SALMO de David, cantado por él al Señor con motivo de las palabras de Cusi, hijo de Jémini. 2 Señor, Dios mío, en ti he puesto mi esperanza; sálvame de todos mis perseguidores, y líbrame. 3 No sea que alguno, como león, arrebate tal vez mi alma, sin que haya nadie que me libre y ponga a salvo. 4 ¡Ah Señor Dios mío! si yo tal hice, si hay iniquidad en mis acciones, 5 si he vuelto mal por mal a los que me lo han hecho, caiga yo justamente en las garras de mis enemigos, sin recurso. 6 Persígame el enemigo, y apodérese de mí, y estrélleme contra el suelo, y reduzca a polvo mi gloria. 7 Levántate, ¡oh Señor! en el momento de tu enojo, y ostenta tu grandeza en medio de mis enemigos. Sí, Señor Dios mío, levántate según la ley por ti establecida; 8 y el concurso de las naciones se reunirá alrededor de ti. Por amor de esta congregación vuelve a subir a lo alto. 9 El Señor es quien juzga a los pueblos. Júzgame, pues, oh Señor, según mi justicia, y según la inocencia que hay en mí. 10 Acábese ya la malicia de los pecadores; y tú, ¡oh Dios!, que penetras los corazones, y los afectos más íntimos, encaminarás al justo.

11 Mi socorro lo espero del Señor; el cual saca a salvo a los rectos de corazón. 12 Dios, justo juez, fuerte y misericordioso, ¿se enoja acaso todos los días? 13 Si vosotros no os convirtiereis vibrará su espada; tenso tiene su arco apuntado; 14 y en él ha puesto dardos mortales, y tiene dispuestas sus abrasadoras saetas. 15 He aquí que el impío ha parido la injusticia; concibió el dolor, y parió el pecado.

16 El abrió y ahondó una fosa; mas ha caído en esa misma fosa que él hizo. 17 El dolor que quiso ocasionarme, recaerá contra él; y su iniquidad descargará sobre su cabeza. 18 Glorificaré yo al Señor por su justicia y cantaré himnos de alabanza al excelso Nombre del Señor altísimo.
Padre
Hijo
Espíritu Santo
Ángeles
Satanás
Comentario
Referencia
Ilustración
Atlas