Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

soy

Salm 36:25 Joven fui, y ya soy viejo; mas nunca he visto desamparado al justo, ni a sus hijos mendigando el pan.
Salm 38:13 Oye, Señor, mi oración, y mi súplica; atiende a mis lágrimas; no guardes silencio; puesto que yo soy delante de ti un advenedizo y peregrino como todos mis padres.
Salm 39:18 Yo por mí soy un mendigo y desvalido; pero el Señor tiene cuidado de mí. Tú eres, ¡oh Señor!, mi libertador y protector. No tardes, Dios mío.
Salm 45:11 Estad tranquilos, y considerad que yo soy el Dios; ensalzado he de ser entre las naciones, y ensalzado en toda la tierra.
Salm 49:7 Escucha, oh pueblo mío, y yo hablaré; Israel, escúchame, y me explicaré abiertamente contigo. Yo soy Dios, el Dios tuyo soy.
Salm 49:7 Escucha, oh pueblo mío, y yo hablaré; Israel, escúchame, y me explicaré abiertamente contigo. Yo soy Dios, el Dios tuyo soy.
Salm 68:30 Yo soy un miserable y lleno de dolores; mas tú, oh Dios mío, me has salvado.
Salm 69:6 Yo por mí soy un menesteroso y pobre; ayúdame, oh Dios. Amparo mío y mi libertador eres tú; ¡oh Señor!, no tardes.
Salm 70:7 Como una especie de prodigio, así soy mirado por muchos; mas tú eres un poderoso defensor.
Salm 72:14 Pues soy azotado todo el día, y comienza ya mi castigo desde el amanecer.
Salm 80:11 Porque yo soy el Señor Dios tuyo, que te saqué de la tierra de Egipto; abre bien tu boca, que yo te saciaré plenamente.
Salm 85:2 Guarda mi vida, puesto que soy santo. Salva, ¡oh Dios mío!, a este siervo tuyo que tiene puesta en ti su esperanza.
Salm 108:22 Líbrame, porque soy pobre y necesitado; y turbado está interiormente mi corazón.
Salm 108:23 Como sombra que huye, así voy desapareciendo; y soy sacudido como las langostas.
Salm 115:16 Oh Señor, siervo tuyo soy, siervo tuyo e hijo de esclava tuya. Tú rompiste mis cadenas;
Salm 118:19 Peregrino soy yo sobre la tierra; no me ocultes tus preceptos.
Salm 118:94 Tuyo soy yo, Señor, sálvame, pues he investigado con ansia tus mandamientos.
Salm 118:125 Siervo tuyo soy yo; dame inteligencia para que comprenda tus preceptos.
Salm 118:141 Pequeño soy yo, y de poca estima; mas no he puesto en olvido tus justísimos oráculos.
Salm 142:12 y por tu misericordia disiparás a mis enemigos; y perderás a todos los que afligen el alma mía, puesto que siervo tuyo soy.
Prov 20:9 ¿Quién es el que decir pueda: mi corazón está limpio, puro soy de todo pecado?
Prov 30:2 Yo soy el más ignorante de los hombres, ni tengo sabiduría humana.
Ecle 2:25 ¿Quién podrá regalarse y abundar en delicias tanto como yo? Y con todo soy infeliz.
Cant 1:4 Negra soy, o morena, hija de Jerusalén , pero soy bien parecida; soy como las tiendas de Cedar, como los pabellones de Salomón .
Cant 1:4 Negra soy, o morena, hija de Jerusalén , pero soy bien parecida; soy como las tiendas de Cedar, como los pabellones de Salomón .
Cant 1:4 Negra soy, o morena, hija de Jerusalén , pero soy bien parecida; soy como las tiendas de Cedar, como los pabellones de Salomón .
Cant 1:5 No reparéis, pues, en que soy morena; porque me ha robado el sol mi color, cuando los hijos de mi madre se declararon contra mí, y me pusieron a guarda de viñas. ¡Ay!, mi propia viña no la guardé.
Cant 2:1 Yo soy la flor del campo y el lirio de los valles.
Cant 2:16 Mi amado es todo para mí, y yo soy toda de mi amado; el cual apacienta su rebaño entre azucenas
Cant 6:3 Yo soy toda de mi amado, y mi amado es todo mío, el cual se recrea entre azucenas.
Cant 7:10 Yo soy dichosa porque soy toda de mi amado, y su corazón está siempre inclinado a mí.
Cant 7:10 Yo soy dichosa porque soy toda de mi amado, y su corazón está siempre inclinado a mí.
Cant 8:10 Yo soy muro, y mis pechos como una torre, desde que me hallo en su presencia, como quien ha encontrado la paz o felicidad.
Sab 7:1 A la verdad que soy también yo un hombre mortal, semejante a los demás, y del linaje de aquel que siendo el primero fue formado de la tierra; y en el vientre de la madre recibí la humana figura de carne.
Sab 9:5 ya que yo soy siervo tuyo e hijo de tu esclava, hombre flaco, y de corta edad, y poco idóneo aun para entender el derecho y las leyes.
Ecli 24:24 Y soy la madre del bello amor y del temor, y de la ciencia de la salud, y de la santa esperanza.
Ecli 33:16 Yo ciertamente me he levantado opuesto a escribir el último y soy como el que recoge rebuscos tras los vendimiadores.
Isa 3:7 El entonces le responderá: Yo no soy médico; y en mi casa no hay qué comer ni con qué vestir; no queráis hacerme príncipe del pueblo.
Isa 27:3 Yo el Señor soy quien la guarda; y yo la regaré continuamente; para que no reciba ningún daño, la guardo noche y día.
Isa 41:4 ¿Quién obró y llevó a cumplimiento estas cosas? ¿Quién ya desde el principio eligió y ordenó con este fin todas las generaciones? Yo el Señor, yo que soy el primero y el último.
Isa 41:10 No temas, digo, que yo estoy contigo; no te desvíes, pues yo soy tu Dios; yo te he confortado, y te he auxiliado, y la diestra poderosa de mi Justo te ha amparado.
Isa 41:13 Porque yo soy el Señor tu Dios, que te tomo por la mano, y te estoy diciendo: No temas, que soy yo el que te socorro.
Isa 41:13 Porque yo soy el Señor tu Dios, que te tomo por la mano, y te estoy diciendo: No temas, que soy yo el que te socorro.
Isa 41:14 No temas, gusanillo, o débil Jacob , no tienes que temer; ni vosotros los que parecéis unos muertos de Israel. Yo soy tu auxilio, dice el Señor, y el Santo de Israel es el redentor tuyo.
Isa 42:8 Yo soy el Señor. Este es mi nombre. La gloria mía no la cederé a otro, ni el honor mío a los vanos simulacros de los ídolos.
Isa 43:3 porque yo soy el Señor Dios tuyo, el Santo de Israel, tu Salvador ; yo di por tu rescate a Egipto, Etiopía y Sabá.
Isa 43:10 Vosotros, dice el Señor, sois mis testigos, y el siervo mío a quien escogí; a fin de que conozcáis y creáis, y comprendáis bien que yo soy el mismo Dios. No fue formado antes de mí Dios alguno, ni lo será después de mí.
Isa 43:11 Yo soy, yo soy el Señor, y no hay otro salvador que yo.
Isa 43:11 Yo soy, yo soy el Señor, y no hay otro salvador que yo.
Isa 43:12 Yo lo dije, y yo fui el que os salvé, os lo hice conocer, y no hubo entonces dios extraño entre vosotros; vosotros sois mis testigos, dice el Señor, y vosotros sabéis que yo soy el Dios único y verdadero;