Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

cosas

Ecle 11:9 Gózate, pues, ¡oh joven disoluto!, en tu mocedad; disfrute de los bienes tu alma en los floridos días de tu juventud; sigue las inclinaciones de tu corazón y lo que agrada a tus ojos; pero sábete que de todas esas cosas te pedirá Dios cuenta en el día en que te juzgue.
Ecle 12:9 El Eclesiastés o Predicador, siendo como era sapientísimo, enseñó al pueblo y refirió las cosas o indagaciones que había hecho; y sobre ellas compuso muchas parábolas.
Sab 1:7 Por cuanto el Espíritu del Señor llena el mundo universo; y como comprende todas las cosas, tiene conocimiento de todo, hasta de una voz.
Sab 1:8 Por eso el que habla cosas malas no puede escondérsele, ni escapará del juicio vengador.
Sab 1:14 Lo creó todo a fin de que subsistiera eternamente en su presencia; saludables hizo él todas las cosas que nacen en el mundo; nada había en ellas de ponzoñoso ni nocivo; el infierno o la muerte no reinaba entonces en la tierra.
Sab 2:21 Estas cosas idearon los impíos, y tanto desatinaron, cegados de su propia malicia.
Sab 3:14 Asimismo más feliz es el eunuco, cuyas manos no han obrado la iniquidad, ni ha pensado cosas criminales contrarias a Dios; pues se le dará un don precioso por su fidelidad y un destino muy distinguido en el cielo, que es el templo de Dios.
Sab 5:9 Pasaron como sombra todas aquellas cosas; y como mensajero que va en posta;
Sab 6:11 Porque los que hayan hecho rectamente obras justas, serán justificados; y los que hayan aprendido estas cosas que enseño, hallarán con qué defenderse.
Sab 7:12 Y me gozaba en todas estas cosas, porque me guiaba esta sabiduría; e ignoraba yo que ella fuese madre de todos estos bienes.
Sab 7:17 El mismo me dio la verdadera ciencia de las cosas existentes; para que yo conozca la constitución del mundo, y las virtudes de los elementos;
Sab 7:21 En suma, aprendí cuantas cosas hay ocultas y nunca vistas; pues la sabiduría, que es el artífice de todas, me instruyó.
Sab 7:24 Pues la sabiduría es más ágil que todas las cosas que se mueven, y alcanza a todas partes, a causa de su pureza o espiritualidad,
Sab 8:1 Ella, pues, abarca fuertemente de un cabo a otro todas las cosas, y las ordena todas con suavidad.
Sab 8:3 Realza su nobleza la estrecha unión que tiene con Dios; y además, el mismo Señor de todas las cosas ha declarado que la ama;
Sab 8:5 Y si en esta vida se codician las riquezas, ¿qué cosa más rica que la sabiduría, creadora de todas las cosas?
Sab 8:6 Y si la industria es la que produce las obras, ¿qué mejor que la sabiduría mostró el arte o ingenio en estas cosas existentes?
Sab 8:7 Y si alguno ama la justicia o santidad de vida, frutos son de los trabajos u obras de esta sabiduría las grandes virtudes; por ser ella la que enseña la templanza, la prudencia, y la justicia, y la fortaleza, que son las cosas más útiles a los hombres en esta vida.
Sab 9:1 Oh Dios de mis padres y Señor de misericordia, que hiciste todas cosas por medio de tu palabra,
Sab 9:11 puesto que sabe ella todas las cosas y todo lo entiende, y me guiará con acierto en mis empresas, y me protegerá con su poder.
Sab 9:15 pues el cuerpo corruptible le pesa al alma, y este vaso de barro deprime la mente, ocupada que está en muchas cosas.
Sab 9:16 Difícilmente llegamos a formar concepto de las cosas de la tierra; y a duras penas entendemos las que tenemos delante de los ojos. ¿Quién podrá, pues, investigar aquellas que están en los cielos?
Sab 9:18 con que sean enderezados los caminos de los moradores de la tierra, y aprendan los hombres las cosas que a ti placen?
Sab 10:2 y ella lo sacó de su pecado, y le dio potestad para gobernar todas las cosas.
Sab 10:12 Lo guardó de los enemigos, y lo defendió de los seductores, y lo hizo salir vencedor en la gran lucha, a fin de que conociese que de todas las cosas la más poderosa es la sabiduría.
Sab 11:13 Porque eran castigados con doble pesar y llanto, con la memoria de las cosas pasadas;
Sab 11:17 a fin de que conociesen cómo por aquellas cosas en que uno peca, por ésas mismas es atormentado.
Sab 11:21 Pero aun sin nada de todo esto, con un solo aliento de tu ira podían ser muertos perseguidos del remordimiento de sus propios crímenes, y disipados por un soplo de tu potencia; mas tú dispones todas las cosas con justa medida, número y peso;
Sab 11:27 Pero tú eres indulgente para con todos; porque tuyas son todas las cosas, ¡oh Señor! amador de las almas."
Sab 12:1 ¡Oh cuán benigno y suave es, oh Señor, tu espíritu en todas las cosas!
Sab 12:13 Porque no hay otro Dios sino tú; que de todas las cosas tienes cuidado, para demostrar que no hay injusticia alguna en tus juicios o disposiciones.
Sab 12:15 Siendo como eres justo, dispones, ¡oh Señor!, todas las cosas justamente; y crees ajeno de tu poder condenar a aquel que no merece ser castigado.
Sab 12:16 Pues tu poder es el principio o fuente de la justicia; y por lo mismo que eres el Señor de todas las cosas, eres con todos indulgente.
Sab 12:23 Por la misma razón a esos otros, que vivieron como insensatos e injustos, les hiciste sufrir horribles tormentos por medio de aquellas mismas cosas que adoraban.
Sab 12:27 Porque irritados de lo que padecían, y viéndose atormentados por las mismas cosas que creían dioses, y que ellas eran su ruina, reconocieron ser el verdadero Dios aquel a quien en otro tiempo negaban conocer; pero no dejaron la impiedad. Por lo cual descargó al cabo sobre ellos la condenación final.
Sab 13:3 Que si encantados de la belleza de estas cosas las imaginaron dioses, debieran conocer cuánto más hermoso es el dueño de ellas; pues el que creó todas estas cosas es el autor de la hermosura.
Sab 13:3 Que si encantados de la belleza de estas cosas las imaginaron dioses, debieran conocer cuánto más hermoso es el dueño de ellas; pues el que creó todas estas cosas es el autor de la hermosura.
Sab 13:9 porque si pudieron llegar por su sabiduría a formar idea o a penetrar las cosas del mundo, ¿cómo no echaron de ver más fácilmente al Señor del mundo?
Sab 13:10 Pero malaventurados son y fundan en cosas muertas sus esperanzas aquellos que llamaron dioses a las obras de la mano de los hombres, al oro y a la plata, labrados con arte, o a las figuras de los animales o a una piedra inútil, obra de mano antigua.
Sab 13:19 y para hacer un viaje se encomienda a quien no puede moverse; y para sus ganancias y labores y el buen éxito de todas las cosas hace oración al que es inútil para todo.
Sab 14:30 Mas por ambas cosas tendrán su justo castigo; porque entregados a sus ídolos sintieron mal de Dios, y porque juraron injustamente y con dolo, menospreciando la justicia.
Sab 15:6 Dignos son de poner su esperanza en semejantes cosas o en esas deidades aquellos que aman el mal; como también los que las hacen, los que las aman, y los que les dan culto.
Sab 15:7 Así es que un alfarero, manejando la blanda greda, forma de ella, a costa de su trabajo, toda suerte de vasijas para nuestros usos; y de un mismo barro hace vasos que sirven para cosas limpias, e igualmente otros para cosas que no lo son; siendo el alfarero el árbitro del destino que han de tener los vasos.
Sab 15:7 Así es que un alfarero, manejando la blanda greda, forma de ella, a costa de su trabajo, toda suerte de vasijas para nuestros usos; y de un mismo barro hace vasos que sirven para cosas limpias, e igualmente otros para cosas que no lo son; siendo el alfarero el árbitro del destino que han de tener los vasos.
Sab 15:9 Pero él no se cura del trabajo que le ha de costar, ni de la brevedad de su vida; sino que va a competencia con los artífices de oro y de plata, e imita también a los broncistas, y pone su gloria en formar cosas inútiles;
Sab 16:1 Por eso fueron justamente atormentados por medio de aquellas mismas o semejantes cosas que adoraban, y exterminados por una turba de animales soeces.
Sab 16:12 Porque no fue hierba, ni ningún emplasto suave lo que los sanó, sino que fue tu palabra, ¡oh Señor!, la cual sana todas las cosas.
Sab 17:10 Porque la maldad siendo como es medrosa, trae consigo el testimonio de su propia condenación; pues una conciencia agitada presagia siempre cosas atroces.
Sab 18:14 Y cuando un tranquilo silencio ocupaba todas las cosas, y la noche, siguiendo su curso, se hallaba en la mitad del camino,
Sab 18:25 A estas cosas, pues, cedió el exterminador, y las respetó; pues bastaba ya esta sola muestra del enojo de Dios.