Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

tierra

Núm 32:29 Si los hijos de Gad y los de Rubén pasaren todos el Jordán, y armados fueren con vosotros a combatir delante del Señor, dadles, después de conquistado el país, la tierra de Galaad en posesión.
Núm 32:30 Mas si no quisieran pasar armados con vosotros a la tierra de Canaán, oblígueseles a que fijen su habitación entre vosotros.
Núm 32:32 Guiados por el Señor, pasaremos armados a la tierra de Canaán, y confesamos públicamente haber ya recibido nuestra posesión en este lado del Jordán.
Núm 32:40 Así Moisés dio una parte de la tierra de Galaad al linaje de Maquir, hijo de Manasés, el cual habitó en ella.
Núm 33:40 Aquí fue cuando Arad, rey de los cananeos, que habitaba hacia el mediodía, supo que venían los hijos de Israel para entrar en la tierra de Canaán.
Núm 33:51 Habla a los hijos de Israel, y diles: Pasado que hubiereis el Jordán, y entrados en la tierra de Canaán,
Núm 33:53 purificando así la tierra para habitar en ella; pues yo os la he dado en posesión;
Núm 33:55 Que si no quisiereis matar a los moradores del país, los que quedaren serán para vosotros como punzones en los ojos y rejones en los costados, y combatirán contra vosotros en la tierra de vuestra morada;
Núm 34:2 Prevén a los hijos de Israel y dales esta orden: Cuando hubierais entrado en la tierra de Canaán y poseyereis en ella lo que la suerte os habrá señalado, serán sus términos los siguientes:
Núm 34:12 y extendiéndose hasta el Jordán, tendrán por último límite el mar Salado. He aquí los límites y extensión de la tierra que poseeréis.
Núm 34:13 Y dio Moisés esta orden a los hijos de Israel, diciéndoles: Esta será la tierra que se os distribuirá por suerte, y la que ha mandado el Señor a las nueve tribus y media.
Núm 34:17 Estos son los nombres de los varones que os repartirán la tierra: el sumo sacerdote Eleazar; y Josué, hijo de Nun;
Núm 34:29 Estos son los que mandó el Señor que repartieran a los hijos de Israel la tierra de Canaán.
Núm 35:10 Habla con los hijos de Israel, y diles: Cuando hubiereis pasado el Jordán y estuviereis en la tierra de Canaán,
Núm 35:14 habrá tres del Jordán acá y tres en la tierra de Canaán,
Núm 35:33 no sea que profanéis la tierra de vuestra morada, la cual con la sangre de los inocentes se amancilla, ni puede purificarse sino por la sangre de aquel que derramó la de otro.
Núm 35:34 Y de esta manera será purificada vuestra tierra, en la cual tengo yo mi morada; pues yo soy el Señor que habito entre los hijos de Israel.
Núm 36:2 El Señor Dios te tiene mandado a ti, que eres señor nuestro, repartir la tierra de Canaán por suerte a los hijos de Israel, y dar a las hijas de Salfaad, hermano nuestro, la posesión debida a su padre;
Deut 1:7 dad la vuelta y marchad a las montañas de los amorreos y demás lugares vecinos, extendiéndoos por los llanos, y por los montes y valles que yacen al mediodía, y a la costa del mar Mediterráneo , por la tierra más septentrional de los cananeos y del Líbano, hasta el gran río Eufrates.
Deut 1:8 Mirad, dijo, que os la tengo dada: entrad y tomad posesión de la tierra, acerca de la cual juró el Señor a vuestros padres Abrahán, Isaac y Jacob , que se le daría a ellos, y después de ellos a su descendencia.
Deut 1:21 Mira, ¡oh Israel! la tierra que te da tu Señor Dios: sube y ocúpala como Dios nuestro Señor lo prometió a tus padres; no tienes que temer ni alarmarte por nada.
Deut 1:22 Y acudisteis a mí todos, y dijisteis: Enviemos personas que reconozcan la tierra, y nos informen por qué camino debemos subir, y a cuáles ciudades encaminarnos.
Deut 1:24 Los cuales puestos en camino, habiendo atravesado las montañas llegaron hasta el valle del Racimo; y reconocida la tierra,
Deut 1:25 cogiendo de sus frutos para muestra de fertilidad, nos los trajeron y dijeron: Buena es la tierra que el Señor Dios nuestro nos ha de dar.
Deut 1:27 murmurasteis en vuestras tiendas y dijisteis: El Señor nos aborrece, y por eso nos sacó de la tierra de Egipto, para entregarnos en manos del amorreo y acabar con nosotros.
Deut 1:35 Ninguno de los hombres de esta pésima generación verá la excelente tierra que tengo prometida con juramento a sus padres;
Deut 1:36 Excepto Caleb, hijo de Jefone; ése la verá; y a ése le daré la tierra que pisó, y a sus hijos; porque ha seguido al Señor.
Deut 1:37 Ni es de maravillar ésta su indignación contra el pueblo; visto que aun contra mí, enojado el Señor por causa vuestra, dijo: Ni tampoco tú entrarás en esa tierra.
Deut 1:38 Mas Josué, hijo de Nun, ministro tuyo, ése entrará por ti: y así exhórtale y aliéntale, pues él es el que ha de repartir por suertes la tierra de Israel.
Deut 1:39 Vuestros pequeñuelos, de quienes dijisteis que serían llevados cautivos, vuestros niños que hoy no saben discernir el bien del mal, esos son los que entrarán; y a ellos daré yo la tierra, y la poseerán.
Deut 1:41 Entonces me respondisteis: Hemos pecado contra el Señor; subiremos a esa tierra, y pelearemos conforme ha ordenado el Señor Dios nuestro. Y como armados os encaminaseis hacia el monte,
Deut 2:5 Mas guardaos bien de moverles guerra, porque no os daré de su tierra ni siquiera la huella de un pie, por cuanto di a Esaú en posesión las montañas de Seir.
Deut 2:9 Aquí me dijo el Señor: No obres hostilmente contra los moabitas, ni trabes batalla con ellos: que no te daré ni un palmo de su tierra, puesto que la posesión de Ar se la he dado a los hijos de Lot.
Deut 2:12 En Seir asimismo habitaron antes los horreos; y arrojados éstos y destruidos, entraron en su lugar los hijos de Esaú, como lo hizo Israel en la tierra cuya posesión le dio el Señor.
Deut 2:19 mas en llegando a las cercanías de los hijos de Amón, guárdate de moverles guerra, ni pelear contra ellos: que nada te daré de la tierra de los hijos de Amón, por cuanto la di en posesión a los hijos de Lot.
Deut 2:21 pueblo grande y numeroso y de altura descomunal, a semejanza de los enaceos. El Señor los exterminó por mano de los amonitas, e hizo que éstos poblasen la tierra en su lugar;
Deut 2:22 como lo había hecho con los hijos de Esaú que habitan en Seir, destruyendo a los horreos y entregándoles su tierra, la cual poseen hasta el día de hoy.
Deut 2:24 Ea, pues, preveníos, os dijo entonces el Señor, y pasad el torrente de Arnón: Sábete, ¡oh Israel!, que yo he puesto en tu mano a Sehón, rey de Hesebón, el amorreo; empieza desde luego a ocupar su tierra y hacerle la guerra.
Deut 2:27 Pasaremos por tu tierra yendo por el camino real, sin torcer ni a la derecha ni a la izquierda.
Deut 2:29 como lo hicieron los hijos de Esaú que habitan en Seir, y los moabitas que moran en Ar; hasta que arribemos al Jordán, y entremos en la tierra que nos ha de dar el Señor, Dios nuestro.
Deut 2:31 Entonces me dijo el Señor: He aquí que he comenzado a entregarte a Sehón y su tierra: empieza tú a poseerla.
Deut 2:37 menos la tierra de los hijos de Amón, a que no tocamos, y todo el país de la orilla del torrente Jeboc, y las ciudades de las montañas, y todos los demás lugares que nos vedó el Señor Dios nuestro.
Deut 3:8 Con lo que nos hicimos entonces dueños de la tierra ocupada por los dos reyes amorreos que habitaban de este lado del Jordán, desde el torrente de Arnón hasta el monte Hermón,
Deut 3:10 y tomamos todas las ciudades de la llanura, y la tierra toda de Galaad y de Basán hasta Selca y Edrai, ciudades del reino de Og en Basán.
Deut 3:11 Es de saber que Og, rey de Basán, era el único que había quedado en esta tierra de la casta de los gigantes. Se muestra su cama de hierro en Rabbat, ciudad de los hijos de Amón, la cual tiene nueve codos de largo y cuatro de ancho, según la medida del codo ordinario de un hombre.
Deut 3:12 Tomamos, pues, entonces posesión de la tierra desde Aroer, situada sobre la ribera del torrente Arnón, hasta la mitad de la montaña de Galaad; y di sus ciudades a las tribus de Rubén y de Gad.
Deut 3:13 La otra mitad del país de Galaad y todo el de Basán, del reino de Og, con toda la comarca de Argob, lo entregué a la media tribu de Manasés. Todo este país de Basán es llamado tierra de los gigantes.
Deut 3:18 Entonces os di esta orden, diciendo a los de estas tres tribus: El Señor Dios vuestro os da esta tierra por heredad; todos los hombres robustos habéis de ir armados a la ligera a la frente de vuestros hermanos los hijos de Israel,
Deut 3:20 hasta tanto que conceda el Señor a vuestros hermanos descanso, como os le ha concedido a vosotros; y posean ellos también la tierra que les ha de dar a la otra parte del Jordán; entonces se volverá cada uno de vosotros a la posesión propia que os he dado.
Deut 3:24 Señor Dios, tú has empezado a mostrar a tu siervo tu grandeza y el poder excelso de tu brazo; como que no hay otro Dios en el cielo ni en la tierra que pueda hacer lo que tú haces, ni compararse contigo en fortaleza.