Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

eran

Gen 1:31 Y vio Dios todas las cosas que había hecho; y eran en gran manera buenas. Con lo que de la tarde y de la mañana se formó el día sexto.
Gen 13:13 Mas los sodomitas eran perversísimos, y muy grandes pecadores a los ojos de Dios.
Gen 18:11 Es de considerar que ambos eran viejos y de avanzada edad, y a Sara le había faltado ya la costumbre de las mujeres.
Gen 28:8 experimentando por otra parte que las hijas de Canaán no eran del agrado de su padre,
Gen 30:40 De esta suerte dividió Jacob la grey, poniendo las varas en las canales ante los ojos de los carneros, de manera que todas las crías blancas y las negras eran de Labán; quedando para Jacob las demás de varios colores, teniendo separados entre sí los rebaños.
Gen 31:1 Mas luego que Jacob entendió los discursos de los hijos de Labán que decían: Se ha apoderado Jacob de todos los bienes que eran de nuestro padre, y enriquecido con su hacienda, se ha hecho un Señor poderoso;
Gen 31:10 Porque llegado el tiempo en que debían concebir las ovejas, alcé los ojos, y vi entre sueños que los machos que cubrían a las hembras, eran pintados y manchados, y de diversos colores.
Gen 36:7 Porque los dos eran riquísimos, y no podían morar juntos, ni sustentarlos la tierra en la que estaban como peregrinos, a causa de la multitud de sus ganados.
Gen 46:15 Estos son los hijos de Lía, que los parió en Mesopotamia de Siria, como también a Dina, hija suya. Todos sus hijos e hijas eran treinta y tres personas.
Gen 46:25 Estos son los hijos de Bala, la cual Labán había dado a Raquel, su hija, que eran también hijos de Jacob : todos siete personas.
Gen 46:27 Los hijos de José que le nacieron en Egipto, eran dos. Con que todas las personas de la casa de Jacob , entradas en Egipto, vinieron a ser setenta.
Ex 36:9 Cada cortina tenía de largo veintiocho codos y cuatro de ancho; todas las cortinas eran de una medida.
Ex 36:15 Cada cubierta tenía treinta codos de largo y cuatro de ancho; todas las cubiertas eran de una misma medida.
Ex 36:30 De modo que en todo eran ocho los tablones, asentados sobre dieciséis basas de plata, es a saber, a dos basas por tablón.
Ex 38:11 Del mismo modo en la parte septentrional, las cortinas, las columnas, las basas y los capiteles de las columnas eran de igual medida, labor y metal.
Ex 38:12 Pero en la parte occidental las cortinas solamente cogían cincuenta codos, afianzadas en diez columnas que tenían sus basas de bronce; y los capiteles de las columnas con todas las molduras eran de plata.
Ex 38:17 Las basas de las columnas eran de bronce; sus capiteles con todas las molduras de plata; y aun las mismas columnas del atrio las cubrió también de plata.
Ex 38:19 Pero las columnas de dicha entrada eran cuatro, con sus basas de bronce y sus capiteles de molduras de plata.
Lev 10:12 Dijo entonces Moisés a Aarón y a Eleazar e Itamar, que eran los hijos que habían quedado a éste: Tomad lo que resta de la ofrenda del sacrificio del Señor y comedlo sin levadura junto al altar, por ser cosa santísima.
Núm 1:24 De los descendientes de Gad, por sus linajes, y familias, y casas de sus parentelas, con el nombre propio de cada uno, se contaron de veinte años arriba todos los que eran aptos para la guerra,
Núm 7:2 Los príncipes de Israel y los jefes de las familias en cada tribu, que eran los superiores de los que habían sido alista-dos,
Núm 8:4 La hechura del candelero era en esta forma: tanto el pie de en medio, como todos los brazos, los cuales salían de ambos lados, eran de oro labrado a martillo; y Moisés le había hecho fabricar, arreglándose en todo al diseño que el Señor le había mostrado.
Núm 16:2 se amotinaron contra Moisés con otros doscientos cincuenta hombres de los hijos de Israel, varones de los más ilustres de la comunidad, y que en tiempo de concilio o asamblea, eran convocados nominadamente.
Núm 26:62 Todos los que fueron contados de la familia de Leví se halló que eran veintitrés mil varones de un mes arriba; porque no fueron puestos en el censo de los hijos de Israel, ni se les dio posesión alguna como a los demás.
Núm 32:1 Tenían los hijos de Rubén y de Gad muchos ganados y un inmenso caudal en bestias. Y habiendo visto que las tierras de Jazer y de Galaad eran propias para apacentar ganados,
Deut 2:10 Los emimeos o terribles fueron sus primeros pobladores, pueblo numeroso y valiente, y de talla tan alta, que eran tenidos como gigantes de la raza de Enacim;
Deut 2:11 y en realidad eran semejantes a los enaceos. Finalmente los moabitas los llaman emineos.
Deut 32:21 Ellos han querido como picarme de celos, con adorar lo que no era dios, y me han irritado con sus vanidades: yo también los provocaré a celos, con amar a aquellos que no eran pueblo mío, y los irritaré sustituyendo en su lugar una gente necia y despreciable.
Jos 2:4 Pero la mujer, habiéndolos escondido, respondió: Es verdad que vinieron a mi casa; mas yo no sabía de dónde eran,
Jos 9:13 Estos pellejos que llevamos de vino eran nuevos, y ahora están ya rotos y descosidos: la ropa que vestimos, y el calzado que traemos en los pies se han gastado, y casi se han consumido a causa de lo prolijo de tan largo viaje.
Jos 15:21 Las ciudades de los hijos de Judá en las extremidades meridionales por las fronteras de Idumea, eran: Cabseel, y Eder, y Jagur,
Jos 21:26 En todo se dieron diez ciudades y sus alrededores a los levitas, hijos de Caat, que eran de inferior grado al sacerdotal.
Jos 21:27 También a los hijos de Gersón de la estirpe de Leví dio de la media tribu de Manasés dos ciudades con sus alrededores, a saber, Gaulón en Basán, y Bosra, que eran ciudades de refugio.
Juec 7:12 Es de advertir que los madianitas y amalecitas, y todos los pueblos orientales yacían tendidos en el valle, como una muchedumbre de langostas; y sus camellos eran sin número, como las arenas de la orilla del mar.
Juec 8:19 Les replicó Gedeón: Hermanos míos eran, hijos de mi madre. Vive Dios que si les hubieseis conservado la vida, yo tampoco os la quitaría a vosotros.
Juec 10:4 y tenía treinta hijos que cabalgaban en treinta pollinos, y eran señores de treinta poblaciones en el país de Galaad; las cuales de su nombre se llamaron Havot-Jair, esto es, Villas de Jair, hasta el día presente.
Juec 19:16 Cuando he aquí que al anochecer apareció un hombre anciano que volvía del campo y de su labranza, el cual era también de la montaña de Efraín, y habitaba como forastero en Gabaa; pues los hombres de aquel territorio eran hijos de Jemini o benjamitas.
Juec 20:16 que eran setecientos hombres muy esforzados, y que peleaban igualmente con la izquierda que con la derecha, y tan diestros en tirar la honda, que podían herir un cabello con una piedra sin errar jamás el tiro.
Juec 20:38 Es de advertir que los hijos de Israel se habían convenido antes, en que luego que los de la emboscada se apoderasen de la ciudad, encendiesen un gran fuego, para que con la humareda que subiría a lo alto diesen a entender que eran ya dueños de la plaza.
Juec 20:43 Así sucedió que por ambos lados eran acuchillados por los enemigos y morían sin remedio. Los que cayeron muertos y quedaron tendidos por el suelo al oriente de la ciudad de Gabaa en aquel mismo lugar,
I Rey 2:12 Mas los hijos de Helí eran hijos de Belial, que no conocían o respetaban al Señor,
I Rey 6:18 Y los ratones de oro que ofrecieron, fueron tantos cuantas eran las poblaciones de los filisteos en las cinco provincias, comenzando desde las ciudades muradas, hasta las aldeas que no tienen muros; todo el país hasta la piedra grande llamada después Abel, sobre la cual habían colocado el arca del Señor, piedra que hasta hoy día está en la heredad de Josué betsamita.
I Rey 9:22 Samuel, tomando consigo a Saúl y al criado, los introdujo en la sala del convite, y los colocó a la cabecera de la mesa, distinguiéndolos sobre todos los convidados, que eran como unas treinta personas.
I Rey 14:51 porque Cis, padre de Saúl, y Ner, padre de Abner, eran hijos de Abiel.
I Rey 23:14 Por lo que dispuso David marcharse de allí con toda su gente, que eran como unos seiscientos hombres; y saliendo de Ceila, andaban de una a otra parte sin asiento fijo. Tuvo Saúl aviso de que había huido David de Ceila, se había puesto a salvo; por lo cual aparentó no querer moverse.
II Rey 8:17 Sadoc, hijo de Aquitob, y Aquimelec, hijo de Abiatar, eran los sumos sacerdotes, y Saraías le servía de escribano.
II Rey 8:18 Banaías, hijo de Joíada, era capitán de los cereteos y feleteos. Pero los hijos de David eran los primeros después del rey.
II Rey 16:7 Estas eran las palabras que decia Semei, maldiciendo al rey: ¡Anda, anda, hombre sanguinario, hombre de Belial!
II Rey 16:23 Los consejos que daba Aquitofel eran mirados entonces como oráculos del mismo Dios; tan estimados eran los consejos de Aquitofel, así cuando estaba al lado de David, como cuando estaba con Absalón.
II Rey 16:23 Los consejos que daba Aquitofel eran mirados entonces como oráculos del mismo Dios; tan estimados eran los consejos de Aquitofel, así cuando estaba al lado de David, como cuando estaba con Absalón.