré, pues, a los principales del pueblo y hablaré a ellos, que sin duda esos saben el camino del Señor, los juicios de su Dios. Pero hallé que éstos, aún más que los otros, todos a una quebrantaron el yugo del Señor, rompieron sus correas.
Jer 5:9 Pues, ¿no he de castigar yo estas cosas, dice el Señor, y no se vengará mi alma de una tal gente?
Jer 5:10 Escalad, ¡oh pueblos de Caldea!, sus muros, y derribadlos; mas no acabéis del todo con ella; quitadle los sarmientos, porque no son del Señor;
Jer 5:11 puesto que la casa de Israel y la casa de Judá han pecado enormemente contra mí, dice el Señor;
Jer 5:12 ellas renegaron del Señor, y dijeron: No es él el Dios verdadero; no nos sobrevendrá ningún desastre; no veremos la espada, ni el hambre.
Jer 5:14 Esto me dice el Señor Dios de los ejércitos: Porque habéis proferido vosotros tales palabras, he aquí, ¡oh Jeremías!, que yo desde ahora pongo en tu boca mis palabras cual fuego devorador, y le doy ese pueblo por leña para que sea de él consumido.
Jer 5:15 Yo voy a traer sobre vosotros, ¡oh familia de Israel!, dice el Señor, una nación lejana, nación robusta, nación antigua, nación cuya lengua tú no sabrás, ni entenderás lo que habla.
Jer 5:18 Con todo eso, en aquellos días no acabaré del todo con vosotros, dice el Señor.
Jer 5:19 Que si dijereis: ¿Por qué ha hecho el Señor Dios nuestro contra nosotros todas estas cosas?, tú les responderás: Así como vosotros me habéis abandonado a mí, dice el Señor, y habéis servido a los dioses extraños en vuestra tierra, así les serviréis ahora en tierra extranjera.
Jer 5:19 Que si dijereis: ¿Por qué ha hecho el Señor Dios nuestro contra nosotros todas estas cosas?, tú les responderás: Así como vosotros me habéis abandonado a mí, dice el Señor, y habéis servido a los dioses extraños en vuestra tierra, así les serviréis ahora en tierra extranjera.
Jer 5:22 ¿conque a mí no me temeréis, dice el Señor, ni os arrepentiréis delante de mí? Yo soy el que al mar le puse por término la arena, ley perdurable que no quebrantará; han de levantarse sus olas, y no traspasarán sus límites; y se encresparán, pero no pasarán más adelante.
Jer 5:24 En vez de decir en su corazón: Temamos al Señor Dios nuestro, que nos da a su tiempo la lluvia temprana y la tardía, y que nos da todos los años una abundante cosecha.
Jer 5:29 ¿Cómo no he de castigar yo estas cosas, dice el Señor?; ¿o cómo puede mi alma dejar de tomar venganza de esta gente?
Jer 6:6 Pues esto dice el Señor de los ejércitos: Cortad sus árboles, abrid trincheras en torno de Jerusalén . Esta es la ciudad que voy a castigar; en ella se abriga toda especie de calumnia e injusticia.
Jer 6:9 Esto dice el Señor de los ejércitos: Los restos del pueblo de Israel serán cogidos como un pequeño racimo en una viña ya vendimiada: Vuelve, ¡oh caldeo!, tu mano, como el vendimiador para meter en el cuévano el rebusco.
Jer 6:10 Mas, ¿a quién dirigiré yo la palabra? ¿Y a quién conjuraré para que me escuche, pues tienen tapadas sus orejas, y no pueden oír? Lo peor es que la palabra del Señor les sirve de escarnio, y no la recibirán.
Jer 6:11 Por lo cual estoy lleno del furor del Señor: Me cansé de sufrir: Derrámale fuera, me dijo a mí mismo, sobre los niños, y también en las reuniones de los jóvenes; porque preso será el marido con la mujer, el anciano con el decrépito.
Jer 6:12 Y sus casas pasarán a ser de otros, y también las heredades y las mujeres, porque yo extenderé mi mano contra los moradores del país, dice el Señor.
Jer 6:15 ¿Se han avergonzado acaso por las cosas abominables que han hecho? Antes bien no han tenido ni pizca de confusión, ni sabido siquiera qué cosa es tener vergüenza. Por este motivo caerán entre los que perecen y serán precipitados, dice el Señor, cuando llegue el tiempo de tomarles cuentas.
Jer 6:16 Esto decía también el Señor: Paraos en los caminos, ved y preguntad cuáles son las sendas antiguas, cuál es el buen camino, y seguidlo, y hallaréis refrigerio para vuestras almas. Mas ellos dijeron: No lo seguiremos.
Jer 6:21 Por tanto así dice el Señor: He aquí que yo lloveré desgracias sobre ese pueblo; caerán a una los padres con los hijos, y el vecino perecerá con su vecino.
Jer 6:22 Esto dice el Señor: Mirad que viene un pueblo del septentrión, y una nación grande saldrá de los extremos de la tierra.
Jer 6:30 Llamadlos plata de desecho; porque el Señor ya los ha reprobado.