Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

amenazas

II Rey 22:16 Quedaron entonces patentes los abismos del mar, y descubiertos los cimientos de la tierra a las amenazas del Señor, y al resuello impetuoso de su furor.
IV Rey 19:3 los cuales le dijeron: Esto dice Ezequías : Día es éste de tribulación, y de amenazas y de blasfemias; llegaron los hijos hasta el punto de nacer; pero la que está de parto no tiene fuerzas para darlos a luz.
IV Rey 22:19 y se ha atemorizado tu corazón, y te has humillado delante del Señor, oídas las amenazas contra este lugar y sus moradores, es a saber, que vendrían a ser objeto de pasmo y execración; y rasgaste tus vestidos, y lloraste en mi presencia; yo también te he escuchado, dice el Señor.
Jud 8:15 Porque no son las amenazas de Dios como las de los hombres, ni él se enciende en cólera como los hijos de los hombres.
Prov 13:8 Con sus riquezas rescata el rico su propia vida; pero aquel que es pobre está exento de amenazas.
Ecli 19:17 ¿Pero quién hay que no haya pecado con su lengua? Corrige al prójimo con suavidad, antes de usar de amenazas,
Ecli 22:30 El vapor y el humo se levantan del horno antes que la llama del fuego; así también las maldiciones, las injurias, y las amenazas preceden al derramamiento de sangre."
Isa 28:22 Dejad, pues, ya de burlaros de mis amenazas, porque no se aprieten más vuestras ligaduras. Porque el Señor Dios de los ejércitos es de quien he oído la destrucción de toda la tierra, o país que habitáis, la destrucción que sucederá dentro de poco.
Jer 36:24 Y así ni el rey, ni ninguno de sus cortesanos que oyeron todas estas palabras o amenazas, temieron por esto, ni rasgaron sus vestiduras en señal de dolor.
Mc 3:12 Tú eres el Hijo de Dios. Mas él los reprendía con graves amenazas para que no le descubriesen.
Lc 4:41 De muchos salían los demonios gritando y diciendo: Tú eres el Hijo de Dios; y con amenazas les prohibía decir que sabían que él era el Cristo .
Hech 4:29 Ahora, pues, Señor, mira sus vanas amenazas, y da a tus siervos el predicar con toda confianza tu palabra,
Hech 9:1 Mas Saulo, que todavía no respiraba sino amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, se presentó al príncipe de los sacerdotes,
Ef 6:9 Y vosotros, amos, haced otro tanto con ellos, excusando las amenazas y castigos, considerando que unos y otros tenéis un mismo Señor allá en los cielos, y que no hay en él preferencia de personas.
I Ped 2:23 quien cuando le maldecían, no retornaba maldiciones; cuando le atormentaban, no prorrumpía en amenazas; antes se ponía en manos de aquel que le sentenciaba injustamente.