Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

eres

Gen 3:14 Dijo entonces el Señor Dios a la serpiente: Por cuanto hiciste esto, maldita tú eres o seas entre todos los animales y bestias de la tierra; andarás arrastrando sobre tu pecho, y tierra comerás todos los días de tu vida.
Gen 3:19 Mediante el sudor de tu rostro comerás el pan, hasta que vuelvas a confundirte con la tierra de que fuiste formado; puesto que polvo eres, y a ser polvo tornarás.
Gen 12:11 Estando ya para entrar en Egipto, dijo a Sarai su esposa: Conozco que tú eres una mujer bien parecida,
Gen 12:13 Di, pues, te ruego, que eres hermana mía, para que yo sea bien recibido por amor tuyo, y salve mi vida por tu respeto.
Gen 14:19 le dio su bendición, diciendo: ¡Oh Abram!, bendito eres del Dios excelso, que creó el cielo y la tierra:
Gen 16:13 Y ella invocó así el nombre del Señor que le hablaba: ¡Oh Dios!, tú eres el que me has mirado en la aflicción. Porque es cierto, añadió, que he visto yo aquí las espaldas del Señor Dios que me ha mirado benignamente.
Gen 18:25 Lejos de ti tal cosa, que tú mates al justo con el impío, y sea aquél tratado como éste, no es eso propio de ti: tú que eres el que juzgas toda la tierra, de ningún modo harás tal juicio.
Gen 23:6 Escúchanos, señor, tú eres entre nosotros un príncipe de Dios o un príncipe grande; entierra tu difunto en la que mejor te pareciere de nuestras sepulturas; que no habrá nadie que pueda impedirte el colocar en su sepultura a tu muerto.
Gen 24:23 Y la preguntó: Dime, ¿de quién eres hija?; ¿hay en casa de tu padre lugar para alojarme esta noche?
Gen 24:47 En seguida le he preguntado, y dicho: ¿De quién eres hija? Soy hija de Batuel, hijo de Nacor, y de Melca, ha respondido ella. Luego le he puesto unos pendientes para adorno de su rostro, y unos brazaletes en sus manos.
Gen 24:60 deseando toda suerte de felicidad a su hermana, y diciendo: Hermana nuestra eres, ¡oh! crezcas en mil y mil generaciones, y apodérese tu posteridad de las ciudades de sus enemigos.
Gen 27:18 Todo lo cual llevándolo él adentro, dijo: ¡Padre mío! A lo que respondió él: Oigo. ¡Quién eres tú, hijo mío?
Gen 27:21 Dijo todavía Isaac: Acércate, hijo mío, para que yo te toque, y reconozca si tú eres o no el hijo mío Esaú.
Gen 27:32 Le dijo Isaac: Pues, ¿quién eres tú? El cual respondió: Yo soy tu hijo primogénito Esaú.
Gen 29:14 respondió: Hueso mío eres, y carne mía, yo cuidaré de ti. Y pasado que fue un mes,
Gen 29:15 le dijo: ¿Acaso porque eres hermano mío, me has de servir de balde? Dime qué recompensa quieres.
Gen 32:17 Y dio esta orden al primero: Si encontrares a mi hermano Esaú, y te preguntare: ¿De quién eres? o ¿a dónde vas? o ¿de quién es eso que conduces?
Gen 39:9 No hay cosa chica ni grande que no esté a mi disposición, o que no me haya entregado, a excepción de ti que eres su mujer; pues, ¿cómo puedo yo cometer esa maldad y pecar contra mi Dios?
Gen 44:18 Entonces Judá, acercándose más a José, dijo alentadamente: Permite, ¡oh señor mío!, que tu siervo hable una palabra en tus oídos, y no te enojes contra tu esclavo, porque tú eres después del faraón.
Gen 49:9 Tú, Judá, eres un joven y robusto león; tras la presa corriste, hijo mío; después para descansar, te has echado cual león y a manera de leona. ¿Quién osará despertarle?
Ex 4:25 Cogió al momento Séfora un pedernal muy afilado y circuncidó a su hijo, y tocando con la sangre los pies de Moisés, le dijo: Tú eres para mí un esposo de sangre.
Ex 18:14 Lo que observado por su suegro es a saber, que acudía a todas las cosas del pueblo, dijo: ¿Qué viene a ser eso que practicas con el pueblo? ¿Por qué eres tú solo en dar audiencia, y está todo el pueblo esperando desde la mañana hasta la noche?
Ex 33:3 a fin de que entres en la tierra que mana leche y miel. Porque yo no subiré a aquel país contigo; no sea que me viese obligado a destruirte en el camino, siendo como eres un pueblo de dura cerviz.
Núm 10:31 Pero Moisés: No quieras, dijo, abandonarnos, ya que tú eres práctico de los sitios en que debemos acampar por el desierto, y nos servirás de guía.
Núm 36:2 El Señor Dios te tiene mandado a ti, que eres señor nuestro, repartir la tierra de Canaán por suerte a los hijos de Israel, y dar a las hijas de Salfaad, hermano nuestro, la posesión debida a su padre;
Deut 7:6 Porque tú eres un pueblo consagrado al Señor Dios tuyo. Tu Señor Dios te ha escogido para que seas pueblo peculiar suyo, entre los pueblos todos que hay sobre la tierra.
Deut 9:6 Ten, pues, entendido que no por tus virtudes te ha dado el Señor Dios tuyo en posesión esta excelente tierra, pues eres un pueblo de durísima cerviz.
Deut 14:2 Porque tú eres, ¡oh Israel!, un pueblo consagrado al Señor Dios tuyo, y él te ha escogido para que seas su pueblo peculiar entre las naciones todas que hay sobre la tierra.
Deut 14:21 Pero de carne mortecina no comáis nada: la darás al extranjero que se halla dentro de tus muros para que la coma, o se la venderás: por cuanto tú eres un pueblo consagrado al Señor Dios tuyo. No cocerás el cabrito en la leche de su madre.
Deut 28:10 Y verán todos los pueblos de la tierra que eres llamado con verdad Pueblo de Dios; y te respetarán.
Deut 33:29 Bienaventurado eres, ¡oh Israel! ¿Quién hay semejante a ti, ¡oh pueblo afortunado!, que hallas tu salud en el Señor? El es el escudo que te cubre y defiende, y la espada que te llena de gloria. Tus enemigos rehusarán reconocerte; pero tú los sojuzgarás y pondrás el pie sobre su cuello.
Jos 17:15 Josué les respondió: Si eres un pueblo numeroso sube a los bosques, y extiéndete, haciendo desmonte en el país de los ferezeos y de los rafaimitas, ya que la posesión del monte de Efraín es para ti estrecha.
Jos 17:17 Dijo entonces Josué a la casa de José, Efraín y Manasés: Pueblo crecido eres y de gran valentía: no tendrás una herencia sola;
Juec 6:17 Replicó él: Si es que yo he hallado gracia delante de ti, dame una señal de que eres tú quien me hablas,
Juec 11:27 Y así yo no falto contra ti, sino que tú eres el que me haces agravio, declarándome una guerra injusta. El Señor árbitro de lo tratado en este día, sea juez entre Israel y los hijos de Amón.
Juec 12:5 Ocuparon también los galaaditas los vados del Jordán, por donde habían de pasar a la vuelta los de Efraín. Y cuando llegaba allí alguno de los fugitivos de Efraín y les decía: Os ruego que me dejéis pasar, le preguntaban los galaaditas: ¿No eres tú efrateo? Y respondiendo él: No lo soy,
Juec 13:3 A la cual se apareció el ángel del Señor, y le dijo: Tú eres estéril y sin hijos; pero concebirás, y parirás un hijo.
Juec 15:18 Y acosado en extremo de la sed, clamó al Señor, y dijo: Tú eres quien ha salvado y concedido por medio de tu siervo tan gran victoria; pero he aquí que me muero de sed, y así vendré a caer en manos de los incircuncisos.
Rut 3:9 y lé dijo: ¿Quién eres? Y ella respondió: Soy Rut, esclava tuya: extiende tu manto sobre tu sierva; por cuanto eres el pariente más cercano de mi marido.
Rut 3:9 y lé dijo: ¿Quién eres? Y ella respondió: Soy Rut, esclava tuya: extiende tu manto sobre tu sierva; por cuanto eres el pariente más cercano de mi marido.
Rut 3:10 A lo que dijo Booz: Bendita seas del Señor, hija mía, que has sobrepujado tu primera bondad y cordura, con la que manifiestas ahora, pues siendo joven como eres, no has ido a buscar jóvenes, ni pobres ni ricos, sino a los que la ley dispone.
Rut 3:11 Por tanto no temas, que yo haré contigo cuanto me has dicho; puesto que todas las gentes de mi ciudad saben que tú eres mujer de virtud.
Rut 4:4 lo cual he querido que tú sepas, y decírtelo en presencia de todos los circunstantes y de los ancianos de mi pueblo. Si tú quieres poseerla por el derecho de parentesco, cómprala y poséela. Y si no gustas de eso, decláralo para que yo sepa lo que debo hacer; puesto que no hay otro pariente sino tú, que eres el primero, y yo que soy el segundo. A lo que respondió él: Pues yo compraré la heredad.
I Rey 17:33 Mas Saúl dijo a David: No tienes tú fuerza para resistir a ese filisteo, ni para pelear contra él; pues tú eres muchacho todavía, y él es un varón aguerrido desde su mocedad.
I Rey 17:58 Y le dijo Saúl: Oh joven, ¿de qué familia eres? Y respondió David: Soy el hijo de vuestro siervo Isaí, natural de Betlehem.
I Rey 24:17 Y dijo a David: Más justo eres tú que yo; porque tú no me has hecho sino bienes, y yo te he pagado con males.
I Rey 26:14 y llamó desde allí en alta voz a la gente de Saúl y a Abner hijo de Ner, diciéndole: Qué, ¿no respondes, oh Abner? Y respondiendo éste, dijo: ¿Quién eres tú, que tanto gritas e incomodas al rey?
I Rey 26:15 Le replicó David: ¿No eres tú un hombre de valor? ¿Y hay otro ninguno en Israel que te iguale? Pues, ¿cómo no has guardado al rey, tu señor, puesto que ha entrado uno de la plebe con intento de matar a tu señor el rey?
I Rey 28:12 Mas luego que la mujer vio a Samuel, exclamó a grandes gritos diciendo a Saúl: ¿Por qué me has engañado? Tú eres Saúl.
I Rey 29:6 Llamó, pues, Aquis a David, y le dijo: Vive el Señor que tú eres justo y bueno en mis ojos; y que es tal la conducta que has observado en el ejército, que no he hallado en ti falta ninguna, desde el día en que te pasaste a mí hasta el presente; pero no eres del gusto de los sátrapas.