Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

brazos

Isa 46:4 Yo mismo os llevaré en brazos hasta la vejez, hasta cuando encanezcáis; yo os hice, y yo os llevaré, yo os sostendré siempre, y yo os salvaré de todo peligro.
Isa 49:22 He aquí lo que responde el Señor Dios: Sábete que yo extenderé mi mano hacia las naciones, enarbolaré entre los pueblos mi estandarte. Y a tus hijos te los traerán en brazos, y en hombros llevarán a tus hijas.
Isa 65:2 Extendí todo el día mis brazos hacia un pueblo incrédulo y rebelde que no anda por el buen camino, sino en pos de sus antojos.
Jer 6:24 Oído hemos su fama, dicen los judíos, y se nos han caído los brazos; nos ha sorprendido la tribulación, y dolores como de mujer que está de parto.
Jer 38:4 Entonces dijeron los príncipes al rey: Te pedimos que sea condenado a muerte ese hombre; porque él procura de intento que desmayen los brazos de los valientes, y el esfuerzo de los guerreros que han quedado en esta ciudad, y de todo el pueblo, con aquellas palabras que dice. Pues está visto que ese hombre no procura el bien sino el mal de este pueblo.
Ezeq 7:17 Descoyuntados quedarán todos los brazos; y poseídos del miedo, se les irán las aguas rodillas abajo.
Ezeq 13:22 Porque vosotras con vuestras mentiras habéis entristecido el corazón del justo, al cual no había yo entristecido; y habéis fortalecido los brazos del impío, para que no se convirtiese de su mal proceder, y viviese:
Ezeq 21:7 Y cuando te preguntaren: ¿Por qué gimes?, responderás: Por la nueva que corre; porque viene el enemigo, y desmayarán todos los corazones, y desfallecerán todos los brazos, y decaerán los ánimos de todos, y todas las rodillas darán una contra otra de puro miedo. He aquí que llega tu ruina, y se efectuará, dice el Señor Dios.
Ezeq 22:14 ¿Por ventura podrá mantenerse firme tu corazón, o serán bastante robustos tus brazos en los días de quebranto que yo te preparo? Yo el Señor lo dije, y lo haré:
Ezeq 30:24 Y daré vigor a los brazos del rey de Babilonia, y pondré en su mano mi espada; y romperé los brazos del faraón, y prorrumpirán en grandes gemidos los de su pueblo que serán muertos en su presencia.
Ezeq 30:24 Y daré vigor a los brazos del rey de Babilonia, y pondré en su mano mi espada; y romperé los brazos del faraón, y prorrumpirán en grandes gemidos los de su pueblo que serán muertos en su presencia.
Ezeq 30:25 Y esforzaré los brazos del rey de Babilonia, y quedarán como lisiados los del faraón; y conocerán que yo soy el Señor cuando haya puesto mi espada en manos del rey de Babilonia, y él la habrá desenvainado contra la tierra de Egipto.
Dan 2:32 La cabeza de esta estatua era de oro finísimo; el pecho y los brazos de plata; mas el vientre y los muslos de cobre o bronce;
Dan 10:6 su cuerpo brillaba como el crisólito, y su rostro como un relámpago, y como dos ardientes antorchas así eran sus ojos; sus brazos y el resto del cuerpo hasta los pies era semejante al bronce reluciente; y el sonido de sus palabras como el ruido de un gran gentío.
Dan 11:31 Y los brazos de los prevaricadores estarán de su parte, y contaminarán el santuario de la fortaleza, y quitarán el sacrificio perenne, y sustituirán la abominación de la desolación.
Os 7:15 Y yo los intruí, y yo di vigor a sus brazos; mas ellos sólo discurrieron cómo obrar el mal contra mí.
Os 11:3 Yo me hice como ayo de Efraín, le traje en mis brazos, y los hijos de Efraín desconocieron que yo soy el que cuida de su salud.
Nah 3:8 ¿Eres tú por ventura mejor que la populosa Alejandría, que tiene su asiento entre ríos o brazos del Nilo, y está rodeada de aguas; cuyos tesoros son el mar, y las aguas son murallas?
Zac 8:9 Esto dice el Señor de los ejércitos: Cobren, pues, vigor vuestros brazos, ¡oh vosotros que en estos días oís tales palabras de boca de los profetas!; ahora que se han echado ya los cimientos de la casa del Señor de los ejércitos, y va a levantarse la construcción del templo.
Mc 10:16 Y estrechándolos entre sus brazos, y poniendo sobre ellos las manos los bendecía.
Lc 2:28 tomándole Simeón en sus brazos, bendijo a Dios, diciendo:
Lc 15:20 Con esta resolución se puso en camino para la casa de su padre. Estando todavía lejos, le avistó su padre, y se le enternecieron las entrañas, y corriendo a su encuentro, le echó los brazos al cuello, y le dio mil besos.