Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

maná

Ex 16:21 Recogía, pues, cada uno de madrugada cuanto le podía bastar para su mantenimiento; y calentando el sol, se derretía el maná del campo.
Ex 16:24 Lo hicieron como Moisés lo había mandado, y el maná no se pudrió, ni se halló en él gusano alguno.
Ex 16:32 Dijo también Moisés: Esto es lo que ha mandado el Señor: Llena de maná un gomor, y guárdese para las generaciones venideras, a fin de que vean el pan con que yo os sustenté en el desierto después de que os saqué de la tierra de Egipto.
Ex 16:33 Dijo, pues, Moisés a Aarón: Toma un vaso, y echa en él todo el maná que pueda caber en tu gomor, y colócale delante del Señor, para que se conserve en vuestra posteridad,
Ex 16:35 Y los hijos de Israel comieron maná por espacio de cuarenta años, hasta que llegaron a tierra poblada en que debían habitar: con este manjar fueron alimentados hasta que tocaron los confines de la tierra de Canaán.
Núm 11:6 Seca está ya nuestra alma; nada ven nuestros ojos, sino maná.
Núm 11:7 Era el maná semejante a la grana del cilantro, del color del bedelio o rubicundo,
Núm 11:9 Y cuando por la noche caía el rocío en el campo, caía también al mismo tiempo el maná.
Deut 8:3 Te afligió con hambre y te dio el maná, manjar que no conocías tú, ni tus padres, para mostrarte que el hombre no vive de solo pan, sino de cualquier cosa que Dios dispusiere.
Deut 8:16 y te alimentó en el desierto con el maná manjar desconocido de tus padres: y después de haberte afligido y probado, al fin se compadeció de ti;
Deut 29:6 No habéis comido pan, ni bebido vino o sidra, a fin de que por el maná conocierais que yo soy el Señor Dios vuestro.
Jos 5:12 Y luego que ya comieron de los frutos de la tierra, faltó el maná; ni usaron más los hijos de Israel de tal manjar, sino que se alimentaron de los frutos que había producido aquel año la tierra de Canaán.
II Esd 9:20 Les diste tu espíritu bueno que los instruye por medio de Moisés, y no quitaste tu maná de la boca, y cuando sedientos, les diste agua.
Salm 77:24 y les llovió el maná para comer, dándoles pan del cielo.
Sab 16:25 Por eso entonces también el maná, criatura tuya, tomando el gusto de todos los manjares, servía a tu benéfica voluntad sustentadora de todos, acomodándose al deseo de aquellos que a ti recurrían;
Sab 16:27 Y en verdad que aquel maná que no podía ser consumido del fuego, calentado al más leve rayo del sol, luego se deshacía;"
Sab 19:20 Al contrario, las llamas no dañaban los cuerpos de los animales, de suyo combustibles, que andaban dentro de ellas, ni derretían el maná, aquel delicioso manjar, que se deshacía tan fácilmente como la escarcha. Así que, ¡oh Señor!, en todo y por todo engrandeciste a tu pueblo, y lo honraste, y no te desdeñaste de asistirle en todo tiempo y en todo lugar.
Jn 6:31 Nuestros padres comieron el maná en el desierto, según está escrito: Les dio a comer pan del cielo.
Jn 6:49 Vuestros padres comieron el maná en el desierto, y murieron.
Jn 6:58 Este es el pan que ha bajado del cielo. No sucederá como a vuestros padres, que comieron el maná, y no obstante murieron. Quien come este pan, vivirá eternamente.
II Cor 8:15 El que recogía mucho maná, no se hallaba con más; ni con menos de lo necesario el que recogía poco.
Heb 9:4 que contenía un incensario de oro; y el arca del Testamento cubierta de oro por todas partes, y allí se guardaba el vaso de oro que contenía el maná, y la vara de Aarón, que floreció, y las tablas de la ley o de la alianza;
Apoc 2:17 El que tiene oído, escuche lo que dice el Espíritu a las iglesias: Al que venciere le daré yo a comer un maná recóndito, y le daré una piedrecita blanca, y en la piedrecita esculpido un nombre nuevo, que nadie lo sabe, sino aquel que le recibe.