Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

Salvador

Gen 41:45 Le mudó también el nombre, llamándole en lengua egipcía Salvador del mundo. Y le dio por mujer a Asenet, hija de Putifare, sacerdote de Heliópoli. Después de esto salió José a visitar la tierra de Egipto,
Ex 15:2 El Señor es la fortaleza mía, y el objeto de mis alabanzas, porque El ha sido mi Salvador . Este es mi Dios, y yo publicaré su gloria: el Dios de mis padres, a quien he de ensalzar.
I Rey 14:39 Vive el Señor, que es el Salvador de Israel, que si la causa de esto es mi hijo Jonatás, morirá sin remisión. A lo cual ninguno del pueblo lo contradijo.
II Rey 22:3 Dios es mi defensa, en él esperaré; es mi escudo y el apoyo de mi salvación; él es el que me ensalza sobre mis enemigos, y él es mi amparo. Sí, Salvador mío, tú me librarás de toda violencia o iniquidad.
I Par 16:35 y decid: Sálvanos, oh Dios, Salvador nuestro; reúnenos, sacándonos de entre las gentes, para que demos gloria a tu santo Nombre, y nos regocijemos cantando tus alabanzas.
Sab 16:7 Y esta insignia quien miraba, quedaba sano; no por virtud del objeto que veía sino por ti, ¡oh Salvador de todos los hombres!
Isa 43:3 porque yo soy el Señor Dios tuyo, el Santo de Israel, tu Salvador ; yo di por tu rescate a Egipto, Etiopía y Sabá.
Isa 45:8 ¡Oh cielos!, derramad desde arriba vuestro rocío; y lluevan las nubes al Justo, ábrase la tierra, y brote al Salvador , y nazca con él la justicia. Yo el Señor lo creé.
Isa 45:15 Verdaderamente eres tú un Dios escondido o invisible, Dios de Israel, Salvador nuestro.
Isa 49:6 El me ha dicho: Poco es el que tú me sirvas para restaurar las tribus de Jacob y convertir los despreciables restos de Israel; he aquí que yo te he destinado para ser luz de las naciones a fin de que tú seas la salud o el Salvador enviado por mí hasta los últimos confines de la tierra.
Isa 51:5 Está para venir mi Justo. El Salvador que yo envío está ya en camino, y mi brazo regirá los pueblos; las islas o naciones de la tierra me estarán aguardando, y esperando en el poder de mi brazo.
Isa 51:6 Alzad al cielo vuestros ojos, y bajadlos después a mirar la tierra, porque los cielos como humo se desharán y mudarán, y la tierra se consumirá como un vestido, y perecerán como estas cosas sus moradores. Pero la salud o el Salvador que yo envío, durará para siempre, y nunca faltará mi justicia.
Isa 52:10 Ha revelado el Señor a la vista de todas las naciones la gloria de su santo brazo, y toda las regiones del mundo verán al Salvador que envía nuestro Dios.
Isa 62:1 Yo no me estaré, pues, callado; sin cesar rogaré a favor de Sión; por amor de Jerusalén no he de sosegar hasta tanto que su Justo nazca como la luz del día, y resplandezca su Salvador cual brillante antorcha.
Isa 62:2 Las naciones, ¡oh Jerusalén !, verán a tu Justo; y los reyes todos a tu glorioso Salvador ; y se te impondrá un nombre nuevo, que pronunciará el Señor de su propia boca.
Isa 62:11 He aquí que el Señor ha mandado echar este pregón hasta las extremidades de la tierra y decir a la hija de Sión: Mira que ya viene el Salvador tuyo; mira cómo trae consigo su galardón, y tiene delante de sí la recompensa para sus siervos.
Isa 63:8 Porque él dijo: Al cabo, éste es el pueblo mío; son mis hijos; no me faltarán más a la fidelidad; y con eso se hizo Salvador suyo.
Bar 4:22 Porque yo he puesto la esperanza mía en el Eterno, que es nuestra salud; y el Santo me ha consolado con la promesa de la misericordia que tendrá de vosotros el Eterno, nuestro Salvador .
Dan 14:42 Entonces dijo el rey : Teman al Dios de Daniel todos los moradores del orbe : porque él es el Salvador ; el que obra prodigios y maravillas sobre la tierra, y ha librado á Daniel del lago de los leones."
Os 3:5 y después de esto volverán los hijos de Israel en busca del Señor Dios suyo, y del descendiente de David, su Rey y Salvador , y buscarán con santo temor y respeto al Señor y a sus bienes en el fin de los tiempos.
Os 13:4 Mas yo soy el Señor Dios tuyo desde que saliste de la tierra de Egipto; y no has de reconocer a otro Dios fuera de mí; ni hay otro Salvador sino yo.
Miq 7:7 Mas yo volveré mis ojos hacia el Señor, pondré mi esperanza en Dios Salvador mío, y mi Dios me atenderá.
Zac 9:9 ¡Oh hija de Sión!, regocíjate en gran manera; salta de júbilo, ¡oh hija de Jerusalén !; he aquí que a ti vendrá tu rey, el Justo, el Salvador , él vendrá pobre, y montado en un asna y su burrito.
Zac 9:11 Y tú mismo, oh Salvador , mediante la sangre de tu testamento has hecho salir a los tuyos, que se hallaban cautivos, del lago o fosa en que no hay agua.
I Mac 4:11 con lo cual reconocerán todas las gentes que hay un Salvador y libertador de Israel.
I Mac 4:30 Conocieron éstos que era poderoso el ejército enemigo, y Judas oró, y dijo: Bendito seas, oh Salvador de Israel, tú que quebrantaste la fuerza de un gigante por medio de tu siervo David, y que entregaste el campamento de los extranjeros en poder de Jonatás, hijo de Saúl, y de su escudero:"
Lc 2:11 y es, que hoy os ha nacido en la ciudad de David el Salvador , que es el Cristo , o Mesías, el Señor nuestro.
Lc 2:30 Porque ya mis ojos han visto al Salvador que nos has dado,
Lc 3:6 y verán todos los hombres al Salvador enviado de Dios.
Jn 4:22 Vosotros adoráis lo que no conocéis, pues sabéis poco de Dios; pero nosotros adoramos lo que conocemos, porque la salud o el Salvador procede de los judíos.
Jn 4:42 y decían a la mujer: Ya no creemos por lo que tú has dicho; pues nosotros mismos le hemos oído, y hemos conocido que éste es verdaderamente el Salvador del mundo.
Rom 11:26 entonces se salvará todo Israel, según está escrito: Saldrá de Sión el Libertador o Salvador , que desterrará de Jacob la impiedad;
Tit 1:4 a Tito, hijo querido, según la fe que nos es común, gracia y paz de Dios Padre, y de Jesucristo Salvador nuestro.
II Ped 1:1 Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que han alcanzado igual fe con nosotros por la justicia y méritos del Dios y Salvador nuestro Jesucristo,
II Ped 1:11 Pues de este modo se os abrirá de par en par la entrada en el reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.
II Ped 2:20 Porque si después de haberse apartado de las asquerosidades del mundo por el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo, enredados otra vez en ellas son vencidos, su postrera condición viene a ser peor que la primera.
II Ped 3:2 para que tengáis presentes las palabras que os he dicho antes, de los santos profetas, y los preceptos que el Señor y Salvador nuestro os ha dado por medio de nosotros, que somos sus apóstoles
II Ped 3:18 antes bien id creciendo en la gracia y en el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A El sea dada la gloria desde ahora y por el día perpetuo de la eternidad. Amén.
I Jn 4:14 Nosotros fuimos testigos de vista, y damos testimonio de que el Padre envió a su Hijo para ser el Salvador del mundo.