Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

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Deut 28:51 y que devorará las crías de tus ganados, y los frutos de tus cosechas, de suerte que perezcas; pues no te dejará trigo, ni vino, ni aceite, ni manadas de vacas, ni rebaños de ovejas; hasta que te destruya.
Deut 28:51 y que devorará las crías de tus ganados, y los frutos de tus cosechas, de suerte que perezcas; pues no te dejará trigo, ni vino, ni aceite, ni manadas de vacas, ni rebaños de ovejas; hasta que te destruya.
Deut 28:51 y que devorará las crías de tus ganados, y los frutos de tus cosechas, de suerte que perezcas; pues no te dejará trigo, ni vino, ni aceite, ni manadas de vacas, ni rebaños de ovejas; hasta que te destruya.
Deut 28:51 y que devorará las crías de tus ganados, y los frutos de tus cosechas, de suerte que perezcas; pues no te dejará trigo, ni vino, ni aceite, ni manadas de vacas, ni rebaños de ovejas; hasta que te destruya.
Deut 28:56 La mujer tierna y delicada, que no sabía dar un paso, ni asentar la planta del pie sobre la tierra por su demasiada delicadeza y sensibilidad, no querrá dar a su mismo amado esposo parte de las carnes del hijo y de la hija,
Deut 28:57 ni de las secundinas, o masa inmunda que sale de su vientre, ni del niño que ha nacido en aquel mismo punto: porque se comerá todo esto a escondidas, por falta de toda otra cosa con que resistir a una hambre tan cruel, durante el cerco y devastación con que te apurará tu enemigo dentro de tus ciudades.
Deut 28:57 ni de las secundinas, o masa inmunda que sale de su vientre, ni del niño que ha nacido en aquel mismo punto: porque se comerá todo esto a escondidas, por falta de toda otra cosa con que resistir a una hambre tan cruel, durante el cerco y devastación con que te apurará tu enemigo dentro de tus ciudades.
Deut 28:64 El Señor te desparramará, ¡oh Israel!, por todos los pueblos desde un cabo del mundo al otro; y allí servirás a dioses ajenos que ni tú, ni tus padres conocisteis, a dioses de palo y de piedra.
Deut 28:64 El Señor te desparramará, ¡oh Israel!, por todos los pueblos desde un cabo del mundo al otro; y allí servirás a dioses ajenos que ni tú, ni tus padres conocisteis, a dioses de palo y de piedra.
Deut 28:65 Aun allí entre aquellas gentes no lograrás descanso, ni podrás asentar el pie, porque el Señor te dará allí un corazón espantadizo, y ojos desfallecidos, y una alma consumida de tristeza.
Deut 29:4 Y el Señor por su justo juicio no os ha dado hasta el presente un corazón que sienta, ni ojos que miren, ni oídos que quieran escuchar.
Deut 29:4 Y el Señor por su justo juicio no os ha dado hasta el presente un corazón que sienta, ni ojos que miren, ni oídos que quieran escuchar.
Deut 29:5 El Señor os ha conducido hasta aquí por el desierto, durante cuarenta años; sin que se hayan gastado vuestros vestidos; ni se ha roto de puro viejo el calzado de vuestros pies.
Deut 29:6 No habéis comido pan, ni bebido vino o sidra, a fin de que por el maná conocierais que yo soy el Señor Dios vuestro.
Deut 29:23 (el cual la abrasará con azufre y salitre ardiente, de suerte que ya no se siembre más, ni brote hierba, ni verde alguno; representando el asolamiento de Sodoma y de Gomorra, de Adama y de Seboim, que arrasó el Señor, encendido el furor de su ira).
Deut 29:23 (el cual la abrasará con azufre y salitre ardiente, de suerte que ya no se siembre más, ni brote hierba, ni verde alguno; representando el asolamiento de Sodoma y de Gomorra, de Adama y de Seboim, que arrasó el Señor, encendido el furor de su ira).
Deut 30:11 Este mandamiento que yo te prescribo hoy no está sobre ti, ni puesto lejos de ti,
Deut 30:12 ni situado en el cielo, de suerte que puedas decir: ¿Quién de nosotros podrá subir al cielo para que nos traiga ese mandamiento y le oigamos y pongamos por obra?
Deut 31:6 Portaos varonilmente, y con firmeza; no temáis, ni os amedrentéis a su vista: porque el Señor Dios tuyo él mismo es, ¡oh Israel!, tu caudillo, y no te dejará ni te desamparará.
Deut 31:6 Portaos varonilmente, y con firmeza; no temáis, ni os amedrentéis a su vista: porque el Señor Dios tuyo él mismo es, ¡oh Israel!, tu caudillo, y no te dejará ni te desamparará.
Deut 31:8 Y el Señor que es vuestro caudillo, él mismo será contigo: no te dejará ni te desamparará: no temas, ni te amedrentes.
Deut 31:8 Y el Señor que es vuestro caudillo, él mismo será contigo: no te dejará ni te desamparará: no temas, ni te amedrentes.
Deut 32:28 Gente es ésta sin consejo, ni prudencia.
Deut 33:9 Aquellos que dijeron a su padre y a su madre: No os conozco; y a sus hermanos: No sé quién sois; y ni a sus propios hijos perdonaron, éstos cumplieron tus mandamientos y guardaron inviolable tu pacto.
Deut 34:7 Era Moisés de ciento veinte años cuando murió: no se ofuscó su vista, ni los dientes se le movieron.
Deut 34:11 ni que hiciese todos aquellos milagros y portentos que obró cuando lo envió el Señor a tierra de Egipto contra Faraón y todos sus siervos, y su reino todo;
Deut 34:12 ni que tuviese aquel universal poderío, y obrase las grandes maravillas que hizo Moisés a vista de todo Israel.
Jos 1:5 Ninguno de esos pueblos podrá resistiros en todo el tiempo de tu vida: como estuve con Moisés, así estaré contigo: no te dejaré ni te desampararé.
Jos 1:7 Anímate, pues, y ármate de gran fortaleza para guardar y cumplir toda la ley que te prescribió mi siervo Moisés; no te desvíes de ella ni a la diestra ni a la siniestra; así obrarás prudentemente.
Jos 1:7 Anímate, pues, y ármate de gran fortaleza para guardar y cumplir toda la ley que te prescribió mi siervo Moisés; no te desvíes de ella ni a la diestra ni a la siniestra; así obrarás prudentemente.
Jos 1:9 Mira que yo soy el que te lo mando; buen ánimo y sé constante. No temas ni desmayes; porque contigo está el Señor Dios tuyo a cualquier parte que vayas.
Jos 5:12 Y luego que ya comieron de los frutos de la tierra, faltó el maná; ni usaron más los hijos de Israel de tal manjar, sino que se alimentaron de los frutos que había producido aquel año la tierra de Canaán.
Jos 6:1 Entre tanto Jericó estaba cerrada y bien pertrechada por temor de los hijos de Israel, y nadie osaba salir ni entrar.
Jos 6:10 Mas Josué había mandado al pueblo, diciendo: No gritaréis, ni se oirá vuestra voz, ni saldrá palabra de vuestra boca, hasta tanto que llegue el día en que os diga: Gritad y dad voces.
Jos 6:10 Mas Josué había mandado al pueblo, diciendo: No gritaréis, ni se oirá vuestra voz, ni saldrá palabra de vuestra boca, hasta tanto que llegue el día en que os diga: Gritad y dad voces.
Jos 6:18 Ahora vosotros, guardaos de tocar cosa chica ni grande, contraviniendo las órdenes dadas; para no haceros reos de prevaricación, y no envolver a todo el campamento de Israel en la culpa, y llenarle de turbación.
Jos 8:1 Dijo después el Señor a Josué: No temas ni te acobardes: toma contigo toda la gente de guerra, y puesto en marcha sube a la ciudad de Hai; sábete que tengo entregado en tus manos su rey y el pueblo, y la ciudad y su territorio.
Jos 8:17 sin que hubiese quedado ni siquiera un hombre en Hai y en Betel que no fuera al alcance de los israelitas (dejando abiertas las puertas por donde salieron de tropel),
Jos 10:12 Entonces habló Josué al Señor en aquel día en que entregó al amorreo a merced de los hijos de Israel, y dijo en presencia de ellos: Sol no te muevas de encima de Gabaón; ni tú, Luna de encima del valle de Ayalón.
Jos 10:14 No hubo antes ni después día tan largo, obedeciendo el Señor, por decirlo así, a la voz de un hombre, y peleando por Israel.
Jos 10:19 vosotros entre tanto no paréis de perseguir a los enemigos, hiriendo siempre la retaguardia de los fugitivos, ni dejéis entrar a guarecerse en sus ciudades a los que el Señor Dios ha entregado en vuestras manos.
Jos 10:21 Y se volvió todo el ejército a Josué junto a Maceda, donde estaba entonces el campo, salvo y sin haber perdido un solo hombre; y ni siquiera uno de los enemigos se atrevió a chistar contra los hijos de Israel.
Jos 10:25 les dijo Josué: No temáis ni os acobardéis; esforzaos y mantened vuestro brío, que así tratará el Señor a todos vuestros enemigos contra quienes peleáis.
Jos 10:35 y la conquistó el mismo día, y pasó a cuchillo toda la gente que había en ella, ni más ni menos que lo había hecho en Laquis.
Jos 10:35 y la conquistó el mismo día, y pasó a cuchillo toda la gente que había en ella, ni más ni menos que lo había hecho en Laquis.
Jos 11:15 Según el Señor lo tenía mandado a su siervo Moisés, así también Moisés se lo mandó a Josué, y éste lo cumplió todo: no omitió ni un ápice de todos los mandamientos que había dado el Señor a Moisés.
Jos 14:4 sino que entraron en su lugar los hijos de José, Manasés y Efraín, divididos en dos tribus: ni tuvieron los levitas en la tierra otra porción de ciudades para habitar, y sus ejidos o campos vecinos, para mantener sus bestias y ganados.
Jos 20:5 Y si el que quiere vengar la muerte viniere persiguiéndolo, no lo entregarán en sus manos: por cuanto no mató su prójimo a sabiendas, ni se prueba que hubiese sido dos o tres días atrás su enemigo.
Jos 22:3 ni en tan largo tiempo hasta el día de hoy habéis desamparado a vuestros hermanos, observando el mandamiento del Señor Dios vuestro.
Jos 22:26 dijimos: Levantemos un altar, no para ofrecer holocaustos ni víctimas;