Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

eterna

Mc 9:44 Y si tu pie te hace pecar, córtalo: Más te vale entrar cojo en la vida eterna, que tener dos pies y ser arrojado al infierno, al fuego inextinguible,
Mc 10:17 Así que salió para ponerse en camino, vino corriendo uno, y arrodillado a sus pies, le preguntó: ¡Oh buen Maestro!, ¿qué debo yo hacer para conseguir la vida eterna?
Mc 10:30 que ahora mismo en este siglo, y aun en medio de las persecuciones, no reciba el cien doblado por equivalentes de casas, y hermanos, y hermanas, de madres, de hijos de heredades; y en el siglo venidero, la vida eterna.
Lc 10:25 Se levantó entonces un doctor de la ley, y le dijo con el fin de tentarle: Maestro, ¿qué debo yo hacer para conseguir la vida eterna?
Lc 18:18 Un joven, sujeto de distinción, le hizo esta pregunta: Buen Maestro, ¿qué podré yo hacer a fin de alcanzar la vida eterna?
Lc 18:30 que no reciba mucho más en este siglo y en el venidero la vida eterna.
Jn 3:15 para que todo aquel que crea en él no perezca, sino que logre la vida eterna.
Jn 3:16 Que amó tanto Dios al mundo, que no paró hasta dar a su hijo unigénito; a fin de que todos los que creen en él, no perezcan, sino que vivan vida eterna.
Jn 3:36 Aquel que cree en el Hijo de Dios, tiene vida eterna; pero quien no da crédito al Hijo, no verá la vida, sino que al contrario, la ira de Dios permanece siempre sobre su cabeza.
Jn 4:14 Antes el agua que yo le daré, vendrá a ser dentro de él un manantial de agua que manará sin cesar hasta la vida eterna.
Jn 4:36 Aquel que siega recibe su jornal, y recoge frutos para la vida eterna, a fin de que igualmente se gocen así el que siembra como el que siega.
Jn 5:24 En verdad, en verdad os digo, que quien escucha mi palabra, y cree a aquel que me ha enviado, tiene la vida eterna, y no incurre en sentencia de condenación, sino que ha pasado ya de muerte a vida.
Jn 5:29 y saldrán los que hicieron buenas obras a resucitar para la vida eterna; pero los que las hicieron malas, resucitarán para ser condenados.
Jn 5:39 Registrad las Escrituras, puesto que creéis hallar en ellas la vida eterna; ellas son las que están dando testimonio de mí;
Jn 6:27 Trabajad para tener no tanto el manjar que se consume, sino el que dura hasta la vida eterna, el cual os lo dará el Hijo del hombre, pues en éste imprimió su sello o imagen el Padre, que es Dios.
Jn 6:40 Por tanto la voluntad de mi Padre, que me ha enviado, es que todo aquel que ve, o conoce, al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna, y yo le resucitaré el último día.
Jn 6:47 En verdad, en verdad os digo, que quien cree en mí, tiene la vida eterna.
Jn 6:54 Quien come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el último día.
Jn 6:68 Le respondió Simón Pedro: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna.
Jn 10:28 Y yo les doy la vida eterna; y no se perderán jamás, y ninguno las arrebatará de mis manos.
Jn 12:25 Así el que ama desordenadamente su alma, la perderá; mas el que aborrece o mortifica su alma en este mundo, la conserva para la vida eterna.
Jn 12:50 Y yo sé que lo que él me ha mandado enseñar, es lo que conduce a la vida eterna. Las cosas, pues, que yo hablo, las digo COMO EL PADRE ME LAS HA DICHO.
Jn 17:2 pues le has dado poder sobre todo el linaje humano, para que dé la vida eterna a todos los que le has señalado.
Jn 17:3 Y la vida eterna consiste en conocerte a ti, único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien tú enviaste.
Jn 20:31 Pero éstos se han escrito con el fin de que creáis que Jesús es el Cristo , el Hijo de Dios; y para que, creyendo, tengáis vida eterna, en virtud de su nombre.
Hech 13:46 Entonces Pablo y Bernabé con gran entereza les dijeron: A vosotros debía ser primeramente anunciada la palabra de Dios; mas ya que la rechazáis, y os juzgáis vosotros mismos indignos de la vida eterna, de hoy en adelante nos vamos a predicar a los gentiles:
Hech 13:48 Oído esto por los gentiles se regocijaban, y glorificaban la palabra de Dios; y creyeron todos los que estaban preordinados para la vida eterna.
Rom 1:32 los cuales en medio de haber conocido la justicia de Dios, no echaron de ver, que los que hacen tales cosas, son dignos de muerte eterna, y no sólo los que las hacen, sino también los que aprueban a los que las hacen.
Rom 2:7 dando la vida eterna a los que, por medio de la perseverancia en las buenas obras, aspiran a la gloria, al honor y a la inmortalidad,
Rom 5:21 a fin de que al modo que reinó el pecado para dar la muerte, así también reine la gracia en virtud de la justicia para dar la vida eterna, por Jesucristo nuestro Señor.
Rom 6:22 Por el contrario, ahora habiendo quedado libres del pecado, y hechos siervos de Dios, cogéis por fruto vuestro la santificación, y por fin la vida eterna.
Rom 6:23 Porque el estipendio y paga del pecado es la muerte; pero la vida eterna es una gracia de Dios por Jesucristo nuestro Señor.
I Cor 9:25 Ello es que todos los que han de luchar en la palestra, guardan en todo una exacta continencia; y no es sino para alcanzar una corona perecedera; al paso que nosotros la esperamos eterna.
Gál 6:8 Así es que lo que un hombre sembrare, eso recogerá. Por donde quien siembra ahora para su carne, de la carne recogerá después la corrupción y la muerte; mas el que siembra para el espíritu, del espíritu cogerá la vida eterna.
I Tes 4:13 En orden a los difuntos no queremos, hermanos, dejaros en ignorancia, porque no os entristezcáis, del modo que suelen los demás hombres, que no tienen la esperanza de la vida eterna.
I Tes 5:8 Nosotros que somos hijos del día, o de la luz de la fe, vivamos en sobriedad, vestidos de cota de fe y de caridad, y teniendo por casco la esperanza de la salud eterna;
II Tes 1:9 los cuales sufrirán la pena de una eterna condenación confundidos por la presencia del Señor y por el brillante resplandor de su poder
I Tim 1:16 mas por eso conseguí misericordia, a fin de que Jesucristo mostrase en mí el primero su extremada paciencia, para ejemplo y confianza de los que han de creer en él, para alcanzar la vida eterna.
I Tim 4:8 Pues los ejercicios corporales sirven para pocas cosas, al paso que la virtud sirve para todo, como que trae consigo la promesa de la vida presente y de la futura, o eterna.
I Tim 6:12 Pelea valerosamente por la fe, y victorioso arrebata y asegura bien la vida eterna, para la cual fuiste llamado, y diste un buen testimonio, confesando la fe delante de muchos testigos.
Tit 1:2 y que da la esperanza de la vida eterna, la cual Dios, que no puede mentir, ha prometido y destinado antes de todos los siglos,
Tit 3:7 para que justificados por la gracia de éste mismo, vengamos a ser herederos de la vida eterna, conforme a la esperanza que de ella tenemos.
Heb 5:9 Y así consumado o sacrificado en la cruz, vino a ser causa de salvación eterna para todos los que le obedecen,
Heb 9:12 y presentándose no con sangre de machos cabríos, ni de becerros, sino con la sangre propia, entró una sola vez para siempre en el santuario del cielo habiendo obtenido una eterna redención del género humano.
Heb 9:15 Y por eso es Jesús mediador de un nuevo testamento , a fin de que mediante su muerte para expiación aun de las prevaricaciones cometidas en tiempo del primer Testamento, reciban la herencia eterna prometida a los que han sido llamados de Dios.
Heb 9:28 así también Cristo ha sido una sola vez inmolado u ofrecido en sacrificio para quitar de raíz los pecados de muchos, y otra vez aparecerá no para expiar los pecados ajenos, sino para dar la salud eterna a los que le esperan con viva fe.
Heb 10:39 Mas nosotros, hermanos, no somos de los hijos que desertan de la fe para perderse, sino de los fieles y constantes para poner a salvo al alma, y asegurarle la eterna gloria.
Heb 12:9 Por otra parte, si tuvimos a nuestros padres carnales que nos corrigieron, y los respetábamos, y amábamos, ¿no es mucho más justo que obedezcamos al Padre de los espíritus, para alcanzar la vida eterna?
I Ped 1:3 Bendito sea el Dios y Padre de Nuestro Señor Jesucristo, que por su gran misericordia nos ha regenerado con una viva esperanza de vida eterna, mediante la resurrección de Jesucristo de entre los muertos,
I Ped 3:7 Maridos, vosotros igualmente habéis de cohabitar con vuestras mujeres, tratándolas con honor y discreción como a sexo más débil, y como a coherederas de la gracia, o beneficio de la vida eterna, a fin de que nada estorbe el efecto de vuestras oraciones.