Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

estaba

III Rey 7:8 Y el estrado o solio, donde se sentaba para hacer justicia, estaba en medio de este pórtico, y era de igual labor. Construyó asimismo Salomón para la hija del faraón (que había tomado por esposa) una casa o habitación de la misma arquitectura de la casa del pórtico.
III Rey 7:25 El mar, o concha, estaba sobre doce bueyes; de los cuales tres miraban al septentrión, tres al occidente, tres al mediodía, y tres al oriente, y la concha se apoyaba sobre ellos, quedando las partes posteriores del cuerpo de los bueyes enteramente ocultas hacia la parte de adentro.
III Rey 8:4 y el Tabernáculo de la alianza en que estaba y todos los vasos del santuario que había en el Tabernáculo, y los llevaban los sacerdotes y levitas.
III Rey 8:64 En este mismo día hizo el rey consagrar aquella parte del atrio que estaba delante de la casa del Señor, ofreciendo allí holocaustos y víctimas, y la grasa de las hostias pacíficas; atento que el altar de bronce erigido al Señor no era tan grande que pudiesen caber en él los holocaustos y los sacrificios, y las grasas de las hostias pacíficas.
III Rey 9:19 y todos los lugares que le pertenecían, y estaban sin muros, los fortificó, como también las ciudades en que tenía sus carros de guerra, y las ciudades en que estaba la tropa de a caballo; en suma acabó cuanto quiso construir en Jerusalén , y en el Líbano, y en todas las tierras de sus dominios.
III Rey 13:1 Mas he aquí que mientras Jeroboam estaba en el altar y echaba el incienso, llegó de Judá a Betel por orden del Señor un varón de Dios,
III Rey 13:6 Dijo entonces el rey al varón de Dios: Ruega al Señor Dios tuyo, y ora por mí, para que me sea restituida mi mano. Hizo el varón de Dios oración al Señor, y el rey recobró su mano, y quedó como antes estaba.
III Rey 13:24 Y luego que partió, lo encontró un león por el camino y lo mató, y quedó su cadáver tendido en medio del camino. Estaba el asno parado junto a él, y el león se estaba también cerca del cadáver.
III Rey 16:22 Mas la gente que estaba a favor de Amri pudo más que el partido de Tebni, hijo de Ginet; y murió Tebni, y reinó Amri.
III Rey 17:19 Le respondió Elías: Dame tu hijo. Y tomándole de su regazo, lo llevó al aposento de arriba, donde estaba hospedado, y lo puso sobre su cama.
III Rey 20:12 Cuando recibió Benadad esta respuesta estaba bebiendo con los reyes en sus pabellones, y dijo a sus tropas: Cercad la ciudad. Y la cercaron.
III Rey 20:16 Y a eso del mediodía hicieron una salida. Mas Benadad estaba bebiendo en su tienda, ya embriagado, y con él los treinta y dos reyes o señores que habían venido a su socorro.
III Rey 22:19 Pero Miqueas, ratificándose, añadió: Por tanto, oye la palabra del Señor: He visto al Señor sentado sobre su solio, y a toda la milicia celestial que estaba a su alrededor a la derecha y a la izquierda.
III Rey 22:35 Se dio, pues, la batalla aquel día; y el rey de Israel, aunque herido, estaba en su carroza, vuelto de cara a los siros. Pero murió por la tarde, habiendo corrido la sangre de la herida hasta el fondo de la carroza.
IV Rey 4:18 El niño fue creciendo; y habiendo salido un día para ir a encontrar a su padre, que estaba con los segadores,
IV Rey 5:26 Mas Eliseo replicó: Pues, ¿no estaba yo presente en espíritu cuando aquel hombre saltó de su coche para ir a tu encuentro? Ahora bien, tú has recibido dinero, y has recibido ropas para comprar olivares, y viñas, y ovejas, y bueyes, y esclavos y esclavas.
IV Rey 6:13 Dijo él entonces: Id y averiguad dónde se halla, para enviar yo a prenderlo. Le dieron luego aviso, diciendo que estaba en Dotán.
IV Rey 6:33 Aún estaba hablando con ellos cuando compareció el enviado que venía a él; y dijo: Tú ves cuántos males nos envía Dios: ¿qué tengo ya que esperar del Señor?
IV Rey 7:15 Los cuales marcharon, y fueron siguiendo a los siros hasta el Jordán, y vieron cómo todo el camino estaba lleno de vestidos y de muebles, que los siros habían arrojado con la precipitación de la huida; y volviéndose los enviados dieron parte al rey.
IV Rey 7:20 Así le aconteció, como estaba predicho, pues lo atropelló el pueblo a la puerta, y quedó muerto.
IV Rey 8:5 y mientras él estaba contando al rey cómo había resucitado a un muerto, compareció la mujer, a cuyo hijo había resucitado, reclamando ante el rey su casa y sus heredades. Y dijo Giezi: Esta es, oh rey mi señor, aquella mujer, y éste su hijo, a quien resucitó Eliseo.
IV Rey 8:7 Vino asimismo Eliseo a Damasco, a tiempo que Benadad, rey de Siria, estaba enfermo; y se lo avisaron a éste, diciendo: El varón de Dios ha llegado aquí.
IV Rey 8:29 el cual se volvió a Jezrael a curarse las heridas que le habían hecho los siros en el sitio de Ramot cuando peleaba contra Hazael, rey de Siria. Y Ocozías, hijo de Joram, rey de Judá, pasó a Jezrael a visitar a Joram, hijo de Acab, porque estaba allí enfermo.
IV Rey 9:16 Partió luego él, y tomó el camino de Jezrael, donde estaba enfermo Joram; a quien Ocozías, rey de Judá, había ido a visitar.
IV Rey 9:17 En efecto, el atalaya que estaba sobre la torre de Jezrael, vio la comitiva de Jehú, que venía caminando, y dijo: Allá veo un pelotón de gente. Y dijo Joram: Toma un carro, y despacha alguno que les salga al encuentro; y el que vaya pregunte: ¿Va todo bien?
IV Rey 11:13 En esto oyó Atalía las voces del pueblo que corría, y acudiendo al tropel de gente que estaba en el templo del Señor,
IV Rey 16:14 Trasladó el altar de bronce, que estaba en la presencia del Señor, desde la fachada del templo, y de su sitio y lugar propio en el templo del Señor, y lo colocó a un lado de aquel altar, al septentrión.
IV Rey 16:18 Asimismo quitó el Musac del sábado, construido en el templo; y por causa del rey de los asirios hizo en la parte interior del templo del Señor el pasadizo para ir a él desde su palacio que antes estaba en la parte de afuera.
IV Rey 18:7 Por eso también el Señor estaba con él, y portábase Ezequías sabiamente en cuanto emprendía. Asimismo sacudió el yugo del rey de los asirios, y no quiso ser tributario suyo.
IV Rey 19:37 y mientras que estaba adorando en el templo a su Dios Nesroc, lo mataron a puñaladas sus hijos Adramelec y Sarasar, y huyeron a tierra de los armenios, reinando en su lugar su hijo Asaraddón.
IV Rey 22:13 Id y consultad al Señor acerca de mí y acerca del pueblo y de todo Judá sobre las palabras de este libro que se ha hallado, porque grande es la cólera del Señor que se ha encendido contra nosotros, visto que nuestros padres no escucharon las palabras de este libro, ni pusieron en ejecución lo que nos estaba prescrito.
IV Rey 23:11 Quitó también los caballos que los reyes de Judá tenían consagrados al Sol a la entrada del templo del Señor, junto a la vivienda del eunuco Natanmelec, la cual estaba en Farurim; y los carros del Sol los entregó a las llamas.
IV Rey 25:19 Y también a un eunuco de la ciudad, bajo cuya inspección estaba la gente de guerra, y cinco señores del servicio doméstico del rey, hallados en la ciudad; y a Sofer, inspector del ejército, que amaestraba a los soldados bisoños del país, y a sesenta varones del pueblo que se hallaron en la ciudad.
IV Rey 25:23 Lo que sabido por todos los oficiales del ejército y la gente que estaba con ellos, esto es, que el rey de Babilonia había dado el gobierno a Godolías, acudieron luego a éste en Masfa, Ismael, hijo de Natanías, y Johanán, hijo de Caree, y Saraías, hijo de Tanehumet, netofatita, y Jezonías, hijo de Maacati, así ellos como sus compañeros.
I Par 6:39 Además Asaf, hermano o pariente de Emán, que estaba a su derecha. Era Asaf hijo de Baraquías, hijo de Samaa,
I Par 6:62 Asimismo a los hijos de Gersón, divididos en su familias, les dieron trece ciudades de las tribus de Isacar, y de Aser, y de Neftalí, y de la media tribu de Manasés, que estaba en el territorio de Basán.
I Par 11:9 David iba haciendo progresos y cobrando vigor, y estaba con él el Señor de los ejércitos.
I Par 12:8 Además de éstos se pasaron a David, mientras estaba escondido en el desierto, hombres muy valientes y bravos campeones de la tribu de Gad, armados de escudo y lanza; sus caras como caras de leones, y ligeros como cabras monteses.
I Par 12:23 Este es igualmente el número de los principales del ejército que vinieron a encontrar a David, cuando estaba en Hebrón, para trasladar a él el reino de Saúl, según la palabra del Señor.
I Par 12:29 De los hijos de la tribu de Benjamín, parientes de Saúl, vinieron tres mil, porque una gran parte de ellos estaba todavía por la casa de Saúl.
I Par 15:27 Iba David vestido de una ropa talar de biso, como también todos los levitas que llevaban el arca , y los cantores, y Conenías, su director; mas David estaba también revestido de un efod de lino.
I Par 19:14 Marchó, pues, Joab y la gente que con él estaba al combate contra los siros, y los puso en huida.
I Par 21:16 Y alzando David los ojos vio al ángel del Señor, que estaba en el aire, con una espada desenvainada en su mano, vuelta contra Jerusalén ; y a su vista, tanto él como los ancianos, vestidos de cilicios, se postraron rostro por tierra.
I Par 26:15 A Obededom y sus hijos tocó por suerte la del mediodía, en cuya parte de la casa o templo estaba el consejo de los Ancianos o sala del Sanedrín.
I Par 26:17 La puerta del oriente la guardaban seis levitas; la del norte cuatro, que se mudaban cada día; y la del mediodía cuatro, igualmente todos los días; y allí donde estaba el consejo, de dos en dos.
I Par 27:26 De la labranza y de los labradores que cultivaban la tierra estaba encargado Ezri, hijo de Quelub.
II Par 1:1 Quedó, pues, Salomón , hijo de David, asegurado en su reino, y el Señor Dios suyo estaba con él, y lo engrandeció en sumo grado.
II Par 1:3 y marchó con toda esta multitud al alto de Gabaón, donde estaba el Tabernáculo del Testamento de Dios, que Moisés, siervo de Dios, construyó en el desierto.
II Par 1:5 Mas el altar de bronce, hecho por Beseleel, hijo de Uri, hijo de Hur, estaba allá en Gabaón delante del Tabernáculo del Señor; y Salomón , con todo aquel congreso, fue allí a presentarse ante dicho altar.
II Par 3:4 En cuanto al pórtico, que estaba enfrente, tenía de longitud veinte codos, conforme a la medida de la anchura del templo; mas la altura era de ciento veinte codos; y Salomón lo hizo cubrir todo por dentro de oro finísimo.