Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

vanidad

I Rey 12:21 ni queráis descarriaros en pos de cosas vanas, que no os aprovecharán de nada, ni os librarán; puesto que no son más que vanidad y mentira.
II Esd 1:7 La vanidad de los ídolos nos sedujo, y no hemos obsersvado tus mandamientos, y ceremonias, y preceptos, que diste a Moisés, tu siervo.
Job 11:11 El conoce la vanidad o iniquidad de los hombres; y viendo sus maldades, ¿ha de pasarlas por alto sin castigarlas?
Job 31:5 Si creéis que he seguido el camino de la vanidad, y que han corrido mis pies a urdir fraudes contra el prójimo,
Salm 4:3 ¡Oh, hijos de los hombres!, ¿hasta cuándo seréis de estúpido corazón?; ¿por qué amáis la vanidad y vais en pos de la mentira?
Salm 5:10 Pues en su boca no se halla palabra de verdad; su corazón está lleno de vanidad y perfidia.
Salm 38:6 Cierto que has señalado a mis días término corto; y que toda mi subsistencia es como nada ante tus ojos. Verdaderamente que es la suma vanidad todo hombre viviente.
Salm 39:5 Bienaventurado el hombre cuya esperanza toda es el nombre del Señor, y que no volvió sus ojos hacia la vanidad y a las necedades engañosas.
Salm 51:9 He ahí el hombre que no contó con el favor de Dios, sino que puso su confianza en sus grandes riquezas, y no hubo quien le apeara de su vanidad.
Salm 61:10 Al contrario, vanos y falaces son los hijos de los hombres; mentirosos son los hijos de los hombres puestos en balanza; todos ellos juntos son más livianos que la misma vanidad.
Salm 118:37 Aparta mis ojos para que no miren la vanidad; haz que viva siguiendo tu camino o ley santa.
Salm 143:8 cuya boca no habla sino vanidad o mentira, y cuyas manos están llenas de iniquidad.
Salm 143:11 sálvame ahora, y sácame de las garras de estos extranjeros; de cuya boca no sale sino vanidad y mentira, y cuyas manos están llenas de iniquidad.
Prov 30:8 Aleja de mí la vanidad y las palabras mentirosas. No me des ni mendiguez ni riquezas; dame solamente lo necesario para vivir,
Ecle 1:2 Vanidad de vanidades, dijo el Eclesiastés; vanidad de vanidades, y todo lo de acá abajo no es más que vanidad.
Ecle 1:2 Vanidad de vanidades, dijo el Eclesiastés; vanidad de vanidades, y todo lo de acá abajo no es más que vanidad.
Ecle 1:14 Yo he visto todo cuanto se hace debajo del sol, y he hallado ser todo vanidad y aflicción del espíritu.
Ecle 2:1 Entonces dije yo en mi corazón: Iré a bañarme en delicias, y a gozar de los bienes presentes. Mas luego eché de ver que también esto es vanidad.
Ecle 2:11 Mas volviendo la vista hacia todas las obras de mis manos, y considerando los trabajos en que tan inútilmente me había afanado, vi que todo era vanidad y aflicción de espíritu, y que nada hay estable en este mundo.
Ecle 2:15 Por lo que dije en mi corazón: Si yo he de morir lo mismo que el necio, ¿de qué me sirve haberme aplicado con mayor desvelo a la sabiduría? Y discurriendo para conmigo, inferí que aun esto por sí solo era vanidad.
Ecle 2:17 Por tanto he cobrado tedio a mi propia vida, viendo que debajo del sol no hay más que males, y que todo es vanidad y aflicción de espíritu.
Ecle 2:21 visto que después de haber uno trabajado con sabiduría y doctrina, y desveládose, viene a dejar lo adquirido a un holgazán; cosa que ciertamente es una vanidad y mucha desdicha.
Ecle 2:23 Llenos están de dolor y de amargura todos sus días; ni aún por la noche goza de reposo su alma. ¿Y no es esto una suma de vanidad o miseria?
Ecle 2:26 Dios, al hombre que le es grato, le da sabiduría, y ciencia, y contentamiento; mas al pecador le envía aflicción e inútiles cuidados de acumular y almacenar bienes para dejarlos a quien Dios quiera; lo que no menos es vanidad e inútil tormento de ánimo.
Ecle 3:19 Porque muere el hombre a semejanza de las bestias, y en tener que morir son ambos de igual condición; pues como el hombre muere, así mueren ellas; todos respiran de la misma manera; y el hombre, después del pecado, no tiene ninguna exención sobre las bestias; todo está sujeto a la vanidad del sepulcro,
Ecle 4:4 Pasé también a contemplar todas las obras o destinos de los hombres; y advertí que sus habilidades están expuestas a la envidia del prójimo, y que así aun en esto hay vanidad y cuidados inútiles.
Ecle 4:7 Reflexionando hallé aún otra vanidad debajo del sol:
Ecle 4:16 Infinito es el número de la gente que lo precedió, y llenó de aplausos; mas los que vendrán después, ya no estarán contentos con él. Conque también esto es vanidad y aflicción de espíritu.
Ecle 5:9 El avariento jamás se saciará de dinero, y quien ama ciegamente las riquezas ningún fruto sacará de ellas. Luego también es esto vanidad.
Ecle 6:2 un hombre a quien Dios ha dado riquezas, y haciendas, y honores, sin que le falte cosa de cuantas desea su alma; mas Dios no le da facultad para disfrutar de ellas; sino que abandonándolo a la avaricia, otro hombre extraño lo ha de devorar todo; vanidad es ésta y miseria muy grande.
Ecle 6:9 Mejor es el ver y gozar lo que deseas, que codiciar cosas que ignoras; pero también esto es vanidad y presunción de espíritu.
Ecle 6:11 Mucho se habla y discurre en las disputas, y en todas ellas se ve mucha vanidad.
Ecle 7:6 Porque las risas o aplausos del insensato son como el vano ruido de las espinas cuando arden debajo de la olla; y así también esto es vanidad.
Ecle 8:10 Vi también los pomposos entierros de los impíos; los cuales aun mientras vivían impíamente residían en el lugar santo, y eran alabados en la ciudad como de buenas costumbres; mas también es esto vanidad.
Ecle 9:9 Goza de la vida en compañía de tu amada esposa, durante todos los días de tu vida, que se te han concedido debajo del sol por todo el tiempo de tu vanidad o frágil vida, ya que mientras vives, esta es la parte que te toca de tu trabajo con que andas afanado en este mundo.
Ecle 11:8 Pero, aunque viva un hombre muchos años, y en todos ellos contento, debe no obstante acordarse del tiempo de las tinieblas, y de la cantidad de días de la eternidad; llegados los cuales, quedarán convencidas de vanidad las cosas pasadas.
Ecle 11:10 Por tanto arranca de tu corazón la ira, y aparta todo vicio de tu carne, puesto que la juventud y las delicias no son sino vanidad.
Ecle 12:8 Vanidad de vanidades, dijo el Eclesiastés, y todo es vanidad.
Sab 4:12 Pues el hechizo de la vanidad del siglo oscurece el bien verdadero; y el inconstante ímpetu de la concupiscencia pervierte el ánimo inocente.
Sab 14:14 Sobrevino en la tierra la vanidad de los hombres; y con esto se tuvo por muy pronta la muerte de ellos.
Ecli 17:29 Porque no puede el hombre tener todas las cosas; puesto que no hay ningún hijo del hombre que sea inmortal, y que no se complazca en la vanidad y malicia."
Ecli 34:5 Las adivinaciones erróneas, los agüeros falsos y los sueños de los malvados son una vanidad.
Isa 5:18 ¡Ay de vosotros que arrastráis la iniquidad con las cuerdas de la vanidad, y al pecado a manera de carro del cual tiráis como bestias!
Isa 24:10 La ciudad de la vanidad se va destruyendo, todas las casas están cerradas, sin que nadie entre en ellas.
Isa 41:29 Luego todos son unos inicuos, y vanas son las obras de sus manos, viento y vanidad sus simulacros.
Isa 59:4 No hay quien clame por la justicia; no hay quien juzgue con verdad; sino que todos ponen su confianza en la nada, y tienen en su boca la vanidad. Concibieron o idearon el trabajo o daño del prójimo, y parieron la iniquidad.
Jer 2:5 Esto dice el Señor: ¿Qué tacha hallaron en mí vuestros padres, cuando se alejaron de mí, y se fueron tras la vanidad de los ídolos haciéndose también ellos vanos?
Jer 10:8 De necios e insensatos quedarán convencidos todos ellos; el leño, que adoran, es la prueba de su vanidad o insensatez.
Jer 16:19 ¡Oh Señor, fortaleza mía, y el sostén mío, y mi refugio en el tiempo de la tribulación!, a ti vendrán las gentes desde las extremidades de la tierra, y dirán: Verdaderamente que nuestros padres poseyeron la mentira y la vanidad, la cual para nada les aprovechó.
Jer 18:15 Pues he aquí que mi pueblo se ha olvidado de mí, ofreciendo sacrificios a la vanidad de los ídolos, y tropezando de continuo en sus caminos, en los antiguos caminos, por seguir un carril no trillado,