Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

siros

Gen 22:21 Hus el primogénito, y Buz hermano de éste, y Camuel padre de los siros,
II Rey 8:5 Acudieron los siros de Damasco a socorrer a Adarecer, rey de Soba, y David pasó a cuchillo a veintidós mil de ellos.
II Rey 10:8 Salieron, pues, los amonitas, y se formaron en batalla frente a la entrada de la puerta de la ciudad; pero los siros de Soba y de Rohob, de Istob y de Maaca estaban aparte en el campo.
II Rey 10:9 Viendo, pues, Joab que iban a acometerle de frente y por retaguardia, escogió entre todos los soldados de Israel a los más valientes, y se puso en orden de batalla contra los siros.
II Rey 10:11 Y le dijo Joab: Si los siros prevalecieren contra mí, tú vendrás a socorrerme; y si los amonitas prevalecieren contra ti, iré yo a auxiliarte.
II Rey 10:13 Con esto Joab atacó con sus tropas a los siros; los cuales huyeron al instante volviéndole las espaldas.
II Rey 10:14 Y cuando los hijos de Amón vieron que los siros habían huido, echaron también ellos a huir de delante de Abisai, retirándose a la plaza. Y Joab dejó el país de los hijos de Amón, y volvió a Jerusalén .
II Rey 10:15 Entretanto los siros viéndose derrotados por Israel, volvieron a rehacerse.
II Rey 10:16 Adarecer hizo venir a los siros que habitaban a la otra parte del río, y juntó de ellos un ejército al mando de Sobac, general de las armas de Adarecer.
II Rey 10:17 Avisado de esto David, reunió todas las tropas de Israel; pasó el Jordán, y fue a Helam; y los siros presentando la batalla a David pelearon contra él.
II Rey 10:18 Pero Israel los puso en fuga, y destrozó David setecientos carros de los siros y cuarenta mil caballos; e hirió al capitán general Sobac, que murió al instante.
II Rey 10:19 Pues como todos aquellos reyes que seguían el partido de Adarecer se viesen vencidos por Israel, se llenaron de pavor, y volvieron las espaldas a presencia de Israel cincuenta y ocho mil hombres. Al fin hicieron paces con los israelitas, y se les sujetaron; y no se atrevieron más los siros a prestar socorro a los amonitas.
III Rey 20:20 y cada uno de ellos mató al que se le puso delante; con lo que huyeron los siros, y fue Israel persiguiéndolos. Huyó también Benadad, rey de Siria, a uña de caballo, con los de su caballería.
III Rey 20:21 Y saliendo asimismo el rey de Israel, derrotó caballos y carros, haciendo un gran estrago en los siros.
III Rey 20:26 Pasado, pues, un año hizo Benadad revista de los siros, y salió a campaña y fue a Afec para pelear contra Israel.
III Rey 20:27 Se pasó también revista de los hijos de Israel, los cuales prevenidos de víveres marcharon al encuentro de sus enemigos, y acamparon enfrente de ellos, a manera de dos pequeños hatos de cabras; al paso que los siros inundaron todo el país.
III Rey 20:28 Entonces un varón de Dios vino a encontrar al rey de Israel, y le dijo: Esto dice el Señor: Por cuanto han dicho los siros: El Señor es Dios de los montes y no es Dios de los valles, por lo mismo yo entregaré en tu mano toda esa gran muchedumbre; con lo que acabaréis de conocer que yo soy el Señor.
III Rey 20:29 Entretanto los dos ejércitos por espacio de siete días estuvieron formados en batalla uno enfrente de otro, y al séptimo día se dio la acción: en la cual los hijos de Israel mataron de los siros en un día cien mil hombres de infantería.
III Rey 22:35 Se dio, pues, la batalla aquel día; y el rey de Israel, aunque herido, estaba en su carroza, vuelto de cara a los siros. Pero murió por la tarde, habiendo corrido la sangre de la herida hasta el fondo de la carroza.
IV Rey 7:4 Si tratamos de entrar en la ciudad, moriremos de hambre; si nos quedamos aquí, moriremos también; vamos, pues, y pasémonos al campamento de los siros; si tuvieren compasión de nosotros, viviremos; que si nos quieren matar, de cualquier modo también habríamos de morirnos acá.
IV Rey 7:5 Con esto al anochecer se pusieron en camino para pasar al campamento de los siros; y llegados que fueron a la entrada del campo de los siros, no hallaron allí a nadie.
IV Rey 7:5 Con esto al anochecer se pusieron en camino para pasar al campamento de los siros; y llegados que fueron a la entrada del campo de los siros, no hallaron allí a nadie.
IV Rey 7:6 Porque el Señor había hecho resonar en los campamentos de los siros estruendo de carros falcados y de caballos, y de un numerosísimo ejército; con lo que se dijeron unos a otros: Sin duda el rey de Israel ha asalariado contra nosotros a los reyes de los heteos y de los egipcios, y se han echado sobre nosotros.
IV Rey 7:10 Venidos a la puerta de la ciudad, dieron la noticia diciendo: Hemos ido al campamento de los siros, y no hemos hallado allí a nadie, sino sólo los caballos y los asnos atados, y las tiendas que están todavía en pie.
IV Rey 7:12 el cual se levantó, siendo aún de noche, y dijo a sus criados: Yo os diré lo que han hecho con nosotros los siros; saben que nos morimos de hambre, y por eso se han salido del campamento, y están escondidos por los campos, diciendo: Cuando salgan de la ciudad, los cogeremos vivos, y entonces podremos entrar en ella.
IV Rey 7:14 Trajeron, pues, dos caballos, y envió el rey dos hombres al campamento de los siros, diciendo: Id y observad lo que hay.
IV Rey 7:15 Los cuales marcharon, y fueron siguiendo a los siros hasta el Jordán, y vieron cómo todo el camino estaba lleno de vestidos y de muebles, que los siros habían arrojado con la precipitación de la huida; y volviéndose los enviados dieron parte al rey.
IV Rey 7:15 Los cuales marcharon, y fueron siguiendo a los siros hasta el Jordán, y vieron cómo todo el camino estaba lleno de vestidos y de muebles, que los siros habían arrojado con la precipitación de la huida; y volviéndose los enviados dieron parte al rey.
IV Rey 7:16 Entonces el pueblo salió, y saqueó los campamentos de los siros; y de resultas un modio de flor de harina valió un siclo y un siclo dos modios de cebada, conforme a la palabra del Señor.
IV Rey 8:28 Se asoció con Joram, hijo de Acab, para hacer la guerra contra Hazael, rey de Siria, en Ramot de Galaad; e hirieron los siros a Joram,
IV Rey 8:29 el cual se volvió a Jezrael a curarse las heridas que le habían hecho los siros en el sitio de Ramot cuando peleaba contra Hazael, rey de Siria. Y Ocozías, hijo de Joram, rey de Judá, pasó a Jezrael a visitar a Joram, hijo de Acab, porque estaba allí enfermo.
IV Rey 9:15 y se había retirado de Jezrael para curarse de las heridas que los siros le habían hecho en el combate contra Hazael, el rey de Siria. Dijo entonces Jehú: Si os parece, nadie salga ni huya de la ciudad, para que no vaya a dar la noticia en Jezrael.
IV Rey 24:2 Entonces el Señor envió contra él cuadrillas de tropa ligera de caldeos, cuadrillas de siros, y cuadrillas de moabitas, y cuadrillas de amonitas; a los cuales envió contra Judá, a fin de destruirlo, conforme lo había predicho el Señor por boca de sus siervos los profetas.
I Par 18:5 Y habiendo sobrevenido los siros de Damasco para socorrer a Adarecer, rey de Soba, les mató David veintidós mil hombres.
I Par 19:10 Joab, pues, conociendo que querían atacarlo de frente y por la espalda, escogió los más valientes de todo Israel, y se dirigió contra los siros.
I Par 19:12 y dijo: Si los siros prevalecieren contra mí, tú vendrás a socorrerme; pero si los amonitas te llevaren a ti de vencida, yo acudiré a tu socorro.
I Par 19:14 Marchó, pues, Joab y la gente que con él estaba al combate contra los siros, y los puso en huida.
I Par 19:15 Viendo los amonitas que los siros habían huido, huyeron ellos también de Abisaí, hermano de Joab, y se metieron en la ciudad. Y volvió también Joab a Jerusalén .
I Par 19:16 Mas viéndose los siros vencidos por Israel, despacharon mensajeros e hicieron venir a los siros que habitaban a la otra parte del río Eufrates; y Sofac, general de las tropas de Adarecer, era su comandante.
I Par 19:16 Mas viéndose los siros vencidos por Israel, despacharon mensajeros e hicieron venir a los siros que habitaban a la otra parte del río Eufrates; y Sofac, general de las tropas de Adarecer, era su comandante.
I Par 19:18 En fin, volvieron los siros las espaldas a Israel, y mató David a siete mil hombres de los que iban montados en carros, y cuarenta mil de a pie, y a Sofac, general de este ejército.
II Par 18:34 Con esto se acabó en aquel día la guerra. El rey de Israel se mantuvo en su coche hasta la tarde, enfrente a los siros, y murió al ponerse el sol.
II Par 22:5 Y se gobernó por sus consejos. Y salió con Joram, hijo de Acab, rey de Israel, a la guerra contra Hazael, rey de Siria, en Ramot de Galaad, donde los siros hirieron a Joram.
II Par 24:24 A la verdad, aunque los siros habían venido en cortísimo número, el Señor entregó en sus manos una multitud inmensa de hijos de Israel, por haber abandonado al Señor Dios de sus padres. También Joás fue maltratado por ellos de un modo ignominioso;
Amós 9:7 Pues vosotros, ¡oh hijos de Israel!, dice el Señor, ¿no sois lo mismo para conmigo que los hijos de los etíopes? ¿No hice yo salir a Israel de Egipto, al modo que transporté de la Capadocia a los palestinos, y de Cirene a los siros?