Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

he

Salm 54:17 Pero yo he clamado a Dios, y el Señor me salvará.
Salm 55:9 ¡Oh Dios!, te he expuesto cuál es la situación de mi vida; tú tienes presentes ante tus ojos mis lágrimas, conforme a tu promesa.
Salm 55:12 A mi cuidado quedan, ¡oh Dios!, los votos que te he hecho, que cumpliré cantando tus alabanzas.
Salm 58:10 En ti he depositado mi fortaleza; pues tú eres, oh Dios, el defensor mío.
Salm 65:17 Al Señor invoqué con mi boca, y le he glorificado con mi lengua.
Salm 68:5 Se han multiplicado, más que los cabellos de mi cabeza, los que me aborrecen injustamente. Se han hecho fuertes mis enemigos, los injustos perseguidores míos; he pagado lo que yo no había robado.
Salm 68:8 Pues por amor a ti he sufrido los ultrajes, y se ve cubierto de confusión el rostro mío.
Salm 70:6 En ti me he apoyado desde el vientre de mi madre, desde cuando estaba en sus entrañas eres tú mi protector. Tú eres siempre el asunto de mis cánticos.
Salm 70:17 Tú, ¡oh Dios!, fuiste mi maestro desde mi tierna edad; y yo publicaré tus maravillas que he experimentado hasta ahora.
Salm 72:13 Yo también exclamé: Luego en vano he purificado mi corazón y lavado mis manos en compañía de los inocentes.
Salm 87:5 Ya me cuentan entre los muertos; he venido a ser como un hombre desamparado de todos,
Salm 88:4 Tengo hecha alianza, dijiste, con mis escogidos; he jurado a David, siervo mío, diciendo:
Salm 88:20 Entonces hablaste en visión a tus santos, y dijiste: Yo tengo preparado en un hombre poderoso el socorro; y he ensalzado a aquel que escogí de entre mi pueblo.
Salm 88:36 Una vez para siempre juré por mi santo Nombre, que no faltaré a lo que he prometido a David:
Salm 100:3 Jamás he puesto la mira en cosa injusta; he aborrecido a los transgresores de la ley.
Salm 100:3 Jamás he puesto la mira en cosa injusta; he aborrecido a los transgresores de la ley.
Salm 100:4 Conmigo no han tenido cabida hombres de corazón depravado; ni he querido conocer al que con su proceder maligno se desviaba de mí.
Salm 100:5 Al que calumniaba secretamente a su prójimo, a éste lo he perseguido. No admitía en mi mesa a hombres de ojos altaneros y de corazón insaciable.
Salm 101:5 Estoy marchito como el heno, árido está mi corazón; pues hasta de comer mi pan me he olvidado.
Salm 101:6 De puro gritar y gemir me he quedado con sola la piel pegada a los huesos.
Salm 101:7 Me he vuelto semejante al pelícano, que habita en la soledad; me parezco al búho en su triste albergue.
Salm 101:12 Como sombra han pasado mis días y me he secado como el heno.
Salm 118:10 Yo te he buscado con todo mi corazón; no me dejes desviar de tus mandamientos.
Salm 118:14 Me he deleitado más que en todos los tesoros, en seguir el camino de tus preceptos.
Salm 118:22 Líbrame del oprobio y del desprecio; pues he guardado exactamente tus testimonios.
Salm 118:31 Me he apoyado, Señor, en los testimonios de tu ley; no permitas que me vea confundido.
Salm 118:39 Aparta de mí el oprobio que yo he temido; pues tus juicios son tan amables.
Salm 118:43 Y nunca quites de mi boca la palabra de la verdad, ya que tanto he confiado en tus promesas.
Salm 118:48 Y alzaré mis manos hacia tus mandamientos, que he amado siempre; y meditaré tus justas disposiciones.
Salm 118:58 Tu favor he implorado de todo mi corazón; apiádate de mí, según tu promesa.
Salm 118:66 Enséñame la bondad, la doctrina y la sabiduría; pues he creído tus preceptos.
Salm 118:81 CAPH. Desfallece mi alma, suspirando por la salud que de ti viene; mas yo siempre he esperado firmemente en tu palabra.
Salm 118:83 Porque me he quedado seco y árido, como un odre expuesto a la escarcha; mas con todo, no me he olvidado de tus justísimos preceptos.
Salm 118:83 Porque me he quedado seco y árido, como un odre expuesto a la escarcha; mas con todo, no me he olvidado de tus justísimos preceptos.
Salm 118:94 Tuyo soy yo, Señor, sálvame, pues he investigado con ansia tus mandamientos.
Salm 118:100 Alcancé más que los ancianos, porque he ido investigando tus preceptos.
Salm 118:102 De tus estatutos no me he desviado, porque tú me lo prescribiste por ley.
Salm 118:127 Por lo mismo he amado tus mandamientos más que el oro y los topacios.
Salm 118:128 Por eso me encaminé por la senda de todos tus preceptos, y he detestado todos los caminos de la iniquidad.
Salm 118:141 Pequeño soy yo, y de poca estima; mas no he puesto en olvido tus justísimos oráculos.
Salm 118:153 RES. Mira, Señor, mi abatimiento, y líbrame; pues no me he olvidado de tu ley.
Salm 118:157 Muchos son los que me persiguen y atribulan; pero yo no me he desviado de tus mandamientos.
Salm 118:159 Mira, ¡oh Señor!, cuánto he amado tus mandamientos; por tu misericordia otórgame la vida.
Salm 118:163 Aborrecí la injusticia, la detesté; y he amado tu santa ley.
Salm 118:173 Extiende tu mano para salvarme; pues yo he preferido a todo tus mandamientos.
Salm 118:174 ¡Oh Señor! ardientemente he deseado la salud que de ti viene, y tu ley es el objeto continuo de mi meditación.
Salm 118:176 He andado errante como una oveja descarriada: ven a buscar a tu siervo, porque no me he olvidado, ¡oh Señor!, de tus mandamientos.
Salm 121:8 Por amor de mis hermanos y de mis prójimos, he pedido yo la paz y prosperidad para ti.
Salm 126:3 he aquí que les viene del Señor la herencia, los hijos, las ganancias y las crías de los ganados.
Salm 129:4 Mas en ti se halla siempre la clemencia; y en vista de tu ley he confiado en ti, ¡oh Señor! en la promesa del Señor se ha apoyado mi alma.