Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

Babilonia

I Esd 7:16 Además toda la plata y oro que recogieres en la provincia de Babilonia de ofertas voluntarias del pueblo, y lo que espontáneamente ofrecieren los sacerdotes para la casa de su Dios que está en Jerusalén ,
I Esd 8:1 Estos son, pues, los príncipes de las familias y la genealogía de los que vinieron conmigo de Babilonia en el reinado del rey Artajerjes:
II Esd 7:5 Pero Dios inspiró en mi corazón que convocase a los magnates y a los magistrrados, y al pueblo para hacer una revista o censo, y hallé un libro del empadronamiento de aquellos que habían vuelto los primeros de Babilonia, en el cual se encontró escrito lo siguiente:
II Esd 7:6 Estos son los naturales de la provincia de Judea, que han vuelto del cautiverio, adonde habían sido llevados por Nabucodonosor, rey de Babilonia, y han regresado a Jerusalén y a la Judea, cada uno a su ciudad.
II Esd 9:36 Y he aquí que nosotros mismos somos hoy esclavos; y en esta tierra que diste a nuestros padres para que comiesen el pan y los frutos de ella, en ella misma nos hallamos siervos del rey de Babilonia.
II Esd 13:6 Durante este tiempo yo no estaba ya en Jerusalén ; porque el año treinta y dos de Artajerjes, rey de Babilonia, volví al rey desde Jerusalén ; y al fin del año pedí licencia al rey.
Est 2:6 el cual había sido llevado de Jerusalén , cuando Nabucodonosor, rey de Babilonia, llevó cautivo a Jeconías, rey de Judá.
Est 11:4 y era del número de los cautivos que Nabucodonosor, rey de Babilonia, trasladó de Jerusalén con Jeconías o Joaquín, rey de Judá.
Salm 86:4 Yo haré memoria de Rahab y de Babilonia, gentes que tienen noticia de mí. He aquí que los filisteos, los de Tiro y el pueblo de los etíopes, todos ésos allí estarán.
Salm 136:1 Salmo de David, para Jeremias. En las márgenes de los ríos del país de Babilonia, allí nos sentábamos, y nos poníamos a llorar, acordándonos de ti, ¡oh Sión!
Salm 136:8 ¡Desventurada hija, o ciudad, de Babilonia! Afortunado sea aquel que te diere el pago de lo que nos ha hecho tu padecer a nosotros.
Isa 13:1 Duro anuncio contra Babilonia, revelado a Isaías, hijo de Amós.
Isa 13:19 Y aquella famosa Babilonia, gloriosa entre los demás reinos, de la que tanto se vanagloriaban los caldeos, será, como Sodoma y Gomorra, arruinada por el Señor.
Isa 14:4 te servirás de este cántico contra el rey de Babilonia, y dirás: ¿Cómo es que no parece ya el tirano y que cesó el tributo?
Isa 14:22 Porque yo me levantaré contra ellos, dice el Señor de los ejércitos; y destruiré el nombre de Babilonia, y el retoño, y toda su raza, dice el Señor.
Isa 21:4 El corazón se me derrite, me quedó pasmado de horror. Babilonia, mi querida Babilonia, es para mí un objeto de asombro.
Isa 21:4 El corazón se me derrite, me quedó pasmado de horror. Babilonia, mi querida Babilonia, es para mí un objeto de asombro.
Isa 21:9 He aquí que viene la pareja de los de a caballo en sus cabalgaduras; y añadió y dijo: Cayó, cayó Babilonia, y todos los simulacros de sus dioses se han estrellado contra la tierra.
Isa 39:1 Por aquel tiempo Merodac Baladán, hijo de Baladán, rey de Babilonia envió embajadores con cartas y presentes a Ezequías , por haber sabido que había estado enfermo y que había convalecido.
Isa 39:3 Mas entró después el profeta Isaías a ver al rey Ezequías , y le preguntó: ¿Qué han dicho esos hombres, y de dónde vienen? Han venido a mí, respondió Ezequías , de lejanas tierras, de Babilonia.
Isa 39:6 He aquí que vendrá tiempo en que todas las cosas que hay en tu palacio, y cuanto atesoraron tus padres hasta el día de hoy, será todo llevado a Babilonia; no dejarán ahí nada, dice el Señor.
Isa 39:7 Y escogerán de entre tus hijos, que descenderán de ti por línea recta, para que sirvan de eunucos en el palacio del rey de Babilonia.
Isa 43:14 Esto dice el Señor y Redentor vuestro, el Santo de Israel: Por amor de vosotros he enviado gentes a Babilonia, y he echado por tierra todas sus defensas, y a los caldeos que se jactaban de sus naves.
Isa 47:1 Entonces dirán a Babilonia: ¡Oh tú virgen, hija de Babilonia!, desciende y siéntate sobre el polvo, siéntate en el suelo; ya no hay más trono para la hija de los caldeos; no te llamarán en adelante tierna y delicada.
Isa 47:1 Entonces dirán a Babilonia: ¡Oh tú virgen, hija de Babilonia!, desciende y siéntate sobre el polvo, siéntate en el suelo; ya no hay más trono para la hija de los caldeos; no te llamarán en adelante tierna y delicada.
Isa 47:5 Tú, ¡oh hija de los caldeos!, infeliz Babilonia, guarda un mudo silencio, y escóndete en las tinieblas; porque ya no te llamarán más la señora de los reinos.
Isa 47:8 Ahora, pues, escucha estas palabras, ¡oh Babilonia!, tú que vives entre delicias, y que estás llena de arrogancia; tú que dices en tu corazón: Yo soy la dominadora, y no hay otra más que yo; no quedaré jamás viuda o sin rey, ni conoceré nunca al esterilidad.
Isa 48:14 Reuníos todos vosotros, pueblos, y escuchadme, ¿cuál de esos ídolos anunció tales cosas? El Señor amó a este hombre; y éste ejecutará la voluntad del Señor en Babilonia, y será su brazo contra los caldeos.
Isa 48:20 Salid, pues, ahora de Babilonia, huid de los caldeos, anunciad con voces de júbilo, haced saber esta alegre nueva, y llevadla hasta las últimas extremidades del mundo, decid en todas partes: Redimió el Señor a los hijos de su siervo Jacob .
Jer 1:3 Y se la dirigió también en los días del rey Joakim, hijo de Josías, rey de Judá; hasta acabado el año undécimo de Sedecías, hijo de Josías, rey de Judá; esto es hasta la transportación de los judíos desde Jerusalén a Babilonia en el mes quinto.
Jer 4:11 En aquel tiempo se dirá a este pueblo y a Jerusalén : Un viento abrasador sopla de la parte del desierto, en el camino que viene de Babilonia a la hija de mi pueblo, y no es viento para aventar y limpiar el grano.
Jer 20:4 Porque esto dice el Señor: Sábete; que yo te llenaré de espanto a ti y a todos tus amigos, los cuales perecerán al filo de la espada de sus enemigos, y es cosa que la verás con tus ojos; y entregaré a todo Judá en poder del rey de Babilonia, quien trasladará sus habitantes a Babilonia, y a muchos los pasará a cuchillo.
Jer 20:4 Porque esto dice el Señor: Sábete; que yo te llenaré de espanto a ti y a todos tus amigos, los cuales perecerán al filo de la espada de sus enemigos, y es cosa que la verás con tus ojos; y entregaré a todo Judá en poder del rey de Babilonia, quien trasladará sus habitantes a Babilonia, y a muchos los pasará a cuchillo.
Jer 20:5 Y todas las riquezas de esta ciudad, y todas sus labores, y cuanto haya de precioso, y los tesoros todos de los reyes de Judá los entregaré en manos de sus enemigos; los cuales los robarán, y cargarán con ellos, y las conducirán a Babilonia.
Jer 20:6 Mas tú, ¡oh Fasur!, y todos los moradores de tu casa iréis cautivos; y tú irás a Babilonia, y allí morirás, y allí serás enterrado tú y todos tus amigos a quienes profetizaste mentiras.
Jer 21:2 Consulta por nosotros al Señor; pues Nabucodonosor, rey de Babilonia, nos ataca con su ejército, y sepas si el Señor por ventura está en obrar a favor nuestro alguno de sus muchos prodigios, que obligue a aquél a retirarse de nosotros.
Jer 21:4 Esto dice el Señor, el Dios de Israel: Sabed que yo haré volver en daño vuestro las armas que tenéis en vuestras manos, y con que peleáis contra el rey de Babilonia y los caldeos que os tienen sitiados rodeando vuestros muros, y las amontonaré todas en medio de la ciudad.
Jer 21:7 Y tras esto, dice el Señor, yo entregaré a Sedecías, rey de Judá, y a sus servidores, y a su pueblo, y a los que hayan quedado en la ciudad salvos de la peste, y de la espada, y del hambre, los entregaré, digo, en poder del rey de Babilonia Nabucodonosor, y en poder de sus enemigos, y en poder de los que buscan cómo matarlos, y serán pasados a cuchillo, y no se aplacará, ni perdonará, ni tendrá compasión.
Jer 21:10 Por cuanto yo tengo fijados los ojos sobre esta ciudad, dice el Señor, no para hacerle bien, sino mal; yo la entregaré en poder del rey de Babilonia, el cual la entregará a las llamas.
Jer 22:25 Yo te entregaré, ¡oh príncipe impío!, en poder de los que buscan cómo matarte, y de aquellos cuyo rostro te hace temblar, en poder de Nabucodonosor, rey de Babilonia, y en poder de los caldeos.
Jer 24:1 Me mostró el Señor una visión, y vi dos canastillos llenos de higos puestos en el atrio delante del templo del Señor, después que Nabucodonosor, rey de Babilonia, había transportado de Jerusalén a Babilonia a Jeconías, hijo de Joakim, rey de Judá, y a sus cortesanos, y a los artífices, y a los joyeros.
Jer 24:1 Me mostró el Señor una visión, y vi dos canastillos llenos de higos puestos en el atrio delante del templo del Señor, después que Nabucodonosor, rey de Babilonia, había transportado de Jerusalén a Babilonia a Jeconías, hijo de Joakim, rey de Judá, y a sus cortesanos, y a los artífices, y a los joyeros.
Jer 25:1 Profecía que se reveló a Jeremías, acerca de todo el pueblo de Judá, en el año cuarto de Joakim, hijo de Josías, rey de Judá; que es el año primero de Nabucodonosor, rey de Babilonia;
Jer 25:9 sabed que yo reuniré, y enviaré, dice el Señor, todas las familias o pueblos del Norte con Nabucodonosor, rey de Babilonia, ministro o instrumento mío, y los conduciré contra esta tierra y contra sus habitantes, y contra todas las naciones circunvecinas, y daré cabo de ellos, y los reduciré a ser el pasmo y el escarnio de todos, y a una soledad perdurable todas sus ciudades.
Jer 25:11 Y toda esta tierra quedará hecha una soledad espantosa; y todas estas gentes servirán al rey de Babilonia por espacio de setenta años.
Jer 25:12 Y cumplidos que sean los setenta años, yo tomaré cuentas al rey de Babilonia y a aquella nación, dice el Señor, castigando sus iniquidades, y a todo el país de los caldeos, reduciéndolo a un eterno páramo.
Jer 25:26 y asimismo a todos los reyes del norte, los de cerca y los de lejos. A cada uno de estos pueblos le di a beber del cáliz de la ira para irritarlo contra su hermano, y a todos cuantos reinos hay en la superficie de la tierra; y el rey de Sesac, o Babilonia, lo beberá después de ellos.
Jer 27:6 Al presente, pues, he puesto todos estos países en poder de Nabucodonosor, rey de Babilonia, ministro mío; y le he dado también las bestias del campo para que le sirvan.
Jer 27:8 Mas a la nación y al reino que no quiera someterse a Nabucodonosor, rey de Babilonia, a cualquiera que no doblare su cerviz al yugo del rey de Babilonia, yo los castigaré, dice el Señor, con la espada, con hambre y con peste hasta que por medio de Nabucodonosor acabe con ellos.
Jer 27:8 Mas a la nación y al reino que no quiera someterse a Nabucodonosor, rey de Babilonia, a cualquiera que no doblare su cerviz al yugo del rey de Babilonia, yo los castigaré, dice el Señor, con la espada, con hambre y con peste hasta que por medio de Nabucodonosor acabe con ellos.