Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

añadió

Gen 1:29 Y añadió Dios: Ved que os he dado todas las hierbas las cuales producen simiente sobre la tierra, y todos los árboles los cuales tienen en sí mismos simiente de su especie, para que os sirvan de alimento a vosotros,
Gen 9:26 Y añadió: Bendito el Señor Dios de Sem, sea Canaán esclavo suyo.
Gen 15:3 Pues por lo que a mí toca, añadió Abram, no habiéndome tú concedido sucesión, he aquí que ha de ser mi heredero este siervo nacido en mi casa.
Gen 16:10 Y añadió: Yo multiplicaré en tanto grado tu descendencia, que por su multitud no podrá contarse.
Gen 16:13 Y ella invocó así el nombre del Señor que le hablaba: ¡Oh Dios!, tú eres el que me has mirado en la aflicción. Porque es cierto, añadió, que he visto yo aquí las espaldas del Señor Dios que me ha mirado benignamente.
Gen 20:15 y añadió: Ahí tenéis el país, habita en donde gustares.
Gen 21:7 Y añadió: ¿Quién hubiera creído que Abrahán habría de oír que Sara daba de mamar a un hijo, que le parió siendo ya viejo?
Gen 24:19 Y acabando de darle de beber, añadió: Voy también a sacar agua para tus camellos, hasta que beban todos.
Gen 24:25 Y añadió: De paja y forraje hay en casa provisión abundante, y mucha capacidad para hospedaje.
Gen 28:17 Y todo despavorido, añadió: ¡Cuán terrible es este lugar! Verdaderamente ésta es la casa de Dios, y la puerta del cielo.
Gen 35:11 y le añadió: Yo soy el Dios todopoderoso. Crece y multiplícate: naciones y muchedumbre de pueblos nacerán de ti, y reyes saldrán de tu sangre.
Gen 37:14 Pronto estoy. Jacob le añadió: Anda, ve y averigua si tus hermanos lo pasan bien, y si están en buen estado los ganados, y tráeme razón de lo que pasa. Despachado, pues, del valle de Hebrón, llegó a Siquem.
Gen 43:29 En esto, alzando José los ojos, vio a Benjamín, su hermano uterino, y dijo: ¿Es ése vuestro hermano el pequeño, de quien me hablasteis? E inmediatamente añadió: Dios te dé su gracia, hijo mío y te bendiga.
Gen 45:4 Mas él, con semblante apacible: Llegaos a mí, les dijo; y habiéndose ellos acercado, añadió: Yo soy José vuestro hermano, a quien vendisteis para ser traído a Egipto.
Ex 3:6 Yo soy, le añadió: Yo soy el Dios de tu padre, el Dios de Abrahán, el Dios de Isaac, y el Dios de Jacob . Se cubrió Moisés el rostro, porque no se atrevía a mirar hacia Dios.
Ex 3:14 Respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. He aquí, añadió, lo que dirás a los hijos de Israel: EL QUE ES me ha enviado a vosotros.
Ex 4:5 Esto es, añadió el Señor, para que crean que se te ha aparecido el Señor Dios de sus padres, el Dios de Abrahán, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob .
Ex 16:8 Y añadió Moisés: Esta tarde misma os dará el Señor a comer carnes y a la mañana pan, hasta que no queráis más, por cuanto ha oído vuestras quejas con que habéis murmurado contra él. Porque, ¿quiénes somos nosotros? Contra el Señor son, y no contra nosotros vuestras murmuraciones.
Ex 32:9 Y añadió el Señor a Moisés: Veo que ese pueblo es de dura cerviz.
Ex 33:21 Mas yo tengo aquí, añadió, un paraje especial mío. Tú, pues, te estarás sobre aquella peña;
Núm 16:8 Y añadió hablando con Coré: Escuchad, hijos de Leví:
Núm 32:14 Y de aquí, añadió Moisés, que habéis sucedido vosotros a vuestros padres, como hijos y retoños de hombres pecadores, a fin de atizar aún el furor del Señor contra Israel.
Jos 3:10 Y añadió: En esto conoceréis que el Señor Dios vivo está en medio de vosotros, y que exterminará a vuestra vista al cananeo, y al heteo, y al heveo, y al ferezeo, al gergeseo también, al jebuseo y al amorreo.
Jos 24:23 Ahora bien, añadió, arrojad de en medio de vosotros los dioses ajenos; y rendid vuestros corazones al Señor Dios de Israel.
Juec 8:24 Y les añadió: Una sola cosa os pido: dadme los zarcillos o pendientes que habéis hallado en el botín. Porque los israelitas acostumbraban traer zarcillos de oro.
Juec 19:24 Y, como fuera de sí, añadió: Yo tengo una hija doncella; y este hombre tiene su mujer: os las sacaré fuera para que abuséis de ellas, y saciéis vuestra pasión: solamente os ruego que no cometáis con un hombre ese crimen nefando y contra la naturaleza.
Rut 2:20 A la cual contestó Noemí: Bendito sea el Señor; pues la misma buena voluntad que tuvo a los vivos, la conserva todavía a los difuntos. Y añadió: ese hombre es pariente nuestro.
Rut 3:15 Y añadió: Extiende el manto con que te cubres, y tenle asido con ambas manos. Extenle dio ella, y teniéndole, le midió seis modios de cebada, se los cargó a cuestas. Así cargada entró en la ciudad.
Rut 3:17 Y añadió: He aquí seis modios de cebada que me ha dado diciéndome: No quiero que vuelvas a tu suegra con las manos vacías.
I Rey 14:34 Y añadió Saúl: Esparcíos entre la gente, y decidles que traiga acá cada uno su buey, su carnero y demás animales; degolladlos sobre esa piedra, y después comed; así no pecaréis contra el Señor, comiendo la carne con sangre. Trajo luego todo el pueblo cada uno por su mano hasta que fue de noche, la res que había de matar.
I Rey 16:11 Y añadió Samuel a Isaí: ¿No tienes ya más hijos? A lo que contestó: Aún tengo otro pequeño, que está apacentando ovejas. Dijo Samuel a Isaí: Envía por él, y tráelo aquí, que no nos pondremos a la mesa, hasta que él venga.
I Rey 17:37 Y añadió David: El Señor que me libró de las garras del león y del oso, él mismo me librará también de las manos de ese filisteo. Dijo Saúl a David: Anda, pues, y el Señor sea contigo.
I Rey 17:44 Y añadió: Ven acá y echaré tus carnes a las aves del cielo y las bestias de la tierra.
I Rey 26:10 Y añadió: Vive Dios que a no ser que el Señor lo mate, o llegue el día de su muerte natural, o perezca en alguna batalla, no morirá;
II Rey 14:22 Aquí Joab, postrándose en tierra sobre su rostro, hizo una profunda reverencia al rey, le dio las gracias, y añadió: Oh rey y señor mío, hoy ha reconocido tu siervo que ha hallado gracia en tus ojos; pues que has otorgado la súplica que te he hecho.
II Rey 15:27 Y añadió el rey al sumo sacerdote Sadoc: Oh vidente, vuélvete en paz a la ciudad con tu hijo Aquímaas y con Jonatás, hijo de Abiatar; estén con vosotros esos dos hijos vuestros.
II Rey 17:8 Y añadió Cusai: No ignoras que tu padre y la gente que te sigue son varones muy esforzados, y en la actualidad de ánimo exasperado, como una osa embravecida en un bosque cuando le han robado sus cachorillos. Sobre todo, tu padre es un hombre aguerrido, y así no se detendrá con su gente.
II Rey 24:23 Todas estas cosas dio el rey Areúna al rey David, y añadió: El Señor Dios tuyo acepte tu sacrificio.
III Rey 2:14 y añadió: Tengo que hablar contigo. Habla, respondió ella. Y Adonías:
III Rey 2:44 Y añadió el rey a Semei: Tú bien sabes y tu misma conciencia es testigo de todo el mal que hiciste a mi padre David. El Señor ha hecho caer sobre tu cabeza el castigo de tu maldad.
III Rey 8:15 Y añadió Salomón : Bendito sea el Señor Dios de Israel, el cual por su propia boca predijo a David, mi padre, lo que con su poder ha ejecutado, diciendo:
III Rey 13:3 Y al mismo tiempo, en prueba de la verdad de su predicción, añadió: Esta será la señal que os hará conocer que Dios es quien os habla: He aquí que va a partirse el altar, y se derramará la ceniza que hay en él.
III Rey 18:34 y dijo: Llenad cuatro cántaros de agua, y vertedla sobre el holocausto y sobre la leña. Y dijo después: Hacedlo segunda vez. Y habiéndolo hecho por segunda vez, añadió: Repetidlo aun por tercera. E hicieron lo mismo por tercera vez;
III Rey 22:5 Respondió Josafat al rey de Israel: Somos los dos una misma cosa, y una misma cosa son tu pueblo y el mío, y tuya es mi caballería. Y añadió Josafat al rey de Israel: Consulta, te ruego, al Señor este día, para que sepamos su voluntad.
III Rey 22:19 Pero Miqueas, ratificándose, añadió: Por tanto, oye la palabra del Señor: He visto al Señor sentado sobre su solio, y a toda la milicia celestial que estaba a su alrededor a la derecha y a la izquierda.
III Rey 22:28 A lo que dijo Miqueas: Si tú vuelves victorioso, el Señor no habló por mi boca. Y añadió: Pueblos todos estad alerta, y sedme testigos.
IV Rey 3:8 Y añadió: ¿Qué camino tomaremos? A lo que le respondió Joram: El camino del desierto de Idumea.
IV Rey 6:27 El cual respondió: No te salva el Señor; ¿cómo puedo yo salvarte? ¿Tengo acaso trigo en las trojes, ni vino en las bodegas?, añadió el rey. Ella respondió:
I Par 28:20 Y añadió David a su hijo Salomón : Pórtate con valor y esfuerzo, y manos a la obra; no temas ni te acobardes; porque el Señor Dios mío estará contigo, y no te desamparará, ni abandonará hasta que concluyas todas las obras necesarias para el servicio de la casa del Señor.
II Par 18:27 A lo que dijo Miqueas: Si regresases tú felizmente, no será verdad que el Señor haya hablado por mi boca. Y añadió: Oídlo, pueblos todos.