Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

les

Mt 26:45 En seguida volvió a sus discípulos y les dijo: Dormid ahora y descansad; he aquí que llegó ya la hora, y el Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los pecadores.
Mt 26:48 El traidor les había dado esta seña: Aquel a quien yo besare, ése es: prendedlo.
Mt 27:26 Entonces les soltó a Barrabás; y a Jesús , después de haberlo hecho azotar, lo entregó en sus manos para que fuese crucificado.
Mt 28:5 Mas el ángel, dirigiéndose a las mujeres, les dijo: Vosotras no tenéis que temer; que bien sé que venís en busca de Jesús , que fue crucificado:
Mt 28:9 Cuando he aquí que Jesús les sale al encuentro, diciendo: Dios os guarde; y acercándose ellas, postradas en tierra abrazaron sus pies y le adoraron.
Mt 28:10 Entonces Jesús les dice: No temáis: Id, avisad a mis hermanos para que vayan a Galilea, que allí me verán.
Mt 28:16 Mas los once discípulos partieron para Galilea, al monte que Jesús les había señalado.
Mt 28:18 Entonces Jesús , acercándose, les habló en estos términos: A mí se me ha dado toda potestad en el cielo y en la tierra.
Mc 1:17 y les dijo Jesús : Seguidme, y yo os haré pescadores de hombres.
Mc 1:44 diciéndole: Mira que no lo digas a nadie; pero ve y preséntate al príncipe de los sacerdotes, y ofrece por tu curación lo que tiene Moisés ordenado, para que esto les sirva de testimonio.
Mc 2:2 Y corriendo la voz de que estaba en la casa, acudieron muchos, en tanto número, que no cabían delante de la puerta; y él les anunciaba la palabra.
Mc 2:8 Mas como Jesús penetrase al momento con su espíritu esto mismo que interiormente pensaban, les dijo: ¿Qué andáis revolviendo esos pensamientos en vuestros corazones?
Mc 2:17 Habiéndolo oído Jesús , les dijo: Los que están buenos no necesitan médico, sino los que están enfermos; así, yo no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores.
Mc 2:20 Tiempo vendrá en que les quitarán al esposo; y entonces será cuando ayunarán.
Mc 2:27 Y les añadió: El sábado se hizo para el hombre, y no el hombre para el sábado.
Mc 3:4 Y a ellos les dijo: ¿Es lícito en sábado hacer bien, o mal? ¿Salvar la vida a una persona, o quitársela? Mas ellos callaban.
Mc 3:23 Mas Jesús , habiéndolos convocado, les decía o refutaba con estas parábolas: ¿Cómo puede Satanás expulsar a Satanás?
Mc 4:2 Y les enseñaba muchas cosas, usando parábolas, y les decía así conforme a su manera de enseñar:
Mc 4:2 Y les enseñaba muchas cosas, usando parábolas, y les decía así conforme a su manera de enseñar:
Mc 4:9 Y les decía: Quien tiene oídos para oír, escuche y reflexione.
Mc 4:11 Y él les decía: A vosotros se os ha concedido el saber o conocer el misterio del reino de Dios; pero a los extraños, todo se les anuncia en parábolas,
Mc 4:11 Y él les decía: A vosotros se os ha concedido el saber o conocer el misterio del reino de Dios; pero a los extraños, todo se les anuncia en parábolas,
Mc 4:12 de modo que viendo, vean y no reparen; y oyendo, oigan y no entiendan, por miedo de llegar a convertirse, y de que se les perdonen los pecados.
Mc 4:13 Después les dijo: ¿Así que vosotros no entendéis esta parábola? ¿Pues cómo entenderéis todas las demás?
Mc 4:33 Con muchas parábolas semejantes a ésta les predicaba la palabra, conforme a lo que podían entender;
Mc 4:34 y no les hablaba sin parábolas, aunque se lo descifraba todo a sus discípulos.
Mc 4:35 Aquel mismo día, siendo ya tarde, les dijo: Pasemos a la ribera de enfrente.
Mc 4:40 Entonces les dijo: ¿De qué teméis? ¿Cómo no tenéis fe todavía?,
Mc 5:16 Los que se habían hallado presentes les contaron lo que había sucedido al demonio, y el azar de los cerdos.
Mc 5:39 y entrando, les dijo: ¿De qué os afligís tanto y lloráis? La muchacha no está muerta, sino dormida.
Mc 5:43 Pero Jesús les mandó muy estrechamente que nadie lo supiera; y dijo que diesen de comer a la muchacha.
Mc 6:4 Mas Jesús les decía: Cierto que ningún profeta está sin honor, o estimación, sino en su patria, en su casa y en su parentela.
Mc 6:8 Y les mandó que nada se llevasen para el camino, sino el solo báculo o bordón; sin alforja, ni pan, o dinero en el cinto, o faja,
Mc 6:31 Y él les dijo: Venid a retiraros conmigo en un lugar solitario, y reposaréis un poquito; porque eran tantos los que lo seguían, que ni aun tiempo de comer les dejaban.
Mc 6:31 Y él les dijo: Venid a retiraros conmigo en un lugar solitario, y reposaréis un poquito; porque eran tantos los que lo seguían, que ni aun tiempo de comer les dejaban.
Mc 6:37 Mas él les respondió: Dadles vosotros de comer. Y ellos le replicaron: Vamos, pues, y bien es necesario que gastemos doscientos denarios para comprar panes si es que les hemos de dar algo de comer.
Mc 6:37 Mas él les respondió: Dadles vosotros de comer. Y ellos le replicaron: Vamos, pues, y bien es necesario que gastemos doscientos denarios para comprar panes si es que les hemos de dar algo de comer.
Mc 6:39 Entonces les mandó que hiciesen sentar a todos sobre la hierba verde, divididos en cuadrillas.
Mc 6:48 desde donde viéndolos remar con gran fatiga (por cuanto el viento les era contrario), a eso de la cuarta vela de la noche vino hacia ellos caminando sobre el mar, e hizo ademán de pasar adelante.
Mc 6:50 porque todos le vieron y se asustaron. pero Jesús les habló luego, y dijo: ¡Buen ánimo!, soy yo, no tenéis que temer.
Mc 6:56 Y doquiera que llegaba fuesen aldeas o alquerías, o ciudades, ponían los enfermos en las calles, suplicándole que les dejase tocar siquiera el ruedo de su vestido; y todos cuantos le tocaban quedaban sanos.
Mc 7:6 Mas Jesús les dio esta respuesta: ¡Oh, hipócritas!, bien profetizó de vosotros Isaías en lo que dejó escrito: Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está bien lejos de mí.
Mc 7:9 Y les añadía: Bellamente destruis el precepto de Dios por observar vuestra tradición.
Mc 7:14 Entonces, llamando de nuevo al pueblo les decía: Escuchadme todos, y entendedlo bien:
Mc 7:18 Y él les dijo: ¡Qué!, ¿también vosotros tenéis tan poca inteligencia? ¿Pues no comprendéis que todo lo que de fuera entra en el hombre no es capaz de contaminarle,
Mc 7:36 Y les mandó que no lo dijeran a nadie, pero cuanto más se lo mandaba, con tanto mayor empeño lo publicaban;
Mc 8:1 Por aquellos días habiéndose juntado otra vez un gran concurso de gentes alrededor de Jesús , y no teniendo qué comer, convocados sus discípulos, les dijo:
Mc 8:5 El les preguntó: ¿Cuántos panes tenéis? Respondieron: Siete.
Mc 8:7 Tenían además algunos pececillos; y les bendijo también, y mandó que se los repartieran.
Mc 8:11 donde salieron los fariseos, y empezaron a disputar con él, pidiéndole, con el fin de tentarle, que les hiciese ver algún prodigio del cielo.