Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

tierra

III Rey 18:42 Fue Acab a comer y beber; mas Elías se subió a la cima del Carmelo, donde arrodillado en tierra, y puesto su rostro entre las rodillas,
III Rey 19:11 Le dijo el Señor: Sal fuera, y ponte sobre el monte en presencia del Señor, y he aquí que pasará el Señor, y delante de él correrá un viento fuerte e impetuoso, capaz de trastornar los montes y quebrantar las peñas; no está el Señor en el viento. Después del viento vendrá un temblor de tierra; tampoco está el Señor en el terremoto.
III Rey 20:10 Volviéndose los mensajeros, llevaron a Benadad esta respuesta; el cual los despachó nuevamente, diciendo por medio de ellos a Acab: Háganme los dioses no bien, sino mucho mal, si todo el polvo o tierra de Samaria ha de ser bastante para que repartido entre mis soldados le quepa a cada uno un puñado.
IV Rey 2:15 Así que vieron esto los hijos de los profetas, que habían venido de Jericó , y estaban en la orilla opuesta, dijeron: El espíritu de Elías ha reposado sobre Eliseo, y saliéndole al encuentro, le hicieron profunda reverencia postrados en tierra,
IV Rey 2:19 Por este tiempo dijeron también a Eliseo los vecinos de la ciudad: Bien ves que la situación de esta ciudad es bellísima, como tú mismo, señor, lo estás conociendo; pero las aguas son muy malas y la tierra estéril.
IV Rey 5:2 Habían salido de Siria guerrillas, y cautivado en tierra de Israel a una doncellita, que entró después a servir a la mujer de Naamán,
IV Rey 5:4 Oído que hubo esto Naamán, entró a ver a su señor, y le dio parte, diciendo: Esto ha dicho una doncella de tierra de Israel.
IV Rey 5:17 Al fin dijo Naamán: Sea como tú quieres; pero te suplico que me permitas a mí, siervo tuyo, el llevarme la porción de tierra que cargan dos mulos; porque ya no sacrificará tu siervo de aquí adelante holocaustos ni víctimas a dioses ajenos, sino sólo al Señor.
IV Rey 8:1 Habló Eliseo a la mujer sunamita, cuyo hijo había resucitado, y le dijo: Márchate con tu familia, y vete fuera de tu país a habitar donde te parezca mejor; porque Dios ha llamado el hambre, y ella se apoderará de la tierra de Israel por siete años.
IV Rey 8:2 Hizo, pues, la mujer lo que le dijo el varón de Dios, y salió con su familia fuera de su país, y permaneció largo tiempo en tierra de filisteos.
IV Rey 8:6 Y preguntó el rey a la mujer, la cual se lo contó. Inmediatamente el rey envió con ella un eunuco o ministro, a quien dijo: Haz que se le restituya todo lo que le pertenece, y todos los réditos de sus heredades, desde el día que salió de su tierra hasta el presente.
IV Rey 9:37 y estarán las carnes o huesos de Jezabel en el campo de Jezrael, como está el estiércol sobre la faz de la tierra; de suerte que los pasajeros dirán: ¡Y ésta es aquella Jezabel!
IV Rey 10:10 Por tanto considerad ahora cómo no ha caído en tierra una sola palabra de las que habló el Señor contra la casa de Acab, y cómo ha ejecutado el Señor lo que predijo por medio de Elías, su siervo.
IV Rey 10:33 desde el Jordán hacia el oriente arruinando toda la tierra de Galaad, de Gad y de Rubén, y de Manasés; desde Aroer, situada junto al torrente de Arnón, hasta Galaad y Basán.
IV Rey 11:18 E inmediatamente entró todo el pueblo de la tierra en el templo de Baal, y derribaron sus aras, e hicieron añicos sus imágenes, y delante del mismo altar mataron a Matán, sacerdote de Baal. Y el sumo sacerdote puso guardias en la casa del Señor.
IV Rey 11:19 Y capitaneando a los centuriones y a las legiones de cereteos y feleteos, y a todo el pueblo de la tierra, condujeron al rey desde el templo del Señor, y por el camino de la puerta de los escuderos lo llevaron a palacio, donde se sentó sobre el trono de los reyes de Judá.
IV Rey 11:20 Y todo el pueblo de la tierra se regocijó, y quedó en reposo la ciudad después que Atalía pereció a filo de espada en la casa del rey.
IV Rey 13:18 Dijo más: Toma saetas; y habiéndolas tomado, le dijo de nuevo: Hiere la tierra con un dardo. Y habiéndola herido tres veces, cesó de tirar.
IV Rey 15:5 Mas el Señor castigó al rey; el cual estuvo leproso hasta el día de su muerte, y habitó separado en una casa aislada. Mientras tanto Joatam, hijo del rey, gobernaba el palacio, y administraba justicia al pueblo de aquella tierra.
IV Rey 15:19 Ful, rey de los asirios, vino entonces a esta tierra; y dio Manahem a Ful mil talentos de plata para que lo ayudase, y lo asegurase en el trono.
IV Rey 16:15 Además dio el rey Acaz al sumo sacerdote Urías esta orden: Ofrecerás sobre este altar grande el holocausto de la mañana y el sacrificio de la tarde, y el holocausto del rey con su sacrificio, y el holocausto de todo el pueblo de la tierra con sus sacrificios y libaciones; y has de derramar sobre este altar toda la sangre de los holocaustos, y toda la sangre de las víctimas. En cuanto al altar de bronce estará pronto a disposición mía.
IV Rey 17:7 La causa fue que los hijos de Israel habían pecado, adorando dioses ajenos, contra el Señor Dios suyo que los había sacado de la tierra de Egipto del poder del faraón, rey de Egipto;
IV Rey 17:11 quemando allí incienso sobre los altares, a imitación de las naciones que había dispersado el Señor así que entraron en aquella tierra; y habían cometido acciones muy criminales provocando la ira del Señor.
IV Rey 17:23 Hasta tanto que el Señor arrojó de su presencia a Israel, como lo tenía predicho por medio de todos los profetas, sus siervos. Y fue Israel transportado de su tierra a la Asiria, en donde se halla hasta hoy día.
IV Rey 17:26 Dieron aviso de esto al rey de los asirios y le dijeron: Las gentes que tú has transportado para poblar las ciudades de Samaria, ignoran el culto del Dios de aquel país, y el Señor ha enviado contra ellas leones que las van despedazando, por cuanto no saben ellas el culto del Dios de aquella tierra.
IV Rey 17:36 sino al Señor Dios vuestro que os sacó de la tierra de Egipto con gran fortaleza y con el poder de su brazo; a ése habéis de temer, a ése adorar, y a ése ofrecer sacrificios.
IV Rey 18:32 hasta tanto que yo vaya y os traslade a un país semejante al vuestro, a una tierra fructífera y abundante de vino, tierra de pan llevar, y de viñas y de olivares, tierra de aceite y de miel. Con eso viviréis en paz y no moriréis. No queráis escuchar a Ezequías , que os engaña diciendo: El Señor nos librará.
IV Rey 18:32 hasta tanto que yo vaya y os traslade a un país semejante al vuestro, a una tierra fructífera y abundante de vino, tierra de pan llevar, y de viñas y de olivares, tierra de aceite y de miel. Con eso viviréis en paz y no moriréis. No queráis escuchar a Ezequías , que os engaña diciendo: El Señor nos librará.
IV Rey 18:32 hasta tanto que yo vaya y os traslade a un país semejante al vuestro, a una tierra fructífera y abundante de vino, tierra de pan llevar, y de viñas y de olivares, tierra de aceite y de miel. Con eso viviréis en paz y no moriréis. No queráis escuchar a Ezequías , que os engaña diciendo: El Señor nos librará.
IV Rey 18:33 ¿Por ventura los dioses de las gentes han libertado su tierra del poder del rey de los asirios?
IV Rey 18:35 ¿Cuáles son entre todos los dioses de la tierra los que han salvado su región de caer en mis manos, para que el Señor pueda librar a Jerusalén de caer en las mismas?
IV Rey 19:15 y oró en su acatamiento, diciendo: Señor Dios de Israel, que estás sentado sobre los querubines, tú eres el solo Dios de todos los reyes de la tierra; tú creaste el cielo y la tierra.
IV Rey 19:15 y oró en su acatamiento, diciendo: Señor Dios de Israel, que estás sentado sobre los querubines, tú eres el solo Dios de todos los reyes de la tierra; tú creaste el cielo y la tierra.
IV Rey 19:19 Ahora, pues, ¡oh Señor Dios nuestro!, sálvanos de la mano de éste; para que sepan todos los reinos de la tierra que tú eres el Señor, el solo Dios.
IV Rey 19:37 y mientras que estaba adorando en el templo a su Dios Nesroc, lo mataron a puñaladas sus hijos Adramelec y Sarasar, y huyeron a tierra de los armenios, reinando en su lugar su hijo Asaraddón.
IV Rey 21:8 y no permitiré que en adelante haya de mover Israel su pie de la tierra que di a sus padres; con tal que guarde todos mis mandamientos, y la ley toda que le comunicó mi siervo Moisés.
IV Rey 23:30 Y sus criados lo llevaron muerto desde Mageddo, y lo transportaron a Jerusalén , y lo sepultaron en su sepulcro. Entonces el pueblo de la tierra tomó a Joacaz, hijo de Josías, al cual ungieron y proclamaron rey en lugar de su padre.
IV Rey 23:33 Y el rey faraón Necao lo puso en cadenas en Rebla, situada en tierra de Emat, privándole del reino de Jerusalén ; y echó al país una contribución de cien talentos de plata y un talento de oro.
IV Rey 24:7 Y de allí en adelante no intentó el rey de Egipto salir de su tierra, por cuanto el rey de Babilonia se había alzado con todo lo que había sido del rey de Egipto, desde el río de Egipto hasta el río Eufrates.
IV Rey 25:21 el cual en la misma Reblata, territorio de Emat, les hizo quitar la vida. Y la tribu de Judá fue transportada fuera de su tierra.
I Par 1:10 Cus engendró también a Nemrod; el cual empezó a ser poderoso en la tierra.
I Par 1:19 A Heber le nacieron dos hijos, el nombre del uno es Faleg, porque en su tiempo fue dividida la tierra, y el nombre de su hermano era Jectán.
I Par 1:46 Muerto que fue Husam, lo sucedió en el reino Adad, hijo de Badad, el que deshizo los madianitas en la tierra de Moab; su ciudad fue Avit.
I Par 2:22 Este Segub engendró a Jair, el cual fue señor de veintitrés ciudades en tierra de Galaad;
I Par 4:23 Estos son los que hacían vasijas de tierra, los alfareros que habitaban en los plantíos y en los cercados, en las casas pertenecientes al rey ocupados en sus obras, y allí se establecie-ron.
I Par 5:9 Habitó también hacia el lado oriental hasta la entrada del desierto y el río Eufrates; por cuanto poseían gran número de ganados en la tierra de Galaad.
I Par 5:11 Pero los hijos de Gad habitaron enfrente de ellos en la tierra de Basán hasta Selca;
I Par 6:55 Se les señaló, pues, a éstos, a Hebrón en tierra de Judá, y sus ejidos al contorno.
I Par 10:9 Y habiéndolo despojado, y cortado la cabeza, y quitándole las armas, lo llevaron a su tierra para conducirlo por todas partes, y exponerlo en los templos de sus ídolos a la vista del pueblo.
I Par 16:18 diciendo: Yo te daré la tierra de Canaán, la cual será vuestra herencia.