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Rom 9:15
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Pues Dios dice a Moisés: Usaré de misericordia con quien yo quiera usarla, y tendré compasión de quien yo quiera tenerla.
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Rom 9:20
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Mas, ¿quién eres tú, ¡oh hombre!, para reconvenir a Dios? ¿Un vaso de barro dice acaso al que le labró: Por qué me has hecho así?
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Rom 9:25
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conforme a lo que dice por Oseas: Llamaré pueblo mío al que no era mi pueblo; y amado, al que no era amado; y objeto de misericordia, al que no había conseguido misericordia.
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Rom 10:6
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Pero de la justicia que procede de la fe, dice así: No digas en tu corazón: ¿Quién podrá subir al cielo?, esto es, para hacer que Cristo descienda;
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Rom 10:8
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Mas ¿qué es lo que dice la Escritura? Cerca está de ti la palabra que da la justificación, en tu boca está y en tu corazón; esta palabra es la palabra de la fe que predicamos.
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Rom 10:11
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Por esto dice la Escritura: Cuantos creen en él, no serán confundidos.
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Rom 10:20
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Isaías, levanta la voz, y dice: Me hallaron los que no me buscaban; me descubrí claramente a los que no preguntaban por mí.
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Rom 10:21
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Y, al contrario, dice a Israel: Todo el día tuve mis manos extendidas a ese pueblo incrédulo y rebelde a mis palabras.
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Rom 11:9
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David dice también: Venga a ser para ellos su mesa un lazo donde queden cogidos, y una piedra de escándalo, y eso en justo castigo suyo.
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Rom 12:19
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No os venguéis vosotros mismos, queridos míos, sino dad lugar a que se pase la cólera; pues está escrito: A mí toca la venganza; yo haré justicia, dice el Señor.
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Rom 14:11
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Pues escrito está: Yo juro por mí mismo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda rodilla, y que toda lengua o nación ha de confesar que soy Dios.
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Rom 15:12
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Así mismo dice Isaías: De la estirpe de Jesé nacerá aquel que ha de gobernar las naciones, y las naciones esperarán en él.
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Rom 15:20
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Por lo demás, al cumplir con mi ministerio, he tenido cuidado de no predicar la buena nueva en los lugares en que era ya conocido el nombre de Cristo , por no edificar sobre fundamento de otro, verificando de esta manera lo que dice la Escritura:
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I Cor 6:16
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¿O no sabéis que quien se junta con una prostituta, se hace un cuerpo con ella? Porque serán los dos, dice la Escritura, una carne.
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I Cor 9:8
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¿Y por ventura esto que digo es solamente un raciocinio humano? ¿O no dice la ley esto mismo?
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I Cor 9:10
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¿Acaso no dice esto principalmente por nosotros? Sí, ciertamente por nosotros se han escrito estas cosas; porque la esperanza hace arar al que ara; y el que trilla lo hace con la esperanza de percibir el fruto.
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I Cor 12:3
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Ahora, pues, yo os declaro que ningún verdadero profeta, ningún hombre que habla inspirado de Dios, dice anatema a Jesús . Ni nadie puede confesar que Jesús es el Señor, sino por el Espíritu Santo.
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I Cor 14:13
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Y por lo mismo, el que habla una lengua, pida la gracia de interpretarla, o explicar lo que dice.
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I Cor 14:21
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En la ley está escrito: Yo hablaré en otras lenguas y con otros acentos a este pueblo; y ni aun así me creerán, dice el Señor.
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I Cor 14:34
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Las mujeres callen en las iglesias, porque no les es permitido hablar allí, sino que deben estar sumisas, como lo dice también la ley.
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I Cor 15:26
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Y la muerte será el último enemigo destruido; porque todas las cosas las sujetó Dios debajo de los pies de su Hijo. Mas cuando dice la Escritura:
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II Cor 6:2
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Pues él mismo dice: Al tiempo oportuno te oí, atenderé tus súplicas, y en el día de la salvación te di auxilio. Llegado es ahora el tiempo favorable, llegado es ahora el día de la salvación.
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II Cor 6:16
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¿O qué consonancia entre el templo de Dios y los ídolos? Porque vosotros sois templo de Dios vivo, según aquello que dice Dios: Habitaré dentro de ellos, y en medio de ellos andaré, y yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo.
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II Cor 6:17
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Por lo cual salid vosotros de entre tales gentes, y separaos de ellas, dice el Señor, y no tengáis contacto con la inmundicia o idolatría;
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II Cor 6:18
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y yo os acogeré, y seré yo vuestro padre, y vosotros seréis mis hijos y mis hijas, dice el Señor todopoderoso.
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II Cor 13:1
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Mirad que por tercera vez voy a visitaros; por el dicho de dos o tres testigos, como dice la ley, se decidirá todo.
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Gál 3:16
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las promesas se hicieron a Abrahán y al descendiente de él. No dice: y a los descendientes, como si fuesen muchos; sino como uno precisamente: y al desciendiente de ti, el cual es Cristo .
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Gál 4:21
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Decidme, os ruego, los que queréis estar sujetos a la ley antigua, ¿no habéis leído lo que dice la ley?
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Gál 4:30
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Pero ¿qué dice la Escritura?: Echa fuera a la esclava y a su hijo; que no ha de ser heredero el hijo de la esclava con el hijo de la libre.
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Ef 4:8
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Por lo cual dice la Escritura: Al subirse a lo alto llevó consigo cautiva o como en triunfo a una gran multitud de cautivos, y derramó sus dones sobre los hombres.
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Ef 4:9
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Mas ¿por qué se dice que subió, sino porque antes había descendido a los lugares más ínfimos de la tierra?
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Ef 5:14
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Por eso dice el Señor: Levántate, tú que duermes, y resucita de la muerte, y te alumbrará Cristo .
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Col 2:21
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No comáis, se os dice, ni gustéis, ni toquéis esto o aquello;
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II Tes 2:4
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el cual se opondrá a Dios, y se alzará contra todo lo que se dice Dios, o se adora, hasta llegar a poner su asiento en el templo de Dios, dando a entender que es Dios.
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I Tim 4:1
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Pero el Espíritu Santo dice claramente que en los venideros tiempos han de apostatar algunos de la fe, dando oídos a espíritus falaces y a doctrinas diabólicas,
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I Tim 5:18
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Porque la Escritura dice: No pondrás bozal al buey que trilla. Y también: El obrero merece su jornal.
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Heb 1:6
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Y otra vez al introducir a su primogénito en el mundo, dice: Adórenle todos los ángeles de Dios.
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Heb 1:7
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Así mismo en orden a los ángeles dice la Escritura: El que a sus ángeles o embajadores los hace espíritus o ligeros como el viento, y a sus ministros activos como la ardiente llama;
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Heb 1:8
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mientras al Hijo le dice: El trono tuyo, ¡oh Dios!, subsistirá por los siglos de los siglos; cetro de rectitud, el cetro de tu reino;
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Heb 1:10
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Y en otro lugar se dice del hijo de Dios: Tú eres, ¡oh Señor!, el que al principio fundó la tierra, y obras de tus manos son los cielos,
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Heb 3:7
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Por lo cual nos dice el Espíritu Santo: Si hoy oyereis su voz,
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Heb 3:15
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Mientras se nos dice: Si hoy oyereis su voz, no endurezcáis vuestros corazones, como los israelitas en el tiempo de aquella provocación.
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Heb 4:5
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Y en éste dice: Jamás entrarán en mi descanso.
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Heb 5:6
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Al modo que también en otro lugar dice: Tú eres sacerdote eternamente, según el orden de Melquisedec.
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Heb 8:8
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Sin embargo, culpándolos dice a los prevaricadores de la ley antigua: He aquí que vendrán días, dice el Señor, en que otorgaré a la casa de Israel y a la casa de Judá un Testamento o alianza nueva;
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Heb 8:8
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Sin embargo, culpándolos dice a los prevaricadores de la ley antigua: He aquí que vendrán días, dice el Señor, en que otorgaré a la casa de Israel y a la casa de Judá un Testamento o alianza nueva;
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Heb 8:9
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no como el Testamento o pacto que hice con sus padres cuando los tomé como por la mano para sacarlos de la tierra de Egipto; por cuanto ellos no guardaron mi alianza, y así yo los deseché, dice el Señor.
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Heb 8:10
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El Testamento que he de disponer, dice el Señor, para la casa de Israel, después de aquellos días, es el siguiente: Imprimiré mis leyes en la mente de ellos, y las escribiré sobre sus corazones; y yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo;
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Heb 10:5
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Por eso el Hijo de Dios al entrar en el mundo dice a su eterno Padre: Tú no has querido sacrificio, ni ofrenda; mas a mí me has apropiado un cuerpo mortal;
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Heb 10:16
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He aquí la alianza que yo asentaré con ellos, dice el Señor, después de aquellos días imprimiré mis leyes en sus corazones y las escribiré sobre sus almas;
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