Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

era

Jud 16:25 Pasados estos días, volvió cada uno a casa; y Judit fue muy celebrada en Betulia, y era la más esclarecida de todo el país de Israel.
Est 1:11 que condujesen a su presencia a la reina Vasti con la corona puesta en la cabeza, para hacer ver su hermosura a todo el pueblo y señores; pues era de extremada belleza.
Est 2:14 Y la que había entrado por la tarde salía por la mañana; y de allí era conducida a otro departamento, de que cuidada el eunuco Susagazi, que tenía el gobierno de las mujeres secundarias del rey; y no podía ya ella volver más al rey, si el rey no lo deseaba, y no la mandaba venir expresamente.
Est 2:15 Pasado, pues, un cierto tiempo, se acercaba ya el día en que debía ser presentada al rey Ester, hija de Abihail, hermano de Mardoqueo, quien se la había prohijado. No pidió Ester adornos mujeriles, sino que el eunuco Egeo, a cuyo cuidado estaban las doncellas, le dio para adornarse lo que él quiso. Porque era de extremada hermosura e increíble belleza, y así parecía graciosa y amable a los ojos de todos.
Est 2:23 Se hizo la pesquisa, y se averiguó que era cierta la cosa; con lo que ambos fueron colgados en un patíbulo. Este suceso fue registrado en las historias, y escrito en los anales, a presencia del rey.
Est 3:1 Después de esto el rey Asuero ensalzó a Amán hijo de Amadati, que era del linaje de Agag, y le dio asiento superior al de todos los grandes señores, que tenía cerca de él.
Est 3:4 Y como se lo repitiesen varias veces, y él no quisiese hacer caso, dieron aviso a Amán, deseando probar si persistiría siempre en su resolución; porque les había dicho que él era judío.
Est 4:2 y con estos alaridos iba hasta las puertas de palacio. Porque no era lícito que uno vestido de cilicio entrase dentro del palacio real.
Est 4:3 Asimismo en todas las provincias, ciudades y pueblos, a donde había llegado el cruel edicto del rey, era grande la consternación de los judíos; ayunaban, prorrumpían en alaridos y lamentos, usando muchos de cilicio y ceniza en lugar de cama.
Est 8:1 Aquel mismo día el rey Asuero dio a la reina Ester la casa y los bienes de Amán, el enemigo de los judíos, y Mardoqueo fue presentado al rey; por cuanto Ester le declaró que era su tío paterno.
Est 8:4 Entonces Asuero, según la costumbre, alargó con la mano el cetro de oro, hacia ella; lo cual era la señal de favor y clemencia; y levantándose Ester se puso en pie delante del rey,
Est 8:8 Escribid, pues, a los judíos en nombre del rey, como mejor os pareciere, sellando las cartas con mi anillo. Porque era uso y costumbre que a cartas recibidas en nombre del rey, y selladas con su anillo, nadie osaba oponerse.
Est 8:13 La sustancia de las cartas era notificar a todas las tierras y pueblos sujetos al imperio del rey Asuero, que los judíos estaban dispuestos y autorizados a vengarse de sus enemigos.
Est 8:17 Asimismo en todos los pueblos, en las ciudades y provincias, doquiera que llegaban las órdenes del rey, se recibían con extraordinaria alegría, y había banquetes, y convites, y fiestas; en tanto grado, que muchos de otras naciones y sectas abrazaban la religión y ceremonias de los judíos. Tan grande era el terror que había infundido a todos el nombre judaico.
Est 11:4 y era del número de los cautivos que Nabucodonosor, rey de Babilonia, trasladó de Jerusalén con Jeconías o Joaquín, rey de Judá.
Est 13:1 El tenor de la carta de Amán contra los judíos era éste: El muy grande rey Artajerjes que reina desde la India hasta la Etiopía, a los principales y gobernadores de las ciento veintisiete provincias que están sujetas a su imperio, salud.
Est 16:10 Y para que conozcáis mejor lo que decimos, sabed que Amán, hijo de Amadati, macedonio de corazón y de origen, y que nada tiene de común con la sangre de los peces , el cual con su crueldad mancillaba nuestra clemencia, extranjero como era, fue acogido por nosotros,
Est 16:11 y le dimos tantas muestras de benevolencia, que era llamado por nuestro padre, y venerado de todos como el segundo después del rey.
Job 1:3 y poseía siete mil ovejas, y tres mil camellos, quinientas yuntas de bueyes y quinientas asnas, y muchísimos criados; por lo cual era este varón grande entre los orientales.
Job 2:13 y estuvieron con él sentados en el suelo siete días y siete noches, sin hablarle palabra, al ver que su dolor era tan vehemente.
Job 21:28 Porque vosotros decís en vuestro interior: ¿Qué se hizo de la casa y familia de este Job que era antes un príncipe? ¿Y dónde están los pabellones de los impíos?
Job 32:2 Entonces Eliú, hijo de Baraquel, buzita, del linaje de Ram, montó en cólera, y se llenó de indignación, se irritó contra Job, porque afirmaba que él era justo aun a los ojos de Dios.
Job 39:12 ¿Crees tú que él te ha de volver lo que has sembrado, y que te llenará de trigo la era?
Salm 77:62 Y no haciendo ya caso de un pueblo que era su heredad, le entregó al filo de la espada.
Salm 100:8 Al levantarme por la mañana mi primer cuidado era exterminar a todos los pecadores del país, para extirpar de la ciudad del Señor a todos los facinerosos.
Salm 105:20 Y trocaron su Dios, que era su gloria, por una figura de becerro que come heno.
Salm 119:7 Yo era pacífico con los que aborrecían la paz; pero ellos, así que les hablaba, se levantaban contra mí sin motivo alguno.
Salm 138:16 Todavía era yo un embrión informe, y ya me distinguían tus ojos; todos los mortales están escritos en tu libro; irán y vendrán días; y ninguno dejará de ser escrito.
Ecle 1:17 aplicado he igualmente mi corazón al conocimiento de la prudencia, y de la doctrina, y de los errores y desaciertos. Mas he visto que aun esto mismo era todo trabajo y aflicción de espíritu.
Ecle 2:11 Mas volviendo la vista hacia todas las obras de mis manos, y considerando los trabajos en que tan inútilmente me había afanado, vi que todo era vanidad y aflicción de espíritu, y que nada hay estable en este mundo.
Ecle 2:15 Por lo que dije en mi corazón: Si yo he de morir lo mismo que el necio, ¿de qué me sirve haberme aplicado con mayor desvelo a la sabiduría? Y discurriendo para conmigo, inferí que aun esto por sí solo era vanidad.
Ecle 12:9 El Eclesiastés o Predicador, siendo como era sapientísimo, enseñó al pueblo y refirió las cosas o indagaciones que había hecho; y sobre ellas compuso muchas parábolas.
Sab 4:14 Porque su alma era grata a Dios, por eso mismo se apresuró el Señor a sacarlo de en medio de los malvados. Viéndolo las gentes, no entendieron ni reflexionaron en su corazón
Sab 8:19 Ya de niño era yo de buen ingenio, y me cupo por suerte una buena alma.
Sab 8:21 Y luego que llegué a entender que no podría ser continente, si Dios no me lo otorgaba (y era ya efecto de la sabiduría saber de quién venía este don), acudí al Señor, y se lo pedí con fervor, diciendo de todo mi corazón:
Sab 9:9 estando contigo tu sabiduría, que conoce tus obras; la cual se hallaba también contigo entonces cuando creabas al mundo, y sabía lo que era grato a tus ojos, y qué cosa era conforme a tus decretos.
Sab 9:9 estando contigo tu sabiduría, que conoce tus obras; la cual se hallaba también contigo entonces cuando creabas al mundo, y sabía lo que era grato a tus ojos, y qué cosa era conforme a tus decretos.
Sab 11:14 pues al oír que era bien para los otros lo que para ellos había sido tormento, conocieron la mano del Señor, asombrados del éxito de los sucesos.
Sab 14:20 Con esto embelesado el vulgo, con la belleza de la obra, comenzó a calificar por un dios al que poco antes era honrado como un hombre.
Sab 16:17 Y lo más maravilloso era que el fuego en la misma agua que lo apaga todo, tenía mayor actividad; porque todas las criaturas se arman para vengar a los justos.
Sab 16:28 para que supiesen todos que era necesario adelantarse al sol para recoger tu bendición, y adorarte así que amanece."
Sab 18:13 Entonces los que antes a ninguna cosa creían (por engaño de los hechiceros), luego que acaeció el exterminio de los primogénitos reconocieron que aquel era el pueblo de Dios.
Ecli 48:18 Algunos de éstos hicieron lo que era del agrado de Dios; otros cometieron muchos pecados.
Ecli 48:25 porque Ezequías hizo lo que era del agrado de Dios, y siguió con firmeza las sendas de David, su padre, como se lo había recomendado Isaías, profeta grande y fiel en la presencia del Señor.
Isa 21:10 ¡Oh vosotros, trilladura mía, vosotros hijos de mi era!, lo que oí del Señor de los ejércitos del Dios de Israel, eso os he anunciado.
Isa 23:8 ¿Quién es el que tales cosas decretó contra Tiro, la cual en otro tiempo era la reina del mar, cuyos comerciantes eran príncipes, y sus mercaderes los más ilustres de la tierra?
Isa 30:24 Y tus bueyes y asnos que trabajan la tierra, comerán el pienso mezclado con variedad de granos, del modo que vienen aventados de la era, o limpios de paja.
Isa 38:3 diciendo: Acuérdate, te ruego, y suplico, ¡oh Señor!, de cómo he caminado en tu presencia con sinceridad y con un corazón perfecto y que he hecho lo que era agradable a tus ojos. Y prorrumpió Ezequías en un deshecho llanto.
Isa 49:21 Y tú dirás en tu corazón: ¿Quién me ha dado estos hijos a mí, que era estéril y no paría, expatriada y cautiva? Pues ¿quién crió estos hijos, estando yo sola y desamparada?; ¿de dónde han salido ellos?
Isa 51:2 Poned los ojos en el anciano Abrahán vuestro padre, y en Sara estéril que os parió; porque a él, que era solo, sin hijos, lo llamé, y lo bendije, y lo multipliqué.