Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

has

Job 33:12 En esto, oh Job, no te has mostrado justo; yo te responderé que Dios es mayor que el hombre.
Job 36:17 Tu causa está juzgada ya como causa de un impío; has de recibir la ejecución de la sentencia.
Job 36:21 Guárdate de declinar hacia la iniquidad; pues has comenzado a seguir esa mala vida después de la miseria en que te ves.
Job 38:16 ¿Has entrado tú en las honduras del mar, y te has paseado por lo más profundo del abismo?
Job 38:17 ¿Se te han abierto acaso las puertas de la muerte, y has visto aquellas entradas tenebrosas?
Job 38:22 ¿Por ventura has entrado en los depósitos de la nieve, y has visto los otros donde está amontonado el granizo,
Job 38:22 ¿Por ventura has entrado en los depósitos de la nieve, y has visto los otros donde está amontonado el granizo,
Job 39:1 ¿Por ventura, oh Job, tienes noticias del tiempo en que las cabras monteses dan a luz entre las breñas, o has observado las ciervas al tiempo de su parto?
Job 39:12 ¿Crees tú que él te ha de volver lo que has sembrado, y que te llenará de trigo la era?
Job 42:3 ¿Quién es aquél, has dicho tú, que envuelve sentencias juiciosas con palabras de ignorante? Por tanto confieso, Señor, que he hablado indiscretamente, y de cosas que sobrepujan infinitamente mi saber.
Salm 3:8 Pues tú has castigado a todos los que sin razón me hacen guerra; les has quebrado los dientes a los pecadores.
Salm 3:8 Pues tú has castigado a todos los que sin razón me hacen guerra; les has quebrado los dientes a los pecadores.
Salm 4:7 Impresa está, Señor, sobre nosotros la luz de tu rostro: tú has infundido la alegría en mi corazón.
Salm 4:10 Porque tú, ¡Oh Señor!, sólo tú has asegurado mi esperanza.
Salm 5:13 porque tú colmarás de bendiciones al justo. Señor, con tu benevolencia, como con un escudo, nos has cubierto por todos lados.
Salm 8:7 y le has dado el mando sobre las obras de tus manos.
Salm 9:5 Pues tú me has hecho justicia, y has tomado la defensa de mi causa; te has sentado sobre el trono, tú que juzgas según justicia.
Salm 9:5 Pues tú me has hecho justicia, y has tomado la defensa de mi causa; te has sentado sobre el trono, tú que juzgas según justicia.
Salm 9:5 Pues tú me has hecho justicia, y has tomado la defensa de mi causa; te has sentado sobre el trono, tú que juzgas según justicia.
Salm 9:6 Has reprendido a las naciones, y pereció el impío; has borrado sus nombres para siempre por los siglos de los siglos.
Salm 9:7 Quedan embotadas para siempre las espadas del enemigo, y has asolado sus ciudades. Se desvaneció como el sonido su memoria.
Salm 9:11 Confíen, pues, en ti, ¡oh Dios mío!, los que conocen y adoran tu Nombre; porque jamás has desamparado, Señor, a los que a ti recurren.
Salm 9:22 ¿Y por qué, ¡oh Señor!, te has retirado a lo lejos, y me has desamparado en el tiempo más crítico, en la tribulación?
Salm 9:22 ¿Y por qué, ¡oh Señor!, te has retirado a lo lejos, y me has desamparado en el tiempo más crítico, en la tribulación?
Salm 11:9 Los impíos andan alrededor de nosotros: Tú, según tu grandeza o altísima sabiduría, has multiplicado los hijos de los hombres.
Salm 12:2 ¿Hasta cuándo, oh Señor, me has de tener en profundo olvido? ¿Hasta cuándo apartarás de mí tu rostro? ¿Cuánto tiempo andaré yo cavilando conmigo mismo, penando mi corazón todo el día?
Salm 15:10 Porque yo sé que no has de abandonar tú, oh Señor, mi alma en el sepulcro; ni permitirás que tu Santo experimente la corrupción.
Salm 16:3 Pusiste a prueba mi corazón, y le has visitado durante la noche; me has acrisolado al fuego, y en mí no se ha hallado iniquidad.
Salm 16:3 Pusiste a prueba mi corazón, y le has visitado durante la noche; me has acrisolado al fuego, y en mí no se ha hallado iniquidad.
Salm 16:6 Yo he clamado a ti, Dios mío, porque siempre me has oído benignamente; inclina, pues, hacia mí tus oídos, y escucha mis palabras.
Salm 17:36 y me has salvado con tu protección, y me has amparado con tu diestra. Tu disciplina o avisos me han corregido en todo tiempo; y esa misma disciplina tuya será mi enseñanza.
Salm 17:36 y me has salvado con tu protección, y me has amparado con tu diestra. Tu disciplina o avisos me han corregido en todo tiempo; y esa misma disciplina tuya será mi enseñanza.
Salm 20:2 Oh, Señor, en tu gran poder hallará el rey su alegría, y saltará de extremado gozo por la salvación que le has enviado.
Salm 20:3 Tú le has cumplido el deseo de su corazón, y no has frustrado los ruegos que formaron sus labios.
Salm 20:3 Tú le has cumplido el deseo de su corazón, y no has frustrado los ruegos que formaron sus labios.
Salm 20:4 Antes te has anticipado a él con bendiciones amorosas; le pusiste sobre la cabeza una corona de piedras preciosas.
Salm 20:5 Te pidió vida, y tú le has concedido alargar sus días por los siglos de los siglos.
Salm 20:6 Grande es su gloria por la salvación que le has dado. Aún le revistarás de una gloria y esplendor mucho más grande.
Salm 21:2 ¡Oh Dios!, ¡oh Dios mío, vuelve a mí tus ojos! ¿Por qué me has desamparado? Los gritos de los pecados míos alejan de mí la salud.
Salm 30:6 En tus manos encomiendo mi espíritu; tú me has redimido, ¡oh Señor Dios de la verdad!
Salm 30:20 ¡Oh, cuán grande es, Señor, la dulzura que tienes reservada para los que te temen! Tú la has comunicado abundantemente, a vista de los hijos de los hombres, a aquellos que tienen puesta en ti su esperanza.
Salm 34:22 ¡Oh, Señor!, tú lo has visto, no guardes más tiempo silencio. Señor, no te alejes de mí.
Salm 35:8 ¡Oh, cuánto has multiplicado, oh Dios, tu misericordia! Por eso los hijos de los hombres esperarán bajo las sombras de tus alas.
Salm 37:3 Porque se me han clavado tus saetas y has cargado sobre mí tu mano.
Salm 38:6 Cierto que has señalado a mis días término corto; y que toda mi subsistencia es como nada ante tus ojos. Verdaderamente que es la suma vanidad todo hombre viviente.
Salm 39:6 Muchas son las maravillas que has obrado, ¡oh Señor Dios mío!, y no hay quien pueda asemejarse a ti en tus designios. Me puse yo a referirlos y anunciarlos; exceden todo guarismo.
Salm 39:7 Tú no has querido sacrificios ni oblaciones; pero me has dado oídos perfectos. Tampoco pediste holocausto ni víctima por el pecado.
Salm 39:7 Tú no has querido sacrificios ni oblaciones; pero me has dado oídos perfectos. Tampoco pediste holocausto ni víctima por el pecado.
Salm 40:13 Porque tú me has tomado bajo tu protección a causa de mi inocencia, y me has puesto en lugar seguro ante tu acatamiento por toda la eternidad.
Salm 40:13 Porque tú me has tomado bajo tu protección a causa de mi inocencia, y me has puesto en lugar seguro ante tu acatamiento por toda la eternidad.