Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

veinte

Deut 34:7 Era Moisés de ciento veinte años cuando murió: no se ofuscó su vista, ni los dientes se le movieron.
Juec 4:2 Clamaron, pues, los hijos de Israel al Señor; porque teniendo Jabín novecientos carros falcados, los había oprimido en extremo por espacio de veinte años.
Juec 8:10 Entretanto Zebee y Salmana estaban descansando con todo su ejército; porque de todas las tropas de los pueblos orientales habían quedado quince mil hombres, habiendo sido muertos ciento veinte mil soldados, que manejaban la espada.
Juec 11:33 Y destruyó veinte ciudades, desde Aroer hasta entrar en Menit y hasta Abel, circuida de viñas, causando grandísimo estrago; con lo que los hijos de Amón fueron humillados por los hijos de Israel.
Juec 15:20 Y Sansón, elegido juez, gobernó a Israel veinte años en tiempo de las guerras de los filisteos.
Juec 16:31 Después acudiendo sus hermanos con toda la parentela, tomaron su cuerpo, y lo colocaron entre Saraa y Estaol, en el sepulcro de su padre Manué. Fue juez de Israel veinte años.
I Rey 14:14 Y éste fue el primer destrozo en que Jonatás y su escudero mataron como unos veinte hombres, en el espacio de tierra que suele arar un yunta de bueyes en medio día.
II Rey 3:20 Llegó, pues, allí acompañado de veinte personas. Y David dio un banquete a Abner y a los que le acompañaban.
II Rey 8:4 e hizo mil setecientos prisioneros de a caballo, y veinte mil de a pie, desjarretando asimismo todos los caballos de los carros de guerra, sin dejar más que los necesarios para cien de éstos.
II Rey 9:10 Por tanto cuida tú con tus hijos y criados de labrarle las tierras, y de proveer a Micá, el hijo de tu amo Mifiboset, lo necesario para sus alimentos. En cuanto a Mifiboset, hijo de tu difunto señor, comerá siempre a mi mesa. Es de saber que Siba tenía quince hijos y veinte siervos.
II Rey 10:6 Mas los amonitas reflexionando en la injuria hecha a David, tomaron a su sueldo veinte mil infantes de la Siria de Rohob y de la Siria de Soba, mil hombres del rey de Maaca y doce mil de Istob.
II Rey 18:7 donde fue derrotado el ejército de Israel por las tropas de David. La mortandad fue grande; quedaron allí tendidos veinte mil hombres;
II Rey 19:17 con mil hombres de Benjamín, e iba con ellos Siba, criado de la casa de Saúl, con sus quince hijos y veinte siervos. Y rompiendo por el Jordán para ponerse delante del rey,
II Rey 24:8 Así recorridas todas las provincias, regresaron a Jerusalén después de nueve meses y veinte días.
III Rey 4:23 diez bueyes cebados y veinte de pasto, y cien carneros, sin contar la caza de ciervos, corzos, y búfalos, y aves cebadas, o volatería.
III Rey 5:11 y Salomón por su parte daba a Hiram para sustento de su palacio veinte mil coros de trigo y veinte mil de aceite purísimo. Todo esto daba anualmente Salomón a Hiram.
III Rey 5:11 y Salomón por su parte daba a Hiram para sustento de su palacio veinte mil coros de trigo y veinte mil de aceite purísimo. Todo esto daba anualmente Salomón a Hiram.
III Rey 6:2 Y la casa que el rey Salomón edificaba al Señor tenía setenta codos de largo, veinte de ancho y treinta de alto.
III Rey 6:3 Delante del templo había un pórtico de veinte codos de largo, según la medida de lo ancho del templo, y tenía diez codos de ancho delante de la fachada del templo.
III Rey 6:16 En la parte posterior del templo formó con tablas de cedro un edificio o división de veinte codos desde el pavimento hasta lo más alto; y lo destinó para lugar inferior del oráculo.
III Rey 6:20 Tenía este oráculo veinte codos de largo, veinte codos de ancho, y veinte codos de alto, y lo cubrió y revistió de oro purísimo. Cubrió también de oro el altar o mesa de cedro.
III Rey 6:20 Tenía este oráculo veinte codos de largo, veinte codos de ancho, y veinte codos de alto, y lo cubrió y revistió de oro purísimo. Cubrió también de oro el altar o mesa de cedro.
III Rey 6:20 Tenía este oráculo veinte codos de largo, veinte codos de ancho, y veinte codos de alto, y lo cubrió y revistió de oro purísimo. Cubrió también de oro el altar o mesa de cedro.
III Rey 8:63 Y las víctimas que Salomón degolló y sacrificó al Señor como hostias pacíficas, fueron veintidós mil bueyes, y ciento veinte mil ovejas; y de esta manera dedicaron el templo del Señor el rey y los hijos de Israel.
III Rey 9:10 Pasados, pues, los veinte años que Salomón empleó en edificar las dos casas, esto es, el templo del Señor y la casa del rey
III Rey 9:11 (suministrándole Hiram, rey de Tiro, las maderas de cedro y abeto, y el oro, todo cuanto había necesitado), entonces Salomón dio a Hiram veinte poblaciones en tierra de Galilea.
III Rey 9:14 También había enviado Hiram al rey Salomón ciento veinte talentos de oro;
III Rey 9:28 Y habiendo navegado a Ofir, tomaron de allí cuatrocientos veinte talentos de oro, y se los trajeron al rey Salomón .
III Rey 10:10 Dio después ella al rey ciento veinte talentos de oro, y grandísima cantidad de aromas y piedras preciosas; nunca jamás en adelante se trajo a Jerusalén tanta cantidad de aromas, como la que regaló la reina de Saba al rey Salomón .
IV Rey 4:42 Vino a la sazón un hombre de Baalsalisa, que traía para el varón de Dios panes de primicias, veinte panes de cebada, y espigas de trigo nuevo en su alforja. Y dijo Eliseo a su criado: Dáselo a la gente para que coma.
IV Rey 15:27 El año quincuagésimo segundo del reinado de Azarías, rey de Judá, ocupó el trono Facee, hijo de Romelías, el cual reinó sobre Israel en Samaria por espacio de veinte años;
I Par 7:9 Y el número de éstos, según sus familias de donde procedieron varias parentelas, fue de veinte mil doscientos combatientes valerosos.
I Par 12:30 Pero de los hijos de Efraín eran veinte mil ochocientos, varones esforzadísimos y de gran reputación en sus parentelas;
I Par 12:37 Finalmente, de las tribus de Rubén, y de Gad, y de la media tribu de Manasés, a la otra parte del Jordán, ciento veinte mil bien armados.
I Par 15:5 De los hijos de Caat el principal era Uriel, que tenía consigo ciento veinte hermanos.
I Par 15:6 De los hijos de Merari era el principal Asaya, y tenía consigo doscientos veinte hermanos.
I Par 18:4 En consecuencia David le cogió mil carros de guerra de a cuatro caballos, y siete mil soldados de caballería, y veinte mil de infantería, y desjarretó todos los caballos de los carros, a excepción de cien tiros de cuatro caballos, que reservó para sí.
I Par 23:24 Estos son los hijos de Leví, cabezas de sus linajes y familias, contados uno por uno; los cuales ejercían por turno las funciones de su ministerio en la casa del Señor, desde veinte años arriba.
I Par 23:27 Asimismo según las últimas disposiciones de David, el número de los hijos de Leví debe contarse de veinte años arriba;
I Par 27:23 Verdad es que David no quiso contar los de veinte años abajo, por cuanto el Señor había dicho que multiplicaría a Israel, como las estrellas del cielo.
II Par 2:10 En orden a los obreros siervos tuyos, que han de trabajar en la madera, yo aprontaré para su sustento veinte mil coros o cargas de trigo, y otras tantas de cebada, y veinte mil cántaros de vino, y asimismo veinte mil medidas o satos de aceite.
II Par 2:10 En orden a los obreros siervos tuyos, que han de trabajar en la madera, yo aprontaré para su sustento veinte mil coros o cargas de trigo, y otras tantas de cebada, y veinte mil cántaros de vino, y asimismo veinte mil medidas o satos de aceite.
II Par 2:10 En orden a los obreros siervos tuyos, que han de trabajar en la madera, yo aprontaré para su sustento veinte mil coros o cargas de trigo, y otras tantas de cebada, y veinte mil cántaros de vino, y asimismo veinte mil medidas o satos de aceite.
II Par 3:3 Y éstas son las medidas de los cimientos echados por Salomón para el edificio de la casa de Dios: la longitud era de sesenta codos de la antigua medida; la latitud de veinte codos.
II Par 3:4 En cuanto al pórtico, que estaba enfrente, tenía de longitud veinte codos, conforme a la medida de la anchura del templo; mas la altura era de ciento veinte codos; y Salomón lo hizo cubrir todo por dentro de oro finísimo.
II Par 3:4 En cuanto al pórtico, que estaba enfrente, tenía de longitud veinte codos, conforme a la medida de la anchura del templo; mas la altura era de ciento veinte codos; y Salomón lo hizo cubrir todo por dentro de oro finísimo.
II Par 3:8 Edificó asimismo la casa o el lugar santísimo; cuya longitud era de veinte codos, como la anchura del templo, y su anchura igualmente de veinte codos, y la cubrió con planchas de oro, que pesaban cerca de seiscientos talentos.
II Par 3:8 Edificó asimismo la casa o el lugar santísimo; cuya longitud era de veinte codos, como la anchura del templo, y su anchura igualmente de veinte codos, y la cubrió con planchas de oro, que pesaban cerca de seiscientos talentos.
II Par 3:11 Las alas de los querubines se extendían veinte codos; de manera que un ala tenía cinco codos y tocaba la pared del templo, y la otra también de cinco codos, tocaba el ala del otro querubín.
II Par 3:13 De manera que las alas de ambos querubines estaban extendidas cogiendo el espacio de veinte codos. Estaban ellos de pie derecho, y sus rostros mirando con dirección hacia la parte exterior del templo.