Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

plebe

I Rey 26:15 Le replicó David: ¿No eres tú un hombre de valor? ¿Y hay otro ninguno en Israel que te iguale? Pues, ¿cómo no has guardado al rey, tu señor, puesto que ha entrado uno de la plebe con intento de matar a tu señor el rey?
II Par 35:13 Y asaron los corderos pascuales al fuego, conforme está escrito en la ley. En cuanto a las víctimas pacíficas, las cocieron en calderos, marmitas y ollas; e inmediatamente las distribuían a toda la plebe.
Prov 22:29 ¿Viste algún hombre puntual y expedito en sus negocios? Ese tendrá cabida con los reyes, y no quedará entre la plebe.
Ecli 42:11 A la hija desenvuelta guárdala con estrecha custodia, no sea que algún día te haga el escarnio de tus enemigos, la fábula de la ciudad y la burla de la plebe; y te cubra de ignominia delante del concurso del pueblo.
Isa 5:13 Por eso mi pueblo fue llevado cautivo, porque le faltó el saber, y sus nobles murieron de hambre, y la plebe pereció de sed.
Jer 26:23 quienes sacaron a Urías de Egipto, y lo condujeron al rey Joakim; el cual lo mandó degollar y arrojar el cadáver en la sepultura de la ínfima plebe.
Jer 39:9 Y a los restos del vecindario que habían quedado en la ciudad, y a los desertores que se habían refugiado a él, y a lo restante de la plebe, los condujo a Babilonia Nabuzardán, general del ejército.
Jer 41:16 Johanán, pues, hijo de Caree, con todos los oficiales de guerra que tenía consigo, se encargó en Masfat de todos los residuos de la plebe que había él recobrado de Ismael, hijo de Natanías, después que éste asesinó a Godolías, hijo de Ahicam; y cogió todos los hombres aptos para la guerra, y las mujeres, y los niños, y los eunucos que había hecho volver de Gabaón,
Mt 27:64 Manda, pues, que se guarde el sepulcro hasta el tercer día; para que no vayan quizás de noche sus discípulos y lo hurten, y digan a la plebe: Ha resucitado de entre los muertos; y sea el último engaño peor que el primero.
Hech 6:12 Con eso alborotaron a la plebe y a los ancianos, y a los escribas, y echándose sobre él, le arrebataron y trajeron al concilio,
Hech 17:5 Pero los judíos incrédulos, llevados de su falso celo, se valieron de algunos malos hombres de ínfima plebe, y reuniendo gente, amotinaron la ciudad, y se echaron sobre la casa de Jasón en busca de Pablo y de Silas, para presentarlos a la vista del pueblo.
Hech 17:8 La plebe y los magistrados de la ciudad, oyendo esto, se alborotaron.