Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

estatua

Gen 19:26 Pero la mujer de Lot volviéndose a mi-rar hacia atrás, quedó convertida en estatua de sal.
Deut 4:16 para que no fuera que engañados os formaseis alguna estatua esculpida, o imagen de hombre o de mujer;
Deut 5:8 No te esculpirás estatua ni figura ninguna de las cosas que hay arriba en el cielo, o acá abajo en la tierra, o se mantienen en las aguas más abajo de la tierra.
Deut 16:22 No te fabricarás ni erigirás estatua; porque tu Señor Dios tuyo aborrece todas estas cosas.
Juec 18:17 Pero los que habían entrado en la vivienda del joven se empeñaron en llevarse la estatua de talla, el efod y los terafim, y la imagen hecha de fundición, mientras el sacerdote estaba en la puerta con algunos que le entretenían, y los seiscientos varones esforzados aguardaban no lejos de allí.
Juec 18:18 En fin, los que habían entrado se llevaron la estatua de talla, el efod, los ídolos y la imagen de fundición, a los cuales les dijo el sacerdote: ¿Qué es lo que hacéis?
Juec 18:20 Oído lo cual, cedió a estas razones, y tomando el efod, y los ídolos, y la estatua de talla, fuese con ellos.
I Rey 19:13 En seguida tomó Micol una estatua o bulto, y la puso sobre la cama de David, y le envolvió la cabeza con una piel peluda de cabra, y cubrió la estatua con la ropa de la cama.
I Rey 19:13 En seguida tomó Micol una estatua o bulto, y la puso sobre la cama de David, y le envolvió la cabeza con una piel peluda de cabra, y cubrió la estatua con la ropa de la cama.
I Rey 19:16 Llegados que fueron allí los enviados de Saúl, hallaron que en la cama sólo había una estatua o bulto, que tenía envuelta la cabeza con una piel de cabra.
IV Rey 10:26 y sacaron fuera del templo la estatua de Baal, y la quemaron y redujeron a cenizas.
Salm 105:19 Hicieron un becerro en Horeb, y adoraron aquella estatua fundida.
Sab 10:7 cuya tierra, en testimonio de las maldades de ella, persevera desierta, humeando, y los árboles dando frutos sin sazón, y fija la estatua de sal, por padrón de un alma incrédula.
Sab 13:15 y haciendo después para la estatua un nicho conveniente, la coloca en la pared, y la afirma con clavos,
Isa 40:20 El hábil artífice escoge una madera dura e incorruptible; y procura afianzar la estatua, de modo que no caiga.
Isa 41:7 El broncista que trabaja a martillo, esforzaba al que batía en el yunque diciendo: Bien hecha está la soldadura; ahora asegura con clavos la estatua del ídolo, para que no se mueva.
Isa 44:10 ¿Quién es, pues, tan insensato que pensó formar un dios, y fundió una estatua que para nada sirve?
Isa 44:15 Y se sirve de estos árboles el hombre para el hogar; toma parte de ellos, y se calienta, y con su fuego cuece el pan; pero de lo restante fabrica un dios y lo adora; hace una estatua y se postra delante de ella.
Isa 44:17 Mas del resto del árbol forma para sí un dios y una estatua; se postra delante de ella, y la adora y la suplica diciendo: Sálvame, porque tú eres mi dios.
Isa 45:20 Reuníos y venid, y acercaos todos vosotros que habéis salido salvos de entre las naciones; confesad que son unos necios los que levantan una estatua de madera que han tallado ellos mismos y dirigen sus plegarias a un dios que no los puede salvar.
Jer 10:5 Esta estatua ha salido recta y firme, como el tronco de una palmera; pero no habla; y la toman y la llevan donde quieren; porque ella de por sí no puede moverse. No temáis, pues, tales cosas o ídolos, pues que no pueden hacer ni mal ni bien.
Jer 10:9 Se trae de Tarsis la plata en planchas arrolladas, y el oro de Ofaz; lo trabaja la mano del artífice y del platero; es vestida luego la estatua de jacinto y de púrpura. Obra de artífice es todo eso.
Jer 10:14 Necio se hizo todo hombre con su ciencia de los ídolos; la misma estatua del ídolo es la confusión de todo artífice; pues no es más que falsedad lo que ha formado, un cuerpo sin alma.
Jer 51:17 En necio paró todo hombre con su saber. La estatua misma del ídolo es la confusión de todo artífice; porque cosa mentirosa es la obra que él ha hecho; no hay en ella espíritu de vida.
Dan 2:31 Tú, ¡oh rey!, tuviste una visión; y te parecía que veías como una gran estatua, y esta estatua gran y de elevada altura estaba derecha enfrente de ti; y su presencia era espantosa.
Dan 2:31 Tú, ¡oh rey!, tuviste una visión; y te parecía que veías como una gran estatua, y esta estatua gran y de elevada altura estaba derecha enfrente de ti; y su presencia era espantosa.
Dan 2:32 La cabeza de esta estatua era de oro finísimo; el pecho y los brazos de plata; mas el vientre y los muslos de cobre o bronce;
Dan 2:34 Así la veías tú cuando, sin que mano alguna la moviese, se desgajó del monte una piedra, la cual hirió la estatua en sus pies de hierro y de barro cocido, y los desmenuzó.
Dan 2:35 Entonces se hicieron pedazos igualmente el hierro, el barro, el cobre, la plata y el oro, y quedaron reducidos a ser como el tamo de una era en el verano, que el viento esparce; y así no quedó nada de ellos. Pero la piedra que había herido a la estatua se hizo una gran montaña, y llenó toda la tierra.
Dan 3:1 Hizo el rey Nabucodonosor una estatua de oro de sesenta codos de altura y seis de anchura, y la puso en el campo de Dura, en la provincia de Babilonia.
Dan 3:2 Mandó, pues, el rey Nabucodonosor juntar los sátrapas, magistrados y jueces, los capitanes y grandes señores, y los prefectos y los gobernadores todos de las provincias, para que asistiesen a la dedicación de la estatua que había levantado el rey Nabucodonosor.
Dan 3:3 Se reunieron, pues, los sátrapas, los magistrados, y los jueces, y los capitanes, y los grandes señores, y los presidentes de los tribunales, y todos los gobernadores de las provincias, para concurrir a la dedicación de la estatua que había levantado el rey Nabucodonosor. Y estaban en pie delante de la estatua erigida por el rey Nabucosonosor,
Dan 3:3 Se reunieron, pues, los sátrapas, los magistrados, y los jueces, y los capitanes, y los grandes señores, y los presidentes de los tribunales, y todos los gobernadores de las provincias, para concurrir a la dedicación de la estatua que había levantado el rey Nabucodonosor. Y estaban en pie delante de la estatua erigida por el rey Nabucosonosor,
Dan 3:5 que en el mismo punto en que oyereis el sonido de la trompeta, de la flauta, del arpa, de la zampoña y del salterio, y de la sinfonía, y de toda especie de instrumentos músicos, postrándoos, adoréis la estatua de oro erigida por el rey Nabucodonosor.
Dan 3:7 Así, pues, luego que los pueblos todos oyeron el sonido de la trompeta, de la flauta, del arpa, de la zampoña, y del salterio, y de la sinfonía, y de toda especie de instrumentos músicos, postrándose todos los pueblos, tribus y lenguas, adoraron la estatua de oro que había levantado el rey Nabucodonosor.
Dan 3:10 Tú, ¡oh rey!, has dado un decreto para que todo hombre que oyere el sonido de la trompeta, de la flauta, y del arpa, de la zampoña, y del salterio, y de la sinfonía, y de toda especie de instrumentos músicos, se postre, y adore la estatua de oro;
Dan 3:12 Hay, pues, tres hombres entre los judíos, a los cuales tú constituiste sobre los negocios de la provincia de Babilonia, que son Sidrac, Misac y Abdénago, estos hombres han despreciado, oh rey, tu decreto; no dan culto a tus dioses, ni adoran la estatua de oro que has levantado.
Dan 3:14 Y les habló el rey Nabucodonosor, diciendo: ¿Es verdad, ¡oh Sidrac, Misac y Abdénago!, que no dais culto a mis dioses, ni adoráis la estatua de oro que yo hice levantar?
Dan 3:15 Ahora, pues, si estáis dispuestos a obedecer, al punto que oigáis el sonido de la trompeta, de la flauta, del arpa, de la zampoña, y del salterio, y de la sinfonía, y de todo género de instrumentos músicos, postraos, y adorad la estatua que yo he hecho; pero si no la adoráis, al instante seréis arrojados en el horno ardiente de fuego. ¿Y cuál es el dios que os librará de mi mano?
Dan 3:18 Que si él no quisiere, sepas, ¡oh rey!, que nosotros no daremos culto a tus dioses, ni adoraremos la estatua de oro que has levantado.
Hab 2:18 ¿De qué sirve el vano simulacro que formó un artífice, y la falsa estatua o imagen que fundió de bronce? Con todo, el artífice pone su esperanza en la hechura suya, en la imagen muda que forjó.
Hab 2:19 ¡Ay de aquel que dice a un madero: ¡Despiértate!, y a una muda piedra: ¡Levántate, y socórreme! ¿Por ventura la estatua podrá instruirte en lo que has de hacer? Mira: Cubierta está ella de oro y plata; pero dentro no hay espíritu ninguno.