Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

manto

Gen 24:65 y preguntó al criado: ¿Quién es aquel hombre que viene por el campo a nuestro encuentro? Y le respondió: Aquel es mi amo. Y ella cogiendo prontamente el manto, se tapó.
Gen 38:14 La cual, depuesto el traje de viuda, tomó un manto o mantilla grande, y mudando de traje, se sentó en la encrucijada del camino que va a Tamnas; porque veía que Sela había ya crecido, y no se lo habían dado por marido.
Gen 49:11 El Mesías o Enviado ligará a la viña su pollino, y a la cepa, ¡oh, hijo mío!, su asna. Lavará en vino su vestido, y en sangre de las uvas su manto.
Deut 22:12 Pondrás a los cuatro cabos del manto o capa, con que te cubres, unos cordoncillos o flecos en las franjas.
Jos 7:24 Tomando, pues, Josué y los hijos de Israel a Acán, hijo de Zaré, y con él el dinero y el manto y la barra de oro, con sus hijos también, y sus hijas, bueyes y asnos, y ovejas, y la misma tienda, y todo cuanto tenía, lo llevaron al valle llamado por eso de Acor,
Juec 4:17 Y habiendo salido Jahel a recibir a Sísara, le dijo: Entrad, señor mío, en mi casa y no temáis. Entró pues, en la tienda, y después que ella lo cubrió con un manto,
Rut 3:9 y lé dijo: ¿Quién eres? Y ella respondió: Soy Rut, esclava tuya: extiende tu manto sobre tu sierva; por cuanto eres el pariente más cercano de mi marido.
Rut 3:15 Y añadió: Extiende el manto con que te cubres, y tenle asido con ambas manos. Extenle dio ella, y teniéndole, le midió seis modios de cebada, se los cargó a cuestas. Así cargada entró en la ciudad.
I Rey 24:4 Le dijeron, pues, a David, sus criados: He aquí el día feliz del cual te dijo el Señor: Yo pondré en tus manos a tu enemigo, para que hagas de él lo que gustares. Entonces David se levantó, y cortó sin ser sentido la orla del manto de Saúl.
I Rey 24:5 E inmediatamente le remordió a David su conciencia de haber cortado la orla del manto de Saúl,
I Rey 24:11 Observa, pues, ¡oh padre mío!, y reconoce si es la orla de tu clámide o manto la que tengo en mi mano, y cómo al cortar la extremidad de tu vestido no he querido extender mi mano contra ti. Considera ahora tú mismo, y persuádete de que no soy culpable en nada, ni de injusticia, ni de pecado contra ti; tú, por el contrario, andas poniendo asechanzas a mi vida para quitármela.
I Rey 28:14 Le replicó Saúl: ¿Qué figura tiene? La de un varón anciano, dijo ella, cubierto con un manto. Reconoció, pues, Saúl que era Samuel, y le hizo una profunda reverencia, postrándose en tierra sobre su rostro.
III Rey 19:13 Habiendo oído esto Elías, cubrió su rostro con el manto, y saliendo fuera, se paró a la puerta de la cueva, y de repente oye una voz que le dice: ¿Qué haces aquí, Elías?
III Rey 19:19 Partido que hubo de allí Elías, halló a Eliseo, hijo de Safat, arando con doce yuntas de bueyes, y él era uno de los que araban con una de las doce yuntas; y Elías, así que llegó a él, le echó su manto encima.
IV Rey 2:8 Entonces Elías se quitó el manto, y lo dobló, e hirió con él las aguas, las cuales se dividieron a uno y otro lado y pasaron los dos a pie enjuto.
IV Rey 2:13 Recogió después el manto, que se le había caído a Elías, y volviéndose se paró en la ribera del Jordán;
IV Rey 2:14 y con el manto que se le cayera a Elías hirió las aguas, las cuales no se dividieron. Por lo que dijo: ¿Dónde está ahora el Dios de Elías? Hirió nuevamente las aguas, y se dividieron a un lado y a otro; con lo que pasó Eliseo.
IV Rey 9:13 Se levantaron entonces a toda prisa, y tomando cada uno su propio manto, le pusieron debajo de los pies de Jehú en forma de tribunal; y a son de trompetas lo proclamaron, diciendo: Jehú es nuestro rey.
I Esd 9:3 Al oír estas palabras, penetrado de dolor rasgué mi manto y la túnica, y mesé los cabellos de mi cabeza y de mi barba, y me senté lleno de tristeza.
I Esd 9:5 Y al tiempo del dicho sacrificio vespertino salí de la consternación en que había estado; y rasgados el manto y la túnica, me arrodillé, y alcé mis manos al Señor Dios mío,
Est 6:10 Le replicó el rey: Date prisa; y tomando el manto real y el caballo, todo eso que has dicho ejecútalo con el judío Mardoqueo, el que está a la puerta del palacio. Guárdate de omitir nada de cuanto has di-cho.
Est 6:11 Tomó, pues, Amán el manto real y el caballo y habiéndoselo vestido a Mardoqueo en la plaza de la ciudad, y héchole montar en el caballo, iba caminando delante de él, y gritaba: De tal honor es digno aquel a quien el rey quiere honrar.
Est 8:15 Entretanto Mardoqueo saliendo del palacio y de la audiencia del rey, iba rozagante, vestido a la manera del rey, esto es, de color de jacinto y de azul celeste, llevando en la cabeza una corona de oro, y cubierto de un manto de seda y de púrpu-ra. Y toda la ciudad hizo fiestas y regocijos.
Est 15:9 Pasadas, pues, de una en una todas las puertas, llegó a ponerse enfrente del rey, que estaba sentado en su real solio, vestido con el regio manto, resplandeciendo con el oro y pedrería; su aspecto causaba terror.
Job 29:14 Porque siempre me revestí de justicia y mi equidad me ha servido como de regio manto y diadema.
Cant 5:7 Me encontraron las patrullas que rondan la ciudad, me hirieron, y me lastimaron; y me quitaron mi manto, con que me cubría, las centinelas de los muros.
Ecli 15:5 y en medio de la comunidad le abrirá la boca, llenándolo del espíritu de sabiduría y de inteligencia, y revistiéndole de un manto que lo cubrirá de gloria.
Ecli 50:11 como el olivo que retoña, y como el ciprés que descuella por su altura, tal parecía el sumo sacerdote Simón cuando se ponía el manto glorioso, y se revestía de todos los ornamentos de su dignidad.
Isa 59:17 Se armó de la justicia como de una coraza, y se puso en la cabeza el yelmo de la salud; la venganza es el ropaje con que se viste, y el celo es el manto con que se cubre.
Isa 61:10 Yo me regocijaré con sumo gozo en el Señor, y el alma mía se llenará de placer en mi Dios; pues él me ha revestido del ropaje de la salud, y me ha cubierto con el manto de la justicia, como a esposo adornado con guirnalda, y como esposa ataviada con sus joyas.
Bar 4:20 Me desnudé del manto o vestido de paz y regocijo, y me vestí del saco de rogativa, y clamaré al Altísimo todos los días de mi vida.
Bar 5:2 Te revestirá el Señor de un doble manto de justicia o santidad, y pondrá sobre tu cabeza una diadema de honra sempiterna.
Ezeq 16:8 Y pasé junto a ti, y te vi, y estabas tú ya entonces en la edad de los amores, o en la pubertad, y extendí yo sobre ti la punta de mi manto y cubrí tu ignominia, y te hice un juramento, e hice contigo un contrato, dice el Señor Dios, y desde entonces fuiste mía.
Ezeq 16:10 Y te vestí con ropas de varios colores, y te di calzado de color de jacinto y ceñidor de lino fino, y te vestí con un manto finísimo.
Zac 13:4 Y quedarán confundidos en aquel día los profetas, cada cual por su propia visión cuando profetizare, y no se cubrirán hipócritamente con el manto de penitencia para mentir;
I Mac 6:15 y le entregó la diadema, el manto real y el anillo, a fin de que fuese a encargarse de su hijo Antíoco, y le educase para ocupar el trono.
Mt 27:28 Y desnudándolo, lo cubrieron con un manto de púrpura.
Mt 27:31 Y después que así se mofaron de él, le quitaron el manto, y habiéndolo puesto otra vez sus propios vestidos, lo sacaron a crucificar.
Mc 15:17 lo vistieron con un manto de color púrpura, y le pusieron una corona de espinas entretejidas.
Jn 19:2 Y los soldados formaron una corona de espinas entretejidas, y se la pusieron sobre la cabeza; y le vistieron una ropa o manto púrpura;
Jn 19:5 (Salió, pues, Jesús , llevando la corona de espinas y revestido del manto o capa púrpura). Y les dijo Pilatos: ¡Ved aquí al hombre!
Heb 1:12 y como un manto o ropa así los mudarás, y quedarán mudados; pero tú eres para siempre el mismo, y tus años o tus días nunca se acabarán, pues eres eterno.