Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

fuerza

Gen 21:25 Y dio entonces quejas a Abimelec acerca de un pozo de agua que sus criados le habían usurpado a viva fuerza.
Gen 31:31 Respondió Jacob : El haberme marchado sin darte parte, ha sido porque temí que me quitases por fuerza tus hijas.
Gen 35:18 Pero exhalando el alma a la fuerza del dolor, y estando ya a punto de morir, puso a su hijo el nombre de Benoni que quiere decir, Hijo de mi dolor; mas el padre le llamó Benjamín, esto es, Hijo de la diestra.
Ex 7:4 y con todo no ha de escucharos. Pero yo extenderé mi mano sobre Egipto, y sacaré al ejército y pueblo mío, los hijos de Israel, de la tierra de Egipto, a fuerza de grandes castigos.
Ex 15:13 Por tu misericordia te has hecho el caudillo del pueblo que redimiste, y le has conducido a fuerza de tu poder a tu santa morada.
Núm 19:21 Este precepto tendrá fuerza de ley perpetua. El mismo que hace la aspersión con las aguas, lavará sus vestidos. Cualquiera que tocare las aguas de purificación estará inmundo hasta la tarde.
Deut 8:17 pero no antes, para que no dijeras en tu corazón: Mi fuerza y la robustez de mi brazo me granjearon todas estas cosas;
Deut 9:29 Ellos son tu pueblo y la herencia tuya que sacaste de Egipto con tu gran poder y a fuerza de tu brazo.
Deut 11:2 Considerad hoy las cosas que ignoran vuestros hijos; los cuales no vieron los castigos del Señor Dios vuestro, ni su grandeza, ni el poder de su robusta mano, ni la fuerza de su brazo,
Deut 11:10 Porque la tierra que vais a poseer, no es como la tierra de Egipto de donde salisteis, en la cual después de haber sembrado, se conducen a fuerza de trabajo aguas de regadío como en las huertas:
Deut 22:25 Pero si el hombre halla en el campo a la doncella desposada, y la fuerza, él solo ha de morir;
Deut 28:29 de suerte que andarás a tientas en medio del día como suele andar un ciego rodeado de tinieblas; y así no acertarás en ninguna cosa que emprendas. Y en todo tiempo tendrás que sufrir calumnias, y serás oprimido por la fuerza sin tener quien te libre.
Deut 28:32 Tus hijos y tus hijas serán entregados a pueblo extraño, viéndolo tus ojos y consumiéndose con la continua vista de su miseria, sin haber fuerza en tu mano para librarlos.
Jos 11:19 pues no hubo ciudad que de suyo se rindiese a los hijos de Israel, fuera de los heveos que habitaban en Gabaón: todas las conquistó a la fuerza.
Juec 3:21 con tanta fuerza que la guarnición o empuñadura entró tras la hoja en la herida, y se quedó cubierta y encajada en la mucha grosura: ni sacó del vientre la daga sino que como se la metió, así la dejó en él; y al instante los excrementos salieron por sus conductos naturales.
Juec 5:25 Con la izquierda cogió un clavo, y con la diestra un martillo de obreros, y mirando donde heriría a Sísara en la cabeza, le dio el golpe y le taladró con gran fuerza las sienes.
Juec 8:21 Y Zebee y Salmana dijeron: Ven tú y danos el golpe: pues a proporción de la edad es la fuerza del hombre. Acercóse Gedeón y mató a Zebee y a Salmana: y tomó después todos los adornos y lunitas de oro, con que suelen engalanarse los cuellos de los camellos de los reyes.
Juec 16:5 Vinieron luego a ella los príncipes de los filisteos, y le dijeron: Engáñale con caricias, y averigua de él de dónde le viene tan gran fuerza, y cómo le podremos sojuzgar para castigarle después de atado: que si lo consiguieres, te daremos cada uno mil cien siclos de plata.
Juec 16:6 En vista de esto, Dalila habló así a Sansón: Dime, por tu vida: ¿En qué consiste tu grandísima fuerza, y cuál es la cosa con que atado no podrías escaparte?
Juec 16:9 quedándose aquéllos en acecho, escondidos en la casa, aguardando en una pieza retirada el fin de este suceso. Luego Dalila le gritó: ¡Sansón, los filisteos se echan sobre ti! Mas él rompió las ataduras, como cualquiera rompería un hilo torcido de borra de estopa, así que le hiciera sentir el fuego. Con esto no se supo en qué consistía su fuerza.
Juec 16:15 Le dijo entonces Dalila: ¿Cómo puedes decir que me amas, cuando tu corazón no está unido conmigo? Por tres veces me has mentido, no queriendo decirme en qué consiste tu grandísima fuerza.
Juec 16:19 Y ella habiéndole hecho dormir sobre sus rodillas, y reclinar la cabeza en su regazo, llamó a un barbero que le cortó a Sansón las siete trenzas de su cabello. Y después comenzó Dalila a empujarle y echarle de sí; pues al punto le desamparó la fuerza.
Juec 16:28 Pero él invocando al Señor dijo: ¡Oh Señor Dios! acuérdate de mí: y restitúyeme ahora, ¡oh Dios mío!, mi anterior fuerza para vengarme de mis enemigos, y hacerles pagar de una sola vez el haberme privado de mis dos ojos.
Juec 19:7 Pero él levantándose se puso en acción de querer marcharse. Con todo, el suegro a fuerza de instancias lo detuvo, y lo hizo quedar consigo.
I Rey 2:9 El dirigirá todos los pasos de sus santos; mas los impíos serán por él reducidos a silencio en medio de tinieblas; porque no estará firme el hombre por su propia fuerza.
I Rey 2:16 Le decía el que inmolaba: Quémese ahora primero la grosura, según el rito, y llévate después todo lo que quisiereis. Mas él respondía diciendo: No, ahora me la darás; de lo contrario, te la quitaré yo por fuerza.
I Rey 17:33 Mas Saúl dijo a David: No tienes tú fuerza para resistir a ese filisteo, ni para pelear contra él; pues tú eres muchacho todavía, y él es un varón aguerrido desde su mocedad.
I Rey 31:3 y toda la fuerza del combate vino a descargar sobre Saúl, a quien alcanzaron los flecheros e hirieron gravemente.
II Rey 4:5 Marcharon, pues, los hijos de Remmón berotita, Recab y Baana, y entraron en la mayor fuerza del sol en casa de Isboset, el cual estaba sobre su cama durmiendo la siesta. La portera de la casa, limpiando trigo, se había quedado dormida.
II Rey 12:17 Fueron a él los más ancianos o principiantes de sus domésticos, para obligarle a fuerza de ruegos a que se levantase del suelo; mas él no quiso hacerlo, ni tomar con ellos alimento.
II Rey 23:21 Este mismo quitó la vida a un egipcio, varón de prodigiosa estatura, que tenía una lanza en la mano. Yendo, pues, contra él, con un palo, le arrancó a viva fuerza la lanza de la mano, y lo mató con ella.
III Rey 1:8 Mas el otro sumo sacerdote Sadoc, y Banaías, hijo de Joíada, el profeta Natán, y Semei, y Rei, y la principal fuerza del ejército de David, no estaban por Adonías.
IV Rey 14:7 Este mismo derrotó diez mil idumeos en el valle de las Salinas, y tomó a viva fuerza a Petra, a la cual llamó Jectehel, nombre que conserva hasta hoy día.
IV Rey 19:26 Y los que las habitaban, quedando faltos de fuerza en sus brazos, temblaron y se amilanaron; y vinieron a quedar como el heno del campo y como la hierba verde de los tejados, que se seca antes de llegar a sazón.
IV Rey 24:14 Y se llevó cautiva toda la corte de Jerusalén , todos sus príncipes y toda la fuerza del ejército, en número de diez mil, y a todos los artífices y maquinistas, sin dejar más que la gente pobre.
I Par 17:21 Porque, ¿hay otro pueblo como el tuyo de Israel, esta nación única sobre la tierra, a la cual vino Dios para libertarla y hacerla su pueblo, arrojando con su poder y a fuerza de prodigios espantosos las naciones todas delante de este pueblo, librado por él de la esclavitud de Egipto?
I Par 26:6 Y Semei, o Semeías, su hijo, tuvo hijos que fueron cabezas de otras tantas familias de ostiarios; porque eran varones de gran fuerza.
I Par 29:12 Tuyas son las riquezas, y tuya es la gloria; tú eres el Señor de todo; en tu mano está la fuerza y el poder; en tu mano la grandeza y el imperio de todas las cosas.
II Par 13:8 Ahora bien, vosotros decís que tenéis fuerza para resistir al reino del Señor, que posee él o gobierna por medio de los hijos de David; y tenéis una gran muchedumbre, y los becerros de oro que os ha hecho Jeroboam para que sean dioses vuestros;
II Par 20:12 ¡Oh Dios nuestro! ¿y no castigarás tú esas gentes? En nosotros ciertamente no hay tanta fuerza que podamos resistir a esa multitud que nos acomete. Mas no sabiendo lo que debemos hacer, no nos queda otro recurso que volver a ti nuestros ojos.
II Par 25:8 Que si piensas que en las guerras depende todo de la fuerza del ejército, Dios hará que tú seas vencido de los enemigos, porque en mano de Dios está el dar auxilio o poner en fuga.
Jud 1:4 Después de esto se jactaba de su poder por la fuerza de sus ejércitos y por sus famosos carros de guerra.
Jud 3:15 y ocupó sus ciudades, y se detuvo allí por espacio de treinta días, en cuyo intermedio mandó que se reuniese toda la fuerza de su ejército.
Jud 4:12 Acordaos de Moisés, siervo del Señor, el cual no por medio de las armas, sino suplicando con santas oraciones, derrotó a los amalecitas, que confiaban en su fuerza, y en su poder, y en sus ejércitos, y en sus escudos, y en sus carros de guerra, y en su caballería.
Jud 6:13 y que indignado el mismo Holofernes lo había mandado entregar a los israelitas, con el fin de hacerlo perecer a fuerza de varios suplicios, luego que éstos fueran vencidos, por haber dicho a Holofernes: El Dios del cielo es el defensor de los hijos de Israel.
Jud 7:2 Componían un ejército de ciento veinte mil soldados de infantería y veintidós mil de caballería, sin contar los que había hecho alistar de entre los cautivos, y toda la juventud que se había llevado por fuerza de las provincias y ciudades.
Jud 9:11 Levanta tu brazo, como ya otra vez hiciste, y con tu poder infinito estrella su fuerza; caiga por tierra todo el poder de ellos al golpe de tu ira, ya que presumenh violar tu santuario, y profanar el Tabernáculo dedicado a tu Nombre santo, y derribar con su espada la gloria de tu altar.
Jud 9:16 Que no consiste, Señor, tu poder en la multitud de escuadrones, ni te complaces en la fuerza de la caballería; desde el principio del mundo te han desagradado los soberbios habiéndote sido siempre grata la oración de los humildes y mansos.
Job 18:13 Acerbísima muerte devorará la belleza de sus carnes y consumirá la fuerza de sus brazos.
Job 22:8 Con la fuerza de tu brazo te pusiste en posesión de la tierra del vecino, y por ser más poderoso te alzaste con ella.