Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

tierra

II Rey 18:28 En esto Aquímaas gritando de lejos, dijo al rey: Señor, Dios te guarde. Y postrándose en tierra delante del rey, y haciéndole profundo acatamiento, dijo: Bendito sea el Señor Dios tuyo que ha entregado en tus manos a los que se habían sublevado contra el rey, mi señor.
II Rey 19:9 Además todo el pueblo esparcido por todas las tribus de Israel, a competencia decía: El rey nos libró del poder de nuestros enemigos, él nos salvó de las manos de los filisteos; y ahora ha tenido que huir de esta tierra por causa de Absalón.
II Rey 20:10 Y no habiendo hecho Amasa ningún reparo en la daga o cuchillo que tenía Joab, lo hirió éste en el costado, y derramó por tierra sus entrañas, y sin repetir el golpe, lo dejó allí muerto. Luego Joab y Abisai su hermano, continuaron en seguimiento de Seba, hijo de Bocri.
II Rey 21:14 los hizo sepultar con los de Saúl y de Jonatás, su hijo, en la tierra de Benjamín, a un lado del sepulcro de Cis, su padre. Ejecutado así todo lo ordenado por el rey, se mostró después Dios propicio con la tierra.
II Rey 21:14 los hizo sepultar con los de Saúl y de Jonatás, su hijo, en la tierra de Benjamín, a un lado del sepulcro de Cis, su padre. Ejecutado así todo lo ordenado por el rey, se mostró después Dios propicio con la tierra.
II Rey 22:8 Se conmovió y se estremeció la tierra; se agitaron los cimientos de los montes, y se hicieron pedazos, porque el Señor se mostró con ellos enojado.
II Rey 22:16 Quedaron entonces patentes los abismos del mar, y descubiertos los cimientos de la tierra a las amenazas del Señor, y al resuello impetuoso de su furor.
II Rey 22:43 Los disiparé como polvo de la tierra; los aplastaré y desmenuzaré como lodo de las calles.
II Rey 23:4 Ellos erán como la luz de la aurora que brilla por la mañana cuando sale el sol sin nube alguna; y como hierba que brota de la tierra después de la lluvia.
II Rey 24:6 y pasando por Jacer, entraron en Galaad y en la tierra baja de Hodsi, y llegaron hasta los bosques de Dan; y dando la vuelta por los contornos de Sidón,
II Rey 24:7 pasaron junto a los muros de Tiro, y atravesando toda la tierra de los heveos y cananeos llegaron hasta Bersabee, al mediodía de Judá.
II Rey 24:21 y saliendo al encuentro, hizo al rey profunda reverencia pegado el rostro en tierra, y dijo: ¿Qué motivo hay para que el rey mi señor venga a casa de su siervo? Al cual respondió David: Para comprarte esa era, y edificar en ella un altar al Señor; a fin de que cese la mortandad que se extiende por el pueblo.
II Rey 24:25 y edificó allí David un altar al Señor, ofreciendo en él holocaustos y hostias pacíficas; con lo que se mostró el Señor propicio a la tierra, y cesó la mortandad en Israel.
III Rey 1:31 Y Betsabé, inclinando el rostro hasta la tierra, hizo reverencia al rey, y dijo: ¡Viva para siempre David, mi señor!
III Rey 1:40 Todo el mundo se fue tras él; y una tropa de gente tocaba flautas y se alegraba con gran júbilo, resonando la tierra con sus aclamaciones.
III Rey 1:52 A lo que respondió Salomón : Si fuere hombre de bien, no caerá en tierra ni uno siquiera de sus cabellos; pero si se portare malamente, morirá.
III Rey 4:19 Gaber, hijo de Huri, en la tierra de Galaad, en la tierra que fue de Sehón, rey de los amorreos, y de Og, rey de Basán; y cuidaba de todo lo de aquel país.
III Rey 4:19 Gaber, hijo de Huri, en la tierra de Galaad, en la tierra que fue de Sehón, rey de los amorreos, y de Og, rey de Basán; y cuidaba de todo lo de aquel país.
III Rey 4:34 Por lo que venían de todos los países a escuchar la sabiduría de Salomón , y enviados de todos los reyes de la tierra, entre los cuales se había esparcido la fama de su sabiduría.
III Rey 6:1 Se comenzó a edificar la casa del Señor en el año cuatrocientos ochenta después de la salida de los hijos de Israel de la tierra de Egipto, el año cuarto del reinado de Salomón sobre Israel, en el mes de Cío, esto es, el mes segundo.
III Rey 7:46 Los hizo fundir el rey en las llanuras del Jordán en una tierra gredosa, entre Socot y Sartán.
III Rey 8:9 Dentro del arca no había otra cosa sino las dos tablas de piedra que había puesto en ella Moisés en Horeb, cuando el Señor hizo la alianza con los hijos de Israel, luego que salieron de la tierra de Egipto.
III Rey 8:21 Y en ella he escogido el lugar para el arca , dentro de la cual está la ley, que es la alianza del Señor, hecha con nuestros padres, cuando salieron de la tierra de Egipto.
III Rey 8:23 dijo: ¡Oh Señor Dios de Israel!, no hay Dios semejante a ti, ni arriba en el cielo, ni acá abajo en la tierra; tú guardas el pacto y usas misericordia con tus siervos, que andan en tu presencia con todo su corazón.
III Rey 8:27 Mas en efecto: ¿es creíble que verdaderamente Dios ha de habitar sobre la tierra? Porque si ni los cielos, oh Señor, ni los altísimos cielos pueden abarcarte, ¿cuánto menos esta casa que yo he construido?
III Rey 8:34 óyelos tú desde el cielo, perdona el pecado de tu pueblo de Israel, y restitúyelos a la tierra que diste a sus padres.
III Rey 8:36 atiéndeles, Señor, desde el cielo y perdona los pecados de tus siervos y de Israel, pueblo tuyo; y enséñales el buen camino por donde deben andar, y envía lluvias a esta tu tierra, cuya posesión diste a tu pueblo.
III Rey 8:40 a fin de que te teman mientras viven sobre la tierra que diste a nuestros padres.
III Rey 8:46 Que si pecaren contra ti, (pues no hay hombre que no peque) y airado los abandonares en poder de sus enemigos, y fueren llevados cautivos a tierra enemiga, lejos o cerca de aquí,
III Rey 8:48 y se volvieren a ti de todo su corazón, y con toda su alma, en la tierra enemiga, a donde fueren conducidos esclavos, e hicieren oración a ti, mirando hacia su tierra, que diste a sus padres, y hacia la ciudad que tú elegiste, y hacia el templo que he edificado a tu Nombre,
III Rey 8:48 y se volvieren a ti de todo su corazón, y con toda su alma, en la tierra enemiga, a donde fueren conducidos esclavos, e hicieren oración a ti, mirando hacia su tierra, que diste a sus padres, y hacia la ciudad que tú elegiste, y hacia el templo que he edificado a tu Nombre,
III Rey 8:51 Porque ellos son el pueblo tuyo y la heredad tuya, y los sacaste de la tierra de Egipto de en medio del horno o crisol del hierro.
III Rey 8:53 ya que tú, ¡oh Señor Dios!, los escogiste de todos los pueblos de la tierra para posesión tuya, como lo declaraste por boca de tu siervo Moisés, cuando sacaste de Egipto a nuestros padres.
III Rey 8:54 Luego que Salomón hubo acabado de proferir toda esta oración y plegaria al Señor, se levantó de ante el Altar del Señor, porque había hincado ambas rodillas en tierra, teniendo levantadas las manos hacia el cielo;
III Rey 8:60 a fin de que todas las naciones de la tierra reconozcan que el Señor es el verdadero Dios, y que fuera de él no hay otro.
III Rey 9:7 yo arrancaré a Israel de la tierra que le di, y arrojaré lejos de mí ese templo que he consagrado a mi Nombre; e Israel vendrá a ser el escarnio y la fábula de todas las gentes.
III Rey 9:9 Y le responderán: Porque abandonaron al Señor Dios suyo, que sacó a sus padres de la tierra de Egipto, y se fueron tras los dioses ajenos, y los adoraron y dieron culto; por eso el Señor ha descargado sobre ellos todos estos males.
III Rey 9:11 (suministrándole Hiram, rey de Tiro, las maderas de cedro y abeto, y el oro, todo cuanto había necesitado), entonces Salomón dio a Hiram veinte poblaciones en tierra de Galilea.
III Rey 10:6 Y dijo al rey: Verdadera es la fama de lo que oí en mi tierra
III Rey 10:13 El rey Salomón por su parte dio a la reina de Saba todo cuanto ella quiso y le pidió; sin contar los presentes que de su grado le hizo con regia magnificencia. Ella se volvió y partió para su tierra con sus criados.
III Rey 10:23 Así el rey Salomón sobrepujó a todos los reyes de la tierra en riquezas y sabiduría;
III Rey 12:28 Y después de discurrirlo mucho, mandó hacer dos becerros de oro y dijo al pueblo: No subáis ya más a Jerusalén . He aquí, oh Israel, tus dioses, los que te sacaron de la tierra de Egipto.
III Rey 13:34 Este fue el pecado de la casa de Jeroboam, y por eso fue destruida y arrancada de la superficie de la tierra.
III Rey 14:15 Y el Señor Dios batirá a Israel, al modo que una caña suele ser batida de las aguas; arrancará a Israel de esta buena tierra que dio a sus padres, y lo arrojará cautivo más allá del río Eufrates, en castigo de haber consagrado bosques a los ídolos para irritar al Señor.
III Rey 15:20 Condescendiendo Benadad con el rey Asa, despachó los capitanes de su ejército contra las ciudades de Israel, y se apoderaron de Ahión, y de Dan, y de Abel-casa de Maaca, y de todo el país de Cennerot, es a saber, de toda la tierra de Neftalí.
III Rey 15:22 Entretanto el rey Asa publicó un bando por toda la tierra de Judá, que decía: Nadie queda exento de acudir a Rama. Con esto recogieron la piedra y madera empleada por Baasa en la construcción de Rama, y con ellas edificó el rey Asa a Gabaa de Benjamín y a Masfa.
III Rey 16:3 he aquí que yo arrancaré de la faz de la tierra tu descendencia y la de tu familia; y haré de tu casa lo que he hecho de la de Jeroboam, hijo de Nabat.
III Rey 17:7 Mas pasados algunos días, se secó el arroyo; porque faltaron las lluvias sobre la tierra.
III Rey 17:14 Porque esto dice el Señor Dios de Israel: No vendrá a menos la harina de la orza, ni menguará el aceite de la alcuza, hasta el día en que el Señor envíe lluvia sobre la tierra.
III Rey 18:1 Mucho tiempo después habló el Señor a Elías en el tercer año del hambre, diciendo: Anda y preséntate a Acab; porque quiero enviar lluvias a la tierra.