Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

Jeremías

IV Rey 23:31 Veintitrés años tenía Joacaz cuando comenzó a reinar, y reinó tres meses en Jerusalén ; su madre se llamaba Amital, hija de Jeremías, de Lobna.
IV Rey 24:18 Veintiún años tenía Sedecías cuando comenzó a reinar, y reinó once años en Jerusalén ; se llamaba su madre Amital, hija de Jeremías, de Lobna.
I Par 5:24 Los príncipes o cabezas de sus familias fueron: Efer, y Jesí, y Eliel, y Ezriel, y Jeremías, y Odoías, y Jediel, varones esforzados y poderosos, y caudillos muy celebrados en sus familias.
I Par 12:4 Asimismo Samaías, de Gabaón el más valiente de los treinta y cabeza de los treinta; Jeremías y Jeheziel, y Johanán; y Jezabad de Gaderot.
I Par 12:10 Masmana el cuarto, Jeremías el quinto,
I Par 12:13 Jeremías el décimo, Macbanai, el undécimo.
II Par 35:25 sobre todo Jeremías, cuyas lamentaciones sobre Josías repiten todos los cantores y cantoras hasta hoy día, tanto que ha venido a ser este uso como una ley en Israel. Se hallan escritas estas cosas entre las Lamentaciones.
II Par 36:12 E hizo el mal delante de los ojos del Señor su Dios, ni respetó a Jeremías profeta, que le hablaba de parte del Señor.
II Par 36:21 y llegó el cumplimiento de la palabra del Señor, pronunciada por Jeremías, y la tierra hubo celebrado sus sábados; pues todo el tiempo de su desolación estuvo en sábado o descanso continuo, hasta que se cumplieron los setenta años.
II Par 36:22 Mas el año primero de Ciro, rey de los persas, en cumplimiento de la palabra del Señor pronunciada por boca de Jeremías, movió el Señor el corazón de Ciro, rey de los persas; el cual mandó publicar en todo su reino por escrito, este decreto:
I Esd 1:1 El año primero del imperio de Ciro, rey de los persas, para que se cumpliese la palabra del Señor, pronunciada por Jeremías, movió el Señor el ánimo de Ciro, rey de los persas, el cual hizo publicar por todo su reino, aun por escrito, el siguiente decreto:
II Esd 10:2 Saraías, Azarías, Jeremías,
II Esd 12:1 Estos son los sacerdotes y los levitas que vinieron con Zorobabel, hijo de Salatiel, con Josué: Saraía, Jeremías, Esdras,
II Esd 12:12 Y en el templo de Joacim los sacerdotes cabezas de las familias sacerdotales eran: De la de Saraías, Maraía; de la de Jeremías, Hananía;
II Esd 12:34 Judas, y Benjamín, y Semeía, y Jeremías.
Salm 64:1 Para el fin: Salmo de David. Cántico de Jeremías y de Ezequiel para el pueblo transportado al cautiverio, cuando empezaba a salir de él.
Ecli 49:8 Por lo mismo incendiaron los caldeos la escogida y santa ciudad, y redujeron sus calles a un desierto, según la predicción de Jeremías.
Jer 1:1 Palabras o profecías de Jeremías, hijo de Helcías, uno de los sacerdotes que habitaban en Anatot, ciudad de la tierra o tribu de Benjamín.
Jer 1:11 Luego me habló el Señor, y dijo: ¿Qué es eso que ves tú, Jeremías? Yo estoy viendo, respondí, la vara de uno que está vigilante.
Jer 5:14 Esto me dice el Señor Dios de los ejércitos: Porque habéis proferido vosotros tales palabras, he aquí, ¡oh Jeremías!, que yo desde ahora pongo en tu boca mis palabras cual fuego devorador, y le doy ese pueblo por leña para que sea de él consumido.
Jer 6:27 A ti, Jeremías, te he constituido cual robusto examinador en medio de mi pueblo; y tú examinarás y harás prueba de sus procederes.
Jer 7:1 Palabras que habló el Señor a Jeremías, diciendo:
Jer 7:16 Así, pues, no tienes tú, Jeremías, que interceder por este pueblo, ni te empeñes por ellos en cantar mis alabanzas y rogarme; ni te me opongas, porque no he de escucharte.
Jer 9:6 Tú, ¡oh Jeremías!, vives rodeado de engañadores; porque aman el dolo, rehúsan conocerme a mí, dice el Señor.
Jer 9:22 Diles, pues tú, Jeremías: Así habla el Señor: Los cadáveres humanos quedarán tendidos por el suelo, como el estiércol sobre un campo, y como el heno que tira tras de sí el segador, sin que haya quien lo recoja.
Jer 11:1 Palabras que dirigió el Señor a Jeremías, diciendo:
Jer 11:3 y tú, ¡oh Jeremías!, les dirás: Esto dice el Señor Dios de Israel: Maldito será el hombre que no escuchare las palabras de este pacto;
Jer 11:5 a fin de renovar y cumplir el juramento que hice a vuestros padres de darles una tierra que manase leche y miel, como se ve cumplido hoy día. A lo cual respondí yo Jeremías, y dije: ¡Así sea, oh Señor!
Jer 14:1 Palabras que habló el Señor a Jeremías sobre el suceso de la sequedad.
Jer 18:1 Orden dada a Jeremías por el Señor, diciendo:
Jer 18:18 Mas ellos dijeron entonces: Venid y tratemos seriamente de obrar contra Jeremías, porque a pesar de lo que él predice, no nos faltará la explicación de la ley de boca del sacerdote, ni el consejo del sabio, ni la palabra del profeta. Venid, pues, atravesémosle con los dardos de nuestra lengua, y no hagamos caso de ninguna de sus palabras.
Jer 19:14 En seguida volvió Jeremías de Tofet, a donde le había enviado el Señor a profetizar, y se paró en el atrio del templo del Señor, y dijo a todo el pueblo:
Jer 20:1 Y Fasur, hijo o descendiente del sacerdote Emmer, y que era uno de los prefectos de la casa del Señor, oyó a Jeremías que profetizaba tales cosas.
Jer 20:2 E irritado Fasur hirió al profeta Jeremías, y lo puso en el cepo, que estaba en la puerta superior de Benjamín, en la casa del Señor.
Jer 20:3 Al amanecer del siguiente día, sacó Fasur del cepo a Jeremías; el cual le dijo: El Señor no te llama ya Fasur, sino el Espantado por todas partes.
Jer 21:1 He aquí lo que respondió el Señor a Jeremías, cuando el rey Sedecías le envió a decir por Fasur, hijo de Melquías, y por el sacerdote Sofonías, hijo de Maasías, lo siguiente:
Jer 21:3 Y Jeremías les respondió: Así diréis a Sedecías:
Jer 23:9 En orden a los falsos profetas, mi corazón, dijo Jeremías, se despedaza en medio de mi pecho, desencajados tengo todos mis huesos; me hallo como un ebrio, como un hombre tomado del vino, al considerar el enojo del Señor y a vista de sus santas palabras.
Jer 24:3 Y me dijo el Señor: ¿Qué es lo que ves, Jeremías? Yo respondí: Higos, higos buenos, y tan buenos que no pueden ser mejores; y otros malos, muy malos, que no se pueden comer de puro malos.
Jer 25:1 Profecía que se reveló a Jeremías, acerca de todo el pueblo de Judá, en el año cuarto de Joakim, hijo de Josías, rey de Judá; que es el año primero de Nabucodonosor, rey de Babilonia;
Jer 25:2 la cual predicó Jeremías, profeta, a todo el pueblo de Judá y a todos los habitantes de Jerusalén , diciendo:
Jer 25:13 Yo verificaré sobre aquella tierra todas las palabras que he pronunciado contra ella; todo lo que está escrito en este libro, todas cuantas cosas ha profetizado Jeremías contra todas las naciones,
Jer 25:27 Y tú, ¡oh Jeremías!, les dirás: Esto dice el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: Bebed y embriagaos hasta vomitar, y echaos por el suelo, y no os levantéis a la vista de la espada que yo voy a enviar contra vosotros.
Jer 26:7 Oyeron los sacerdotes y los profetas y el pueblo todo cómo Jeremías anunciaba tales cosas en la casa del Señor.
Jer 26:8 Y así que hubo concluido Jeremías de hablar cuanto le había mandado el Señor que hiciese saber a todo el pueblo, la prendieron los sacerdotes y los falsos profetas, y el pueblo todo, diciendo: ¡Muera sin remedio!
Jer 26:9 ¿Cómo ha osado profetizar en el nombre del Señor, diciendo: Este templo será destruido como Silo, y esta ciudad quedará de tal manera asolada que no habrá quien la habite? Y todo el pueblo se amotinó contra Jeremías en la casa del Señor.
Jer 26:12 Pero Jeremías habló en estos términos a todos los príncipes y al pueblo todo: El Señor me ha enviado para que profetizara contra esta casa y contra esta ciudad todas las palabras que habéis oído.
Jer 26:20 Hubo también un varón llamado Urías, hijo de Semei, natural de Cariatiarim, que profetizaba en el nombre del Señor, y profetizó contra esta ciudad y contra este país todo lo que ha dicho Jeremías.
Jer 26:24 El auxilio, pues, de Ahicam, hijo de Safán, protegió a Jeremías, para que no fuese entregado en manos del pueblo y le matasen.
Jer 27:1 Al principio del reinado de Joakim, hijo de Josías, rey de Judá, el Señor habló a Jeremías de esta manera: