CÁNTICO gradual. Desde lo más profundo clamé a ti, ¡oh Señor! 2 Oye, Señor, benignamente mi voz. Estén atentos tus oídos a la voz de mis plegarias. 3 Si te pones a examinar, Señor, nuestras maldades, ¿quién podrá subsistir, ¡oh Señor!, en tu presencia? 4 Mas en ti se halla siempre la clemencia; y en vista de tu ley he confiado en ti, ¡oh Señor! en la promesa del Señor se ha apoyado mi alma. 5 En el Señor ha puesto su esperanza. 6 Desde el amanecer hasta la noche espere Israel en el Señor. 7 Porque en el Señor está la misericordia, y en su mano tiene una redención abundantísima. 8 Y es él el que redimirá a Israel de todas sus iniquidades.
Padre
Hijo
Espíritu Santo
Ángeles
Satanás
Comentario
Referencia
Ilustración
Atlas