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Gen 3:11
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Le replicó: ¿Pues quién te ha hecho advertir que estás desnudo, sino el haber comido del fruto de que yo te había vedado que comieses?
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Gen 15:3
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Pues por lo que a mí toca, añadió Abram, no habiéndome tú concedido sucesión, he aquí que ha de ser mi heredero este siervo nacido en mi casa.
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Gen 15:5
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Y le sacó afuera y le dijo: Mira al cielo, y cuenta, si puedes, las estrellas. Pues así, le dijo, será tu descendencia.
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Gen 18:14
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Pues qué ¿hay para Dios cosa difícil? Al plazo prometido volveré a visitarte por este mismo tiempo, si Dios quiere, y Sara tendrá un hijo.
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Gen 18:19
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Pues bien sé que ha de mandar a sus hijos y a su familia después de sí, que guarden el camino del Señor, y obren según rectitud y justicia: para que cumpla el Señor por amor de Abrahán todas las cosas que le tiene prometidas.
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Gen 25:33
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Pues jurámelo, dijo Jacob . Esaú se lo juró y le vendió el derecho de primogenitura.
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Gen 27:25
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Pues tráeme acá, hijo mío, el plato de tu caza, para que te bendiga mi alma. Y habiéndoselo presentado, después que comió de él le sirvió también vino; bebido el cual,
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Gen 27:32
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Le dijo Isaac: Pues, ¿quién eres tú? El cual respondió: Yo soy tu hijo primogénito Esaú.
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Gen 27:36
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A lo que replicó Esaú: Con razón se le puso el nombre de Jacob : porque ya es ésta la segunda vez que me ha suplantado; antes ya se alzó con mi primogenitura, y ahora de nuevo me ha robado la bendición mía. Y vuelto a su padre: ¿Pues qué, le dijo, no has reservado bendición para mí?
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Gen 34:31
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Respondieron los hijos: Pues qué, ¿debieron ellos abusar de nuestra hermana como de una prostituta?
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Gen 37:8
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Respondieron sus hermanos: Pues qué, ¿has de ser tú nuestro rey?, ¿o hemos de estar sujetos nosotros a tu dominio? Así, pues, la materia de estos sueños y coloquios, fue fomento de la envidia y del odio.
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Gen 40:8
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Respondieron ellos: Hemos tenido un sueño y no hay quien nos lo interprete. Y les dijo José: Pues qué, ¿no es cosa propia de Dios la interpretación? Referidme lo que habéis visto.
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Gen 42:6
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Y en la tierra de Egipto mandaba José, y a su arbitrio se vendían los granos a los pueblos. Pues como sus hermanos le hubiesen adorado,
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Gen 44:23
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Pues si no viniere vuestro hermano menor con vosotros, nos dijiste tú a tus siervos, no tenéis que volver a mi presencia.
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Ex 5:23
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Pues desde que yo he venido a tratar con el faraón en tu nombre, ha afligido más a tu pueblo, y tú no lo has libertado.
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Ex 8:26
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No puede ser eso, respondió Moisés, por cuanto hemos de sacrificar al Señor Dios nuestro, animales, que entre los egipcios es un sacrilegio el matarlos. Pues si delante de sus ojos matáramos aquellos animales que ellos adoran, nos apedrearían como sacrílegos.
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Ex 9:15
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Pues esta vez, extendiendo mi mano te castigaré a ti y a tu pueblo con mortal pestilencia, y serás exterminado de la tierra.
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Ex 9:18
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Pues mira, mañana a esta misma hora, haré llover un horrible pedrisco, tal cual nunca se ha visto en Egipto desde que comenzó a ser habitado, hasta el presente.
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Ex 18:1
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Pues como hubiese oído Jetro, sacerdote de Madián, suegro de Moisés, todo lo que Dios había hecho a favor de Moisés y de Israel su pueblo, y cómo el Señor había sacado a Israel de Egipto,
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Ex 33:5
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Pues dijo el Señor a Moisés: Di a los hijos de Israel: Eres pueblo de dura cerviz; si yo llego una vez a aparecer en medio de ti, te exterminaré. Ahora bien, quítate tus atavíos para ver qué tengo de hacer contigo.
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Ex 33:16
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¿Pues en qué podremos conocer yo y tu pueblo haber hallado gracia en tu acatamiento, si no vienes con nosotros, para que seamos respetados de todos los pueblos que habitan en la tierra?
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Lev 7:34
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Pues de la carne de las hostias pacíficas de los hijos de Israel he reservado el pecho que se eleva u ofrece delante de mí, y la espaldilla que se ha separado; y lo he dado al sacerdote Aarón y a sus hijos por ley perpetua de todo el pueblo de Israel.
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Núm 11:13
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¿De dónde tengo yo de sacar carnes para dar de comer a tanta gente? Pues lloran y murmuran contra mí, diciendo: Danos carnes para comer.
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Núm 11:23
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Le replicó el Señor: Pues que, ¿acaso flaquea la mano del Señor? Bien presto verás si tiene efecto mi palabra.
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Núm 12:2
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y dijeron: Pues que, ¿por ventura el Señor ha hablado solamente por boca de Moisés?; ¿acaso no nos ha hablado igualmente a nosotros? Lo que oyendo el Señor,
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Núm 12:8
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porque yo a él le hablo boca a boca, y él ve claramente al Señor, y no por enigmas o figuras. ¿Pues cómo os habéis atrevido a hablar mal de mi siervo Moisés?
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Núm 13:22
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Y subiendo hacia el mediodía vinieron a Hebrón, donde estaban Acimán, y Sisai, y Tolmai, hijos de Enac. Pues Hebrón fue fundada siete años antes que Tanaís, ciudad de Egipto.
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Núm 14:3
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Ojalá hubiéramos muerto en Egipto; y haga el cielo que perezcamos en esta vasta soledad, y no nos introduzca Dios en esa tierra, donde muramos al filo de la espada, y sean llevados cautivos nuestras mujeres y niños. ¿Pues no será mejor volvernos a Egipto?
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Núm 16:13
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Pues que, ¿te parece aún poco el habernos sacado de una tierra que manaba leche y miel, para hacernos morir en el desierto, sino que además de eso nos has de estar tiranizando?
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Núm 22:30
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Dijo la burra: ¿Pues no soy yo tu pollina, sobre la cual has solido ir siempre montado hasta el día de hoy? Di si jamás te he hecho una tal cosa. Jamás, le respondió él.
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Núm 23:12
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Pero él respondió: Pues que, ¿puedo hablar yo otra cosa sino lo que me ha ordenado el Señor?
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Núm 23:26
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Pues que, respondió Balaam , ¿no te dije que yo habría de hacer todo cuanto el Señor me mandase?
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Núm 24:12
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Respondió Balaam a Balac: ¿Pues no dije yo a tus mensajeros que me enviaste:
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Núm 32:6
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Les respondió Moisés: Pues que, ¿han de ir vuestros hermanos a la guerra, y vosotros habéis de quedaron aquí sentados?
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Núm 32:15
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Pues si no queréis seguirle abandonará al pueblo en el desierto, y vosotros vendréis a ser la causa del exterminio de todos.
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Deut 4:6
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y los observaréis y pondréis en ejecución. Pues tal debe ser vuestra sabiduría y cordura delante de las gentes, que oyendo referir todos aquellos preceptos, digan: Ved aquí un pueblo sabio y entendido, una gente esclarecida.
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Deut 4:20
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Pues a vosotros el Señor os escogió, y os sacó de Egipto, como de una fragua en que se derrite el hierro, para tener un pueblo que sea su posesión hereditaria, conforme lo sois vosotros al presente.
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Deut 4:46
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en esta parte del Jordán en el valle fronterizo al templo del ídolo Fogor en la tierra de Sehón, rey amorreo, que habitó en Hesebón, a quien destruyó Moisés. Pues los hijos de Israel que salieron de Egipto,
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Deut 9:3
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Pues has de saber hoy que irá delante de ti el mismo Dios tuyo, fuego devorador y consumidor, que los ha de desmenuzar y consumir, y disipar delante de tus ojos rápidamente, como te lo ha prometido.
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Deut 9:8
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Pues ya en Horeb lo provocaste, y airado te quiso destruir,
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Deut 22:17
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le imputa un delito muy feo, diciendo: No he hallado virgen a tu hija. Pues ved aquí las señales de la virginidad de mi hija; y desplegarán la ropa delante de los ancianos de la ciudad.
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Deut 29:16
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Pues bien sabéis de qué manera hemos vivido en la tierra de Egipto, y cómo hemos atravesado por medio de las naciones, donde al pasar
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Jos 11:10
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Dio luego la vuelta, y tomó a Asor, y degolló a su rey. Pues Asor de tiempo antiguo tenía el principado entre todos estos reinos.
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Jos 14:3
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Pues que a las otras dos tribus y media les tenía dado ya Moisés su porción a la otra parte del Jordán: sin contar con los levitas, quienes no recibieron porción alguna de tierra entre sus hermanos,
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Jos 23:15
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Pues así como de hecho ha cumplido lo que prometió, y todo os ha sucedido prósperamente, así también descargará sobre vosotros todos los males con que os ha amenazado, hasta arrancaros y exterminaros de esta fertilísima tierra que os ha dado,
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Jos 24:20
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Pues en el caso de que abandonéis al Señor, y sirváis a dioses ajenos, se volverá contra vosotros, y os afligirá y os arruinará, por más beneficios que os haya hecho.
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Juec 1:7
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Pues los hijos de Judá habiendo atacado a Jerusalén , la tomaron, e hicieron en ella gran mortandad; y entregaron toda la ciudad a las llamas.
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Juec 1:22
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Pues cuando estaban sitiando esta ciudad, que antes se llamaba Luza,
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Juec 6:3
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Pues cuando los israelitas habían hecho la sementera se presentaban los madianitas, los amalecitas y los otros pueblos orientales,
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Juec 7:5
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Pues como las tropas bajasen al agua, dijo el Señor a Gedeón: Los que bebieron el agua llevada a su boca con la mano, como la cogen los perros con la lengua, los separarás a un lado; mas los que hubieren puesto las rodillas en tierra para beber con más comodidad, quedarán en otra parte.
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