Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

Señor

Salm 135:1 Aleluya. Alabad al Señor, porque es infinitamente bueno, porque es eterna su misericordia.
Salm 135:3 Alabad al Señor de los señores, porque es eterna su misericordia.
Salm 135:26 Bendecid, pues, al Dios del cielo, porque es eterna su misericordia. Bendecid al Señor de los señores, porque es eterna su misericordia.
Salm 136:4 ¿Cómo hemos de cantar los cánticos del Señor, les respondíamos, en tierra extraña?
Salm 136:7 Acuérdate, ¡oh Señor!, de los hijos de Edom, los cuales en el día de la ruina de Jerusalén decían: Arrasadla, arrasadla hasta sus cimientos.
Salm 137:1 Del mismo David. Te alabaré, Señor, con todo mi corazón; porque oíste las peticiones de mi boca. En presencia de los ángeles te cantaré himnos.
Salm 137:4 Alábente, ¡oh Señor!, todos los reyes de la tierra, ya que han oído todas las palabras de tu boca.
Salm 137:5 Y celebren las disposiciones del Señor, visto que la gloria del Señor es tan grande.
Salm 137:5 Y celebren las disposiciones del Señor, visto que la gloria del Señor es tan grande.
Salm 137:6 Porque siendo el Señor, como es altísimo, pone los ojos en las criaturas humildes y mira como lejos de sí a las altivas.
Salm 137:7 Si me hallare, oh Señor, en medio de la tribulación, tú me animarás, porque extendiste tu mano contra el furor de mis enemigos, y me salvó tu poderosa diestra.
Salm 137:8 El Señor tomará mi defensa. Eterna es, ¡oh Señor!, tu misericordia, no deseches las obras de tus manos.
Salm 137:8 El Señor tomará mi defensa. Eterna es, ¡oh Señor!, tu misericordia, no deseches las obras de tus manos.
Salm 138:1 Para el fin: Salmo de David. ¡Oh Señor!, tú has hecho prueba de mí, y me tienes bien conocido.
Salm 138:5 Todo lo conoces, Señor, lo pasado y lo venidero; tú me formaste, y pusiste sobre mí tu mano bienhechora.
Salm 138:14 Te alabaré, Señor, a vista de tu estupenda grandeza; maravillosas son todas tus obras, de cuyo conocimiento está penetrada toda mi alma.
Salm 138:21 ¿No es así, Señor, que yo he aborrecido a los que te aborrecían? Y ¿no me consumía por causa de tus enemigos?
Salm 139:2 Líbrame, ¡oh Señor!, del hombre malvado, líbrame del hombre perverso.
Salm 139:5 Defiéndeme, Señor, de las manos del pecador; y líbrame de los hombres inicuos, que intentan dar conmigo en tierra.
Salm 139:7 Mas yo dije al Señor: Tú eres mi Dios, escucha, ¡oh Señor! mi humilde súplica.
Salm 139:7 Mas yo dije al Señor: Tú eres mi Dios, escucha, ¡oh Señor! mi humilde súplica.
Salm 139:8 ¡Señor, Señor!, de cuya fortaleza depende mi salvación, tú pusiste a cubierto mi cabeza el día del combate.
Salm 139:8 ¡Señor, Señor!, de cuya fortaleza depende mi salvación, tú pusiste a cubierto mi cabeza el día del combate.
Salm 139:9 No me entregues, Señor, contra mi deseo en manos del pecador. Han maquinado los impíos contra mí; no me desampares tú, no sea que triunfen.
Salm 139:13 Yo sé de cierto que el Señor tomará a su cargo la causa del desvalido y la venganza de los pobres.
Salm 140:1 Salmo de David. Señor, a ti he clamado, óyeme benigno; atiende mi voz, cuando hacia ti la dirijo.
Salm 140:3 Pon, Señor, un guardia en mi boca, y un candado que cierre enteramente mis labios.
Salm 140:8 Pero, Señor, pues mis ojos están levantados hacia ti, ¡oh Señor!, pues en ti he esperado, no me quites la vida.
Salm 140:8 Pero, Señor, pues mis ojos están levantados hacia ti, ¡oh Señor!, pues en ti he esperado, no me quites la vida.
Salm 141:2 Alcé mi voz para clamar al Señor; al Señor dirigí los clamores de mi plegaria.
Salm 141:2 Alcé mi voz para clamar al Señor; al Señor dirigí los clamores de mi plegaria.
Salm 141:4 Está ya para desfallecer mi espíritu; y tú, Señor, conoces bien mi recto proceder. En este camino, por donde yo andaba, me tendieron ocultos lazos.
Salm 141:6 Clamé a ti, oh Señor, diciendo: Tú eres la única esperanza mía, mi porción en la dichosa tierra de los vivientes.
Salm 142:1 Salmo de David cuando le perseguia su hijo Absalon. ¡Oh Señor!, escucha benigno mi oración; presta oídos a mi súplica, según la verdad de tus promesas; óyeme por tu misericordia.
Salm 142:7 Oyeme luego, ¡oh Señor!, mi espíritu ha desfallecido. No retires de mí tu rostro; haz que no haya de contarme ya entre los muertos.
Salm 142:9 Líbrame, ¡oh Señor!, de mis enemigos; a ti me acojo.
Salm 142:11 Por amor de tu Nombre, ¡oh Señor!, me darás la vida, según la justicia de tus promesas. A mi alma la sacarás de la tribulación,
Salm 143:1 Salmo de David contra Goliath. Bendito sea el Señor Dios mío, que adiestra mis manos para la pelea y mis dedos para manejar las armas.
Salm 143:3 ¡Oh Señor! ¿Qué es el hombre para que te des a conocer a él?; ¿o el hijo del hombre, que así lo aprecias?
Salm 143:5 Señor, inclina esos tus cielos, y desciende a socorrernos; toca los montes, y se desharán en humo.
Salm 143:10 Señor, tú que das la salud o felicidad a los reyes, que libraste a David, siervo tuyo, de la espada sangrienta,
Salm 143:15 Feliz llamaron al pueblo que goza de estas cosas. Mas yo digo: Feliz aquel pueblo que tiene al Señor por su Dios.
Salm 144:3 Grande es el Señor, y digno de ser infinitamente loado; su grandeza no tiene límites.
Salm 144:4 Las generaciones todas, oh Señor, celebrarán tus obras, y pregonarán tu poder infinito.
Salm 144:8 Benigno es el Señor, exclamarán, y misericordioso, paciente y clemente.
Salm 144:9 Para todos es benéfico el Señor, y su misericordia se extiende sobre todas sus obras.
Salm 144:10 Alábente, ¡oh Señor!, todas ellas, y bendígante todos tus santos.
Salm 144:13 El reino tuyo, reino que se extiende a todos los siglos; y tu imperio a todas las generaciones. Fiel es el Señor y todas sus promesas, y santo en todas sus obras.
Salm 144:14 Y así el Señor alarga la mano a todos los que van a caer, y endereza a todos los agobiados.
Salm 144:15 Por eso fijan en ti sus ojos, oh Señor, las criaturas todas; y tú les das a su tiempo el alimento necesario.