Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

Ana

Gen 36:2 Casó Esaú con mujeres cananeas, y fueron: Ada, hija de Helón, heteo; y Oolibama, hija de Ana, hija de Sebeón el heveo.
Gen 36:14 Asimismo los hijos de Oolibama, mujer de Esaú, hija de Ana, y ésta de Sebeón, fueron Jehús, Ihelón y Coré.
Gen 36:18 Pero los hijos de Oolibama, mujer de Esaú, son los siguientes: el príncipe Jehús, el príncipe Ihelón, el príncipe Coré; estos príncipes vienen de Oolibama, hija de Ana, y mujer de Esaú.
Gen 36:20 Los hijos de Seir el horreo, naturales de aquella tierra, son Lotán, y Sobal, y Sebeón y Ana,
Gen 36:24 Los de Sebeón: Aia y Ana. Este Ana es el que descubrió las aguas calientes en el desierto, mientras andaba apacentando los asnos de Sebeón, su padre.
Gen 36:24 Los de Sebeón: Aia y Ana. Este Ana es el que descubrió las aguas calientes en el desierto, mientras andaba apacentando los asnos de Sebeón, su padre.
Gen 36:29 Estos son los príncipes de los horreos: príncipe Lotán, príncipe Sobal, príncipe Sebeón, príncipe Ana,
I Rey 1:2 Y tenía dos mujeres, una llamada Ana, y la otra Fenenna. Fennena tenía hijos, mas Ana carecía de ellos.
I Rey 1:2 Y tenía dos mujeres, una llamada Ana, y la otra Fenenna. Fennena tenía hijos, mas Ana carecía de ellos.
I Rey 1:5 Pero a Ana, que no tenía hijos, le dio una sola porción, entristecido porque la amaba, aunque el Señor la había hecho estéril.
I Rey 1:7 Y así lo hacía todos los años cuando, llegado el tiempo, subían al templo del Señor; y de este modo la zahería. Con esto Ana se ponía a llorar, y no probaba la comida.
I Rey 1:8 Le dijo, pues, Elcana, su marido: Ana, ¿por qué lloras? ¿cómo es que no comes?, ¿y por qué se aflige así tu corazón? ¿acaso no soy yo para ti mejor que diez hijos que tuvieses?
I Rey 1:9 Y después de haber comido y bebido en Silo, se levantó Ana, y estando el sumo sacerdote Helí sentado en su silla, o audiencia, delante de la puerta del templo o Tabernáculo del Señor,
I Rey 1:10 vino Ana con un corazón lleno de amargura, y oró al Señor derramando copiosas lágrimas,
I Rey 1:13 porque Ana hablaba solo en su corazón, de manera que únicamente movía los labios; pero no se le oía ni siquiera una palabra. Y así Helí la tuvo por ebria,
I Rey 1:15 Le respondió Ana: No es, mi señor, lo que decís; la verdad es que yo soy una mujer afligidísima; y no es que haya bebido vino, ni cosa que pueda embriagar, sino que estaba derramando mi corazón en la presencia del Señor.
I Rey 1:18 Le respondió Ana: ¡Ojalá tu sierva halle gracia en tus ojos! Se fue la mujer a su posada, y tomó alimento, y desde entonces ya no se vio melancólico su semblante.
I Rey 1:19 Por la mañana se levantaron todos, adoraron al Señor, y poniéndose en camino, regresaron a su casa en Rámata. Elcana se unió a Ana, su mujer, y el Señor se acordó de ella y de su oración.
I Rey 1:20 Luego concibió Ana, y a su tiempo parió un hijo, a quien puso por nombre Samuel, por haberlo pedido fervorosamente al Señor.
I Rey 1:22 Pero Ana no fué, habiendo dicho a su marido: No iré hasta que el niño esté destetado, y le lleve yo para presentarlo al Señor, y se quede allí para siempre.
I Rey 1:23 Le dijo Elcana su marido: Haz lo que mejor te parezca, y quédate hasta destetarle; yo suplico al Señor que se digne perfeccionar su obra. Se quedó, pues, Ana en su casa, y dio de mamar al hijo, hasta que lo destetó;
I Rey 1:26 diciendo Ana: Oyeme, Señor mío, por vida tuya: Yo soy, mi señor, aquella mujer que estuve orando al Señor delante de ti.
I Rey 1:28 Por tanto, se lo tengo ofrecido, a fin de que le sirva mientras viva. Con esto, adoraron allí al Señor; y Ana, estando orando, prorrumpió en este cántico:
I Rey 2:21 En efecto, el Señor visitó a Ana, la cual concibió y parió tres hijos y dos hijas. Entretanto el niño Samuel iba haciéndose grande en la presencia del Señor.
IV Rey 18:34 ¿Dónde está el dios de Emat, y de Arfad? ¿Dónde el dios de Sefarvaím, de Ana y de Ava? ¿Libraron acaso a Samaria de caer en mi poder?
IV Rey 19:13 ¿Dónde está el rey de Emat, y el rey de Arfad, y el rey de la ciudad de Sefarvaím, y de Ana y de Ava?
I Par 1:38 Hijos de Seir: Lotán, Sobal, Sebeón, Ana, Disón, Eser, Disán.
I Par 1:40 Hijos de Sobal: Alián y Manahat, y Ebal, Sefí y Onam. Hijos de Sebeón: Aja y Ana. Hijo de Ana: Disón.
I Par 1:40 Hijos de Sobal: Alián y Manahat, y Ebal, Sefí y Onam. Hijos de Sebeón: Aja y Ana. Hijo de Ana: Disón.
Tob 1:9 Cuando fue ya hombre hecho, se casó con una mujer de su tribu llamada Ana, de la cual tuvo un hijo, a quien puso su mismo nombre,
Tob 2:19 Entretanto Ana, su mujer, iba todos los días a tejer, y traía el sustento que podía ganar con el trabajo de sus manos.
Tob 7:2 Así que Raguel puso sus ojos en Tobías, dijo a Ana, su mujer: ¡Cuán parecido es este joven a mi primo hermano Tobías!
Tob 7:8 Asimismo Ana, su mujer, y Sara, hija de ambos, prorrumpieron en llanto.
Tob 7:18 Llamó, en fin, Raguel a Ana, su mujer, y le mandó que preparase otro aposento;
Tob 7:19 en el cual introdujo Ana a su hija Sara, que echó a llorar.
Tob 7:20 Mas Ana le dijo: Ten buen ánimo, hija mía; el Señor del cielo te llene de gozo después de tantos disgustos como has sufrido.
Tob 8:16 y volvió a dar la buena noticia; con lo que alabaron a Dios tanto Raguel como Ana, su mujer,
Tob 10:3 Con esto empezó a afligirse sobremanera, tanto él como su mujer Ana. Y ambos comenzaron a llorar, visto que su hijo no volvía al tiempo señalado.
Tob 11:5 Iba Ana todos los días a sentarse cerca del camino, en la cima de una colina, desde donde podía mirar a larga distancia.
Isa 37:13 ¿Dónde está el rey de Emat y el rey de Arfad, y el rey de la ciudad de Sefarvaím, y de Ana, y de Ava?
Lc 2:36 Vivía entonces una profetisa llamada Ana, hija de Fanuel, de la tribu de Aser que era de edad muy avanzada; y la cual, casada desde muy joven, vivió con su marido siete años.