Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

cien

Gen 11:10 Esta es la descendencia de Sem: Sem era ya de cien años cuando engendró a Arfaxad, dos años después del diluvio.
Gen 17:17 Abrahán se postró sobre su rostro, y se sonrió, diciendo en su corazón: ¿Conque a un viejo de cien años le nacerá un hijo?; ¿y Sara de noventa ha de parir?
Gen 21:5 siendo entonces de cien años: pues en esta edad del padre nació Isaac.
Gen 33:19 Y compró la parte del campo en que había fijado sus tiendas de campaña, a los hijos de Hemor, padre de Siquem, por cien corderos.
Ex 27:11 Igualmente en el lado septentrional habrá también a lo largo cortinas de cien codos, veinte columnas, y otras tantas basas de bronce, y sus capiteles de plata con sus molduras.
Ex 27:18 En longitud ocupará el atrio cien codos, en anchura cincuenta, y su altura será de cinco codos. Sus cortinas se harán de torzal de lino fino, y tendrán basas de bronce.
Ex 38:9 Formó después el atrio, en cuyo lado meridional había cortinas tiradas por espacio de cien codos, tejidas de torzal de hilo fino,
Ex 38:26 Además de esto se contaron cien talentos de plata, de que se fundieron las basas de las columnas del santuario, y de la entrada, donde está pendiente el velo.
Ex 38:27 Cien basas se hicieron de los cien talentos, a talento por basa.
Lev 26:8 Cinco de los vuestros perseguirán a cien extraños y cien de vosotros a diez mil; vuestros enemigos caerán en vuestra presencia al filo de la espada.
Lev 26:8 Cinco de los vuestros perseguirán a cien extraños y cien de vosotros a diez mil; vuestros enemigos caerán en vuestra presencia al filo de la espada.
Núm 2:24 Todos los que se contaron en el campamento de Efraín, son ciento y ocho mil cien hombres, repartidos en sus escuadrones. Estos marcharán los terceros.
Deut 22:19 multándole además en cien siclos de plata, que dará al padre de la muchacha, por haber infamado gravísimamente a una virgen de Israel: y la retendrá por mujer; ni podrá repudiarla en todos los días de su vida.
Jos 24:32 Asimismo los huesos de José, que los hijos de Israel habían traído de Egipto, los sepultaron en Siquem en una parte de la heredad que compró Jacob a los hijos de Hemor, padre de Siquem, por cien corderos, y tocó en posesión a los hijos de José.
Juec 16:5 Vinieron luego a ella los príncipes de los filisteos, y le dijeron: Engáñale con caricias, y averigua de él de dónde le viene tan gran fuerza, y cómo le podremos sojuzgar para castigarle después de atado: que si lo consiguieres, te daremos cada uno mil cien siclos de plata.
Juec 17:2 el cual dijo a su madre: Los mil cien siclos de plata que habías apartado para ti, y acerca de los cuales jurabas, estando yo presente, que te los había hurtado, sábete que yo los tengo, y que están en mi poder. Le respondió ella: Colme el Señor a mi hijo de bendiciones.
Juec 20:35 En efecto, el Señor los castigó a la vista de los hijos de Israel, que mataron de ellos en aquel día veintincinco mil cien hombres, toda gente guerrera y valiente.
I Rey 18:25 Dijo entonces Saúl: Hablad así a David: El rey no necesita de dote para su hija; únicamente exige de ti la cabeza de cien incircuncisos filisteos, para vengarse así de sus enemigos. Pero el designio de Saúl era hacer caer a David en manos de los filisteos.
I Rey 25:18 Cogió, pues, Abigaíl, a toda prisa, doscientos panes, y dos pellejos de vino, y cinco carneros cocidos, y cinco medidas de grano tostado, y cien ataditos de pasas, y doscientos panes de higos secos, y lo cargó todo sobre sus asnos.
II Rey 3:14 En seguida envió David embajadores a Isboset, hijo de Saúl, diciendo: Restitúyeme mi mujer Micol, la cual se me dio por esposa, por haber muerto yo cien filisteos.
II Rey 8:4 e hizo mil setecientos prisioneros de a caballo, y veinte mil de a pie, desjarretando asimismo todos los caballos de los carros de guerra, sin dejar más que los necesarios para cien de éstos.
II Rey 16:1 Apenas hubo David bajado un poco de la cima del monte, se dejó ver Siba, criado de Mifiboset, que venía a su encuentro con dos asnos cargados de doscientos panes, y cien hilos de pasas, y cien panes de higos secos, y un pellejo de vino.
II Rey 16:1 Apenas hubo David bajado un poco de la cima del monte, se dejó ver Siba, criado de Mifiboset, que venía a su encuentro con dos asnos cargados de doscientos panes, y cien hilos de pasas, y cien panes de higos secos, y un pellejo de vino.
II Rey 18:4 Les dijo el rey: Haré lo que bien os pareciere. Y se puso en la puerta de la ciudad, mientras iba desfilando el ejército en cuerpos de a cien y de a mil hombres.
II Rey 24:3 Respondió Joab al rey: Así multiplique el Señor Dios tuyo a tu pueblo sobre lo que ahora es, de suerte que venga a ser cien veces más numeroso, y lo vea el rey mi señor; pero, ¿y qué es lo que pretende mi señor el rey con hacer eso?
III Rey 4:23 diez bueyes cebados y veinte de pasto, y cien carneros, sin contar la caza de ciervos, corzos, y búfalos, y aves cebadas, o volatería.
III Rey 7:2 Construyó asimismo la casa o palacio del bosque del Líbano que tenía cien codos de largo y cincuenta de ancho, y treinta de alto; y había cuatro galerías entre columnas de cedro; pues de los maderos de cedro había formado columnas.
III Rey 18:4 pues cuando Jezabel hacía matar a los profetas del Señor, recogió él cien profetas, y los escondió en cuevas, cincuenta en una cueva y cincuenta en otra; y los proveyó de pan y agua).
III Rey 18:13 ¿Por ventura, señor mío, no ha llegado a tu noticia lo que hice yo cuando Jezabel mataba a los profetas del Señor; cómo escondí a cien de estos profetas, cincuenta en una cueva y cincuenta en otra, proveyéndoles de pan y de agua?
III Rey 20:29 Entretanto los dos ejércitos por espacio de siete días estuvieron formados en batalla uno enfrente de otro, y al séptimo día se dio la acción: en la cual los hijos de Israel mataron de los siros en un día cien mil hombres de infantería.
IV Rey 3:4 Es de saber que Mesa, rey de Moab, criaba muchos ganados, y pagaba al rey de Israel cien mil corderos y cien mil carneros con sus vellones.
IV Rey 3:4 Es de saber que Mesa, rey de Moab, criaba muchos ganados, y pagaba al rey de Israel cien mil corderos y cien mil carneros con sus vellones.
IV Rey 4:43 A lo que respondió el criado: ¿Qué es todo eso para ponerlo delante de cien personas? Replicó Eliseo nuevamente: Dáselo a la gente para que coma; porque esto dice el Señor: Comerán, y sobrará.
IV Rey 23:33 Y el rey faraón Necao lo puso en cadenas en Rebla, situada en tierra de Emat, privándole del reino de Jerusalén ; y echó al país una contribución de cien talentos de plata y un talento de oro.
I Par 5:21 Y se apoderaron de todo cuanto poseían, cincuenta mil camellos, de doscientas cincuenta mil ovejas, de dos mil asnos, con cien mil prisioneros.
I Par 12:14 Estos eran de la tribu de Gad, y caudillos del ejército, y el que menos mandaba cien soldados, y mil el que más.
I Par 12:25 De los hijos de Simeón, varones fortísimos para la guerra, siete mil cien.
I Par 18:4 En consecuencia David le cogió mil carros de guerra de a cuatro caballos, y siete mil soldados de caballería, y veinte mil de infantería, y desjarretó todos los caballos de los carros, a excepción de cien tiros de cuatro caballos, que reservó para sí.
I Par 21:3 A lo que respondió Joab: Aumente el Señor su pueblo cien veces más de lo que es. Pero, ¿no es así, oh mi rey y señor, que todos son siervos tuyos? ¿A qué fin pretende mi señor hacer una cosa, que será perniciosa y acarreará el castigo a Israel?
I Par 21:5 y entregó a David la lista de los lugares que había recorrido; y se halló ser toda la suma de Israel un millón cien mil hombres de armas tomar, y de la tribu de Judá cuatrocientos setenta mil;
I Par 22:14 Ya ves que yo en mi pobreza he preparado para los gastos de la casa del Señor cien mil talentos de oro y un millón de talentos de plata; el bronce y el hierro es en tanta cantidad, que es incalculable; tengo prevenida mucha madera y piedra para todas las obras necesarias.
I Par 29:7 y dieron para las obras de la casa de Dios cinco mil talentos de oro, y diez mil sueldos o monedas de oro, y diez mil talentos de plata, y dieciocho mil de cobre, con cien mil talentos de hierro.
II Par 3:16 También hizo unas cadenillas, como las del santuario, que colocó sobre los capiteles de las columnas, con cien granadas mezcladas con las cadenillas.
II Par 4:8 Además diez mesas, y las puso en el templo, cinco a la derecha y cinco a la izquierda, e hizo igualmente cien tazas de oro.
II Par 25:6 Tomó también a su sueldo cien mil valientes de Israel, por cien talentos de plata.
II Par 25:6 Tomó también a su sueldo cien mil valientes de Israel, por cien talentos de plata.
II Par 25:9 Respondió Amasías al varón de Dios: ¿Pues y los cien talentos que he dado a los soldados de Israel? Le replicó el varón de Dios: Tiene el Señor de donde poder darte mucho más que eso.
II Par 27:5 Este hizo guerra al rey de los amonitas, a los cuales sujetó; por lo que le dieron por entonces los amonitas cien talentos de plata, diez mil coros o cargas de trigo, y otros tantos de cebada; esto mismo le dieron los amonitas el segundo y tercer año.
II Par 29:32 El número de los holocaustos ofrecidos por el pueblo fue éste: Setenta toros, cien carneros y doscientos corderos.
II Par 36:3 Porque el rey de Egipto, viniendo a Jerusalén lo depuso, y multó al país en cien talentos de plata y un talento de oro;