I Rey 25:26
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Ahora pues, mi señor, vive Dios, y vive tu alma, que el Señor es quien te ha estorbado, haciéndome salir a mí, el derramar sangre, y te ha detenido la mano. Que sean desde luego tan débiles como Nabal tus enemigos, y cuantos maquinan contra mi señor.
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I Rey 25:33
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Bendita seas tú que me has estorbado hoy en ir a derramar sangre, y a tomarme la venganza por mi mano.
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Gál 5:7
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Vosotros habíais comenzado bien vuestra carrera, ¿quién os ha estorbado de obedecer a la verdad?
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I Tes 2:18
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Por eso quisimos pasar a visitaros; y en particular yo, Pablo, he estado resuelto a ello más de una vez; pero Satanás nos lo ha estorbado.
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