Catecismo Mayor

Prescrito por San Pío X el 15 de julio de 1905, Edición de 1973

"The faith, as such, is always the same. Therefore, St. Pius X's catechism always retains its value."

ÍNDICE GENERAL
DE LA DOCTRINA CRISTIANA Y DE SUS PARTES PRINCIPALES

LECCIÓN PRELIMINAR - DE LA DOCTRINA CRISTIANA Y DE SUS PARTES PRINCIPALES

Parte primera – Del Símbolo de los Apóstoles, llamado vulgarmente “Credo”

Parte segunda – De la oración

Parte tercera – De los Mandamientos de la Ley de Dios y de la Iglesia

Parte cuarta – De los Sacramentos

Parte quinta – De las Virtudes principales y de otras cosas necesarias que ha de saber el Cristiano

INSTRUCCIÓN SOBRE LAS FIESTAS DEL SEÑOR, DE LA SANTÍSIMA VIRGEN Y DE LOS SANTOS

Parte primera – De las fiestas del Señor

Parte segunda – De las fiestas solemnes de la Santísima Virgen y de las fiestas de los Santos

BREVE HISTORIA DE LA RELIGIÓN

Parte primera – Resumen de la historia del Antiguo Testamento

Parte segunda – Resumen de la historia del Nuevo Testamento

Parte tercera – Breve noticia de la historia eclesiástica


Al Señor Cardenal Pedro Respighi Nuestro Vicario General

Señor Cardenal:

La necesidad de proveer cuanto antes ó la religiosa institución de la tierna juventud, Nos ha aconsejado la publicación de un Catecismo que exponga de un modo claro los rudimentos de nuestra santa fe y aquellas divinas verdades conque debe informarse la vida de todo cristiano. Por tanto, habiendo hecho examinar los muchos textos ya en uso en las diócesis de Italia, Nos pareció oportuno adoptar, con ligeras modificaciones, el texto ha varios años aprobado por los Obispos del Piamonte, Liguria, Lombardía, Emilia y Toscana. El uso de este texto será obligatorio para la enseñanza pública y privada en la diócesis de Roma y en todas las demás de la Provincia romana; y confiamos que también las otras diócesis lo querrán adoptar, para llegar de esta manera al texto único, á lo menos para toda Italia, que es el deseo universal.

Con esta dulce esperanza os damos de todo corazón, señor Cardenal, la Apostólica Bendición.

Del Vaticano, á 14 de Julio de 1905.

Pío Papa X

LECCIÓN PRELIMINAR - DE LA DOCTRINA CRISTIANA Y DE SUS PARTES PRINCIPALES

1 P. ¿Sois cristiano?

Sí, señor; soy cristiano por la gracia de Dios.

2 P. ¿Por qué decís por la gracia de Dios?

Digo por la gracia de Dios porque el ser cristiano es un don enteramente gratuito de Dios nuestro Señor, que no hemos podido merecer.

3 P. ¿Quién es verdadero cristiano?

Verdadero cristiano es el que está bautizado, cree y profesa la doctrina cristiana y obedece a los legítimos Pastores de la Iglesia.

4 P. ¿Qué es la doctrina cristiana?

Doctrina Cristiana es la doctrina que nos enseñó Nuestro Señor Jesucristo para mostrarnos el camino de la salvación.

5 P. ¿Es necesario aprender la doctrina enseñada por Jesucristo?

Es necesario aprender la doctrina enseñada por Jesucristo, y faltan gravemente los que descuidan aprenderla.

6 P. ¿Tienen los padres y los amos obligación de mandar a sus hijos y dependientes al Catecismo?

Los padres y los amos tienen obligación de procurar que sus hijos y dependientes aprendan la doctrina cristiana, e incurren en culpa delante de Dios si descuidan esta obligación.

7 P. ¿De quién hemos de recibir y aprender la doctrina cristiana?

La doctrina cristiana la hemos de recibir y aprender de la santa Iglesia Católica.

8 P. ¿Cómo estamos ciertos de que la doctrina cristiana que recibimos de la Santa Iglesia es realmente verdadera?

Estamos ciertos que la doctrina cristiana que recibimos de la Iglesia Católica es realmente verdadera porque Jesucristo, divino Autor de esta doctrina, la confió por medio de sus Apóstoles a la Iglesia fundada por El, a la cual constituyó Maestra infalible de todos los hombres y prometió su divina asistencia hasta el fin del mundo.

9 P. ¿Hay otras pruebas de la verdad de la doctrina cristiana?

La verdad de la doctrina cristiana se demuestra, además, por la santidad eminente de tantos que la profesaron y profesan, por la heroica fortaleza de los mártires, por su rápida y admirable propagación en el mundo y por su completa conservación por espacio de tantos siglos de varias y continuas luchas.

10 P. ¿Cuántas y cuáles son las partes principales y más necesarias de la doctrina cristiana?

Las partes principales y más necesarias de la doctrina cristiana son cuatro: El Credo, Padrenuestro, Mandamientos y Sacramentos.

11 P. ¿Qué nos enseña el Credo?

El Credo nos enseña los principales artículos de nuestra santa fe.

12 P. ¿Qué nos enseña el Padrenuestro?

El Padrenuestro nos enseña todo lo que hemos de esperar de Dios y todo lo que hemos de pedirle.

13 P. ¿Qué nos enseñan los Mandamientos?

Los Mandamientos nos enseña todo lo que hemos de hacer para agradar a Dios, que se resume en amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a nosotros mismos por amor de Dios.

14 P. ¿Qué nos enseña la doctrina de los Sacramentos?

La doctrina de los Sacramentos nos enseña la naturaleza y buen uso de los medios instituidos por Jesucristo para perdonarnos los pecados, comunicarnos su gracia e infundir y acrecentar en nosotros las virtudes de la fe, de la esperanza y de la caridad.

PARTE PRIMERA DEL SÍMBOLO DE LOS APÓSTOLES, LLAMADO VULGARMENTE EL "CREDO"
CAPITULO PRIMERO - DEL CREDO EN GENERAL

15 P. ¿Cuál es la primera parte de la doctrina cristiana?

La primera parte de la doctrina cristiana es el símbolo de los Apóstoles, llamado vulgarmente el CREDO.

16 P. ¿Por qué llamáis al Credo SÍMBOLO DE LOS APÓSTOLES?

Llamo símbolo de los Apóstoles al Credo porque es un compendio de las verdades de la fe enseñadas por los Apóstoles.

17 P. ¿Cuántos son los artículos del CREDO?

Los artículos del Credo son doce.

18 P. Decidlos. -

1º. Creo en Dios Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra. 2º. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor. 3º. Que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo; nació de Santa María Virgen. 4º. Padeció bajo el poder de Poncio Pilato: fue crucificado, muerto y sepultado. 5º. Descendió a los infiernos: al tercer día resucitó de entre los muertos. 6º. Subió a los cielos: está sentado a la diestra de Dios Padre. 7º. Desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos. 8º. Creo en el Espíritu Santo. 9º. En la Santa Iglesia Católica: la Comunión de los Santos. 10º. El perdón de los pecados. 11º. La resurrección de los muertos. 12º. Y la vida eterna. Amén.

19 P. ¿Que quiere decir la palabra CREO?

La palabra Creo quiere decir: tengo por certísimo todo lo que en estos doce artículos se contiene, y lo creo con más firmeza que si lo viera con mis ojos, porque Dios, que ni puede engañarse ni engañarnos, lo ha revelado a la santa Iglesia Católica, y por medio de ella nos lo revela también a nosotros.

20 P. ¿Que contienen los artículos del Credo?

Los artículos del Credo contienen todo lo que principalmente hemos de creer acerca de Dios, de Jesucristo y de la Iglesia.

21 P. ¿Es muy bueno rezar a menudo el Credo?

Es provechosísimo rezar a menudo el Credo para grabar más y más en nuestro corazón las verdades de la fe.

CAPITULO II - DEL PRIMER ARTÍCULO DEL SÍMBOLO
1º.- De Dios Padre y de la Creación

22 P. ¿Que nos enseña el primer artículo: CREO EN DIOS PADRE TODOPODEROSO, CREADOR DEL CIELO Y DE LA TIERRA?

El primer artículo del Credo nos enseña que hay un solo Dios; que es todopoderoso, que creó el cielo y la tierra y todo lo que en el cielo y en la tierra se contiene.

23 P. ¿Cómo sabemos que hay Dios?

Sabemos que hay Dios porque la razón lo demuestra y la fe lo confirma.

24 P. ¿Por qué se dice que Dios es Padre?

Se dice que Dios es Padre: 1º. Porque es Padre, por naturaleza, de la segunda persona de la Santísima Trinidad, que es el Hijo engendrado por El. 2º. Porque Dios es Padre de todos los hombres que el ha creado, conserva y gobierna. 3º. Porque finalmente, es Padre por gracia de todos los buenos cristianos, que por eso se llaman hijos de Dios adoptivos.

25 P. ¿Por qué el Padre es la Primera Persona de la Santísima Trinidad?

El Padre es la primera Persona de la Santísima Trinidad porque no procede de otra persona, sino que es el principio de las otras dos Personas, que son el Hijo y el Espíritu Santo.

26 P. ¿Qué quiere decir TODOPODEROSO?

Todopoderoso quiere decir que Dios puede hacer todo cuanto quiere.

27 P. Dios no puede pecar ni morir ¿cómo, pues, se dice que todo lo puede?

Se dice que Dios todo lo puede, aunque no pueda pecar ni morir, porque el pecar o morir no es efecto de potencia, sino de flaqueza, la cual no puede hallarse en Dios, que es perfectísimo.

28 P. ¿Qué quiere decir CREADOR DEL CIELO Y DE LA TIERRA?

Crear es hacer de nada algo; por esto se dice Creador del cielo y de la tierra, porque hizo de nada el cielo y la tierra y cuanto en el cielo y en la tierra se contiene.

29 P. ¿Fue creado el mundo por el Padre solamente?

El mundo fue creado igualmente por las tres divinas Personas, porque todo cuanto hace una Persona respecto a las criaturas, lo hacen con el mismo acto las otras dos.

30 P. ¿Por qué, pues, la creación se atribuye particularmente al Padre?

La creación se atribuye particularmente al Padre porque es efecto de la divina Omnipotencia; la cual se atribuye especialmente al Padre, como la sabiduría al Hijo y la bondad al Espíritu Santo, aunque las tres divinas Personas tienen la misma omnipotencia, sabiduría y bondad.

31 P. ¿Tiene Dios cuidado del mundo y de todas las cosas que ha creado?

Si, señor; Dios tiene cuidado del mundo y de todas las cosas que ha creado, las conserva y gobierna con su infinita bondad y sabiduría, y nada sucede acá abajo sin que Dios lo quiera o permita.

32 P. ¿Por qué decís que nada sucede sin que Dios lo quiera o lo permita?

Digo que nada sucede sin que Dios lo quiera o lo permita porque hay cosas que Dios quiere y manda y otras que no las impide, como es el pecado.

33 P. ¿Por que Dios no impide el pecado?

Dios no impide el pecado porque aun del abuso, que el hombre hace de la libertad que El le dio, sabe sacar bien y hacer que brille más y más su misericordia o su justicia.

2º.- De los Ángeles

34 P. ¿Cuáles son las criaturas más nobles que Dios ha creado?

Las criaturas más nobles creadas por Dios son los Ángeles.

35 P. ¿Quiénes son los Ángeles?

Los Ángeles son criaturas inteligentes y puramente espirituales.

36 P. ¿Para que fin creó Dios a los Ángeles?

Dios creó a los Ángeles para que le honren y le sirvan y para hacerlos eternamente bienaventurados.

37 P. ¿Qué forma o figura tienen los Ángeles?

Los Ángeles no tienen forma ni figura alguna sensible, porque son puros espíritus, que subsisten sin necesidad de estar unidos a cuerpo alguno.

38 P. ¿Por qué, pues, se representan los Ángeles con formas sensibles?

Los Ángeles se representan con formas sensibles: 1º, para ayudar a nuestra imaginación; 2º, porque así han aparecido muchas veces a los hombres, como leemos en las Santas Escrituras.

39 P. ¿Permanecieron fieles a Dios todos los Ángeles?

No, señor; no permanecieron fieles a Dios todos los Ángeles; antes, muchos de ellos, por soberbia, pretendieron ser iguales a El e independientes, y por este pecado fueron desterrados para siempre del paraíso y condenados al infierno.

40 P. ¿Cómo se llaman los Ángeles desterrados para siempre del paraíso y condenados al infierno?

Los Ángeles desterrados para siempre del paraíso y condenados al infierno se llaman demonios, y su caudillo se llama Lucifer o Satanás.

41 P. ¿Pueden los demonios hacernos algún mal?

Sí, señor; los demonios pueden hacernos mucho mal en el alma y en el cuerpo, si Dios les da licencia, mayormente tentándonos a pecar.

42 P. ¿Por qué nos tientan?

Los demonios nos tientan por la envidia que nos tienen, la cual les hace desear nuestra eterna condenación, y por odio a Dios, cuya imagen resplandece en nosotros.

43 P. ¿Por qué permite Dios las tentaciones?

Dios permite las tentaciones para que, venciéndolas con su gracia, ejercitemos las virtudes y adquiramos merecimientos para el cielo.

44 P. ¿Cómo se vencen las tentaciones?

Las tentaciones se vencen con la vigilia, la oración y la mortificación cristiana.

45 P. ¿Cómo se llaman los Ángeles que permanecieron fieles a Dios?

Los Ángeles que permanecieron fieles a Dios se llaman Ángeles buenos, Espíritus celestiales o simplemente Ángeles.

46 P. ¿Qué fue de los Ángeles que permanecieron fieles a Dios?

Los Ángeles que permanecieron fieles a Dios fueron confirmados en gracia, gozan para siempre de la vista de Dios, le aman, le bendicen y le alaban eternamente.

47 P. ¿Sírvese Dios de los Ángeles como de ministros suyos?

Sí, señor; Dios se sirve de los Ángeles como de ministros suyos, y en especial a muchos de ellos hace custodios y protectores nuestros.

48 P. ¿Hemos de tener particular devoción al Ángel de nuestra Guarda?

Si, señor; hemos de tener particular al Ángel de nuestra guarda, honrarle, implorar su socorro, seguir sus inspiraciones y ser agradecidos a su continua asistencia.

3º.- Del hombre

49 P. ¿Cuál es la criatura más noble que Dios ha puesto sobre la tierra?

La criatura más noble que Dios ha puesto sobre la tierra es el hombre.

50 P. ¿Qué es el hombre?

El hombre es una criatura racional compuesta de alma y cuerpo.

51 P. ¿Que es el alma?

El alma es la parte más noble del hombre, porque es sustancia espiritual dotada de entendimiento y de voluntad, capaz de conocer a Dios y de poseerle eternamente.

52 P. ¿Puede verse y tocarse el alma humana?

El alma humana no puede verse ni tocarse, porque es espíritu.

53 P. ¿Muere con el cuerpo el alma humana?

El alma humana no muere jamás; la fe y la misma razón prueban que es inmortal.

54 P. ¿Es libre el hombre en sus acciones?

Sí, señor; el hombre es libre en sus acciones, y todos nosotros sentimos dentro de nosotros mismos que podemos hacer una cosa o no hacerla, o hacer una en vez de otra.

55 P. Explicadme con un ejemplo la libertad humana.

Al decir yo voluntariamente una mentira, pienso que podía no decirla y callar, y que podía, asimismo, hablar de otro modo, diciendo la verdad.

56 P. ¿Por qué se dice que el hombre fue creado a imagen y semejanza de Dios?

Se dice que el hombre fue creado a imagen y semejanza de Dios porque el alma humana es espiritual y racional, libre en su obrar, capaz de conocer y amar a Dios y gozarlo eternamente: perfecciones que son un reflejo de la infinita grandeza del Señor.

57 P. ¿En qué estado puso Dios a nuestros primeros padres, Adán y Eva?

Dios puso a Adán y a Eva en el estado de inocencia y gracia; más presto cayeron de él por el pecado.

58 P. ¿Dio el Señor otros dones a nuestros primeros padres, además de la inocencia y de la gracia santificante?

Además de la inocencia y de la gracia santificante, dio el Señor otros dones a nuestros primeros padres, que ellos debían transmitir junto con la gracia santificante a sus descendientes, y eran: la integridad, o perfecta sujeción de la sensualidad de la razón; la inmortalidad; la inmunidad de todo dolor y miseria, y la ciencia proporcionada a su estado.

59 P. ¿Cuál fue el pecado de Adán?

El pecado de Adán fue pecado de soberbia y grave desobediencia.

60 P. ¿Cuál fue el castigo de Adán y Eva?

Adán y Eva perdieron la gracia de Dios y el derecho al cielo; fueron lanzados del paraíso terrenal, sujetos a muchas miserias en el alma y en el cuerpo y condenados a morir.

61 P. Si Adán y Eva no hubiesen pecado, ¿hubieran estado exentos de la muerte?

Si Adán y Eva no hubiesen pecado, tras una feliz estancia en este mundo, hubieran sido trasladados por Dios al cielo, sin morir, para gozar una vida eterna y gloriosa.

62 P. ¿Eran estos dones debidos al hombre?

Estos dones no eran debidos al hombre, sino absolutamente gratuitos y sobrenaturales, y por esto, desobedeciendo Adán al divino mandamiento, pudo Dios, sin injusticia, privar de ellos a Adán y a toda su posteridad.

63 P. ¿Es este pecado únicamente propio de Adán?

Este pecado no es propio únicamente de Adán, sino que también es nuestro, aunque de diverso modo. Es propio de Adán porque él lo cometió con un acto de su voluntad, y por esto en él fue personal. Es propio nuestro porque, habiendo pecado Adán en calidad de cabeza y fuente de todo el linaje humano, viene transfundiéndose por natural generación a todos sus descendientes, y por esto es para nosotros pecado original.

64 P. ¿Cómo es posible que el pecado original se transfunda a todos los hombres?

El pecado original se transfunde a todos los hombres porque, habiendo conferido Dios al género humano en Adán la gracia santificante y los otros dones sobrenaturales, a condición de que Adán no desobedeciese, habiendo éste desobedecido, en su calidad de cabeza y padre de humano linaje, tornó la naturaleza humana rebelde a Dios. Por esta causa, la naturaleza humana se transfunde a todos los hombres descendientes de Adán en estado de rebelión a Dios, privada de la gracia divina y de los otros dones.

65 P. ¿Qué daños nos ha causado el pecado original?

Los daños que nos ha causado el pecado original son la privación de la gracia, la pérdida de la bienaventuranza, la ignorancia, la inclinación al mal, todas las miserias de esta vida y, en fin, la muerte.

66 P. ¿Contraen todos los hombres el pecado original?

Si, señor; todos los hombres contraen el pecado original, excepto la Santísima Virgen, que fue preservada de Dios por singular privilegio, en previsión de los méritos de Jesucristo Nuestro Salvador. Este privilegio se llama “la Inmaculada Concepción” de María Santísima.

67 P. ¿Podrían salvarse los hombres después del pecado de Adán?

Después del pecado de Adán, los hombres no podían salvarse, a no usar Dios la misericordia con ellos.

68 P. ¿Cuál fue la misericordia que usó Dios con el linaje humano?

La misericordia que usó Dios con el linaje humano fue prometer, desde luego, a Adán el Redentor divino o Mesías, y enviarlo después a su tiempo para librar a los hombres de la esclavitud del demonio y del pecado.

69 P. ¿Quién es el Mesías prometido?

El Mesías prometido es Jesucristo, como nos enseña el segundo artículo del Credo.

CAPITULO III - DEL SEGUNDO ARTÍCULO

70 P. ¿Que nos enseña el segundo artículo : CREO EN JESUCRISTO, SU ÚNICO HIJO, NUESTRO SEÑOR?

El segundo artículo del Credo nos enseña que el Hijo de Dios es la segunda persona de la santísima Trinidad: que es Dios eterno, omnipotente, Creador y Señor como el Padre, que se hizo hombre para salvarnos, y que el Hijo de Dios hecho hombre se llama Jesucristo.

71 P. ¿Por qué la segunda Persona se llama HIJO?

La segunda Persona se llama Hijo porque es engendrada del Padre por vía de entendimiento desde toda la eternidad, y por esto se llama también Verbo eterno del Padre.

72 P. Siendo también nosotros hijos de Dios ¿por qué Jesucristo se llama HIJO ÚNICO DE DIOS PADRE?

Jesucristo se llama Hijo Único de Dios Padre porque sólo El es el Hijo suyo por naturaleza, y nosotros somos hijos por creación y adopción.

73 P. ¿Por qué Jesucristo se llama NUESTRO SEÑOR?

Jesucristo se llama Nuestro Señor porque además de habernos creado junto con el Padre y el Espíritu Santo, en cuanto es Dios, nos ha redimido también en cuanto Dios y hombre.

74 P. ¿Por qué el Hijo de Dios hecho hombre se llama JESÚS?

El Hijo de Dios hecho hombre se llama Jesús, que quiere decir Salvador, porque nos ha salvado de la muerte eterna merecida por nuestros pecados.

75 P. ¿Quién dio el nombre de JESÚS al Hijo de Dios hecho hombre?

El nombre de Jesús lo dio al Hijo de Dios hecho hombre el mismo eterno Padre, por medio del Arcángel San Gabriel, cuando éste anunció a la Virgen el misterio de la Encarnación.

76 P. ¿Por qué el Hijo de Dios hecho hombre se llama también CRISTO?

El Hijo de Dios hecho hombre se llama también Cristo, que quiere decir ungido y consagrado, porque antiguamente se ungían a los reyes, sacerdotes y profetas, y Jesucristo es Rey de reyes, Sumo Sacerdote y Sumo Profeta.

77 P. ¿Fue Jesucristo verdaderamente ungido y consagrado con unción corporal?

La unción de Jesucristo no fue corporal, como la de los antiguos reyes, sacerdotes y profetas, sino toda espiritual y divina, porque la plenitud de la divinidad habita en El substancialmente.

78 P. ¿Tuvieron los hombres algún conocimiento de Jesucristo antes de su venida?

Si, señor; los hombres tuvieron conocimiento de Jesucristo antes de su venida por la promesa del Mesías que hizo Dios a nuestros primeros padres, Adán y Eva, y renovó a los Santos Patriarcas, y por las profecías y muchas figuras que le señalaban.

79 P. ¿Por dónde sabemos que Jesucristo es verdaderamente el Mesías y Redentor prometido?

Sabemos que Jesucristo es verdaderamente el Mesías y Redentor prometido por haberse cumplido en El: 1º, todo lo que anunciaban las profecías; 2º, todo lo que representaban las figuras del Antiguo Testamento.

80 P. ¿Qué predecían las profecías acerca del Redentor?

Las profecías predecían la tribu y familia de la cual había de nacer el Redentor; el lugar y tiempo de su nacimiento; sus milagros y las más pequeñas circunstancias de su pasión y muerte; su resurrección y ascensión a los cielos; su reino espiritual, universal y perpetuo, que es la Santa Iglesia Católica.

81 P. ¿Cuáles son las principales figuras del Redentor en el Antiguo Testamento?

Las principales figuras del Redentor en el Antiguo Testamento son el inocente Abel, el sumo sacerdote Melquisedech, el sacrificio de Isaac, José vendido por sus hermanos, el profeta Jonás, el cordero pascual y la serpiente de bronce levantada por Moisés en el desierto.

82 P. ¿Cómo sabemos que Jesucristo es verdadero Dios?

Sabemos que Jesucristo es verdadero Dios: 1º., por el testimonio del Padre cuando dijo: Este es mi Hijo muy amado, en quien tengo todas mis complacencias, oídle. 2º., por la atestación del mismo Jesucristo, confirmada con los milagros más estupendos. 3º., por la doctrina de los Apóstoles. 4º., por la tradición constante de la Iglesia Católica.

83 P. ¿Cuales son los principales milagros obrados por Jesucristo?

Los principales milagros obrados por Jesucristo son, además de la resurrección, el haber dado salud a los enfermos, vista a los ciegos, oído a los sordos, vida a los muertos.

CAPITULO IV - DEL TERCER ARTÍCULO

84 P. ¿Que nos enseña el tercer artículo: QUE FUE CONCEBIDO POR OBRA Y GRACIA DEL ESPÍRITU SANTO: NACIÓ DE SANTA MARÍA VIRGEN?

El tercer artículo del Credo nos enseña que el Hijo de Dios tomó cuerpo y alma, como tenemos nosotros, en las purísimas entrañas de María Virgen, por obra del Espíritu Santo, y que nació de esta Virgen.

85 P. ¿Concurrieron también el Padre y el Hijo a formar el cuerpo y crear el alma de Jesucristo?

Si, señor; a formar el cuerpo y a crear el alma de Jesucristo concurrieron las tres divinas personas.

86 P. ¿Por qué se dice sólo: FUE CONCEBIDO POR OBRA Y GRACIA DEL ESPÍRITU SANTO?

Se dice sólo: fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo porque la Encarnación del Hijo de Dios fue obra de bondad y amor, y las obras de bondad y amor se atribuyen al Espíritu Santo.

87 P. ¿El Hijo de Dios, al hacerse hombre, ¿dejó de ser Dios?

No, señor; el Hijo de Dios se hizo hombre sin dejar de ser Dios.

88 P. ¿Luego Jesucristo es Dios y hombre juntamente?

Si, señor; el Hijo de Dios encarnado, esto es, Jesucristo, es Dios y hombre juntamente, perfecto Dios y perfecto hombre.

89 P. ¿Luego en Jesucristo hay dos naturalezas?

Si, señor; en Jesucristo, que es Dios y hombre, hay dos naturalezas: la divina y la humana.

90 P. ¿Hay también en Jesucristo dos personas, la divina y la humana?

No, señor; en el Hijo de Dios hecho hombre no hay más que una Persona, y ésta es la divina.

91 P. ¿Cuantas voluntades hay en Jesucristo?

En Jesucristo hay dos voluntades: la una divina y la otra humana.

92 P. ¿Tenía Jesucristo libre albedrío?

Si, señor; Jesucristo tenía libre albedrío, más no podía obrar el mal, porque el poder obrar el mal es defecto, no perfección de la libertad.

93 P. ¿Son una misma Persona el Hijo de Dios y el Hijo de María?

El Hijo de Dios y el Hijo de María son una misma Persona, esto es, Jesucristo, verdadero Dios y verdadero hombre.

94 P. ¿Es la Virgen María Madre de Dios?

Si, señor; la Virgen María es Madre de Dios, porque es Madre de Jesucristo, que es verdadero Dios.

95 P. ¿De qué manera vino a ser María Madre de Jesucristo?

María vino a ser Madre de Jesucristo únicamente por obra y gracia del Espíritu Santo.

96 P. ¿Es de fe que María fue siempre Virgen?

Si, señor; es de fe que María Santísima fue siempre Virgen, y es llamada la Virgen por excelencia.

96 bis P. ¿Es de fe que María está en cuerpo y alma en el Cielo?

Si, señor; desde el 1º de noviembre de 1950, es dogma de fe que María Santísima terminado el curso de su mortal vida, fue llevada en cuerpo y alma a los Cielos. Este privilegio se llama “la Asunción de María”.

CAPITULO V - DEL CUARTO ARTÍCULO

97 P. ¿Qué nos enseña el artículo cuarto: PADECIÓ BAJO EL PODER DE PONCIO PILATO: FUE CRUCIFICADO, MUERTO Y SEPULTADO?

En cuarto artículo del Credo nos enseña que Jesucristo, para redimir al mundo con su sangre preciosa, padeció bajo Poncio Pilato, murió en la Cruz y fue sepultado.

98 P. ¿Que expresa la palabra padeció?

La palabra padeció expresa todas las penas que Jesucristo sufrió en su pasión.

99 P. ¿Murió Jesucristo en cuanto Dios o en cuanto hombre?

Jesucristo murió en cuanto hombre, porque en cuanto Dios no podía padecer ni morir.

100 P. ¿Qué especie de suplicio era el de la cruz?

El suplicio de la cruz era el más cruel y afrentoso de todos los suplicios.

101 P. ¿Quién fue el que condenó a Jesucristo a ser crucificado?

El que condenó a Jesucristo a ser crucificado fue Poncio Pilato, gobernador de la Judea, quien había reconocido la inocencia del Salvador, más cedió vilmente a las amenazas del pueblo de Jerusalén.

102 P. ¿No hubiera podido Jesucristo librarse de las manos de los judíos y de Pilato?

Si, señor; Jesucristo hubiera podido librarse de las manos de los judíos y de Pilato, más se sujetó voluntariamente a padecer y morir para salvarnos, por saber que así lo quería su eterno Padre, y aún salió al encuentro de sus enemigos y se dejó espontáneamente prender y llevar a la muerte.

103 P. ¿Dónde fue crucificado Jesucristo?

Jesucristo fue crucificado en el monte Calvario.

104 P. ¿Qué hizo Jesucristo en la Cruz?

Jesucristo en la Cruz rogó por sus enemigos; dio su misma Madre, María Santísima, por madre a su discípulo San Juan, y en él a todos nosotros; ofreció su muerte en sacrificio y satisfizo a la justicia de Dios por los pecados de los hombres.

105 P. ¿No bastara que viniese un Ángel para satisfacer por nosotros?

No, señor; no bastara que viniese un Ángel a satisfacer por nosotros, porque la ofensa hecha a Dios por el pecado era, en cierta manera, infinita, y para satisfacer por ella se requería una persona que tuviese un mérito infinito.

106 P. ¿Era menester que Jesucristo fuese Dios y hombre juntamente para satisfacer a la divina justicia?

Si, señor; era menester que Jesucristo fuese hombre para que pudiese padecer y morir, y que fuese Dios para que sus padecimientos fuesen de valor infinito.

107 P. ¿Por qué era necesario que los méritos de Jesucristo fuesen de valor infinito?

Era necesario que los méritos de Jesucristo fuesen de valor infinito porque la majestad de Dios, ofendida por el pecado, es infinita.

108 P. ¿Era necesario que Jesucristo padeciese tanto?

No, señor; no era absolutamente necesario que Jesús padeciese tanto, porque el menor de sus padecimientos hubiera sido suficiente para nuestra redención, siendo cualquiera acción suya de valor infinito.

109 P. ¿Por qué, pues, quiso Jesús padecer tanto?

Quiso Jesús padecer tanto para satisfacer más copiosamente a la divina justicia, para mostrarnos más su amor y para inspirarnos sumo horror al pecado.

110 P. ¿Sucedieron algunos prodigios a la muerte de Jesús?

Si, señor; a la muerte de Jesús se oscureció el sol, se estremeció la tierra, abriéndose los sepulcros y muchos muertos resucitaron.

111 P. ¿Dónde fue sepultado el cuerpo de Jesucristo?

El cuerpo de Jesucristo fue sepultado en un sepulcro nuevo, cavado en la peña del monte, no lejos del lugar donde le habían crucificado.

112 P. ¿Se separó del cuerpo y del alma la divinidad en la muerte de Jesucristo?

En la muerte de Jesucristo, la divinidad no se separó ni del cuerpo ni del alma, sino solamente el alma se separó del cuerpo.

113 P. ¿Por quién murió Jesucristo?

Jesucristo murió por la salvación de todos los hombres y por todos ellos satisfizo.

114 P. Si Jesucristo murió por todos los hombres, ¿por qué no todos se salvan?

Jesucristo murió por todos; pero no todos se salvan, porque o no le quieren reconocer o no guardan su ley, o no se valen de los medios de santificación que nos dejó.

115 P. ¿Basta para salvarnos que Jesucristo haya muerto por nosotros?

Para salvarnos no basta que Jesucristo haya muerto por nosotros, sino que es necesario aplicar a cada uno el fruto y los méritos de su pasión y muerte, lo que se hace principalmente por medio de los sacramentos instituidos a este fin por el mismo Jesucristo, y como muchos no reciben los sacramentos, o no los reciben bien, por esto hacen para sí mismos inútil la muerte de Jesucristo.

CAPITULO VI - DEL QUINTO ARTÍCULO

116 P. Qué nos enseña el quinto artículo: DESCENDIÓ A LOS INFIERNOS: AL TERCER DÍA RESUCITÓ DE ENTRE LOS MUERTOS?

El quinto artículo del Credo nos enseña: que el alma de Jesucristo, separada ya del cuerpo, fue al Limbo de los Santos Padres y que al tercer día se unió de nuevo a su cuerpo para no separarse jamás.

117 P. ¿Qué se entiende aquí por Infierno?

Por infierno se entiende aquí el Limbo de los Santos Padres, es decir, el lugar donde las almas de los justos eran recogidas y esperaban la redención de Jesucristo.

118 P. ¿Por qué las almas de los Santos Padres no fueron introducidas en el cielo antes de la muerte de Jesucristo?

Las almas de los Santos Padres no fueron introducidas en el cielo antes de la muerte de Jesucristo porque por el pecado de Adán el cielo estaba cerrado, y convenía que el primero que entrase en él fuese Jesucristo, que con su muerte lo abrió de nuevo.

119 P. ¿Por qué Jesucristo quiso dilatar hasta el tercer día su propia resurrección?

Jesucristo quiso dilatar hasta el tercer día su propia resurrección para mostrar con evidencia que verdaderamente había muerto.

120 P. ¿Fue la resurrección de Jesucristo semejante a la resurrección de los otros hombres resucitados?

No, señor; la resurrección de Jesucristo no fue semejante a la resurrección de los otros hombres resucitados, porque Jesucristo resucitó por su propia virtud, y los demás fueron resucitados por la virtud de Dios.

CAPITULO VII - DEL SEXTO ARTICULO

121 P. ¿Qué nos enseña el sexto artículo: SUBIÓ A LOS CIELOS: ESTÁ SENTADO A LA DIESTRA DE DIOS PADRE?

El sexto artículo del Credo nos enseña que Jesucristo, cuarenta días después de su resurrección, subió por sí mismo al cielo en presencia de sus discípulos, y que, siendo como Dios igual al Padre en la gloria, fue como hombre ensalzado sobre todos los Ángeles y Santos y constituido Señor de todas las cosas.

122 P. ¿Por qué Jesucristo después de su resurrección se quedó cuarenta días en la tierra antes de subir al cielo?

Jesucristo, después de su resurrección, quedóse cuarenta días en la tierra, antes de subir al cielo, para probar con varias apariciones que verdaderamente había resucitado, y para instruir más y más y conformar a los Apóstoles en las verdades de la fe.

123 P. ¿Por qué subió Jesucristo al cielo?

Jesucristo subió al cielo: 1º., para tomar posesión de su reino, conquistado con su muerte; 2º., para prepararnos tronos de gloria y para ser nuestro Medianero y Abogado cerca del Padre; 3º., para enviar el Espíritu Santo a sus Apóstoles.

124 P. ¿Por qué se dice de Jesucristo que subió a los cielos y de su Madre Santísima que fue asunta?

Dícese de Jesucristo que subió a los cielos y de su Madre Santísima que fue asunta, porque Jesucristo, por ser Hombre-Dios, subió al cielo por su propia virtud, pero su Madre, como era criatura, aunque la más digna de todas, subió al cielo por la virtud de Dios.

125 P. Explicadme las palabras: ESTÁ SENTADO A LA DIESTRA DE DIOS PADRE.

La palabra está sentado significa la eterna y pacífica posesión que Jesucristo tiene de su gloria, y la expresión a la diestra de Dios Padre quiere decir que ocupa el puesto de honor sobre todas las criaturas.

CAPITULO VIII - DEL SÉPTIMO ARTÍCULO

126 P. ¿Qué nos enseña el séptimo artículo: DESDE ALLÍ HA DE VENIR A JUZGAR A LOS VIVOS Y A LOS MUERTOS?

El séptimo artículo del Credo nos enseña que al fin del mundo Jesucristo, lleno de gloria y majestad, vendrá del cielo para juzgar a todos los hombres, buenos y malos, y dar a cada uno el premio o el castigo que hubiere merecido.

127 P. Si todos, inmediatamente después de la muerte, hemos de ser juzgados por Jesucristo en el juicio particular, ¿por qué todos hemos de ser juzgados en el juicio universal?

Hemos de ser juzgados todos en el juicio universal por varias razones:
1ª., para gloria de Dios; 2ª., para gloria de Jesucristo; 3ª., para gloria de los Santos; 4ª., para confusión de los malos; 5ª., finalmente, para que el cuerpo tenga con el alma su sentencia de premio o de castigo.

128 P. ¿Cómo se manifestará la gloria de Dios en el juicio universal?

En el juicio universal se manifestará la gloria de Dios, porque todos conocerán con cuanta justicia gobierna Dios el mundo, aunque ahora se ven muchas veces afligidos los buenos y en prosperidad los malos.

129 P. ¿Cómo se manifestará en el juicio universal la gloria de Jesucristo?

En el juicio universal se manifestará la gloria de Jesucristo porque habiendo sido injustamente condenado por los hombres, aparecerá entonces a la faz de todo el mundo como juez supremo de todos.

130 P. ¿Cómo se manifestará la gloria de los Santos en el juicio universal?

En el juicio universal se manifestará la gloria de los Santos porque muchos de ellos, que murieron despreciados de los malos, serán glorificados a la vista de todo el mundo.

131 P. ¿Cuál será en el juicio universal la confusión de los malos?

En el juicio universal será grandísima la confusión de los malos, mayormente la de aquellos que oprimieron a los justos o procuraron en vida ser estimados como hombres buenos y virtuosos, al ver descubiertos a todo el mundo los pecados que cometieron, aún los más secretos.

CAPITULO IX - DEL OCTAVO ARTÍCULO

132 P. ¿Qué nos enseña el octavo artículo: CREO EN EL ESPÍRITU SANTO?

El octavo artículo del Credo nos enseña que hay Espíritu Santo, tercera Persona de la Santísima Trinidad, que es Dios eterno, infinito, omnipotente, Criador y Señor de todas las cosas, como el Padre y el Hijo.

133 P. ¿De quién procede el Espíritu Santo?

El Espíritu Santo procede del Padre y del Hijo, por vía de voluntad y de amor, como de un solo principio.

134 P. Si el Hijo procede del Padre, y el Espíritu Santo procede del Padre y del Hijo, parece que le Padre y el Hijo sean antes que el Espíritu Santo, ¿cómo, pues, se dice que todas tres Personas son eternas?

Se dice que todas tres Personas son eternas porque el Padre desde todas la eternidad engendra al Hijo, y del Padre y del Hijo procede desde toda la eternidad el Espíritu Santo.

135 P. ¿Por qué la tercera Persona de la Santísima Trinidad se llama particularmente con el nombre de Espíritu Santo?

La tercera Persona de la Santísima Trinidad se llama particularmente con el nombre de Espíritu Santo porque procede del Padre y del Hijo por vía de aspiración y de amor.

136 P. ¿Qué obra se atribuye especialmente al espíritu Santo?

Al Espíritu Santo se atribuye especialmente la santificación de las almas.

137 P. ¿No nos santifican el Padre y el Hijo lo mismo que el Espíritu Santo?

Si, señor; todas tres personas nos santifican igualmente.

138 P. Pues, ¿por qué la santificación de las almas se atribuye en particular al Espíritu Santo?

La santificación de las almas se atribuye en particular al Espíritu Santo porque es obra de amor, y las obras de amor se atribuyen al Espíritu Santo.

139 P. ¿Cuándo bajó el Espíritu Santo sobre los Apóstoles?

El Espíritu Santo bajó sobre los Apóstoles el día de Pentecostés; es decir, cincuenta días después de la Resurrección de Jesucristo y diez después de su Ascensión.

140 P. ¿Dónde estaban los Apóstoles los diez días antes de Pentecostés?

Los Apóstoles estaban reunidos en el Cenáculo en compañía de la Virgen María y de otros discípulos, y perseveraban en oración esperando al Espíritu Santo que Jesucristo les había prometido.

141 P. ¿Qué efectos produjo el espíritu Santo en los Apóstoles?

El Espíritu Santo confirmó en la fe a los Apóstoles, los llenó de luz, de fortaleza, de caridad y de la abundancia de todos sus dones.

142 P. ¿Fue el Espíritu Santo enviado para sólo los Apóstoles?

El Espíritu Santo fue enviado para toda la Iglesia y para todas las almas fieles.

143 P. ¿ Que obra el Espíritu Santo en la Iglesia?

El Espíritu Santo, como el alma en el cuerpo, vivifica con su gracia y dones a la Iglesia, establece en ella el reinado de la verdad y del amor y la asiste para que lleve con seguridad a sus hijos por el camino del cielo.

CAPITULO X - DEL NOVENO ARTÍCULO
1º.- De la Iglesia en general

144 P. ¿Qué nos enseña el noveno artículo: EN LA SANTA IGLESIA CATÓLICA: LA COMUNIÓN DE LOS SANTOS?

El noveno artículo del Credo nos enseña que Jesucristo fundó en la tierra una sociedad visible, que se llama Iglesia Católica, y que todos los que forman parte de esta Iglesia están en comunión entre sí.

145 P. ¿Por qué después del artículo que trata del Espíritu Santo se habla inmediatamente de la Iglesia Católica?

Después del artículo que trata del Espíritu Santo se habla inmediatamente de la Iglesia Católica, para indicar que toda la santidad de la misma Iglesia se deriva del Espíritu Santo, que es el autor de toda santidad.

146 P. ¿Que quiere decir esta palabra Iglesia?

La palabra Iglesia quiere decir convocación o reunión de muchas personas.

147 P. ¿Quién nos ha convocado o llamado a la Iglesia de Jesucristo?

Dios, por una gracia particular, nos ha llamado a la Iglesia de Jesucristo, para que con la luz de la fe y la observancia de la divina ley le demos el debido culto y lleguemos a la vida eterna.

148 P. ¿Dónde se hallan los miembros de la Iglesia?

Los miembros de la Iglesia se hallan, parte en el cielo, y forman la Iglesia triunfante; parte en el purgatorio, y forman la Iglesia purgante o paciente, y parte sobre la tierra, y forman la Iglesia militante.

149 P. ¿Constituyen una sola Iglesia estas diversas partes de la Iglesia?

Si, señor; estas diversas partes de la Iglesia constituyen una misma Iglesia y un solo cuerpo, porque tienen una misma cabeza, que es Jesucristo; un mismo espíritu, que las anima y une entre sí, un mismo fin, que es la bienaventuranza eterna, la cual unos miembros gozan ya y otros la aguardan.

150 P. ¿A qué parte de la Iglesia se refiere principalmente este noveno artículo del Credo?

Este noveno artículo del Credo se refiere principalmente a la Iglesia militante, que es la Iglesia en que estamos los presentes.

2º.- De la Iglesia en particular

151 P. ¿Qué es la Iglesia Católica?

La Iglesia Católica es la sociedad o congregación de todos los bautizados que, viviendo en la tierra, profesan la misma fe y ley de Cristo, participan en los mismos Sacramentos y obedecen a los legítimos Pastores, principalmente al Romano Pontífice.

152 P. Decid distintamente: ¿qué es necesario para ser miembro de la Iglesia?

Para ser miembro de la Iglesia es necesario estar bautizado, creer y profesar la doctrina de Jesucristo, participar de los mismos Sacramentos, reconocer al Papa y a los otros Pastores legítimos de la Iglesia.

153 P. ¿Quienes son los Pastores legítimos de la Iglesia?

Los Pastores legítimos de la Iglesia son el Romano Pontífice, o sea, el Papa, que es el Pastor universal, y los Obispos. Además, con dependencia de los Obispos y del Papa, tienen parte en el oficio de Pastores los otros sacerdotes, y en especial los párrocos.

154 P. ¿Por qué decís que el Romano Pontífice es el Pastor universal de la Iglesia?

Porque Jesucristo dijo a San Pedro, primer Papa: “Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y te daré las llaves del reino de los cielos, y todo lo que atares en la tierra será atado en el cielo, y lo que desatares en la tierra, será desatado también en el cielo.” Y, asimismo, le dijo: “Apacienta mis corderos, apacienta mis ovejas.”

155 P. ¿No pertenecen, pues, a la Iglesia de Jesucristo tantas sociedades de hombres bautizados que no reconocen al Romano Pontífice por cabeza?

No, señor; todos los que no reconocen al Romano Pontífice por cabeza no pertenecen a la Iglesia de Jesucristo.

156 P. ¿Cómo puede distinguirse la Iglesia de Jesucristo de tantas sociedades o sectas fundadas por los hombres y que se dicen cristianas?

Entre tantas sociedades o sectas fundadas por los hombres, que se dicen cristianas, puédese fácilmente distinguir la verdadera Iglesia de Jesucristo por cuatro notas, porque sólo ella es UNA, SANTA, CATÓLICA y APOSTÓLICA.

157 P. ¿Por qué la Iglesia verdadera es UNA?

La Iglesia verdadera es UNA porque sus hijos, de cualquier tiempo y lugar, están unidos entre sí en una misma fe, un mismo culto, una misma ley y en la participación de unos sacramentos bajo una misma cabeza visible, el Romano Pontífice.

158 P. ¿No podría haber más Iglesias?

No, señor; no puede haber más Iglesias, porque así como no hay más que un solo Dios, una Fe y un solo Bautismo, así no hay ni puede haber más que una sola y verdadera Iglesia.

159 P. ¿Pero no se llaman también Iglesias los fieles unidos de una nación o diócesis?

Se llaman también Iglesias los fieles unidos de una nación o diócesis, pero con todo eso no son sino partes de la Iglesia universal, con la que forman una sola Iglesia.

160 P. ¿Por qué la Iglesia verdadera es SANTA?

La Iglesia verdadera es SANTA porque santa es su cabeza invisible, que es Jesucristo, santos muchos de sus miembros, santas su fe, su ley, sus sacramentos, y fuera de ella no hay ni puede haber verdadera santidad.

161 P. ¿Por qué la Iglesia verdadera es CATÓLICA?

La Iglesia verdadera es CATÓLICA que quiere decir universal, porque abraza los fieles de todos los tiempos y lugares, de toda edad y condición, y todos los hombres del mundo son llamados a formar parte de ella.

162 P. ¿Por qué la Iglesia verdadera es, además, APOSTÓLICA?

La Iglesia verdadera es, además, APOSTÓLICA porque se remonta sin interrupción hasta los Apóstoles; porque cree y enseña todo lo que ellos creyeron y enseñaron y porque es guiada y gobernada por los Pastores que legítimamente les suceden.

163 P. ¿Y por qué la Iglesia verdadera se llama, asimismo, ROMANA?

La Iglesia verdadera se llama, asimismo, ROMANA porque los cuatro caracteres de unidad, santidad, catolicidad y apostolicidad se hallan sólo en la Iglesia que reconoce por cabeza al Obispo de Roma, sucesor de San Pedro.

164 P. ¿Cómo está constituida la Iglesia de Jesucristo?

La Iglesia de Jesucristo está constituida como una verdadera y perfecta sociedad, y en ella, como en toda persona moral, podemos distinguir alma y cuerpo.

165 P. ¿En que consiste el alma de la Iglesia?

El alma de la Iglesia consiste en lo que tiene de interno y espiritual, que es la fe, la esperanza y la caridad, los dones de la gracia y del Espíritu Santo y todos los celestiales tesoros que le provienen de los merecimientos de Cristo Redentor y de los Santos.

166 P. ¿En qué consiste el cuerpo de la Iglesia?

El cuerpo de la iglesia cosiste en lo que tiene de visible y externo, ya en la asociación de los congregados, ya en el culto y ministerio de la enseñanza, ya en su orden exterior y gobierno.

167 P. ¿Basta para salvarse ser como quiera miembro de la Iglesia Católica?

No, señor; no basta para salvarse ser como quiera miembro de la Iglesia Católica, sino que es necesario ser miembro vivo.

168 P. ¿Cuáles son los miembros vivos de la Iglesia?

Los miembros vivos de la Iglesia son todos y solamente los justos; a saber, los que están actualmente en gracia de Dios.

169 P. ¿Y cuales son los miembros muertos?

Miembros muertos de la Iglesia son los fieles que se hallan en pecado mortal.

170 P. ¿Puede alguien salvarse fuera de la Iglesia Católica, Apostólica, Romana?

No, señor; fuera de la Iglesia Católica, Apostólica y Romana, nadie puede salvarse, como nadie pudo salvarse del diluvio fuera del Arca de Noé, que era figura de esta Iglesia.

171 P. ¿Cómo, pues, se salvaron los antiguos Patriarcas y Profetas y todos los otros justos del Antiguo Testamento?

Todos los justos del Antiguo Testamento se salvaron en virtud de la fe que tenían en Cristo futuro, mediante la cual ya pertenecían espiritualmente a esta Iglesia.

172 P. ¿Podría salvarse quien sin culpa se hallase fuera de la Iglesia?

Quién sin culpa, es decir, de buena fe, se hallase fuera de la Iglesia y hubiese recibido el bautismo o, a lo menos, tuviese el deseo implícito de recibirlo y buscase, además, sinceramente la verdad y cumpliese la voluntad de Dios lo mejor que pudiese, este tal, aunque separado del cuerpo de la Iglesia, estaría unido al alma de ella y, por consiguiente, en camino de salvación.

173 P. ¿Se salvaría quien, siendo miembro de la Iglesia Católica, no practicase sus enseñanzas?

Quien, siendo miembro de la Iglesia Católica, no practicase sus enseñanzas, sería miembro muerto y, por tanto, no se salvaría, pues para la salvación de un adulto se requiere no sólo el bautismo y la fe, sino también obras conformes a la fe.

174 P. ¿Estamos obligados a creer todas las verdades que la Iglesia nos enseña?

Si, señor; estamos obligados a creer todas las verdades que la Iglesia nos enseña, y Jesucristo declara que el que no cree, ya está condenado.

175 P. ¿Estamos, además, obligados a cumplir todo lo que la Iglesia nos manda?

Si, señor; estamos obligados a cumplir todo lo que la Iglesia nos manda, porque Jesucristo ha dicho a los Pastores de la Iglesia: “El que a vosotros oye, a Mí me oye, y el que a vosotros desprecia, a Mí me desprecia”.

176 P. ¿Puede errar la Iglesia en los que nos propone para creer?

No, señor; en las cosas que nos propone para creer la Iglesia no puede errar, porque, según la promesa de Jesucristo, está perennemente asistida por el Espíritu Santo.

177 P. ¿Es, pues, infalible la Iglesia Católica?

Si, señor; la Iglesia católica es infalible, y a esta causa, los que rechazan sus definiciones pierden la fe y se hacen herejes.

178 P. ¿Puede la Iglesia Católica ser destruida o perecer?

No, señor; la Iglesia Católica puede ser perseguida, pero no destruida ni perecer. Durará hasta el fin del mundo, porque hasta el fin del mundo estará con ella Jesucristo, como El lo ha prometido.

179 P. ¿Por qué es tan perseguida la Iglesia Católica?

La Iglesia Católica es tan perseguida porque también fue perseguido su divino Fundador y porque reprueba los vicios, combate pasiones y condena todas las injusticias y errores.

180 P. ¿Tienen los católicos otros deberes que cumplir con la Iglesia?

Todo católico ha de profesar un amor sin límites a la Iglesia, estimarse por infinitamente honrado y feliz de pertenecer a ella, y procurar su gloria y acrecentamiento por cuantos medios pueda.

3º.- De la Iglesia docente y de la Iglesia discente o enseñada

181 P. ¿Hay alguna distinción entre los miembros que componen la Iglesia?

Entre los miembros que componen la Iglesia hay una distinción notabilísima, porque hay en ella quien manda y quien obedece, quien enseña y quien es enseñado.

182 P. ¿Cómo se llama la parte de la Iglesia que enseña?

La parte de la Iglesia que enseña se llama docente o enseñante.

183 P. ¿Como se llama la parte de la Iglesia que aprende?

La parte de la Iglesia que aprende se llama discente o enseñada.

184 P. ¿Quien ha establecido está distinción en la Iglesia?

Esta distinción en la Iglesia la ha establecido el mismo Jesucristo.

185 P. ¿Son, pues, dos Iglesias distintas la IGLESIA DOCENTE y la IGLESIA DISCENTE?

La Iglesia docente y la Iglesia discente son partes distintas de una misma y única Iglesia, como en el cuerpo humano la cabeza es distinta a los otros miembros, y con todo forma con ellos un solo cuerpo.

186 P. ¿Quienes componen la Iglesia DOCENTE?

Componen la Iglesia docente todos los Obispos, con el Romano Pontífice a la cabeza, ya se hallen dispersos, ya congregados en Concilio.

187 P. ¿Y quienes componen la Iglesia DISCENTE o enseñada?

Componen la Iglesia discente o enseñada todos los fieles.

188 P. ¿Quiénes, pues, tienen en la Iglesia la autoridad de enseñar?

La autoridad de enseñar la tienen en la Iglesia el Papa y los Obispos, y con dependencia de ellos, los demás sagrados Ministros.

189 P. ¿Estamos obligados a escuchar a la IGLESIA DOCENTE?

Si, por cierto; todos estamos obligados a escuchar a la Iglesia docente, so pena de eterna condenación, porque Jesucristo dijo a los Pastores de la Iglesia en la persona de los Apóstoles: “El que a vosotros oye, a Mí me oye, y el que a vosotros desprecia, a Mí me desprecia”.

190 P. ¿Tiene la Iglesia algún otro poder además de la autoridad de enseñar?

Si, señor; además de la autoridad de enseñar, tiene la Iglesia especialmente el poder de administrar las cosas santas, hacer leyes y exigir su cumplimiento.

191 P. ¿Viene del pueblo el poder que tienen los miembros de la Jerarquía eclesiástica?

El poder que tienen los miembros de la Jerarquía eclesiástica no viene del pueblo, y decir esto sería herejía, sino que viene únicamente de Dios.

192 P. ¿A quién compete el ejercicio de estos poderes?

El ejercicio de estos poderes compete exclusivamente al orden jerárquico, es decir, al Papa y a los Obispos a él subordinados.

4º.- Del Papa y de los Obispos

193 P. ¿Quién es el Papa?

El Papa, a quien llamamos asimismo Sumo Pontífice o también Romano Pontífice, es el sucesor de San Pedro en la Cátedra de Roma, Vicario de Jesucristo y cabeza visible de la Iglesia.

194 P. ¿Por qué el Romano Pontífice es sucesor de San Pedro?

El Romano Pontífice es sucesor de San Pedro porque San Pedro unió en su persona la dignidad de Obispo de Roma y de cabeza dela Iglesia; estableció en Roma por divina disposición su sede, y allí murió; por esto, el que es elegido Obispo de Roma, es también heredero de toda su autoridad.

195 P. ¿Por qué el Romano Pontífice es Vicario de Jesucristo?

El Romano Pontífice es Vicario de Jesucristo porque le representa en la tierra y hace sus veces en el gobierno de la Iglesia.

196 P. ¿Porqué el Romano Pontífice es cabeza visible de la Iglesia?

El Romano Pontífice es cabeza visible de la Iglesia porque él la rige visiblemente con la misma autoridad de Jesucristo, que es cabeza invisible.

197 P. ¿Qué dignidad es, pues, la del Papa?

La dignidad del Papa es la mayor entre todas las dignidades de la tierra, con que ejerce supremo e inmediato poder sobre todos y cada uno de los Pastores y de los fieles.

198 P. ¿Puede errar el Papa al enseñar a la Iglesia?

El Papa no puede errar, es decir, es infalible en las definiciones que atañen a la fe y a las costumbres.

199 P. ¿Por qué motivo el Papa es infalible?

El Papa es infalible por la promesa de Jesucristo y por la continua asistencia del Espíritu Santo.

200 P. ¿Cuándo es infalible el Papa?

El Papa es infalible sólo cuando, en calidad de Pastor y Maestro de todos los cristianos, en virtud de su suprema y apostólica autoridad, define que una doctrina acerca de la fe o de las costumbres debe ser abrazada por la Iglesia universal.

201 P. ¿Qué pecado cometería el que no creyese las solemnes definiciones del Papa?

El que no creyese las solemnes definiciones del Papa, o aunque sólo dudase de ellas, pecaría contra la fe, y si persistiese obstinadamente en esa incredulidad, ya no sería católico, sino hereje.

202 P. ¿A qué fin ha otorgado Dios al Papa el don de la infalibilidad?

Dios ha otorgado al Papa el don de la infalibilidad para que todos estemos ciertos y seguros de la verdad que la Iglesia nos enseña.

203 P. ¿Cuándo definió la Iglesia que el Papa es infalible?

La Iglesia definió en el Concilio Vaticano I que el Papa es infalible, y si alguien presumiese contradecir a esta definición, sería hereje y excomulgado.

204 P. ¿Ha establecido la Iglesia alguna nueva verdad de fe al definir que el Papa es infalible?

No, señor; la Iglesia no ha establecido ninguna nueva verdad de fe al definir que el Papa es infalible, sino solamente ha definido, para oponerse a los nuevos errores, que la infalibilidad del Papa, contenida ya en la Sagrada Escritura y en la Tradición, es una verdad revelada por Dios, y, por consiguiente, que ha de creerse como dogma o artículo de fe.

205 P. ¿Cómo debe portarse todo católico respecto al Papa?

Todo católico debe reconocer al Papa como Padre, Pastor y Maestro universal, y estar unido con él de entendimiento y corazón.

206 P. ¿Quienes son por institución divina los personajes más venerados de la Iglesia después del Papa?

Los personajes más venerados de la Iglesia después del Papa son, por institución divina, los Obispos.

207 P. ¿Quienes son los Obispos?

Los Obispos son los Pastores de los fieles, puestos por el Espíritu Santo para gobernar la Iglesia de Dios en las sedes que se les han encomendado, con dependencia del Romano Pontífice.

208 P. ¿Qué es el Obispo en su propia diócesis?

El Obispo en su propia diócesis es el Pastor legítimo, el Padre, el Maestro, el superior de todos los fieles, eclesiásticos y seglares, que pertenecen a la misma diócesis.

209 P. ¿Por qué llamamos al Obispo Pastor legítimo?

Llamamos al Obispo Pastor legítimo porque la jurisdicción, esto es, el poder que tiene de gobernar a los fieles de la propia diócesis, se le ha conferido según las normas y leyes de la Iglesia.

210 P. ¿De quienes son sucesores el Papa y los Obispos?

El Papa es sucesor de San Pedro, Príncipe de los Apóstoles, y los Obispos son sucesores de los Apóstoles en lo que mira al gobierno ordinario de la Iglesia.

211 P. ¿Debe el fiel estar unido a su propio Obispo?

Sí, señor; todo fiel, eclesiástico o seglar, debe estar unido de entendimiento y de corazón a su propio Obispo, en gracia y comunión con la Sede Apostólica.

212 P. ¿Cómo debe portarse todo fiel con su propio Obispo?

Todo fiel, eclesiástico o seglar, debe reverenciar, amar y honrar a su Obispo y prestarle obediencia en todo lo que se refiere a la cura de almas y al gobierno espiritual de la diócesis.

213 P. ¿De quién se ayuda el Obispo en la cura de almas?

El Obispo, en la cura de almas, se ayuda de los sacerdotes, y principalmente de los párrocos.

214 P. ¿Quién es el párroco?

El Párroco es un sacerdote designado para presidir y dirigir con dependencia del Obispo, una parte de la diócesis, que se llama parroquia.

215 P. ¿Cuáles son los deberes de los fieles para con su párroco?

Los fieles deben estar unidos con su párroco, escucharle con docilidad y profesarle respeto y sumisión en todo lo que atañe al régimen de la Parroquia.

5º P. De la Comunión de los Santos

216 P. ¿Qué nos enseña el noveno artículo del Credo con aquellas palabras: LA COMUNIÓN DE LOS SANTOS?

Con las palabras: La comunión de los Santos, el noveno artículo del Credo nos enseña que en la Iglesia, por la íntima unión que existe entre todos sus miembros, son comunes los bienes espirituales que le pertenecen, así internos como externos.

217 P. ¿Cuáles son en la Iglesia los bienes comunes internos?

Los bienes comunes internos en la Iglesia son: la gracia que se recibe en los Sacramentos, la fe, la esperanza, la caridad, los méritos infinitos de Jesucristo, los merecimientos sobreabundantes de la Virgen y de los Santos y el fruto de todas las buenas obras que se hacen en la misma Iglesia.

218 P. ¿Cuáles son los bienes comunes externos en la Iglesia?

Los bienes externos comunes en la Iglesia son: los Sacramentos, el Santo Sacrificio de la Misa, las públicas oraciones, las funciones religiosas y las demás prácticas exteriores que unen a los fieles entre sí.

219 P. ¿Entran todos los hijos de la Iglesia en esta comunión de bienes?

En la comunión de los bienes internos entran los cristianos que están en gracia de Dios; pero los que están en pecado mortal no participan de estos bienes.

220 P. ¿Por qué no participan de estos bienes los que están en pecado mortal?

Porque la gracia de Dios es la que junta a los fieles con Dios y entre sí; por esto, lo que están en pecado mortal, como no tienen la gracia de Dios, son excluidos de la comunión de los bienes espirituales.

221 P. Luego, ¿no perciben ninguna utilidad de los bienes internos y espirituales de la Iglesia los cristianos que están en pecado mortal?

Los cristianos que están en pecado mortal no dejan de percibir alguna utilidad de los bienes internos y espirituales de la Iglesia de que están privados, en cuanto conservan el carácter de cristiano, que es indeleble, y son ayudados de las oraciones y buenas obras de los fieles para alcanzar la gracia de convertirse a Dios.

222 P. ¿Pueden participar de los bienes externos de la Iglesia los que están en pecado mortal?

Los que están en pecado mortal pueden participar de los bienes externos de la Iglesia, con tal que no estén separados de la Iglesia por la excomunión.

223 P. ¿Por qué los miembros de esta comunión, tomados en conjunto, se llaman santos?

Los miembros de esta comunión se llaman santos, porque todos son llamados a la santidad y fueron santificados por medio del Bautismo, y muchos de ellos han llegado ya a la perfecta santidad.

224 P. ¿Se extiende también al cielo y al purgatorio la comunión de los santos?

Si, señor; la comunión de los santos se extiende también al cielo y al purgatorio, porque la caridad une las tres Iglesias: triunfante, purgante y militante; los santos ruegan a Dios por nosotros y por las almas del purgatorio, y nosotros damos honor y gloria a los santos, y podemos aliviar a las almas del purgatorio aplicándoles en sufragio misas, limosnas, indulgencias y otras buenas obras.

6º.- De los que están fuera de la Iglesia

225 P. ¿Quiénes son los que no pertenecen a la comunión de los Santos?

No pertenecen a la comunión de los santos en la otra vida los condenados, y en ésta, los que están fuera de la verdadera Iglesia.

226 P. ¿Quiénes están fuera de la verdadera Iglesia?

Está fuera de la verdadera Iglesia los infieles, los judíos, los herejes, los apóstatas, los cismáticos y los excomulgados.

227 P. ¿Quiénes son los infieles?

Infieles son los que no tienen el Bautismo ni creen en Jesucristo, o porque creen y adoran falsas divinidades, cómo los idólatras, o porque, aun admitiendo al único verdadero Dios, no creen en Cristo Mesías, ni como venido ya en la persona de Jesucristo ni como que ha de venir: tales son los mahometanos y otros semejantes.

228 P. ¿Quiénes son los judíos?

Judíos son los que profesan la ley de Moisés, no han recibido el Bautismo y no creen en Jesucristo.

229 P. ¿Quiénes son los herejes?

Herejes son los bautizados que rehusan con pertinacia creer alguna verdad revelada por Dios y enseñada como de fe por la Iglesia Católica; por ejemplo los arrianos, los nestorianos y las varias sectas de los protestantes.

230 P. ¿Quiénes son los apóstatas?

Apóstatas son los que abjuran, esto es, niegan con acto externo la fe católica que antes profesaban.

231 P. ¿Quiénes son los cismáticos?

Cismáticos son los cristianos que, sin negar explícitamente ningún dogma, se separan voluntariamente de la Iglesia de Jesucristo, esto es, de sus legítimos Pastores.

232 P. ¿Quiénes son los excomulgados?

Los excomulgados son aquellos que por faltas gravísimas son castigados por el Papa o por el Obispo con la pena de excomunión, en cuya virtud son, como indignos, separados del cuerpo de la Iglesia, que espera y desea su conversión.

233 P. ¿Débese temer la excomunión?

La excomunión debe temer grandemente, porque es la pena más grave y más terrible que puede imponer la Iglesia a sus hijos rebeldes y obstinados.

234 P. ¿De qué bienes quedan privados los excomulgados?

Los excomulgados quedan privados de las oraciones públicas, de los sacramentos, de las indulgencias y, después de sentencia condenatoria o declaratoria, también de sepultura eclesiástica.

235 P. ¿Podemos ayudar en alguna manera a los excomulgados?

Podemos ayudar en alguna manera a los excomulgados y a todos los que están fuera de la Iglesia con saludables avisos, con oraciones y buenas obras, suplicando al Señor que por su misericordia les otorgue la gracia de convertirse a la fe y entrar en la comunión de los Santos.

CAPITULO XI - DEL DÉCIMO ARTÍCULO

236 P. ¿Qué nos enseña el décimo artículo: EL PERDÓN DE LOS PECADOS?

El décimo artículo del Credo nos enseña que Jesucristo ha dejado a su Iglesia el poder de perdonar los pecados.

237 P. ¿Puede la Iglesia perdonar toda clase de pecados?

Si, señor; la Iglesia puede perdonar todos los pecados, por muchos y graves que sean, porque Jesucristo le ha dado plena potestad para atar y desatar.

238 P. ¿Quiénes son los que en la Iglesia ejercen esta potestad de perdonar los pecados?

Los que en la Iglesia ejercen la potestad de perdonar los pecados son, en primer lugar, el Papa, que es el único que posee la plenitud de esta potestad; luego los Obispos y, con dependencia de los Obispos, los sacerdotes.

239 P. ¿Cómo perdona la Iglesia los pecados?

La Iglesia perdona los pecados por los méritos de Jesucristo, confiriendo los sacramentos instituidos por El con este fin, principalmente el Bautismo y la Penitencia.

CAPITULO XII - DEL UNDÉCIMO ARTÍCULO

240 P. ¿Qué nos enseña el undécimo artículo: LA RESURRECCIÓN DE LOS MUERTOS?

El undécimo artículo del Credo nos enseña que todos los hombres resucitarán, volviendo a tomar cada alma el cuerpo que tuvo en esta vida.

241 P. ¿Cómo sucederá la resurrección de los muertos?

La resurrección de los muertos sucederá por la virtud de Dios omnipotente, a quien nada es imposible.

242 P. ¿Cuándo acaecerá la resurrección de los muertos?

La resurrección de los muertos acaecerá al fin del mundo, y entonces seguirá el juicio universal.

243 P. ¿Por qué ha dispuesto Dios la resurrección de los cuerpos?

Dios ha dispuesto la resurrección de los cuerpos para que, habiendo el alma obrado el bien o el mal junto con el cuerpo, sea también junto con el cuerpo premiada o castigada.

244 P. ¿Resucitarán todos los hombres de la misma manera?

No, señor; sino que habrá grandísima diferencia entre los cuerpos de los escogidos y los cuerpos de los condenados, porque sólo los cuerpos de los escogidos tendrán, a semejanza de Jesucristo resucitado, las dotes de los cuerpos gloriosos.

245 P. ¿Cuáles son las dotes que adornarán los cuerpos de los escogidos?

Las dotes que adornarán los cuerpos gloriosos de los escogidos son: 1ª., la impasibilidad, por la que no podrán ya estar sujetos a males y dolores de ningún género, ni a la necesidad de comer, descansar o de otra cosa; 2ª., la claridad, con la que brillarán como el sol y como otras tantas estrellas; 3ª., la agilidad, con que podrán trasladarse en un momento y sin fatiga de un lugar a otro, y de la tierra al cielo; 4ª., la sutileza, con que sin obstáculo alguno podrán penetrar cualquier cuerpo, como lo hizo Jesucristo resucitado.

246 P. ¿Cómo serán los cuerpos de los condenados?

Los cuerpos de los condenados estarán privados de las dotes de los cuerpos gloriosos y llevarán la horrible marca de su eterna condenación.

CAPITULO XIII - DEL DUODÉCIMO ARTÍCULO

247 P. ¿Qué nos enseña el último artículo: Y LA VIDA ETERNA?

El último artículo del Credo nos enseña que, después de la vida presente, hay otra, o eternamente bienaventurada para los escogido en el cielo o eternamente infeliz para los condenados al infierno.

248 P. ¿Podemos comprender la bienaventuranza del cielo?

No, señor; no podemos comprender la bienaventuranza de la gloria, porque sobrepuja nuestro limitado entendimiento y porque los bienes del cielo no pueden compararse con los bienes de este mundo.

249 P. ¿En que consiste la bienaventuranza delos escogidos?

La bienaventuranza de los escogidos consiste en ver, amar y poseer por siempre a Dios, fuente de todo bien.

250 P. ¿En qué consiste la infelicidad de los condenados?

La infelicidad de los condenados consiste en ser privados por siempre de la vista de Dios y castigados con eternos tormentos en el infierno.

251 P. ¿Son únicamente para las almas los bienes del cielo y los males del infierno?

Los bienes del cielo y los males del infierno son ahora únicamente para las almas, porque solamente las almas está ahora en el cielo o en el infierno; pero después de la resurrección, los hombres serán o felices o atormentados para siempre en alma y cuerpo.

252 P. ¿Serán iguales para los bienaventurados los bienes del cielo y para los condenados los males del infierno?

Los bienes del cielo para los bienaventurados y los males de infierno para los condenados serán iguales en la sustancia y en la duración eterna; más en la medida o en los grados serán mayores o menores, según los méritos o deméritos de cada cual.

253 P. ¿Que quiere decir la palabra AMÉN al final del Credo?

La palabra Amén al fin de las oraciones significa: Así sea; al fin del Credo significa: Así es, que vale tanto como decir: Creo que es la pura verdad cuanto en estos doce artículos se contiene y estoy más cierto de ello que si lo viese con mis propios ojos.

Parte segunda – De la oración

PARTE SEGUNDA DE LA ORACIÓN
CAPÍTULO PRIMERO - DE LA ORACIÓN EN GENERAL

254 P. ¿De qué se trata en la segunda parte de la Doctrina Cristiana?

En la segunda parte de la Doctrina Cristiana se trata de la oración en general y del Padrenuestro en particular.

255 P. ¿Qué es la oración?

Oración es una elevación de la mente a Dios para adorarle, darle gracias y pedirle lo que necesitamos.

256 P. ¿De cuántas maneras es la oración?

La oración es de dos maneras: mental y vocal. Oración mental es la que se hace con solo la mente; oración vocal es la que se hace con las palabras, acompañadas de la atención de la mente y de la devoción del corazón.

257 P. ¿Hay otras maneras de oración?

Hay otras maneras de oración, a saber: privada y pública.

258 P. ¿Qué es la oración privada?

Oración privada es la que uno hace en particular para sí o para otros.

259 P. ¿Qué es la oración pública?

Oración pública es la que se hace por los sagrados Ministros, a nombre de la Iglesia y por la salvación del pueblo fiel. Puede llamarse, asimismo oración pública la oración hecha en común y públicamente por los fieles, como en las procesiones, en las romerías o en la Iglesia.

260 P. ¿En qué se funda la esperanza de recabar de Dios por medio de la oración los auxilios y gracias que necesitamos?

La esperanza de recabar de Dios por medio de la oración las gracias que necesitamos se funda en la promesa de Dios omnipotente, misericordioso y fidelísimo, y en los merecimientos de Jesucristo.

261 P. ¿En qué nombre hemos de pedir las gracias que necesitamos?

Hemos de pedir a Dios las gracias que necesitamos en nombre de Jesucristo, como el mismo nos lo ha enseñado y como lo practica la Iglesia, terminando todas las oraciones con estas palabras: per Dóminum nostrum Iesum Christum, esto es, por Nuestro Señor Jesucristo.

262 P. ¿Por qué hemos de pedir a Dios las gracias en nombre de Jesucristo?

Hemos de pedir a Dios la gracias en nombre de Jesucristo porque siendo El nuestro medianero, sólo por medio de El podemos acercarnos al trono de Dios.

263 P. ¿Por qué muchas veces no son oídas nuestras oraciones, siendo así que la oración tiene tanta virtud?

Muchas veces no son oídas nuestras oraciones porque o pedimos cosas que no convienen a nuestra salvación eterna o porque no pedimos como debemos.

264 P. ¿Qué cosas debemos principalmente pedir a Dios?

Debemos principalmente pedir a Dios su gloria, nuestra eterna salvación y los medios de alcanzarla.

265 P. ¿No es lícito pedir también a Dios bienes temporales?

Si, señor; es lícito pedir también a Dios bienes temporales, aunque siempre con la condición de que sean conformes a su santísima voluntad y no impidan nuestra eterna salvación.

266 P. ¿A qué pedir a Dios lo que necesitamos, si ya lo sabe?

Aunque Dios sepa lo que necesitamos, quiere, no obstante, que se lo pidamos para reconocerle como dador de todo bien, atestiguarle nuestra humilde sumisión y merecer sus favores.

267 P. ¿Cuál es la primera y mejor disposición para hacer eficaces nuestras oraciones?

La primera y mejor disposición para hacer eficaces nuestras oraciones es estar en gracia de Dios o desear, al menos, ponerse en tal estado.

268 P. ¿Que otras disposiciones se requieren para bien orar?

Para bien orar se requieren especialmente recogimiento, humildad, confianza, perseverancia y resignación.

269 P. ¿Qué quiere decir orar con recogimiento?

Quiere decir pensar que hablamos con Dios, por lo cual hemos de orar con todo respeto y devoción, evitando cuanto es posible las distracciones, esto es, todo pensamiento extraño a la oración.

270 P. ¿Disminuyen las distracciones el mérito de la oración?

Si, señor; cuando nosotros mismos las procuramos o bien no las desechamos con diligencia. Mas si hacemos lo posible para estar recogidos en Dios, no menoscaban el mérito de nuestra oración, antes pueden acrecentarlo.

271 P. ¿Que se requiere para hacer oración con recogimiento?

Antes de la oración debemos alejar todas las ocasiones de distracción, y durante ella pensar que estamos delante de Dios, que nos ve y escucha.

272 P. ¿Qué quiere decir orar con humildad?

Quiere decir reconocer sinceramente la propia indignidad, impotencia y miseria, acompañando la oración con la compostura del cuerpo.

273 P. ¿Qué quiere decir orar con confianza?

Quiere decir que hemos de tener firme esperanza de ser oídos, si ha de ser para gloria de Dios y nuestro verdadero bien.

274 P. ¿Que quiere decir orar con perseverancia?

Quiere decir que no hemos de cansarnos de orar, aunque Dios no nos oiga inmediatamente, sino que hemos de seguir orando con más fervor.

275 P. ¿Que quiere decir orar con resignación?

Quiere decir que nos hemos de conformar con la voluntad de Dios, pues conoce mejor que nosotros cuanto nos es necesario para nuestra salvación eterna, aun en el caso que no sean oídas nuestras oraciones.

276 P. ¿Oye Dios siempre las oraciones bien hechas?

Sí, señor; siempre oye Dios las oraciones bien hechas, pero siempre en el modo que El sabe que es provechoso para nuestra eterna salvación, y no siempre según nuestra voluntad.

277 P. ¿Que efectos produce en nosotros la oración?

La oración nos hace reconocer nuestra dependencia de Dios, supremo Señor, en todas las cosas; nos hace pensar en las cosas celestiales, nos hace adelantar en la virtud, nos alcanza de Dios misericordia, nos fortalece contra las tentaciones, nos conforta en las tribulaciones, nos socorre en nuestras necesidades y nos impetra la gracia de la perseverancia final.

278 P. ¿En qué ocasiones especialmente hemos de orar?

Hemos de orar especialmente en los peligros, en las tentaciones, en el trance de la muerte; además, hemos de orar frecuentemente, y es bien que esto se haga a la mañana, a la tarde y al principio de las acciones más importantes del día.

279 P. ¿Por quiénes hemos de orar?

Hemos de orar por todos, a saber: por nosotros mismos, por nuestros padres, superiores, bienhechores, amigos y enemigos; por la conversión de los pobres pecadores, de los que están fuera de la Iglesia y por las benditas almas del purgatorio.

CAPITULO II - DE LA ORACIÓN DOMINICAL
1º.- De la oración dominical en general

280 P. ¿Cuál es la oración vocal más excelente?

La oración vocal más excelente es la que el mismo Jesucristo nos enseñó, que es el Padrenuestro.

281 P. ¿Por qué el PADRENUESTRO es la oración más excelente?

El Padrenuestro es la oración más excelente porque la compuso y enseñó el mismo Jesucristo; encierra con claridad y en pocas palabras cuanto podemos esperar de Dios y es la regla y dechado de todas las demás oraciones.

282 P. ¿No es también el Padrenuestro la oración más eficaz?

El Padrenuestro es también la oración más eficaz porque es la más acepta a Dios, pues hacemos oración con las mismas palabras que nos dictó su divino Hijo.

283 P. ¿Por qué el Padrenuestro se llama oración dominical?

El Padrenuestro se llama oración dominical, que quiere decir oración del Señor, precisamente porque nos la enseñó Jesucristo por su propia boca.

284 P. ¿Cuántas peticiones hay en el Padrenuestro?

En el Padrenuestro hay siete peticiones precedidas de una introducción.

285 P. Rezad el Padrenuestro

Padrenuestro, que estás en los cielos: (1º) Santificado sea tu nombre. (2º) Venga a nosotros tu reino. (3º) Hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo. (4º) El pan nuestro de cada día, dánosle hoy. (5º) Perdónanos nuestras deudas, así como nosotros perdonamos a nuestros deudores. (6º) Y no nos dejes caer en la tentación. (7º) Mas líbranos del mal. Amén.

286 P. ¿Por qué al invocar a Dios al principio de la oración dominical le llamamos Padre nuestro?

Al principio de la oración dominical llamamos Padre nuestro a Dios para despertar nuestra confianza en su bondad infinita, siendo nosotros sus hijos.

287 P. ¿Cómo podemos decir que somos hijos de Dios?

Somos hijos de Dios: 1º., porque El nos ha creado a su imagen y nos conserva y gobierna con su providencia; 2º., porque, con especial benevolencia, nos adoptó en el Bautismo como hermanos de Jesucristo y coherederos con El de la vida eterna.

288 P. ¿Por qué llamamos a Dios Padre nuestro y no Padre mío?

Llamamos a Dios Padre nuestro y no Padre mío porque todos somos sus hijos, por lo cual hemos de mirarnos y amarnos todos como hermanos y rogar unos por otros.

289 P. ¿Cómo, estando Dios en todo lugar, decimos: QUE ESTÁS EN LOS CIELOS?

Dios está en todo lugar; pero decimos Padre nuestro que estás en los cielos para levantar nuestros corazones al cielo, donde Dios, en la gloria, se manifiesta a sus hijos.

2º.- De la primera petición

290 P. ¿Qué pedimos en la primera petición: SANTIFICADO SEA TU NOMBRE?

En la primera petición Santificado sea tu nombre, pedimos que Dios sea conocido, amado, honrado y servido de todo el mundo y de nosotros en particular.

291 P. ¿Qué entendemos cuando pedimos que Dios sea conocido, amado y servido de todo el mundo?

Entendemos pedir que los infieles vengan al conocimiento del verdadero Dios, los herejes reconozcan sus errores, los cismáticos vuelven a la unidad de la Iglesia, los pecadores se conviertan y los justos perseveren en el bien.

292 P. ¿Por qué pedimos ante todo que sea santificado el nombre de Dios?

Pedimos ante todo que sea santificado el nombre de Dios porque hemos de desear más la gloria de Dios que todos nuestros intereses y provechos.

293 P. ¿De qué manera hemos de procurar la gloria de Dios?

Hemos de procurar la gloria de Dios con oraciones y buen ejemplo, y enderezando a El todos nuestros pensamientos, afectos y acciones.

3º.- De la segunda petición

294 P. ¿Qué entendemos por REINO DE DIOS?

Por reino de Dios entendemos un triple reino espiritual: el reino de Dios en nosotros, que es la gracia; el reino de Dios en la tierra, que es la Iglesia Católica, y el reino de Dios en el cielo, que es la bienaventuranza.

295 P. ¿Qué pedimos en orden a la gracia con las palabras VENGA A NOSOTROS TU REINO?

En orden a la gracia, pedimos que Dios reine en nosotros con su gracia santificante, por la cual se complace de morar en nosotros como rey en su corte, y que nos conserve unidos a sí con las virtudes de la Fe, Esperanza y Caridad, por las cuales reina en nuestro entendimiento, en nuestro corazón y en nuestra voluntad.

296 P. ¿Qué pedimos en orden a la Iglesia con las palabras venga a nosotros tu reino?

En orden a la Iglesia, pedimos que se dilate y propague por todo el mundo para la salvación de los hombres.

297 P. ¿Qué pedimos en orden a la gloria con las palabras venga a nosotros tu reino?

En orden a la gloria, pedimos ser un día admitidos en la bienaventuranza, para que hemos sido creados, donde seremos cumplidamente felices.

4º.- De la tercera petición

298 P. ¿Qué pedimos en la tercera petición: HÁGASE TU VOLUNTAD, ASÍ EN LA TIERRA COMO EN EL CIELO?

En la tercera petición: Hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo, pedimos la gracia de hacer en todas las cosas la voluntad de Dios, obedeciendo sus santos mandamientos con la misma presteza con que los ángeles y santos le obedecen en el cielo. Pedimos además la gracia de corresponder a las divinas inspiraciones y de vivir resignados a la voluntad de Dios cuando nos enviare alguna tribulación.

299 P. ¿Es necesario que cumplamos la voluntad de Dios?

Es tan necesario que cumplamos la voluntad de Dios como lo es alcanzar la salvación eterna, pues Jesucristo dijo que sólo entrará en el reino de los cielos el que hiciere la voluntad de su Padre.

300 P. ¿De qué manera podemos conocer la voluntad de Dios?

Podemos conocer la voluntad de Dios especialmente por medio de la Iglesia y de nuestros superiores espirituales, puestos por Dios para guiarnos en el camino de la salvación. También podemos conocerla por las divinas inspiraciones y por las circunstancias en que el Señor nos ha colocado.

301 P. ¿Debemos reconocer siempre la voluntad de Dios en las cosas así prósperas como adversas de esta vida?

En las cosas prósperas como adversas de esta vida hemos de reconocer siempre la voluntad de Dios, el cual todo lo dispone o permite para nuestro bien.

5º.- De la cuarta petición

302 P. ¿Qué pedimos en la cuarta petición: EL PAN NUESTRO DE CADA DÍA, DÁNOSLE HOY?

En la cuarta petición: El pan nuestro de cada día, dánosle hoy, pedimos a Dios lo que nos es necesario cada día para el alma y para el cuerpo.

303 P. ¿Qué pedimos a Dios para nuestra alma?

Para nuestra alma pedimos a Dios el mantenimiento de la vida espiritual, es decir, rogamos al Señor nos dé su gracia, de la que continuamente tenemos necesidad.

304 P. ¿Cómo se mantiene la vida de nuestra alma?

La vida de nuestra alma se mantiene sobre todo con la divina palabra y con el Santísimo Sacramento del altar.

305 P. ¿Qué pedimos a Dios para nuestro cuerpo?

Para nuestro cuerpo pedimos lo necesario para el mantenimiento de la vida temporal.

306 P. ¿Por qué decimos: EL PAN NUESTRO DE CADA DÍA y no EL PAN DE CADA DÍA?

Decimos: El pan nuestro de cada día y no El pan de cada día, para excluir todo deseo de los bienes ajenos; por esto le pedimos al Señor nos ayude en las ganancias justas y lícitas con que nos procuremos el sustento mediante nuestro trabajo, sin echar mano de hurtos y malas mañas.

307 P. ¿Por qué decimos DANOS y no DAME el pan?

Decimos danos y no dame para traernos a la memoria que, siendo Dios el dador de todos los bienes, al darlos en abundancia, lo hace para que distribuyamos lo superfluo a los pobres.

308 P. ¿Por qué añadimos DE CADA DÍA?

Añadimos de cada día porque hemos de querer lo necesario para la vida, y no la abundancia de manjares y bienes de la tierra.

309 P. ¿Qué significa la palabra HOY en la cuarta petición?

La palabra hoy quiere decir que no hemos de andar demasiado solícitos de lo por venir, sino pedir lo que al presente necesitamos.

6º.- De la quinta petición

310 P. ¿Qué pedimos en la quinta petición: PERDÓNANOS NUESTRAS DEUDAS, ASÍ COMO NOSOTROS PERDONAMOS A NUESTROS DEUDORES?

En la quinta petición: Perdónanos nuestras deudas, así como nosotros perdonamos a nuestros deudores, pedimos a Dios nos perdone nuestros pecados, como nosotros perdonamos a nuestros ofensores.

311 P. ¿Por qué nuestros pecados se llaman deudas?

Nuestro pecados se llaman deudas porque hemos de satisfacer por ellos a la divina justicia en esta vida o en la otra.

312 P. ¿Pueden esperar de Dios perdón los que no perdonan al prójimo?

Los que no perdonan al prójimo no tienen razón ninguna para esperar de Dios el perdón; tanto más que se condenan por sí mismos diciendo a Dios que les perdone como ellos perdonan a su prójimo.

7º.- De la sexta petición

313 P. ¿Qué pedimos en la sexta petición: Y NO NOS DEJES CAER EN LA TENTACIÓN?

En la sexta petición: Y no nos dejes caer en la tentación, pedimos a Dios que nos libre de las tentaciones, o no permitiendo que seamos tentados o dándonos gracia para no ser vencidos.

314 P. ¿Qué son las tentaciones?

Las tentaciones son unas excitaciones al pecado que nos vienen del demonio, o de los malos, o de nuestras pasiones.

315 P. ¿Es pecado tener tentaciones?

No, señor; no es pecado tener tentaciones; pero es pecado consentir en ellas o exponerse voluntariamente a peligro de consentir.

316 P. ¿Por qué permite Dios que seamos tentados?

Dios permite que seamos tentados para probar nuestra fidelidad, para darnos ocasión de perfeccionar nuestras virtudes y para acrecentar nuestros merecimientos.

317 P. ¿Qué hemos de hacer para evitar las tentaciones?

Para evitar las tentaciones hemos de huir de las ocasiones peligrosas, tener a raya nuestros sentidos, recibir a menudo los Santos Sacramentos y valernos de la oración.

8º.- De la séptima petición

318 P. ¿Qué pedimos en la séptima petición: MAS LÍBRANOS DEL MAL?

En la séptima petición: Mas líbranos del mal, pedimos a Dios que nos libre de los males pasados, presentes y futuros, especialmente del sumo mal, que es el pecado, y de la pena de él, que es la condenación eterna.

319 P. ¿Por qué decimos LÍBRANOS DEL MAL y no DE LOS MALES?

Decimos: Líbranos del mal y no de los males porque no hemos de desear estar exentos de todos los males de esta vida, sino solamente de los que no convienen a nuestra alma, y por esto pedimos nos libre Dios del mal en general; a saber, de todo lo que prevé que es mal para nosotros.

320 P. ¿Es lícito pedir que nos libre Dios de algún mal particular, por ejemplo, de una enfermedad?

Si, señor; es lícito pedir a Dios nos libre de algún mal particular, pero siempre remitiéndonos a su voluntad, ya que puede ordenar aquella misma tribulación para provecho de nuestra alma.

321 P. ¿De qué sirven las tribulaciones que Dios nos envía?

Las tribulaciones nos ayudan a hacer penitencia de nuestras culpas, a ejercitar las virtudes y, sobre todo, a imitar a Jesucristo, nuestra cabeza, a la cual es justo nos conformemos en los padecimientos si queremos tener parte en su gloria.

322 P. ¿Qué quiere decir AMÉN al final del PADRENUESTRO?

Amén quiere decir: así sea, así lo deseo, así lo pido al Señor y así lo espero.

323 P. ¿Basta rezar de cualquier manera el PADRENUESTRO para alcanzar las gracias que pedimos?

Para alcanzar las gracias que pedimos en el Padrenuestro hay que rezarlo sin atropellamiento, con atención y acompañarlo con el corazón.

324 P. ¿Cuándo hemos de rezar el PADRENUESTRO?

Hemos de rezar el Padrenuestro todos los días, pues todos los días tenemos necesidad del socorro de Dios.

CAPITULO III - DEL “AVEMARÍA”

325 P. ¿Qué oración solemos rezar después del PADRENUESTRO?

Después del Padrenuestro solemos rezar la salutación angélica o Avemaría, por la cual recurrimos a la Santísima Virgen.

326 P. ¿Por qué el AVEMARÍA se llama SALUTACIÓN ANGÉLICA?

El Avemaría se llama salutación angélica porque comienza por las palabras con que el Arcángel San Gabriel saludó a la Virgen María.

327 P. ¿De quién son las palabras del AVEMARÍA?

Las palabras del Avemaría son: parte del Arcángel San Gabriel, parte de Santa Isabel y parte de la Iglesia.

328 P. ¿Cuáles son las palabras del Arcángel San Gabriel?

Las palabras del Arcángel San Gabriel son: “Dios te salve, llena de gracia; el Señor es contigo; bendita tú eres entre todas las mujeres.”

329 P. ¿Cuándo dijo el Ángel estas palabras a María?

El Ángel dijo estas palabras a María cuando fue a anunciarle de parte de Dios el misterio de la Encarnación que en ella había de obrarse.

330 P. ¿Con qué intento saludamos nosotros a la Santísima Virgen con las palabras del Arcángel?

Saludamos a la Santísima Virgen con las palabras del Arcángel para alegrarnos con Ella de los singulares privilegios y dones que Dios le concedió con preferencia a todas las otras criaturas.

331 P. ¿Cuáles son las palabras de Santa Isabel?

Las palabras de Santa Isabel son: “Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre.”

332 P. ¿Cuándo dijo Santa Isabel estas palabras?

Santa Isabel dijo estas palabras, inspirada por Dios, cuando, tres meses antes de dar a luz a San Juan Bautista, fue visitada por la Santísima Virgen, que llevaba ya en su seno a su divino Hijo.

333 P. ¿Qué hacemos nosotros al decir estas palabras?

Al decir estas palabras de Santa Isabel nos alegramos con María Santísima de su excelsa dignidad de Madre de Dios y bendecimos al Señor y le damos gracias por habernos dado a Jesucristo por medio de María.

334 P. ¿De quién son las otras palabras del AVEMARÍA?

Todas las otras palabras del Avemaría han sido añadidas por la Iglesia.

335 P. ¿Qué pedimos con las últimas palabras del AVEMARÍA?

Con las últimas palabras del Avemaría imploramos la protección de la Santísima Virgen en el transcurso de esta vida, y especialmente en la hora de nuestra muerte, en que será mayor nuestra necesidad.

336 P. ¿Por qué después del PADRENUESTRO decimos el AVEMARÍA con preferencia a otra oración?

Porque la Virgen Santísima es la más poderosa abogada cerca de Jesucristo, y por esto, dicha la oración que Jesucristo nos enseñó, rogamos a la Santísima Virgen nos alcance las gracias que hemos pedido.

337 P. ¿Por qué razón la Virgen Santísima es tan poderosa?

La Virgen Santísima es tan poderosa porque es Madre de Dios y es imposible no sea de El atendida.

339 P. ¿Qué devoción a María recomienda la Iglesia de un modo especial?

La devoción a María Santísima que la Iglesia recomienda de un modo especial es el rezo del Santo Rosario.

CAPITULO IV - DE LA INVOCACIÓN A LOS SANTOS

340 P. ¿Es bueno y provechoso recurrir a la intercesión de los Santos?

Es de grandísimo provecho rezar a los Santos, y ha de hacerlo todo cristiano. De un modo particular hemos de rezar al Ángel de nuestra Guarda; a San José, patrón de la Iglesia; a los Santos Apóstoles, al Santo de nuestro nombre y a los Santos Patronos de la diócesis y de la parroquia.

341 P. ¿Qué diferencia hay entre la oración que hacemos a Dios y la que hacemos a los Santos?

Entre la oración que hacemos a Dios y la que hacemos a los Santos hay esta diferencia: que rogamos a Dios para que, como autor de la gracia nos otorgue los bienes y nos libre de los males, y rogamos a los Santos para que, en calidad de abogados cerca de Dios, intercedan por nosotros.

342 P. ¿Qué queremos significar cuando decimos que un Santo nos ha concedido alguna gracia?

Cuando decimos que un Santo nos ha concedido alguna gracia queremos significar que aquel Santo nos la ha alcanzado de Dios.

PARTE TERCERA DE LOS MANDAMIENTOS DE LA LEY DE DIOS Y DE LA IGLESIA
CAPÍTULO I - DE LOS MANDAMIENTOS DE LA LEY DE DIOS EN GENERAL

343 P. ¿De qué se trata en la tercera parte de la Doctrina Cristiana?

En la tercera parte de la Doctrina Cristiana se trata de los mandamientos de la Ley de Dios y de la Iglesia.

344 P. ¿Cuáles son los mandamientos de la Ley de Dios?

Los mandamientos de la Ley de Dios son diez: Yo soy el Señor Dios tuyo. El 1º Amarás a Dios sobre todas las cosas. El 2º No tomarás el nombre de Dios en vano. El 3º Santificarás las fiestas. El 4º Honrarás a tu padre y a tu madre. El 5º No matarás. El 6º No cometerás actos impuros. El 7º No hurtarás. El 8º No dirás falso testimonio ni mentirás. El 9º No consentirás pensamientos ni deseos impuros. El 10º No codiciarás los bienes ajenos.

345 P. ¿Por qué los mandamientos de la ley de Dios tienen este nombre?

Los mandamientos de la Ley de Dios tienen este nombre porque el mismo Dios los ha impreso en el alma de todo hombre, los promulgó en la antigua Ley sobre el monte Sinaí, grabados en dos tablas de piedra, y Jesucristo los ha confirmado en la Ley nueva.

346 P. ¿Cuáles son los mandamientos de la primera tabla?

Los mandamientos de la primera tabla son los tres primeros que miran derechamente a Dios y a los deberes que con El tenemos.

347 P. ¿Cuáles son los mandamientos de la segunda tabla?

Los mandamientos de la segunda tabla son los siete últimos, que miran al prójimo y a los deberes que tenemos con él.

348 P. ¿Estamos obligados a guardar los mandamientos?

Si, señor; estamos obligados a guardar los mandamientos, porque todos hemos de vivir según la voluntad de Dios, que nos ha creado, y basta quebrantar gravemente uno solo para merecer el infierno.

349 P. ¿Está en nuestro poder guardar estos mandamientos?

Si, señor; está en nuestro poder guardar estos mandamientos con la gracia de Dios, quien siempre está pronto a darla a quien debidamente se la pide.

350 P. ¿Qué se ha de considerar generalmente en cada mandamiento?

En cada mandamiento ha de considerarse la parte positiva y la parte negativa; a saber, lo que nos manda y lo que prohíbe.

CAPITULO II - DE LOS MANDAMIENTOS QUE MIRAN A DIOS
1º.- Del primer mandamiento

351 P. ¿Por qué se dice al principio: YO SOY EL SEÑOR DIOS TUYO?

Al principio de los mandamientos se dice: Yo soy el Señor Dios tuyo para que entendamos que Dios, por ser nuestro Creador y Señor, puede mandarnos lo que quiera, y nosotros, sus criaturas, estamos obligados a obedecerle.

352 P. ¿Qué nos ordena Dios con las palabras del primer mandamiento: AMARÁS A DIOS SOBRE TODAS LAS COSAS?

Con las palabras del primer mandamiento, Dios nos ordena que le reconozcamos, adoremos, amemos y sirvamos a El solo, como a nuestro supremo Señor.

353 P. ¿Cómo se cumple el primer mandamiento?

El primer mandamiento se cumple con el ejercicio del culto interno y externo.

354 P. ¿Qué es culto interno?

Culto interno es la honra que a Dios se da con las facultades del espíritu únicamente; a saber, con el entendimiento y la voluntad.

355 P. ¿Qué es el culto externo?

Culto externo es el homenaje que se rinde a Dios por medio de actos exteriores y de objetos sensibles.

356 P. ¿Basta adorar a Dios nada más que con el corazón interiormente?

No, señor; no basta adorar a Dios nada más que con el corazón interiormente, sino que es necesario adorarle también exteriormente, con el espíritu y con el cuerpo, porque es Creador y Señor absoluto del uno y del otro.

357 P. ¿Puede subsistir el culto externo sin el interno?

No, señor; no puede en manera alguna subsistir el culto externo sin el interno, porque aquél, desacompañado de este, queda privado de vida, de mérito y de eficacia, como cuerpo sin alma.

358 P. ¿Qué nos prohíbe el primer mandamiento?

El primer mandamiento nos prohíbe la idolatría, la superstición, el sacrilegio, la herejía y cualquier otro pecado contra la religión.

359 P. ¿Qué es idolatría?

Llámase idolatría dar a una criatura cualquiera, por ejemplo a una estatua, a una imagen, a un hombre, el culto supremo de adoración debido sólo a Dios.

360 P. ¿Cómo se halla expresada esta prohibición en la Sagrada Escritura?

En la Sagrada Escritura se halla expresada esta prohibición con las palabras: No harás para ti escultura ni figura alguna de los que está arriba en el cielo o abajo en la tierra. Y no adorarás tales cosas ni les darás culto.

361 P. ¿Prohíben estas palabras toda suerte de imágenes?

No, por cierto, sino sólo las imágenes de las falsas divinidades hechas con fin de ser adoradas, como hacían los idólatras. Es esto tanta verdad, que el mismo Dios mandó a Moisés que hiciera algunas, como las dos estatuas de querubines sobre el arca y la serpiente de metal en le desierto.

362 P. ¿Qué es superstición?

Se llama superstición cualquiera devoción contraria a la doctrina y uso de la Iglesia, como también atribuir a alguna acción u objeto cualquiera una virtud sobrenatural que no tiene.

363 P. ¿Qué es sacrilegio?

Sacrilegio es la profanación de un lugar, de una persona o de una cosa consagrada a Dios y destinada a su culto.

364 P. ¿Qué es herejía?

Herejía es un error culpable del entendimiento por el que se niega con pertinacia alguna verdad de fe.

365 P. ¿Qué otras cosas prohíbe el primer mandamiento?

El primer mandamiento prohíbe, además, todo linaje de comercio con el demonio y el asociarse a las sectas anticristianas.

366 P. ¿Cometería pecado grave quien recurriese al demonio o lo invocase?

Quien recurriese al demonio o lo invocase cometería en pecado enorme, pues el demonio es el más perverso enemigo de Dios y de los hombres.

367 P. ¿Es lícito interrogar las mesas que se dicen parlantes o escribientes, o consultar de cualquier modo que sea las almas de los finados mediante el espiritismo?

Todas las prácticas del espiritismo son ilícitas, porque son supersticiosas, y a menudo no inmunes de intervención diabólica, por lo cual han sido justamente prohibidas por la Iglesia.

368 P. ¿Prohíbe el primer mandamiento que honremos e invoquemos a los Ángeles y Santos?

No, señor; no está prohibido honrar e invocar a los Ángeles y Santos, antes hemos de hacerlo, por ser cosa muy buena, provechosa y altamente recomendada por la Iglesia, ya que ellos son amigos de Dios y nuestros intercesores para con El.

369 P. Siendo Jesucristo nuestro único Medianero para con Dios, ¿a qué recurrir también a la mediación de María Santísima y de los Santos?

Jesucristo es nuestro Medianero para con Dios, en cuanto por ser verdadero Dios y verdadero hombre, El solo, en virtud de sus propios merecimientos, nos ha reconciliado con Dios y nos alcanza todas las gracias. La Virgen, empero, y los Santos, en virtud de los merecimientos de Jesucristo y por la caridad que los junta con Dios y con nosotros, nos ayudan con su intercesión a obtener las gracias que pedimos. Y este es uno de los grandes bienes de la comunión de los Santos.

370 P. ¿Podemos honrar también las imágenes de Jesucristo y de los Santos?

Si, señor; porque la honra que se hace a las sagradas imágenes de Jesucristo y de los Santos se refiere a sus mismas personas.

371 P. ¿Y podemos venerar las reliquias de los Santos?

Si, señor; también las reliquias de los Santos deben ser veneradas, porque sus cuerpos fueron miembros vivos de Jesucristo y templos del Espíritu Santo, y han de resucitar gloriosos a la vida eterna.

372 P. ¿Qué diferencia hay entre el culto que damos a Dios y el que damos a los Santos?

Entre el culto que damos a Dios y el que damos a los Santos hay esta diferencia: que a Dios le adoramos por su excelencia infinita, mientras a los Santos no los adoramos, sino que los honramos y veneramos como amigos de Dios e intercesores nuestros para con El.

373 P. ¿Cómo se llama el culto que se tributa a Dios y el que se tributa a los Santos?

El culto que se tributa a Dios se llama latría, esto es, de adoración, y el culto que se tributa a los Santos se llama dulía, o de veneración a los siervos de Dios, y el culto particular que damos a María Santísima se llama hiperdulía, que quiere decir especialísima veneración, como a Madre de Dios.

2º.- Del segundo mandamiento

374 P. ¿Que nos prohíbe el segundo mandamiento: NO TOMARÁS EL NOMBRE DE DIOS EN VANO?

El segundo mandamiento: No tomarás el nombre de Dios en vano, nos prohíbe: 1º., pronunciar el nombre de Dios sin respeto; 2º., blasfemar contra Dios, contra la Santísima Virgen y contra los Santos; 3º., hacer juramentos falsos o no necesarios o de algún modo ilícitos.

375 P. ¿Qué quiere decir pronunciar el nombre de Dios sin respeto?

Pronunciar el nombre de Dios sin respeto quiere decir pronunciar este santo nombre y todo lo que se refiere de un modo especial al mismo Dios, como en nombre de Jesús, de María y de los Santos, con algún enojo, por burla o de otra manera poco reverente.

376 P. ¿Qué es blasfemia?

Blasfemia es un pecado horrendo, que consiste en palabras o acciones de menosprecio o maldición contra Dios, la Virgen, los Santos o contra las cosas santas.

377 P. ¿Hay diferencia entre la blasfemia y la imprecación?

Hay diferencia, porque con la blasfemia se maldice o desea el mal a Dios, a la Virgen, a los Santos; mientras con la imprecación se maldice o se desea el mal a sí mismo o al prójimo.

378 P. ¿Qué es juramento?

Juramento es traer a Dios por testigo de la verdad que se dice o de la que se promete.

379 P. ¿Está siempre prohibido el jurar?

No siempre está prohibido el jurar, antes es lícito y aún de honra de Dios, cuando hay en ello necesidad y el juramento se hace con verdad, con juicio y con justicia.

380 P. ¿Cuándo no se jura con verdad?

Cuando se afirma con juramento lo que se sabe o cree que es falso, o cuando con juramento se promete hacer lo que no se tiene intención de cumplir.

381 P. ¿Cuándo se jura sin juicio?

Cuando se jura sin prudencia y sin madura consideración o por cosas de poca importancia.

382 P. ¿Cuándo se jura sin justicia?

Cuando se jura hacer algo que no es justo o lícito, como vengarse, robar o cosas semejantes.

383 P. ¿Estamos obligados a mantener el juramento de hacer cosas injustas o ilícitas?

No sólo no estamos obligados, antes pecamos haciéndolas, como cosas prohibidas por la Ley de Dios o de la Iglesia.

384 P. ¿Qué pecado comete el que jura en falso?

Quien jura en falso comete pecado mortal, porque deshonra gravemente a Dios, verdad infinita, trayéndole por testigo de los falso.

385 P. ¿Qué nos ordena el segundo mandamiento?

El segundo mandamiento nos ordena honrar el santo nombre de Dios y cumplir los votos, además de los juramentos.

386 P. ¿Qué es voto?

El voto es una promesa que se hace a Dios de una cosa buena y a nosotros posible y mejor que su contraria, a la cual nos obligamos como si nos fuese mandada.

387 P. ¿Qué se hará si el cumplimiento del voto se hiciere en todo o en parte difícil?

Se puede pedir la conmutación o la dispensa de él al propio Obispo o al Romano Pontífice, según la calidad del voto.

388 P. ¿Es pecado infringir los votos?

Infringir los votos es pecado, y por esto no hemos de hacerlos sin madura reflexión y, ordinariamente, sin consejo del confesor o de otra persona prudente, por no exponernos a peligro de pecar.

389 P. ¿Se pueden hacer votos a la Virgen y a los Santos?

Los votos se hacen sólo a Dios; pero se puede prometer a Dios hacer alguna cosa en honra de la virgen o de los Santos.

3º.- Del tercer mandamiento

390 P. ¿Qué nos manda el tercer mandamiento: SANTIFICARÁS LAS FIESTAS?

El tercer mandamiento: santificarás las fiestas, nos manda honrar a Dios con obras de culto en los días de fiesta.

391 P. ¿Cuáles son los días de fiesta?

En la ley antigua eran los sábados y otros días particularmente solemnes para el pueblo hebreo; en la ley nueva son los domingos y otras festividades establecidas por la Iglesia.

392 P. ¿Por qué en la ley nueva se santifica el domingo en lugar del sábado?

En la ley nueva se santifica el domingo, que significa día del Señor, en lugar del sábado, porque en tal día resucitó Jesucristo Nuestro Señor.

393 P. ¿Qué obra de culto se nos manda en los días de fiesta?

Se nos manda asistir devotamente al santo sacrificio de la Misa.

394 P. ¿Con qué otras obras santifica el buen cristiano las fiestas?

En buen cristiano santifica las fiestas: 1º., asistiendo a la Doctrina cristiana, al sermón y a los divinos oficios; 2º., recibiendo a menudo y con las debidas disposiciones los sacramentos de la Penitencia y de la Eucaristía; 3º., ejercitándose en la oración y en obras de cristiana caridad con el prójimo.

395 P. ¿Qué nos prohíbe el tercer mandamiento?

El tercer mandamiento nos prohíbe las obras serviles y otras cualesquiera que nos impidan el culto a Dios.

396 P. ¿Cuáles son las obras serviles que se prohíben en los días festivos?

Las obras serviles que se prohíben en los días festivos son las obras que se llaman manuales; a saber, los trabajos materiales en que el cuerpo tiene más parte que el espíritu, como las que de ordinario ejecutan los criados, obreros y artesanos.

397 P. ¿Qué pecado se comete trabajando el día de fiesta?

Trabajando el día de fiesta se comete pecado mortal; pero excusa de culpa grave la brevedad del tiempo que se emplea.

398 P. ¿Hay algunas obras serviles que se permiten los días de fiesta?

Se permiten los días de fiesta las obras que son necesarias a la vida o al servicio de Dios y las que se hacen por causa grave, pidiendo licencia, si se puede, al propio párroco.

399 P. ¿Por qué fin se prohíben en las fiestas las obras serviles?

Se prohíben en las fiestas las obras serviles para que podamos atender mejor al culto divino y a la salvación de nuestra alma y para descansar de nuestras fatigas. Por esta razón no se prohíbe en ellas algún honesto esparcimiento.

400 P. ¿Qué otras cosas hemos de evitar principalmente en las fiestas?

En las fiestas hemos de evitar principalmente el pecado y todo lo que pueda inducirnos a él, como son las diversiones y reuniones peligrosas.

CAPITULO III - DE LOS MANDAMIENTOS QUE MIRAN AL PRÓJIMO
1º.- Del cuarto mandamiento

401 P. ¿Qué nos manda el cuarto mandamiento: HONRARÁS A TU PADRE Y A TU MADRE?

El cuarto mandamiento: Honrarás a tu padre y a tu madre, nos manda respetar al padre y a la madre, obedecerles en todo lo que no es pecado y asistirles en sus necesidades espirituales y temporales.

402 P. ¿Qué nos prohíbe el cuarto mandamiento?

El cuarto mandamiento nos prohíbe ofender a nuestro padres de palabra, de obra o de otro modo cualquiera.

403 P. ¿A quiénes más comprende este mandamiento con el nombre de padre y de madre?

Con el nombre de padre y madre comprende también este mandamiento a todos lo superiores, así eclesiásticos como seglares, a los cuales por esta razón debemos obedecer y reverenciar.

404 P. ¿De dónde les viene a los padres la autoridad de mandar a sus hijos y a los hijos la obligación de obedecer a sus padres?

La autoridad que los padres tienen de mandar a los hijos y la obligación de éstos de obedecerles viene de Dios, que constituyó y ordenó la familia para que suministre al hombre los primeros medios necesarios para su perfeccionamiento material y espiritual.

405 P. ¿Tienen los padres deberes para con sus hijos?

Los padres tienen el deber de amar, alimentar y mantener a sus hijos, proveer a su educación religiosa y civil, darles buen ejemplo, alejarlos de las ocasiones de pecado, corregirlos de sus defectos y ayudarlos a abrazar el estado a que Dios los llama.

406 P. ¿Nos ha propuesto Dios un dechado de familia perfecta?

Dios nos propuso un dechado de familia perfecta en la Sagrada Familia, en la que Jesucristo estuvo sujeto a María Santísima y a San José hasta la edad de treinta años, esto es, hasta que empezó a cumplir la misión de evangelizar que le confió su Eterno Padre.

407 P. Podrían las familias proveer a todas sus necesidades si viviesen separadas?

Si las familias viviesen separadas no podrían proveer a todas sus necesidades; fue necesario que se juntasen en una sociedad civil, a fin de ayudarse mutuamente al perfeccionamiento y el bienestar común.

408 P. ¿Qué es sociedad civil?

Sociedad civil es la unión de muchas familias dependientes de la autoridad de una cabeza para ayudarse unas a otras a conseguir el mutuo perfeccionamiento y el bienestar temporal.

409 P. ¿De dónde le viene a la sociedad civil la autoridad por que es gobernada?

La autoridad por que es gobernada la sociedad civil viene de Dios, que quiere se constituya ésta para el bien común.

410 P. ¿Hay obligación de respetar y obedecer a la autoridad que gobierna la sociedad civil?

Si, señor; todos los que pertenecen a la sociedad civil tienen obligación de respetar y obedecer a la autoridad, porque viene de Dios y porque así lo exige el bien común.

411 P. ¿Se han de respetar todas las leyes que imponga la autoridad civil?

Se han de respetar todas las leyes que la autoridad civil impone, con tal que no sean contrarias a la ley de Dios, según el mandato y ejemplo de Nuestro Señor Jesucristo.

412 P. Fuera del respeto y obediencia a las leyes impuestas por la autoridad, ¿qué otros deberes tienen los que forman parte de la sociedad civil?

Los que forman parte de la sociedad civil, fuera de la obligación de respetar y obedecer las leyes, tienen el deber de vivir concordes y de procurar, según sus medios, que la sociedad sea virtuosa, pacífica, ordenada y próspera para el común provecho.

2º.- Del quinto mandamiento

413 P. ¿Qué prohíbe el quinto mandamiento: NO MATARÁS?

El quinto mandamiento: No matarás, prohíbe dar muerte, golpear, herir o hacer cualquier otro daño al prójimo en el cuerpo, ya por sí, ya por otros; como también agraviarle con palabras injuriosas o quererle mal. En este mandamiento prohíbe igualmente Dios, darse a sí mismo la muerte o el suicidio.

414 P. ¿Por qué es pecado grave matar al prójimo?

Porque el matador usurpa temerariamente el derecho que sólo Dios tiene sobre la vida del hombre; porque destruye la seguridad del trato humano y porque quita al prójimo la vida, que es el mayor bien natural que hay sobre la tierra.

415 P. ¿Hay casos en que es lícito quitar la vida al prójimo?

Es lícito quitar la vida al prójimo cuando se combate en guerra justa, cuando se ejecuta por orden de la autoridad suprema la condenación a muerte en pena de un delito y, finamente, en caso de necesaria y legítima defensa de la vida contra un injusto agresor.

416 P. ¿Prohíbe también Dios en el quinto mandamiento perjudicar al prójimo en la vida espiritual?

Si, señor; Dios en el quinto mandamiento prohíbe también perjudicar al prójimo en la vida espiritual con el escándalo.

417 P. ¿Qué es escándalo?

Escándalo es cualquier dicho, hecho u omisión que da ocasión a otro de cometer pecados.

418 P. ¿Es grave pecado el escándalo?

El escándalo es pecado grave porque tiende a destruir la obra más grande de Dios, que es la Redención, con la pérdida de las almas; da la muerte al alma del prójimo quitándole la vida de la gracia, que es más preciosa que la vida del cuerpo, y es causa de una multitud de pecados. Por esto amenaza Dios a los escandalosos con los más severos castigos.

419 P. ¿Por qué prohíbe Dios en el quinto mandamiento quitarse uno la vida o el suicidio?

En el quinto mandamiento prohíbe Dios el suicidio porque el hombre no es dueño de su vida. Además, la Iglesia priva de sepultura eclesiástica a quien deliberadamente se suicida.

420 P. ¿Está prohibido también el DUELO en el quinto mandamiento?

Si, señor; en el quinto mandamiento está prohibido también el duelo, porque el duelo participa de la malicia del suicidio y del homicidio, y está excomulgado todo el que voluntariamente toma en él parte, aun como simple espectador.

421 P. ¿Y se prohíbe también el duelo cuando se excluye el peligro de muerte?

También se prohíbe este duelo, porque no sólo no podemos matar, pero ni aún herir voluntariamente a nosotros mismos o a los demás.

422 P. ¿Puede excusarse el duelo con la defensa del propio honor?

No, señor; porque no es verdad que en el duelo se repare la ofensa; y porque no puede repararse el honor con una acción injusta, irracional y bárbara, como es el duelo.

423 P. ¿Qué nos manda el quinto mandamiento?

El quinto mandamiento nos manda perdonar a nuestros enemigos y querer bien a todos.

424 P. ¿Qué ha de hacer quien ha perjudicado al prójimo en la vida del cuerpo y del alma?

Quien ha perjudicado al prójimo, no basta que se confiese; ha de reparar el mal que ha hecho, resarciendo los daños producidos, retractándose de los errores que enseñó y dando buen ejemplo.

3º.- Del sexto y noveno mandamientos

425 P. ¿Que nos prohíbe el sexto mandamiento: NO COMETERÁS ACTOS IMPUROS?

El sexto mandamiento: No cometerás actos impuros, nos prohíbe toda acción, toda mirada, toda conversación contraria a la castidad, y la infidelidad en el matrimonio.

426 P. ¿Qué prohíbe en noveno mandamiento: NO CONSENTIRÁS PENSAMIENTOS NI DESEOS IMPUROS?

El noveno mandamiento prohíbe expresamente todo deseo contrario a la fidelidad que los cónyuges se han jurado al contraer matrimonio, y asimismo prohíbe todo pensamiento o deseo culpable de acciones prohibidas en el sexto mandamiento.

427 P. ¿Es gran pecado la impureza?

Es pecado gravísimo y abominable delante de Dios y de los hombres; rebaja al hombre a la condición de los brutos, le arrastra a otros muchos pecados y vicios y acarrea los más terribles castigos en esta vida y en la otra.

428 P. ¿Son pecado todos los pensamientos que nos vienen a la mente contra la pureza?

Los pensamientos que nos vienen a la mente contra la pureza, por sí mismos no son pecados, sino tentaciones e incentivos de pecado.

429 P. ¿Cuándo son pecado los malos pensamientos?

Los malos pensamientos, aunque sean ineficaces, son pecado cuando culpablemente damos motivo a tenerlos, consentimos o nos exponemos a peligro próximo de consentir en ellos.

430 P. ¿Qué nos ordenan el sexto y noveno mandamientos?

El sexto mandamiento nos ordena ser castos y modestos en las acciones, en las miradas, en nuestra conducta y en las palabras. El noveno mandamiento nos ordena que seamos castos y puros aun en lo interior, a saber: en la mente y en el corazón.

431 P. ¿Qué hemos de hacer para guardar el sexto y noveno mandamientos?

Para guardar el sexto y noveno mandamientos hemos de orar con frecuencia y de corazón a Dios, ser devotos de la Santísima Virgen María, Madre de pureza, acordarnos de que Dios nos ve, pensar en la muerte, en los divinos castigos, en la Pasión de Jesucristo, refrenar nuestros sentidos, practicar la mortificación y recibir a menudo y con las debidas disposiciones los santos sacramentos.

432 P. ¿De qué debemos de huir para conservarnos castos?

Para conservarnos castos debemos huir el ocio, las malas compañías, la lectura de libros y diarios malos, la intemperancia, el mirar estampas indecentes, los espectáculos licenciosos, las conversaciones peligrosas y todas las demás ocasiones de pecar.

4º.- Del séptimo mandamiento

433 P. ¿Qué nos prohíbe el séptimo mandamiento: NO HURTARÁS?

El séptimo mandamiento: No hurtarás, prohíbe tomar o retener injustamente lo ajeno, o causar algún daño al prójimo en la hacienda, de cualquier modo que sea.

434 P. ¿Qué quiere decir HURTAR?

Quiere decir tomar injustamente la hacienda ajena contra la voluntad de su dueño, es decir, cuando éste tiene toda la razón y el derecho de no querer ser privado de ella.

435 P. ¿Por qué se prohíbe el hurtar?

Porque se peca contra la justicia y se hace injuria al prójimo, tomando o reteniendo contra su derecho y voluntad lo que le pertenece.

436 P. ¿Que se entiende por bienes ajenos?

Bienes ajenos es todo lo que pertenece al prójimo, por tener la propiedad o el uso de ello, o por guardarlo en depósito.

437 P. ¿De cuántas maneras se toman injustamente los bienes ajenos?

De dos maneras: con el hurto y con la rapiña.

438 P. ¿Cuándo se comete hurto?

Se comete hurto cuando se toman ocultamente los bienes ajenos.

439 P. ¿Cuándo se comete rapiña?

Se comete rapiña cuando se toman los bienes ajenos con violencia y manifiestamente.

440 P. ¿En qué casos pueden tomarse los bienes ajenos sin pecado?

Cuando el dueño de ellos no lo lleva a mal, o cuando injustamente no quisiese darlos, como sucedería si uno estuviese en extrema necesidad, con tal que tomase sólo lo que le es precisamente necesario para socorrer la urgente y extrema indigencia.

441 P. ¿Se perjudica en la hacienda al prójimo solamente con el hurto y la rapiña?

Se le perjudica también con los fraudes, la usura y cualquier otra injusticia contra los bienes.

442 P. ¿Cómo se comete el fraude?

El fraude se comete engañando al prójimo en el comercio con pesos, medidas o monedas falsas y con mercancías averiadas; falsificando escrituras y documentos; en suma, haciendo trampas en las compras y ventas o en cualquier otro contrato, y asimismo cuando se niega uno a dar lo justo o lo convenido.

443 P. Cómo se comete la usura?

La usura se comete cuando se exige sin legítimo título un interés ilícito por alguna cantidad prestada, abusando de la necesidad o ignorancia del otro.

444 P. ¿Qué otras injusticias se cometen contra los bienes del prójimo?

Hacerle perder a uno injustamente lo que tiene, perjudicarle en sus propiedades, no trabajar conforme al deber, no pagar por malicia las deudas y salarios debidos, herir o matar animales que son del prójimo, dejar que se echen a perder las cosas encomendadas, impedir a otro la consecución de cualquiera justa ganancia, dar la mano al ladrón y recibir, esconder o comprar la cosa hurtada.

445 P. ¿Es pecado grave hurtar?

Es pecado grave contra la justicia, cuando la materia es grave, por ser cosa importantísima que se respete el derecho de cada cual a lo suyo, y esto para bien de los individuos, de las familias y de la sociedad.

446 P. ¿Cuándo es grave la materia del hurto?

Es grave cuando se quitan cosas de importancia, y también, aunque lo que se hurta sea de escasa monta, si con ello se perjudica notablemente al prójimo.

447 P. ¿Qué nos manda el séptimo mandamiento?

El séptimo mandamiento nos manda que se respete la hacienda ajena, que se pague el jornal justo al operario y que se guarde la justicia en todo lo que mira a la propiedad de los demás.

448 P. ¿Basta la confesión al que ha pecado contra el séptimo mandamiento?

Al que ha pecado contra el séptimo mandamiento no le basta la confesión, sino que debe hacer lo que pueda para restituir lo ajeno y resarcir los perjuicios.

449 P. ¿En qué consiste resarcir los perjuicios?

Resarcir los perjuicios consiste en la compensación que ha de darse al prójimo por lo frutos o ganancias que perdió a causa del hurto o de otras injusticias cometidas con daño de él.

450 P. ¿A quien se debe restituir la cosa robada?

A quien se robó, a su herederos si ya murió, y si esto fuese verdaderamente imposible, debe gastarse el valor en beneficio de los pobres y obras pías.

451 P. ¿Qué debe hacerse cuando se encuentra una cosa de gran valor?

Debe emplearse gran diligencia en buscar al dueño y restituirla con fidelidad.

5º.- Del octavo mandamiento

452 P. ¿Qué nos prohíbe el octavo mandamiento: NO DIRÁS FALSO TESTIMONIO NI MENTIRÁS?

El octavo mandamiento: No dirás falso testimonio ni mentirás, nos prohíbe atestiguar en falso en juicio; prohíbe además la detracción o murmuración, la calumnia, la adulación, el juicio y sospecha temeraria y toda suerte de mentiras.

453 P. ¿Qué es la detracción o murmuración?

Detracción o murmuración es un pecado que consiste en manifestar, sin justo motivo, los pecados y defectos de los demás.

454 P. ¿Qué es calumnia?

Calumnia es un pecado que consiste en atribuir maliciosamente al prójimo culpas y defectos que no tiene.

455 P. ¿Qué es la adulación?

Adulación es un pecado que consiste en engañar a uno diciendo falsamente bien de él o de otros, con el fin de sacar algún provecho.

456 P. ¿Qué es el juicio o sospecha temeraria?

Juicio o sospecha temeraria es un pecado que consiste en juzgar o sospechar mal de uno sin justo fundamento.

457 P. ¿Qué es mentira?

Mentira es un pecado que consiste en asegurar como verdadero o falso, con palabras o con obras, lo que no se tiene por tal.

458 P. ¿De cuántas especies es la mentira?

La mentira es de tres especies: jocosa, oficiosa y dañosa.

459 P. ¿Qué es la mentira jocosa?

Mentira jocosa es aquella con que se miente por burla o juego y sin perjuicio de nadie.

460 P. ¿Qué es la mentira oficiosa?

Mentira oficiosa es la afirmación de una falsedad por el propio o ajeno provecho, sin perjuicio de tercero.

461 P. ¿Qué es la mentira dañosa?

Mentira dañosa es afirmar una cosa falsa con perjuicio de tercero.

462 P. ¿Es lícito alguna vez mentir?

Jamás es lícito mentir, ni por juego, ni por interés propio o ajeno, por se cosa en sí mala.

463 P. ¿Que pecado es mentir?

La mentira jocosa u oficiosa es pecado venial, pero la dañosa es pecado mortal, si el daño que acarrea es grave.

464 P. ¿Es preciso decir siempre todo lo que se piensa?

No siempre es preciso, especialmente cuando el que pregunta no tiene derecho a saber lo que pregunta.

465 P. ¿Basta la confesión al que ha pecado contra el octavo mandamiento?

Al que ha pecado contra el octavo mandamiento no le basta la confesión, sino que tiene obligación de retractarse de cuanto dijo calumniando al prójimo, y de reparar, del modo que pueda, los daños que le ha causado.

466 P. ¿Qué nos manda el octavo mandamiento?

El octavo mandamiento nos manda que digamos la verdad en su lugar y tiempo, y que echemos a buena parte, en cuanto podamos, las acciones de nuestro prójimo.

6º.- Del décimo mandamiento

467 P. ¿Qué nos prohíbe el décimo mandamiento: NO CODICIARÁS LOS BIENES AJENOS?

El décimo mandamiento: No codiciarás los bienes ajenos, nos prohíbe el deseo de quitar a otros sus bienes y el de adquirir hacienda por medios injustos.

468 P. ¿Por qué prohíbe Dios aun el deseo de los bienes ajenos?

Dios prohíbe los deseos desordenados de los bienes ajenos porque quiere que aun interiormente seamos justos y que nos mantengamos siempre muy lejos de las acciones injustas.

469 P. ¿Qué nos manda el décimo mandamiento?

El décimo mandamiento nos manda que estemos contentos con el estado en que Dios nos ha puesto, y que suframos con paciencia la pobreza cuando el Señor nos quiera en ese estado.

470 P. ¿Cómo puede el cristiano estar contento en el estado de pobreza?

El cristiano puede estar contento aun en el estado de pobreza, si considera que la mayor felicidad es la conciencia pura y tranquila, que nuestra verdadera patria es el cielo, que Jesucristo se hizo pobre por nuestro amor y ha prometido un premio especial a los que sufren con resignación la pobreza.

CAPITULO IV - DE LOS MANDAMIENTOS DE LA SANTA MADRE IGLESIA
1º.- De los mandamientos de la Santa Madre Iglesia en general

471 P. ¿Qué otros mandamientos hemos de guardar además de los mandamientos de la ley de Dios?

Además de los mandamientos de la ley de Dios hemos de guardar los mandamientos de la Santa Madre Iglesia.

472 P. ¿Estamos obligados a obedecer a la Iglesia?

Sin duda ninguna, estamos obligados a obedecer a la Iglesia, porque Jesucristo mismo lo manda, y porque los mandamientos de la Iglesia ayudan a guardar los mandamientos de la ley de Dios.

473 P. ¿Cuándo empieza la obligación de guardar los mandamientos de la Iglesia?

La obligación de guardar los mandamientos de la Iglesia empieza generalmente con el uso de la razón y siete años cumplidos, si no se indica otra edad.

474 P. ¿Es pecado quebrantar un mandamiento de la Iglesia?

Quebrantar a sabiendas un mandamiento de la Iglesia en materia grave es pecado mortal.

475 P. ¿Quién puede dispensar de un mandamiento de la Santa Madre Iglesia?

Sólo el Papa, o quien de él tuviere facultad, puede dispensar de un mandamiento de la Santa Madre Iglesia.

476 P. ¿Cuántos y cuáles son los mandamientos más generales de la Santa Madre Iglesia?

Los mandamientos más generales de la Santa Madre Iglesia son cinco: El 1º. Oír Misa entera todos los domingos y fiestas de guardar. El 2º. Confesar los pecados mortales al menos una vez al año y en peligro de muerte y si se ha de comulgar. El 3º. Comulgar pos Pascua florida. El 4º. Ayunar y abstenerse de comer carne cuando lo manda la Santa Madre Iglesia. El 5º. Ayudar a la Iglesia en sus necesidades. También son mandamientos de la Iglesia “No leer libros prohibidos y no celebrar solemnemente bodas cuando están cerradas las velaciones.”

2º.- Del primer mandamiento de la Santa Madre Iglesia

477 P. ¿Qué nos manda el primer mandamiento de la Iglesia: OÍR MISA ENTERA TODOS LOS DOMINGOS Y FIESTAS DE GUARDAR?

El primer mandamiento de la Iglesia: Oír Misa entera todos los domingos y fiestas de guardar, nos manda asistir con devoción a la Santa Misa todos los domingos y fiestas de precepto, oyéndola desde el principio al fin.

478 P. ¿Cuál es la Misa a que la Iglesia desea se asista los domingos y demás fiestas de precepto?

La Misa a que la Iglesia desea que, en cuanto sea posible, se asista los domingos y demás fiestas de precepto, es la Misa parroquial.

479 P. ¿Por qué la Iglesia recomienda a los fieles la asistencia a la Misa parroquial?

La Iglesia recomienda a los fieles la asistencia a la Misa parroquial: 1º., para que los de la misma parroquia se unan a rogar con el párroco, que es su cabeza; 2º., para que los feligreses participen con más especialidad del Santo Sacrificio, que se aplica principalmente por ellos; 3º., para que oigan las verdades del Evangelio, que los párrocos tienen obligación de exponer en la Santa Misa, y 4º., para que vengan en conocimiento de las prescripciones y avisos que en dicha Misa se publican.

480 P. ¿Qué quiere decir DOMÍNICA o DOMINGO?

Dominica o Domingo quiere decir día del Señor, o día especialmente consagrado al divino servicio.

481 P. ¿Por qué en el primer mandamiento de la Iglesia se hace particular mención del domingo?

En el primer mandamiento de la Santa Madre Iglesia se hace particular mención del domingo, porque ésta es la fiesta principal entre los cristianos, como el sábado era la fiesta principal entre los judíos, establecida por el mismo Dios.

482 P. ¿Qué otras fiestas ha instituido la Iglesia?

La Iglesia ha instituido además las fiestas de nuestro Señor, de la Santísima Virgen, de los ángeles y de los Santos.

483 P. ¿Por qué la Iglesia ha instituido otras fiestas de nuestro Señor?

La Iglesia ha instituido otras fiestas de nuestro Señor en memoria de sus divinos misterios.

484 P. ¿Por qué fin han sido instituidas las fiestas de la Santísima Virgen, de los Ángeles y de los Santos?

Las fiestas de la Santísima Virgen, de los Ángeles y de los Santos han sido instituidas: 1º., en memoria de las gracias con que Dios los enriqueció, y en agradecimiento a la divina Bondad por habérselas dispensado; 2º., para que nosotros los honremos e imitemos sus ejemplos y ellos nos ayuden con sus oraciones.

3º.- Del segundo mandamiento de la Santa Madre Iglesia

485 P. ¿Qué nos manda la Iglesia con las palabras del segundo mandamiento: CONFESAR LOS PECADOS MORTALES AL MENOS UNA VEZ AL AÑO?

Con las palabras del segundo mandamiento: Confesar los pecados mortales al menos una vez al año, la Iglesia obliga a todos los cristianos que han llegado al uso de razón, a cercarse por lo menos una vez al año al sacramento de la Penitencia para confesar los pecados mortales.

486 P. ¿Cuál es el tiempo más oportuno para satisfacer el precepto de la confesión anual?

El tiempo más oportuno para satisfacer el precepto de la confesión anual es la Cuaresma, según el uso introducido y aprobado de toda la Iglesia.

487 P. ¿Por qué dice la Iglesia que confesemos los pecados mortales al MENOS una vez al año?

La Iglesia dice: al menos, para darnos a entender su deseo de que nos acerquemos más a menudo a los santos sacramentos.

488 P. ¿Es, pues, útil confesarse a menudo?

Es utilitísimo confesarse a menudo, sobre todo porque es difícil que se confiese bien y esté alejado del pecado mortal quien rara vez se confiesa.

489 P. ¿Por qué se añade: Y EN PELIGRO DE MUERTE?

Se añade en el segundo mandamiento de la Iglesia y en peligro de muerte, porque de una santa muerte depende la salvación del alma y una buena confesión facilita una santa muerte.

490 P. ¿Por qué se indican últimamente: Y SI SE HA DE COMULGAR?

Se indica en último lugar: y si se ha de comulgar, porque la Sagrada Comunión se ha de recibir en estado de gracia, y el que tenga pecado mortal ha de ponerse en gracia mediante la confesión precisamente, no bastando el acto de contrición perfecta.

4º.- Del tercer mandamiento de la Santa Madre Iglesia

491 P. ¿Qué ordena la Santa Madre Iglesia con las palabras del tercer mandamiento: COMULGAR POR PASCUA FLORIDA?

Con las palabras del tercer mandamiento: Comulgar por Pascua florida, la Iglesia obliga a todos los cristianos que han llegado a la edad de la discreción a que reciban todos los años la santísima Eucaristía durante el tiempo pascual, y aconseja se comulgue en la propia parroquia. Cuídese de avisar al propio párroco si se comulga en otra parte.

492 P. ¿Estamos obligados a comulgar en otro tiempo fuera de la Pascua?

Estamos obligados a comulgar en peligro de muerte, por modo de Viático.

493 P. ¿Hay que comulgar solamente por Pascua florida y en peligro de muerte?

Por obligación no, pero la Iglesia desea vivamente que no sólo por Pascua de Resurrección, sino lo más a menudo que podamos, nos acerquemos a la Sagrada Comunión, que es el mantenimiento divino de nuestras almas.

494 P. ¿Se satisface al segundo y tercer mandamientos con una confesión o comunión sacrílegas?

Quien hiciese una confesión y comunión sacrílega no satisfaría al segundo y tercer mandamientos de la Iglesia, porque la intención de la Iglesia es que recibamos estos sacramentos para el fin que fueron instituidos, que es nuestra santificación.

5º.- Del cuarto mandamiento de la Santa Madre Iglesia

495 P. ¿Qué nos manda el cuarto mandamiento de la Santa Madre Iglesia: AYUNAR Y ABSTENERSE DE COMER CARNE CUANDO LO MANDA LA SANTA MADRE IGLESIA?

El cuarto precepto de la Iglesia, con las palabras: Ayunar y abstenerse de comer carne cuando lo manda la Santa Madre Iglesia, nos manda que guardemos el ayuno: 1º., en la Cuaresma; 2º., en las cuatro Témporas; 3º., en algunas vigilias y nos abstengamos de tomar carne y su caldo en ciertos días.

496 P. ¿En qué consiste el ayuno?

El ayuno consiste en no hacer más que una sola comida fuerte al día, permitiéndose la colación por la noche y la parvedad por la mañana, el Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo.

497 P. ¿De qué sirve el ayuno?

El ayuno sirve para disponernos mejor a la oración, para hacer penitencia de los pecados cometidos y para preservarnos de cometer otros nuevos.

498 P. ¿Quien está obligado al ayuno?

Al ayuno están obligados todos los cristianos desde los diez y ocho años cumplidos hasta los sesenta incoados, si no están dispensados o excusados por legítimo impedimento.

499 P. ¿Están exentos de la mortificación los que no tienen obligación de ayunar?

Los que no tienen obligación de ayunar no están exentos de la mortificación, porque todos estamos obligados a hacer penitencia.

500 P. ¿Para qué fin se instituyó la Cuaresma?

La Cuaresma se instituyó para imitar en alguna manera el riguroso ayuno de cuarenta días que Jesucristo practicó en el desierto y para prepararnos por medio de la penitencia a celebrar santamente la Pascua.

501 P. ¿Para qué fin se instituyó el ayuno de las cuatro Témporas?

El ayuno de las cuatro Témporas se instituyó para consagrar todas las estaciones del año con la penitencia de algunos días; para pedir a Dios la conservación de los frutos de la tierra; para darle gracias por los frutos ya recibidos, y parea rogarle dé a su Iglesia buenos ministros, cuya ordenación se hace los sábados de las cuatro Témporas.

502 P. ¿Para qué fin se ha instituido el ayuno de las vigilias?

El ayuno de las vigilias se ha instituido para prepararnos a celebrar santamente las fiestas principales.

503 P. ¿En qué días y con qué fines prescribe la Iglesia la abstinencia?

La Iglesia prescribe la abstinencia de carne y su caldo todos los viernes del año, en conmemoración de la Pasión y Muerte de Jesús, y en las Témporas y Vigilias, para que hagamos penitencia y nos preparemos a celebrar santamente las fiestas, como se dijo del ayuno. A la abstinencia están obligados todos los cristianos desde los catorce años cumplidos.

6º.- Del quinto mandamiento de la Santa Madre Iglesia

504 P. ¿Cómo se guarda el quinto mandamiento de la Santa Madre Iglesia: AYUDAR A LA IGLESIA EN SUS NECESIDADES?

El quinto mandamiento: Ayudar a la Iglesia en sus necesidades, se guarda pagando las ofrenda o prestaciones establecidas para reconocer el supremo dominio de Dios sobre todas las cosas, y para proveer a la decorosa sustentación de sus ministros.

505 P. ¿Cómo se deben pagar estas ofrendas?

Estas ofrendas deben pagarse de aquellas cosas y en aquella manera que se acostumbra en cada lugar. En España, y en virtud de Convenios especiales con la Santa Sede, se cumple este precepto dando las limosnas señaladas por la administración de ciertos Sacramentos, por los funerales, y contribuyendo a las colectas que disponen el Papa y los Obispos.

7º.- De otros mandamientos generales de la Santa Madre Iglesia

506 P. ¿Qué prohíbe la Iglesia con este mandamiento: NO CELEBRAR SOLEMNEMENTE BODAS CUANDO ESTÁN CERRADAS LAS VELACIONES?

Con este mandamiento no prohíbe la Iglesia la celebración del sacramento del matrimonio, sino solamente la solemnidad de las bodas, desde el primer domingo de Adviento hasta Navidad inclusive, y desde el miércoles de Ceniza hasta el Domingo de Pascua inclusive.

507 P. ¿En qué consiste la SOLEMNIDAD prohibida de las bodas?

La solemnidad prohibida por este mandamiento consiste en la Misa propia de los esposos, en la bendición nupcial y en la pompa extraordinaria de las bodas.

508 P. ¿Por qué las demostraciones de pompa no dicen bien con el Adviento y la Cuaresma?

Las demostraciones de pompa no dicen bien con el Adviento y la Cuaresma porque éstos son tiempos especialmente consagrados a la penitencia y oración.

508 bis P. ¿Por qué la Iglesia prohíbe la lectura de ciertos libros?

La Iglesia prohíbe la lectura de ciertos libros que defienden la herejía, el cisma o tratan de destruir los fundamentos de la Religión, por el gran peligro de perversión que su lectura entraña para los cristianos. Los libros que exponen asuntos obscenos están además prohibidos por el derecho natural.

CAPITULO V - DE LOS DEBERES PARTICULARES DEL PROPIO ESTADO Y DE LOS CONSEJOS EVANGÉLICOS
1º.- De los deberes del propio estado

509 P. ¿Qué se entiende por deberes del propio estado?

Por deberes del propio estado se entienden aquellas obligaciones particulares que tiene cada uno por razón de su estado, condición y oficio.

510 P. ¿Quién ha impuesto a los varios estados sus particulares deberes?

Dios mismos es quien ha impuesto a los varios estados sus particulares deberes, porque éstos se derivan de los divinos mandamientos.

511 P. Mostradme con un ejemplo cómo los deberes particulares se derivan de los mandamientos.

El cuarto mandamiento, con el nombre de padre y madre, se entienden asimismo todos nuestros superiores, y por esto, de aquel mandamiento se derivan todos lo deberes de obediencia, amor y respeto de los inferiores a sus superiores y todos los deberes de vigilancia que tienen los superiores para con sus subordinados.

512 P. De qué mandamiento se derivan los deberes de los artesanos, comerciantes, administradores de bienes ajenos y otros semejantes?

Los deberes de fidelidad, justicia, sinceridad y equidad que tienen, derívanse del séptimo, octavo y décimo mandamientos, que prohíbe todo fraude, injusticia, negligencia y doblez.

513 P. ¿De qué mandamiento se derivan los deberes de las personas consagradas a Dios?

Los deberes de las personas consagradas a Dios se derivan del segundo mandamiento, que manda cumplir las promesas y votos hechos a Dios; pues las tales personas se obligaron con voto a la guarda de todos o de algunos consejos evangélicos.

2º.- De los consejos evangélicos

514 P. ¿Qué son los consejos evangélicos?

Los consejos evangélicos son algunos medios propuestos por Jesucristo en el Santo Evangelio para llegar a la perfección cristiana.

515 P. ¿Cuáles son los consejos evangélicos?

Los consejos evangélicos son : pobreza voluntaria, castidad perpetua y obediencia en todo lo que no fuere pecado.

516 P. ¿Para qué sirven los consejos evangélicos?

Los consejos evangélicos sirven para facilitar la guarda de los mandamientos y asegurar mejor la eterna salvación.

517 P. ¿Por qué los consejos evangélicos facilitan la guarda de los mandamientos?

Los consejos evangélicos facilitan la guarda de los mandamientos porque nos ayudan a desasir el corazón del amor a la riqueza, de los placeres y de las honras, y de esta suerte nos desvían del pecado.

PARTE CUARTA DE LOS SACRAMENTOS
CAPÍTULO I - DE LOS SACRAMENTOS EN GENERAL
1º.- Naturaleza de los Sacramentos

518.- ¿De qué se trata en la cuarta parte de la Doctrina Cristiana?

En la cuarta parte de la Doctrina cristiana se trata de los Sacramentos.

519.- ¿Qué se entiende por la palabra SACRAMENTO?

Por la palabra Sacramento se entiende un signo sensible y eficaz de la gracia, instituido por Jesucristo para santificar nuestras almas.

520.- ¿Por qué llamáis a los sacramentos señales sensibles y eficaces de la gracia?

Llamo a los sacramentos señales sensibles y eficaces de la gracia, porque todos los sacramentos significan, por medio de cosas sensibles, la gracia divina que producen en nuestras almas.

521.- ¿Explicadme con un ejemplo cómo los sacramentos son señales sensibles y eficaces de la gracia?

En el Bautismo, el derramar el agua sobre la cabeza del niño y las palabras: Yo te bautizo, esto es, yo te lavo, en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, son una señal sensible de los que el Bautismo obra en el alma, porque así como el agua lava el cuerpo, así también la gracia divina del Bautismo limpia de pecado el alma.

522.- ¿Cuántos y cuáles son los sacramentos?

Los sacramentos son siete: Bautismo, Confirmación o Santo Crisma, Eucaristía, Penitencia, Extremaunción, Orden Sacerdotal y Matrimonio.

523.- ¿Qué cosas se requieren para un sacramento?

Para un sacramento se requieren la materia, la forma, el ministro y el sujeto. El ministro ha de tener intención de hacer lo que hace la Iglesia.

524.- ¿Qué es la materia del sacramento?

La materia del sacramento es la cosa sensible que para él se emplea, como, por ejemplo, el agua natural en el Bautismo; el óleo y el bálsamo en la Confirmación.

525.- ¿Qué es la forma del sacramento?

La forma del sacramento son las palabras que para hacerlo se profieren.

526.- ¿Quién es el ministro del sacramento?

El ministro del sacramento es la persona que hace o confiere el sacramento.

526 bis.- ¿Quién es el sujeto en el sacramento?

El sujeto en el sacramento es la persona que lo recibe.

2º.- Del efecto principal de los Sacramentos, que es la gracia

527.- ¿Qué es la gracia?

La gracia de Dios es un don interno, sobrenatural, que se nos da, sin ningún merecimiento nuestro, por los méritos de Jesucristo, en orden a la vida eterna.

528.- ¿De cuántas maneras es la gracia?

La gracia es de dos maneras: gracia santificante, que se llama también habitual, y gracia actual.

529.- ¿Qué es la gracia santificante?

La gracia santificante es un don sobrenatural, inherente a nuestra alma, que nos hace justos, hijos adoptivos de Dios y herederos de la gloria.

530.- ¿De cuántas maneras es la gracia santificante?

La gracia santificante es de dos maneras: gracia primera y gracia segunda.

531.- ¿Cuál es la gracia primera?

Gracia primera es aquélla por la que el hombre pasa del estado de pecado mortal al estado de justicia.

532.- ¿Cuál es la gracia segunda?

Gracia segunda es un aumento de la gracia primera.

533.- ¿Qué es la gracia actual?

Gracia actual es un don sobrenatural que ilumina nuestro entendimiento y mueve y conforta nuestra voluntad para que obremos el bien y nos abstengamos del mal.

534.- ¿Podemos resistir a la gracia de Dios?

Si, señor; podemos resistir a la gracia de Dios, porque no destruye nuestro libre albedrío.

535.- ¿Podemos con nuestras solas fuerzas hacer algo que nos ayude para la vida eterna?

Sin el socorro de la gracia de Dios no podemos con solas nuestras fuerzas hacer ninguna cosa que nos ayude para la vida eterna.

536.- ¿Cómo nos comunica Dios la gracia?

Dios nos comunica la gracia principalmente por medio de los santos sacramentos.

537.- ¿Confieren los sacramentos otra gracia además de la santificante?

Los sacramentos, además de la gracia santificante, confieren también la gracia sacramental.

538.- ¿Qué es la gracia sacramental?

La gracia sacramental consiste en el derecho que el sacramento da al que lo recibe de tener en tiempo oportuno las gracias actuales necesarias para cumplir las obligaciones que impone. Así, cuando fuimos bautizados, recibimos el derecho de tener las gracias para vivir cristianamente.

539.- Los sacramentos, ¿dan siempre la gracia a quien los recibe?

Los sacramentos dan siempre la gracia con tal que se reciban con las necesarias disposiciones.

540.- ¿Quién ha dado a los sacramentos la virtud de conferir la gracia?

La virtud que tienen los sacramentos de conferir la gracia se la ha dado Jesucristo con su pasión y muerte.

541.- ¿Cuáles son los sacramentos que confieren la primera gracia santificante?

Los sacramentos que confieren la primera gracia santificante, que nos hace amigos de Dios, son: el Bautismo y la Penitencia.

542.- ¿Cómo se llaman por esta razón estos dos sacramentos?

Estos dos sacramentos, Bautismo y Penitencia, se llaman por esta razón sacramentos de muertos, porque están instituidos principalmente para devolver la vida de la gracia a las almas muertas por el pecado.

543.- ¿Cuáles son los sacramentos que aumentan la gracia en quien la posee?

Los sacramentos que aumentan la gracia en quien la posee, son los otros cinco, a saber: Confirmación, Eucaristía, Extremaunción, Orden Sagrado y Matrimonio, los cuales confieren la gracia segunda.

544.- ¿Cómo se llaman por esta razón estos cinco sacramentos?

Estos cinco sacramentos, a saber: Confirmación, Eucaristía, Extremaunción, Orden Sagrado y Matrimonio, se llaman sacramentos de vivos, porque los que los reciben han de estar sin pecado mortal, esto es, ya vivos a la gracia santificante.

545.- ¿Qué pecado comete quien recibe uno de los sacramentos de vivos, sabiendo que no está en gracia de Dios?

Quien recibe uno de los sacramentos de vivos, sabiendo que no está en gracia de Dios, comete grave sacrilegio.

546.- ¿Cuáles son los sacramentos más necesarios para salvarnos?

Los sacramentos más necesarios para salvarnos son dos: el Bautismo y la Penitencia; el Bautismo es necesario a todos, y la Penitencia es necesaria a todos los que han pecado mortalmente después del Bautismo.

547.- ¿Cuál es el más excelente de todos lo sacramentos?

El más excelente de todos los sacramentos es la Eucaristía, porque encierra, no sólo la gracia, sino a Jesucristo, autor de la gracia y de los sacramentos.

3º.- Del carácter que imprimen algunos sacramentos

548.- ¿Qué sacramentos pueden recibirse sólo una vez?

Los Sacramentos que pueden recibirse sólo una vez son tres: el Bautismo, la Confirmación y el Orden sagrado.

549.- ¿Por qué los tres sacramentos, Bautismo, Confirmación y Orden Sagrado, pueden recibirse sólo una vez?

Los tres sacramentos, Bautismo, Confirmación y Orden sagrado, sólo pueden recibirse una vez porque cada uno de ellos imprime carácter.

550.- ¿Qué es el CARÁCTER que cada uno de los tres sacramentos, Bautismo, Confirmación y Orden sagrado, imprimen en el alma?

El carácter que cada uno de los tres sacramentos, Bautismo, Confirmación y Orden sagrado, imprime en el alma, es una señal espiritual que no se borra jamás.

551.- ¿De qué sirve el carácter que imprimen en el alma estos tres sacramentos?

El carácter que imprimen en el alma estos tres sacramentos, sirve de señal o contraseña para marcarnos: en el Bautismo, como miembros de Jesucristo; el la Confirmación, como sus soldados; en le Orden sagrado, como sus ministros.

CAPÍTULO II - DEL BAUTISMO
1º.- Naturaleza y efectos del Bautismo

552.- ¿Qué es el sacramento del Bautismo?

El Bautismo es un sacramento por el cual renacemos a la gracia de Dios y nos hacemos cristianos.

553.- ¿Cuáles son los efectos del sacramento del Bautismo?

El Sacramento del Bautismo confiere la primera gracia santificante, por la que se perdona el pecado original, y también los actuales, si los hay; remite toda la pena por ellos debida; imprime el carácter de cristianos; nos hace hijos de Dios, miembros de la Iglesia y herederos de la gloria y nos habilita para recibir los demás sacramentos.

554.- ¿Cuál es la materia del Bautismo?

La materia del Bautismo es el agua natural que se vierte sobre la cabeza del bautizando, en tal cantidad que corra.

555.- ¿Cuál es la forma del bautismo?

La forma del Bautismo es ésta: Yo te bautizo en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.

2º.- Ministro del Bautismo

64 Q. What is meant by an efficacious resolution?

It means that there must be a determined will to lose everything rather than commit another sin; to avoid the dangerous occasions of sin; to stamp out our bad habits; and to discharge the obligations that may have been contracted in consequence of our sins.

65 Q. What is meant by a bad habit?

By a bad habit is meant an acquired disposition to fall easily into those sins to which we have become accustomed.

66 Q. What must be done to correct bad habits?

To correct bad habits we must watch over ourselves, pray much, go often to confession, have one good director, and put into practice the counsels and remedies which he gives us.

67 Q. What is meant by dangerous occasions of sin?

By dangerous occasions of sin are meant all those circumstances of time, place, person, or things, which, of their very nature or because of our frailty, lead us to commit sin.

68 Q. Are we strictly bound to shun dangerous occasions?

We are strictly bound to shun those dangerous occasions which ordinarily lead us to commit mortal sin, and which are called the proximate occasions of sin.

69 Q. What should a person do who cannot avoid a certain occasion of sin?

A person who cannot avoid a certain occasion of sin should lay the matter before his confessor and follow his advice.

70 Q. What considerations will help us to make a good resolution?

The same considerations help us to make a good resolution as are efficacious in exciting sorrow; that is, a consideration of the motives we have to fear God's justice and to love His infinite goodness.

The Accusation of Sins to the Confessor

71 Q. Having prepared properly for confession by an examination of conscience, by exciting sorrow, and by forming a good resolution, what do you do next?

Having prepared properly for confession by an examination of conscience, by sorrow, and by a purpose of amendment, I will go to make an accusation of my sins to the confessor in order to get absolution.

72 Q. What sins are we bound to confess?

We are bound to confess all our mortal sins; it is well, however, to confess our venial sins also.

73 Q. Which are the qualities the accusation of sins, or confession, ought to have?

The principal qualities which the accusation of our sins ought to have are five: It ought to be humble, entire, sincere, prudent and brief.

74 Q. What is meant by saying that the accusation ought to be humble?

That the accusation ought to be humble, means that the penitent should accuse himself to his confessor without pride or boasting; but with the feelings of one who is guilty, who confesses his guilt, and who appears before his judge.

75 Q. What is meant by saying that the accusation ought to be entire?

That the accusation ought to be entire means that all mortal sins we are conscious of having committed since our last good confession must be made known, together with the circumstances and number.

76 Q. What circumstances must be made known for the accusation to be entire?

For the accusation to be entire, the circumstances which change the species of the sin must be made known.

77 Q. Which are the circumstances which change the species of a sin?

The circumstances which change the species of a sin are: (1) Those by which a sinful action from being venial becomes mortal; (2) Those by means of which a sinful action contains the malice of two or more mortal sins.

78 Q. Give an example of a circumstance making a venial sin mortal.

If, to excuse himself, a man were to tell a lie and by doing so occasion serious harm to another, he would be bound to make known this circumstance, which changes the lie from an officious lie to a seriously harmful lie.

79 Q. Give an example of a circumstance on account of which a single sinful action contains the malice of two or more sins.

If a man were to steal a sacred object he would be bound to accuse himself of this circumstance which adds to the theft the malice of sacrilege.

80 Q. If a penitent is not certain of having committed a sin must he confess it?

If a penitent is not certain of having committed a sin he is not bound to confess it; and if he does confess it, he should add that he is not certain of having committed it.

81 Q. What should he do who does not remember the exact number of his sins?

He who does not distinctly remember the number of his sins must mention the number as nearly as he can.

82 Q. Does he who through forgetfulness does not confess a mortal sin, or a necessary circumstance, make a good confession?

He who through pure forgetfulness does not confess a mortal sin, or a necessary circumstance, makes a good confession, provided he has been duly diligent in trying to remember it.

83 Q. If a mortal sin, forgotten in confession, is afterwards remembered, are we bound to confess it in another confession?

If a mortal sin forgotten in confession is afterwards remembered we are certainly bound to confess it the next time we go to confession.

84 Q. What does he commit who, through shame or some other motive, wilfully conceals a mortal sin in confession?

He who, through shame or some other motive, wilfully conceals a mortal sin in confession, profanes the sacrament and is consequently guilty of a very great sacrilege.

85 Q. In what way must he relieve his conscience who has wilfully concealed a mortal sin in confession?

He who has wilfully concealed a mortal sin in confession, must reveal to his confessor the sin concealed, say in how many confessions he has concealed it, and make all these confessions over again, from the last good confession.

86 Q. What reflection should a penitent make who is tempted to conceal a sin in confession?

He who is tempted to conceal a mortal sin in confession should reflect: (1) That he was not ashamed to sin, in the presence of God who sees all; (2) That it is better to manifest his sin secretly to the confessor than to live tormented by sin, die an unhappy death, and be covered with shame before the whole world on the day of general judgment; (3) That the confessor is bound by the seal of confession under the gravest sin and under threat of the severest punishments both temporal and eternal.

87 Q. What is meant by saying that the accusation ought to be sincere?

By saying that the accusation ought to be sincere, is meant that we must unfold our sins as they are, without excusing them, lessening them, or increasing them.

88 Q. What is meant by saying that the confession ought to be prudent?

That the confession ought to be prudent, means that in confessing our sins we should use the most careful words possible and be on our guard against revealing the sins of others.

89 Q. What is meant by saying the confession ought to be short?

That the confession ought to be short, means that we should say nothing that is useless for the purpose of confession.

90 Q. Is it not a heavy burden to be obliged to confess one's sins to another, especially when these are shameful sins?

Although it may be a heavy burden to confess one's sins to another, still it must be done, because it is of divine precept, and because pardon can be obtained in no other way; and, moreover, because the difficulty is compensated by many advantages and great consolations.

How to Make a Good Confession

91 Q. How do you present yourself to the confessor?

I kneel at the feet of the confessor and I say: "Bless me, Father, for I have sinned."

92 Q. What do you do while the confessor blesses you?

I humbly bow my head to receive the blessing and I make the Sign of the Cross.

93 Q. Having made the sign of the Cross what should you say?

Having made the sign of the Cross, I say: "I confess to Almighty God, to blessed Mary ever Virgin, to all the Saints, and to you, my spiritual Father, that I have sinned."

94 Q. And then what must you say?

Then I must say: "I was at confession such a time; by the grace of God I received absolution, performed my penance, and went to Holy Communion." Then I accuse myself of my sins.

95 Q. When you have finished the accusation of your sins what do you do?

When I have finished the accusation of my sins I say: "I accuse myself also of all the sins of my past life, especially of those against such or such a virtue" — for example, against purity or against the Fourth Commandment, etc.

96 Q. After this accusation what should you say?

I should say: "For all these sins and for those I do not remember, I ask pardon of God with my whole heart, and penance and absolution of you, my spiritual Father."

97 Q. Having thus finished the accusation of your sins what remains to be done?

Having finished the accusation of my sins I should listen respectfully to what the confessor says, accept the penance with a sincere intention of performing it; and, from my heart, renew my act of contrition while he gives me absolution.

98 Q. Having received absolution what remains to be done?

Having received absolution I should thank the Lord, perform my penance as soon as possible, and put in practice the advice of the confessor.

Absolution

99 Q. Must confessors always give absolution to those who go to confession to them?

Confessors should give absolution to those only whom they judge properly disposed to receive it.

100 Q. May confessors sometimes defer or refuse absolution?

Confessors not only may, but must defer or refuse absolution in certain cases so as not to profane the sacrament.

101 Q. Who are those penitents who are to be accounted badly disposed and to whom absolution must as a rule be refused or deferred?

Penitents who are to be accounted badly disposed are chiefly the following: (1) Those who do not know the principal mysteries of their faith, or who neglect to learn those other truths of Christian Doctrine which they are bound to know According to their state; (2) Those who are gravely negligent in examining their conscience, who show no signs of sorrow or repentance; (3) Those who are able but not willing to restore the goods of others, or the reputations they have injured; (4) Those who do not from their heart forgive their enemies; (5) Those who will not practise the means necessary to correct their bad habits; (6) Those who will not abandon the proximate occasions of sin.

102 Q. Is not a confessor too severe, who defers absolution because he does not believe the penitent is well enough disposed?

A confessor who defers absolution because he does not believe the penitent well enough disposed, is not too severe; on the contrary, he is very charitable and acts as a good physician who tries all remedies, even those that are disagreeable and painful, to save the life of his patient.

103 Q. Should the sinner to whom absolution is deferred or refused, despair or leave off going to confession altogether?

A sinner to whom absolution is deferred or refused, should not despair or leave off going to confession altogether; he should, on the contrary, humble himself, acknowledge his deplorable state, profit by the good advice his confessor gives him, and thus put himself as soon as possible in a state deserving of absolution.

104 Q. What should a penitent do with regard to selecting a confessor?

A genuine penitent should earnestly recommend himself to God for help to enable him to select a pious, learned, and prudent confessor, into whose hands he should put himself, obeying him as his judge and physician.

Satisfaction or Penance

105 Q. What is satisfaction?

Satisfaction, which is also called sacramental penance, is one of the acts of the penitent by which he makes a certain reparation to the justice of God for his sins, by performing the works the confessor imposes on him.

106 Q. Is the penitent bound to accept the penance imposed on him by the confessor?

Yes, the penitent is bound to accept the penance imposed on him by the confessor if he can perform it; and if he cannot, he should humbly say so, and ask some other penance.

107 Q. When should the penance be performed?

If the confessor has fixed no time, the penance should be performed as soon as convenient, and as far as possible while in the state of grace.

108 Q. How should the penance be performed?

The penance should be performed entirely and devoutly.

109 Q. Why is a penance imposed in confession?

A penance is imposed because, after sacramental absolution which remits sin and its eternal punishment, there generally remains a temporal punishment to be undergone, either in this world or in Purgatory.

110 Q. Why has our Lord willed to remit all the punishment due to sin in the sacrament of Baptism, and not in the sacrament of Penance?

Our Lord has willed to remit all the punishment due to sin in the sacrament of Baptism, and not in the sacrament of Penance, 'because the sins after Baptism are much more grievous, being committed with fuller knowledge and greater ingratitude for God's benefits, and also in order that the obligation of satisfying for them may restrain us from falling into sin again.

111 Q. Can we of ourselves make satisfaction to God?

Of ourselves we cannot make satisfaction to God, but we certainly can do so by uniting ourselves to Jesus Christ, who gives value to our actions by the merits of His passion and death.

112 Q. Does the penance which the confessor imposes always suffice to discharge the punishment which remains due to our sins?

The penance which the confessor imposes does not ordinarily suffice to discharge the punishment remaining due to our sins; and hence we must try to supply it by other voluntary penances.

113 Q. Which are the works of penance?

The works of penance may be reduced to three kinds: Prayer, Fasting, and Alms-deeds.

114 Q. What is meant by prayer?

By prayer is meant every kind of pious exercise.

115 Q. What is meant by fasting?

By fasting is meant every kind of mortification.

116 Q. What is meant by almsgiving?

By almsgiving is meant every spiritual or corporal work of mercy.

117 Q. Which penance is the more meritorious, that which the confessor gives, or that which we do of our own choice?

The penance which the confessor imposes is the most meritorious, because being part of the sacrament it receives greater virtue from the merits of the passion of Jesus Christ.

118 Q. Do those who die after having received absolution but before they have fully satisfied the justice of God, go straight to Heaven?

No, they go to Purgatory there to satisfy the justice of God and be perfectly purified.

119 Q. Can the souls in Purgatory be relieved of their pains by us?

Yes, the souls in Purgatory can be relieved by our prayers, alms-deeds, all our other good works, and by indulgences, but above all by the Holy Sacrifice of the Mass.

120 Q. Besides his penance, what else must the penitent do after confession?

Besides performing his penance after confession, the penitent, if he has justly injured another in his goods or reputation, or if he has given him scandal, must as soon as possible, and as far as he is able, restore him his goods, repair his honour, and remedy the scandal.

121 Q. How can the scandal given be remedied?

The scandal given can be remedied by removing the occasion of it and by edifying by word and example those whom we have scandalised.

122 Q. How should we make satisfaction to one whom we have offended?

We should make satisfaction to one whom we have offended, by asking his pardon, or by some other suitable reparation.

123 Q. What fruits does a good confession produce in us?

A good confession: (1) Remits the sins we have committed and gives us the grace of God; (2) Restores us peace and quiet of conscience; (3) Reopens the gates of Heaven and changes the eternal punishment of hell into a temporal punishment; (4) Preserves us from falling again, and renders us capable of partaking of the treasury of Indulgences.

Indulgences

124 Q. What is an Indulgence?

An Indulgence is the remission of the temporal punishment due on account of our sins which have been already pardoned as far as their guilt is concerned — a remission accorded by the Church outside the sacrament of Penance.

125 Q. From whom has the Church received the power to grant Indulgences?

The Church has received the power to grant Indulgences from Jesus Christ.

126 Q. In what way does the Church by means of Indulgences remit this temporal punishment?

The Church by means of Indulgences remits this temporal punishment by applying to us the superabundant merits of Jesus Christ, of the Blessed Virgin and of the Saints, which constitute what is known as the Treasure of the Church.

127 Q. Who has the power to grant Indulgences?

The Pope alone has the power to grant Indulgences in the whole Church, and the Bishop in his own diocese, according to the faculty given him by the Pope.

128 Q. How many kinds of Indulgences are there?

Indulgences are of two kinds: plenary and partial.

129 Q. What is a plenary Indulgence?

A plenary Indulgence is that by which the whole temporal punishment due to our sins is remitted. Hence, if one were to die after having gained such an Indulgence, he would go straight to Heaven, being, as he is, perfectly exempt from the pains of Purgatory.

130 Q. What is a partial Indulgence?

A partial Indulgence is that by which is remitted only a part of the temporal punishment due to our sins.

131 Q. Why does the Church grant Indulgences?

In granting Indulgences the Church intends to aid our incapacity to expiate all the temporal punishment in this world, by enabling us to obtain by means of works of piety and Christian charity that which in the first ages Christians gained by the rigour of Canonical penances.

132 Q. What is meant by an Indulgence of forty or a hundred days or of seven years, and the like?

By an Indulgence of forty or a hundred days, or of seven years and the like, is meant the remission of so much of the temporal punishment as would have been paid by penances of forty or a hundred days, or seven years, anciently prescribed in the Church.

133 Q. What value should we set on Indulgences?

We should set the greatest value on Indulgences because by them we satisfy the justice of God and obtain possession of Heaven sooner and more easily.

134 Q. Which are the conditions necessary to gain Indulgences?

The conditions necessary to gain Indulgences are: (1) The state of grace (at least at the final completion of the work), and freedom from those venial faults, the punishment of which we wish to cancel; (2) The fulfilment of all the works the Church enjoins in order to gain the Indulgence; (3) The intention to gain it.

135 Q. Can Indulgences be applied also to the souls in Purgatory?

Yes, Indulgences can be applied also to the souls in Purgatory, when he who grants them says that they may be so applied.

136 Q. What is a Jubilee?

A Jubilee, which as a rule is granted every twenty-five years, is a Plenary Indulgence to which are attached many privileges and special concessions, such as that of being able to obtain absolution from certain reserved sins and from censures, and the commutation of certain vows.

The Sacrament of Extreme Unction

1 Q. What is Extreme Unction?

Extreme Unction is a sacrament instituted for the spiritual as well as for the temporal comfort of the sick in danger of death.

2 Q. What are the effects of Extreme Unction?

The sacrament of Extreme Unction produces the following effects: (1) It increases sanctifying grace; (2) It remits venial sins, and also mortal sins which the sick person, if contrite, is unable to confess; (3) It takes away weakness and sloth which remain even After pardon has been obtained; (4) It gives strength to bear illness patiently, to withstand temptation and to die holily; (5) It aids in restoring us to health of body if it is for the good of the soul.

3 Q. When should Extreme Unction be received?

Extreme Unction should be received when the illness is dangerous, and after the sick person has received, if possible, the sacraments of Penance and the Blessed Eucharist; it is even well to receive it while he has the use of his senses, and has still some hope of recovery.

4 Q. Why is it well to receive Extreme Unction when the sick person has still the use of his senses, and has still some hope of recovery?

It is well to receive Extreme Unction while the sick person retains the use of his senses, and while there remains some hope of his recovery because: (1) He thus receives it with better dispositions, and is hence able to derive greater fruit from it; (2) This sacrament restores health of body (should it be for the good of the soul) by assisting the powers of nature; and hence it should not be deferred until recovery is despaired of.

5 Q. With what dispositions should the sacrament of Extreme Unction be received?

The principal dispositions for receiving Extreme Unction are: To be in the state of grace; to have confidence in the power of this sacrament and in the mercy of God and to be resigned to the will of the Lord.

6 Q. What should be the sick person's feelings on seeing the priest?

On seeing the priest, the sick person should feel thankful to God for having sent him; and should gladly receive the comforts of religion, which, if he is able, he should request himself.

The Sacrament of Holy Orders

1 Q. What is the sacrament of Holy Orders?

Holy Orders is a sacrament which gives power to exercise the sacred duties connected with the worship of God and the salvation of souls, and which imprints the character of Minister of God on the soul of him who receives it.

2 Q. Why is it called Orders?

It is called Orders because it comprises various grades, the one subordinate to the other, from which the sacred Hierarchy is composed.

3 Q. Which are these grades?

The highest is the Episcopate, which contains the fullness of the Priesthood; then comes the Priesthood; then the Diaconate, the Sub-diaconate, and the Orders called Minor.

4 Q. When did Jesus Christ institute the Sacerdotal Order?

Jesus Christ instituted the Sacerdotal Order at the Last Supper when he conferred on the Apostles and their successors the power of consecrating the Blessed Eucharist. Then on the day of His resurrection He conferred on them the power of remitting and retaining sin, thus constituting them the first Priests of the New Law in all the fullness of their power.

5 Q. Who is the Minister of this sacrament?

The bishop is the Minister of this sacrament.

6 Q. Is the dignity of the Christian Priesthood a great dignity?

The dignity of the Christian Priesthood is great indeed, because of the two-fold power which Jesus Christ has conferred upon it — that over His real body and that over His mystical body, or the Church; and because of the divine mission committed to priests to lead men to eternal life.

7 Q. Is the Catholic Priesthood necessary in the Church?

The Catholic Priesthood is necessary in the Church, because without it the faithful would be deprived of the Holy Sacrifice of the Mass and of the greater part of the sacraments; they would have no one to instruct them in the faith; and they would be as sheep without a shepherd, a prey to wolves; in short, the Church, such as Christ instituted it, would no longer exist.

8 Q. Will the Catholic Priesthood therefore never cease on this earth?

In spite of the war that hell wages against it, the Catholic Priesthood will last until the end of time, because Jesus Christ has promised that the powers of hell shall never prevail against His Church.

9 Q. Is it a sin to despise Priests?

It is a very grave sin, because the scorn and insults cast on Priests fall upon Jesus Christ Himself, who said to His Apostles: He who despises you, despises Me.

10 Q. What motive should he have who embraces the ecclesiastical state?

The motive of one who embraces the ecclesiastical state should be the glory of God and the salvation of souls alone.

11 Q. What is necessary to enter the ecclesiastical state?

To enter the ecclesiastical state a divine vocation is necessary before all else.

12 Q. What should be done to find out whether God calls us to the ecclesiastical state?

To find out if God calls us to the ecclesiastical state we should: (1) Fervently pray the Lord to make known His will to us; (2) Consult our Bishop or a learned and prudent director; (3) Diligently examine whether we have the capacity necessary for the studies, the duties, and the obligations of this state.

13 Q. If one were to enter the ecclesiastical state without a divine vocation would he do wrong?

If one were to enter the ecclesiastical state without a divine vocation he would commit a great wrong and run the risk of being lost.

14 Q. Do those parents sin who, from worldly motives, impel their sons to embrace the ecclesiastical state without any vocation?

Those parents who, for worldly motives, impel their sons to embrace the ecclesiastical state without any vocation commit a very grave sin, because by thus acting they usurp the right God has reserved to Himself alone of choosing His own ministers; and they expose their children to the danger of eternal damnation.

15 Q. Which are the duties of the faithful towards those who are called to Holy Orders?

The faithful should: (1) Give their children and dependents full liberty to follow the call of God; (2) Pray God to deign to grant good pastors and zealous ministers to His Church — it is precisely for this end that the fasts of Quarter Tense have been instituted; (3) Have special respect for all who are consecrated by Holy Orders to God's service.

The Sacrament of Matrimony

Nature of the Sacrament of Matrimony

1 Q. What is the sacrament of Matrimony?

Matrimony is a sacrament, instituted by our Lord Jesus Christ, which creates a holy and indissoluble union between a man and woman, and gives them grace to love one another holily and to bring up their children as Christians.

2 Q. By whom was Matrimony instituted?

Matrimony was instituted by God Himself in the Garden of Paradise, and was raised to the dignity of a sacrament by Jesus Christ in the New Law.

3 Q. Has the sacrament of Matrimony any special signification?

The sacrament of Matrimony signifies the indissoluble union of Jesus Christ with the Church, His Spouse, and our holy Mother.

4 Q. Why do we say that the bond of marriage is indissoluble?

We say that the bond of marriage is indissoluble or that it cannot be dissolved except by the death of either husband or wife, because God so ordained from the beginning and so Jesus Christ our Lord solemnly proclaimed.

5 Q. Can the contract be separated from the sacrament in Christian marriage?

No, in marriage among Christians the contract cannot be separated from the sacrament, because, for Christians, marriage is nothing else than the natural contract itself, raised by Jesus Christ to the dignity of a sacrament.

6 Q. Among Christians, then, there can be no true marriage that is not a sacrament?

Among Christians there can be no true marriage that is not a sacrament.

7 Q. What effects does the sacrament of Matrimony produce?

The sacrament of matrimony: (1) Gives an increase of sanctifying grace; (2) Gives a special grace for the faithful discharge of all the duties of the married state.

Minister — Rite Dispositions

8 Q. Who are the Ministers of this sacrament?

The Ministers of this sacrament are the couple themselves, who together confer and receive the sacrament.

9 Q. How is this sacrament administered?

This sacrament, preserving, as it does, the nature of a contract, is administered by the contracting parties. themselves, who declare, in the presence of the parish priest, or another priest delegated by him, and of two witnesses, that they take each other in marriage.

10 Q. What use, then, is the blessing which the parish priest gives to the married couple?

The blessing which the parish priest gives to the married couple is not necessary to constitute the sacrament, but it is given to sanction their union in the name of the Church and to invoke on them more abundantly the blessing of God.

11 Q. What intention should those have who contract marriage?

Those who contract marriage should have the intention: (1) Of doing the will of God, who calls them to that state; (2) Of working out in that state the salvation of their souls; (3) Of bringing up their children as Christians, if God should bless them with any.

12 Q. How should those about to be married prepare themselves to receive this sacrament with fruit?

In order to receive this sacrament with fruit, those about to be married should: (1) Earnestly recommend themselves to God, so as to know His will and obtain the graces necessary for that state; (2) Consult their parents before making any promise, because obedience and the respect due to them demand this; (3) Prepare themselves by a good confession, or, if necessary, a general confession of their whole life; (4) Avoid all dangerous familiarity in word or act while in each other's company.

13 Q. Which are the principal obligations of married persons?

Married persons should: (1) Guard inviolably their conjugal fidelity and behave Always and in all things as Christians; (2) Love one another, bear patiently with one another, and live in peace and concord; (3) Think seriously of providing for their children, if they have any, according to their needs; bring them up as Christians, and leave them free to choose the state of life to which they are called by God.

Conditions and Impediments

14 Q. What is necessary to contract Christian marriage validly?

To contract Christian marriage validly it is necessary to be free from every diriment impediment to marriage; and to give consent freely to the marriage contract in the presence of the parish priest (or a priest delegated by him) and of two witnesses.

15 Q. What is necessary to contract marriage lawfully?

To contract marriage lawfully it is necessary to be free from every impeding impediment to marriage; to be instructed in the principal truths of religion; and, finally, to be in a state of grace; otherwise a sacrilege would be committed

16 Q. What are impediments to marriage?

Impediments to marriage are certain circumstances which render marriage either invalid or unlawful. The former are called diriment impediments and the latter impeding impediments.

17 Q. Give examples of diriment impediments.

Diriment impediments are, for example, relationship to the fourth degree, spiritual relationship, a solemn vow of chastity, or difference in religion, that is, when one party is baptised and the other is not. [This has been altered by the 1983 code of canon law]

18 Q. Give examples of impeding impediments.

Impeding impediments are, for example, the forbidden times, a simple vow of chastity, and the like.

19 Q. Are the faithful obliged to make known to ecclesiastical authority impediments of which they have a knowledge?

The faithful are obliged to make known to ecclesiastical authority impediments of which they have knowledge; and for this reason the names of those who intend to get married are published in the Church.

20 Q. Who has the power to regulate impediments to marriage, to dispense from them, and to judge of the validity of Christian marriage?

The Church alone has power to regulate impediments to marriage, to judge of the validity of marriage among Christians and to dispense from the impediments which she has placed.

21 Q. Why has the Church alone power to place impediments and to judge of the validity of marriage?

The Church alone has power to place impediments, to judge of the validity of marriage, and to dispense from the impediments which she has placed, because the contract, being inseparable from the sacrament in a Christian marriage, also comes under the power of the Church, to which alone Jesus Christ gave the right to make laws and give decisions in sacred things.

22 Q. Can the civil authority dissolve the bonds of Christian marriage by divorce?

No, the bond of Christian marriage cannot be dissolved by the civil authority, because the civil authority cannot interfere with the matter of the sacrament nor can it put asunder what God has joined together.

23 Q. What is a civil marriage?

It is nothing but a mere formality prescribed by the [civil] law to give and insure the civil effects of the marriage to the spouses and their children.

24 Q. Is it sufficient for a Christian to get only the civil marriage or contract?

For a Christian, it is not sufficient to get only the civil contract, because it is not a sacrament, and therefore not a true marriage.

25 Q. In what condition would the spouses be who would live together united only by a civil marriage?

Spouses who would live together united by only a civil marriage would be in an habitual state of mortal sin, and their union would always be illegitimate in the sight of God and of the Church.

26 Q. Should we also get the civil marriage?

We should perform the civil marriage, because, though it is not a sacrament, it provides the spouses and their children with the civil effects of conjugal society; for this reason, the ecclesiastical authority as a general rule allows the religious marriage only after the formalities prescribed by the civil authorities have been accomplished.

[In many countries, especially English speaking countries, the civil authority acknowledges the religious marriage and gives it the civil effects, thus there is no need of a separate ceremony. However the states often add certain requirements and formalities which should be observed.]

ON THE COMMANDMENTS OF GOD AND OF THE CHURCH

The Commandments of God in General

1 Q. What is treated of in the third part of Christian Doctrine?

The Commandments of God and of the Church are treated of in the third part of Christian Doctrine.

2 Q. How many Commandments of God's Law are there?

There are Ten Commandments of God's Law:

I am the Lord thy God:

  1. Thou shalt not have strange gods before Me;
  2. Thou shalt not take the Name of the Lord thy God in vain;
  3. Remember thou keep holy the Sabbath Day;
  4. Honour thy Father and thy Mother,
  5. Thou shalt not kill;
  6. Thou shalt not commit adultery;
  7. Thou shalt not steal;
  8. Thou shalt not bear false witness;
  9. Thou shalt not covet another's wife;
  10. Thou shalt not covet another's goods.

3 Q. Why are the Commandments of God so named?

The Commandments of God are so named because God Himself has stamped them on the soul of every man; promulgated them, engraved on two tables of stone, on Mount Sinai, in the Old Law; and Jesus Christ has confirmed them in the New Law.

4 Q. Which are the Commandments of the first table?

The Commandments of the first table are the first three, which directly regard God and our duties towards Him.

5 Q. Which are the Commandments of the second table?

The Commandments of the second table are the last seven, which regard our neighbour, and our duties towards him.

6 Q. Are we bound to observe the Commandments?

Yes, we are bound to observe the Commandments, because we are all bound to live according to the will of God who created us, and because a serious transgression against even one of them is enough to merit hell.

7 Q. Are we able to observe the Commandments?

Yes, without doubt we are able to observe God's Commandments, because God never commands anything that is impossible, and because He gives grace to observe them to those who ask it as they should.

8 Q. What, in a general way, should we consider in each of the Commandments?

In each of the Commandments we should consider its positive part and its negative part, that is, what it commands and what it forbids.

The First Commandment

1 Q. Why is it said at the commencement of the Commandments: I am the Lord thy God?

It is said at the commencement of the Commandments: I am the Lord thy God, to show us that God being our Creator and Lord, can command whatever He wills, and that we, being His creatures, are bound to obey Him.

2 Q. In the words of the First Commandment: Thou shalt not have strange gods before Me, what does God command us?

By the words of the First Commandment: Thou shalt not have strange gods before Me, He commands us to acknowledge, adore, love and serve Him alone as our Sovereign Lord.

3 Q. How do we fulfil the First Commandment?

We fulfil the First Commandment by the practice of internal and external worship.

4 Q. What is internal worship?

Internal worship is the honour which is given to God with the faculties of the soul alone, that is with the intellect and the will.

5 Q. What is external worship?

External worship is the homage that is given to God by means of outward acts and of sensible objects.

6 Q. Is it not enough internally to adore God with the heart alone?

No, it is not enough internally to adore God with the heart alone; we must also adore Him externally with both soul and body, because He is the Creator and absolute Lord of both.

7 Q. Can there be external worship without internal worship?

No, in no way can there be external worship without internal, because unless external worship is accompanied by internal, it is destitute of life, of merit, and of efficacy, like a body without a soul

8 Q. What is forbidden by the First Commandment?

The First Commandment forbids idolatry, superstition, sacrilege, heresy, and every other sin against religion.

9 Q. What is idolatry?

Idolatry is the giving to any creature, for example, to a statue, to an image, or to a man, the supreme worship of adoration that belongs to God alone.

10 Q. How is this prohibition expressed in Holy Scripture?

This prohibition is expressed in Holy Scripture in these words: Thou shalt not make to thyself a graven thing, nor the likeness of anything that is in heaven above, or on the earth beneath; and thou shalt not adore them or serve them.

11 Q. Do these words forbid every kind of image?

Certainly not; but only those of false divinities, made to be adored, as idolaters adore them. So true is this, that God Himself commanded Moses to make images, as, for example, the two statues of the Cherubim for the Ark, and the Brazen Serpent in the desert.

12 Q. What is superstition?

Superstition is any devotion that is contrary to the teaching and practice of the Church; as also the ascribing to any action or any thing whatever a supernatural virtue which it does not possess.

13 Q. What is a sacrilege?

A sacrilege is the profanation of a place, of a person, or of a thing consecrated to God and set apart for his worship.

14 Q. What is heresy?

Heresy is a culpable error of the intellect by which some truth of faith is obstinately denied.

15 Q. What else does the First Commandment forbid?

The First Commandment also forbids all dealings with the devil, and all association with anti-Christian sects.

16 Q. If one were to have recourse to and invoke the devil, would he commit a grave sin?

If one were to have recourse to and invoke the devil, he would commit an enormous sin, because the devil is the most wicked enemy both of God and of man.

17 Q. Is it lawful to put questions to speaking or writing tables or in any way to consult the souls of the dead by means of spiritism?

All the practices of spiritism are unlawful, because they are superstitious; and often they are not free from diabolical intervention; and hence they are rightly condemned by the Church.

18 Q. Does the First Commandment forbid us to honour and invoke the Angels and Saints?

No, it is not forbidden to honour and invoke the Angels and Saints; on the contrary, we should do so, because it is a good and useful practice highly commended by the Church; for they are God's friends and our intercessors with Him.

19 Q. Since Jesus Christ is our only mediator with God, why have recourse also to the intercession of the Blessed Virgin and the Saints?

Jesus Christ is our Mediator with God, because being true God and true man He alone in virtue of His own merits has reconciled us to God and obtains us all graces. But in virtue of the merits of Jesus Christ, and through the charity which unites them to God and us, the Blessed Virgin and the Saints help us by their intercession to obtain the graces we ask. And this is one of the great benefits of the Communion of Saints.

20 Q. May we also honour the sacred images of Jesus Christ and of the Saints?

Yes, because the honour we give the sacred images of Jesus Christ and of the Saints is referred to their very persons.

21 Q. May the relics of the Saints be honoured?

Yes, we should honour the relics of the Saints, because their bodies were living members of Jesus Christ and temples of the Holy Ghost, and will rise gloriously to eternal life.

22 Q. What is the difference between the honour we give to God and the honour we give to the Saints?

Between the honour we give to God and the honour we give to the Saints there is this difference, that we adore God because of his infinite excellence, whereas we do not adore the Saints, but honour and venerate them as God's friends and our intercessors with Him. The honour we give to God is called Latria, that is, the worship of adoration; the honour we give to the Saints is called Dulia, that is, the veneration of the servants of God; while the special honour we give to the Blessed Virgin is called Hyperdulia, that is, a special veneration of the Mother of God.

The Second Commandment

1 Q. What does the Second Commandment: Thou shalt not take the Name of God in vain, forbid?

The Second Commandment: Thou shalt not take the Name of God in vain, forbids us: (1) To utter the Name of God irreverently; (2) To blaspheme God, the Blessed Virgin or the Saints; (3) To take false, unnecessary, or unlawful oaths.

2 Q. What is meant by: Not to utter the Name of God irreverently?

Not to utter the Name of God irreverently means not to mention this Holy Name, or any other name that in a special way refers to God Himself, such as the name of Jesus, of Mary and the Saints, in anger or in joke or in any irreverent way whatsoever.

3 Q. What is blasphemy?

Blasphemy is a horrible sin which consists in words or acts of contempt or malediction against God, the Blessed Virgin, the Saints, or sacred things.

4 Q. Is there any difference between blasphemy and imprecation?

There is a difference, because by blasphemy one wishes evil to or curses God, the Blessed Virgin or the Saints; while by imprecation one wishes evil to or curses one's self or one's neighbour.

5 Q. What is an oath?

An oath is the calling on God to witness the truth of what one says or promises.

6 Q. Is it always forbidden to take an oath?

It is not always forbidden to take an oath; an oath is lawful and even gives honour to God, when it is necessary, and when one swears with truth, judgement and justice.

7 Q. When is an oath without truth?

When one affirms on oath what he knows or believes to be false, or when one promises under oath to do what one has no intention of doing.

8 Q. When is an oath without judgement?

When one makes oaths imprudently and without mature consideration, or in trivial matters.

9 Q. When is an oath without justice?

When one makes an oath to do something unjust or unlawful, as, for example, to swear to take revenge, or to steal, and so on.

10 Q. Are we obliged to keep an oath to do unjust or unlawful things?

Not only are we not obliged, but we should sin by doing such things, because they are forbidden by the laws of God and of the Church.

11 Q. What sin does he commit who swears falsely?

He who swears falsely commits a mortal sin, because he grievously dishonours God, the Infinite Truth, by calling Him to witness what is false.

12 Q. What does the Second Commandment command us to do?

The Second Commandment commands us to honour the Holy Name of God as well as to keep our oaths and vows.

13 Q. What is a vow?

A vow is a promise made to God regarding something which is good, within our power, and better than its opposite, and to the keeping of which we bind ourselves just as if it had been commanded us.

14 Q. If the keeping of a vow were to become very difficult, in whole or in part, what is to be done?

Commutation or dispensation, may be sought from one's Bishop or from the Pope, according to the character of the vow.

15 Q. Is it a sin to break a vow?

It is a sin to break a vow and therefore we should not make vows without mature reflection, nor, as a rule, without the advice of our confessor or other prudent person, so as not to expose ourselves to the danger of sinning.

16 Q. May vows be made to our Lady and the Saints?

Vows are made to God alone; we may, however, promise God to do something in honour of our Lady or the Saints.

The Third Commandment

1 Q. What does the Third Commandment: Remember thou keep holy the Sabbath day, command us to do?

The Third Commandment: Remember thou keep holy the Sabbath day, commands us to honour God by acts of worship on festivals.

2 Q. What are festivals?

In the Old Law they were Saturdays and certain other days regarded as specially solemn by the Jews; in the New Law they are Sundays and other festivals instituted by the Church.

3 Q. Why is Sunday sanctified instead of Saturday in the New Law?

Sunday, which means the Lord's Day, was substituted for Saturday, because it was on that day that our Lord rose from the dead.

4 Q. What act of worship is commanded us on festivals?

We are commanded to assist devoutly at the Holy Sacrifice of the Mass.

5 Q. With what other good works does a good Christian sanctify festivals?

A good Christian sanctifies festivals: (1) By attending Christian Doctrine, sermons, and the Divine Office; (2) By frequently and devoutly receiving the sacraments of Penance and the Blessed Eucharist; (3) By the practice of prayer and works of Christian charity.

6 Q. What does the Third Commandment forbid?

The Third Commandment forbids servile works and any other works that hinder the worship of God.

7 Q. What servile works are forbidden on festivals?

The servile works forbidden on festivals are those works called manual, that is, those material works in which the body has more part than the mind, such, for instance, as are ordinarily done by servants, labourers, and artisans.

8 Q. What sin does one commit by working on festivals?

One commits a mortal sin by working on festivals; brevity of time, however, will excuse from grave sin.

9 Q. Is no servile work at all permitted on festivals?

On festivals those works are permitted which are necessary for life, or for the service of God; as well as those done for a grave reason, with leave, when possible, from the Pastor.

10 Q. Why is servile work forbidden on festivals?

Servile work is forbidden on festivals in order that we may the better attend to divine worship, and to the care of our souls; And to enable us to rest from toil. Hence innocent recreation is not forbidden.

11 Q. What else above all should we avoid on festivals?

We should above all avoid sin and whatever leads to sin, such as dangerous diversions and dangerous places of amusement.

The Fourth Commandment

1 Q. What does the Fourth Commandment: Honour thy father and thy mother, command?

The Fourth Commandment: Honour thy father and thy mother, commands us to respect our parents, obey them in all that is not sinful, and assist them in their temporal and spiritual needs.

2 Q. What does the Fourth Commandment forbid?

The Fourth Commandment forbids us to offend our parents by word or by deed or in any other way.

3 Q. What other persons does this Commandment include under the names of father and mother?

Under the names of father and mother this Commandment also includes all our superiors, both ecclesiastical and lay, whom we must consequently obey and respect.

4 Q. Whence are derived the authority of parents to command their children and the duty of children to obey their parents?

The authority possessed by parents to command their children and the obligation children are under to obey their parents, are derived from God who constituted and established family life in order that in it man might have the first helps that are necessary towards his spiritual and temporal well-being.

5 Q. Have parents any duties towards their children?

Parents are bound to love, support and maintain their children; to attend to their religious and secular education; to give them good example; to keep them from the occasions of sin; to correct their faults; and to help them to embrace the state to which God has called them.

6 Q. Has God given us an example of a perfect family?

God gave us an example of a perfect family in the Holy Family in which Jesus Christ lived subject to the Blessed Virgin and St. Joseph until His thirtieth year, that is, until He began the Mission of preaching the Gospel entrusted to Him by His Eternal Father.

7 Q. If families were to live alone, cut off one from the other, could they provide for all their material and moral needs?

If families lived alone, cut off one from the other, they could not provide for their individual needs, and hence it is necessary that they be united in civil society so as mutually to aid one another for the common good and happiness.

8 Q. What is Civil Society?

Civil Society is the union of many families under the authority of one head for the purpose of assisting each other in securing their mutual perfection and temporal happiness.

9 Q. Whence comes the authority which rules Civil Society?

The authority which rules Civil Society comes from God, who established it for the common good.

10 Q. Are we under any obligation to obey the authority that governs Civil Society?

Yes; all who form part of Civil Society are bound to respect and obey authority because that authority comes from God and because the common good so demands.

11 Q. Are all laws imposed by the Civil Authority to be respected?

Yes; in accordance with the command and example of our Lord Jesus Christ, all laws imposed by the Civil Authority are to be respected, provided they are not contrary to the law of God.

12 Q. Have those who form part of Civil Society any other duties besides respect and obedience to the laws imposed by authority?

Besides the obligation of respect and obedience to the laws, all those who form part of Civil Society are bound to live in peace, and to endeavour, each according to his means and ability, to render that society virtuous, peaceful, orderly and prosperous.

The Fifth Commandment

1 Q. What does the Fifth Commandment: Thou shalt not kill, forbid?

The Fifth Commandment, Thou shalt not kill, forbids us to kill, strike, wound or do any other bodily harm to our neighbour, either of ourselves or by the agency of others; as also to wish him evil, or to offend him by injurious language. In this Commandment God also forbids the taking of one's own life, or suicide.

2 Q. Why is it a grave sin to kill one's neighbour?

Because the slayer unjustly invades the right which God alone has over the life of man; because he destroys the security of civil society; and because he deprives his neighbour of life, which is the greatest natural good on earth.

3 Q. Are there cases in which it is lawful to kill?

It is lawful to kill when fighting in a just war; when carrying out by order of the Supreme Authority a sentence of death in punishment of a crime; and, finally, in cases of necessary and lawful defence of one's own life against an unjust aggressor.

4 Q. Does God also forbid us in the Fifth Commandment to do harm to the spiritual life of another?

Yes, in the Fifth Commandment God also forbids us to do harm to another's spiritual life by scandal.

5 Q. What is scandal?

Scandal is any word, act, or omission which is the occasion of another's committing sin.

6 Q. Is scandal a grave sin?

Scandal is a grave sin because, by causing the loss of souls, it tends to destroy the greatest work of God, namely, the redemption; it effects the death of another's soul by depriving it of the life of grace, which is more precious than the life of the body; and is the source of a multitude of sins. Hence God threatens the severest chastisement to those who give scandal.

7 Q. Why does God, in the Fifth Commandment, forbid the taking of one's own life or suicide?

In the Fifth Commandment God forbids suicide, because man is not the master of his own life no more than of the life of another. Hence the Church punishes suicide by deprivation of Christian burial.

8 Q. Is duelling also forbidden by the Fifth Commandment?

Yes, duelling is also forbidden by the Fifth Commandment, because duelling has in it the guilt both of suicide and of homicide; and whoever voluntarily takes part in it, even as a simple onlooker, is excommunicated.

9 Q. Is duelling also forbidden when there is no danger of being killed?

This sort of duelling is also forbidden, because not only are we forbidden to kill, but even voluntarily to wound ourselves or others.

10 Q. Is the defence of one's honour an excuse for duelling?

No, because it is not true that the offence is repaired by duelling; and because honour cannot be repaired by an unjust, irrational and barbarous act such as duelling.

11 Q. What does the Fifth Commandment command?

The Fifth Commandment commands us to forgive our enemies and to wish well to all.

12 Q. What should he do who has injured another in the life of either body or soul?

He who has injured another must not only confess his sin, but must also repair the harm by compensating his neighbour for the loss he has sustained, by retracting the errors taught, and by giving good example.

The Sixth and Ninth Commandment

1 Q. What does the Sixth Commandment, Thou shalt not commit adultery, forbid?

The Sixth Commandment, Thou shalt not commit adultery, forbids every act, every look and every word contrary to chastity; it also forbids infidelity in marriage.

2 Q. What does the Ninth Commandment forbid?

The Ninth Commandment expressly forbids every desire contrary to that fidelity which husband and wife vowed to observe when contracting marriage; and it also forbids every guilty thought or desire of anything that is prohibited by the Sixth Commandment.

3 Q. Is impurity a great sin?

It is a most grave and abominable sin in the sight of God and man; it lowers man to the condition of the brute; it drags him into many other sins and vices; and it provokes the most terrible chastisements both in this world and in the next.

4 Q. Is every thought that comes into the mind against purity a sin?

The thoughts that come into the mind against purity are not of themselves sins, but rather temptations and incentives to sin.

5 Q. When is a bad thought a sin?

Bad thoughts, even though resulting in no bad deed, are sins when we culpably entertain them, or consent to them, or expose ourselves to the proximate danger of consenting to them.

6 Q. What do the Sixth and Ninth Commandments command?

The Sixth Commandment commands us to be chaste and modest in act, in look, in behaviour, and in speech. The Ninth Commandment commands us in addition to this to be chaste and pure interiorly, that is, in mind and in heart.

7 Q. What must we do to observe the Sixth and Ninth Commandments?

To be able to observe the Sixth and Ninth Commandments, we ought to pray often and from our hearts to God; be devout to the Blessed Virgin, the Mother of purity; remember that God watches us; think on death, on the Divine chastisements, and on the Passion of Jesus Christ; guard the senses; practice Christian mortification; and frequent the Sacraments with the proper dispositions.

8 Q. What must we avoid in order to preserve ourselves chaste?

To preserve ourselves chaste we must shun idleness, bad companions, the reading of bad books and papers, intemperance, the sight of indecent statues or pictures, licentious theatres, dangerous conversations, and all other occasions of sin.

The Seventh Commandment

1 Q. What does the Seventh Commandment, Thou shalt not steal, forbid?

The Seventh Commandment, Thou shalt not steal, forbids all unjust taking and all unjust keeping of what belongs to another, and also every other way of wronging our neighbour in his property.

2 Q. What is meant by stealing?

It means taking another's goods unjustly and against the owner's will, that is to say, when he has every reason and right to be unwilling to be deprived of them.

3 Q. Why is it forbidden to steal?

Because a sin is committed against justice and an injury is done to another by taking or keeping against his right and will that which belongs to him.

4 Q. What is meant by another's goods?

Everything that belongs to him everything of which he has the ownership, or the use, or the custody.

5 Q. In how many ways can another's goods be unjustly taken?

In two ways: by theft and by robbery.

6 Q. How is theft committed?

Theft is committed by taking another's goods secretly.

7 Q. How is robbery committed?

Robbery is committed by taking another's goods openly and with violence.

8 Q. In what cases may another's goods be taken without sin?

When the owner consents or even when he unjustly refuses. Thus, one in extreme necessity may take another's goods without sin, provided that he takes only so much as is absolutely necessary to relieve pressing and extreme need.

9 Q. Is it only by theft and robbery that another can be injured in his property?

He can also be injured by fraud, usury, and any other act of injustice directed against his goods.

10 Q. How is fraud committed?

Fraud is committed in trade by deceiving another by false weight, measure and money or by bad goods; by falsifying writings and documents; in short, by deceit in buying and selling or in contracts in general, as well as by refusing to pay what is just and agreed upon.

11 Q. How is usury committed?

Usury is committed by exacting, without just title, an unlawful interest for money lent, thus taking an unfair advantage of another's need or ignorance.

12 Q. What other sorts of injustice may be committed with regard to another's goods?

By unjustly causing him to lose what he has; by injuring him in his possessions; by not working as in duty bound; by maliciously refusing to pay debts or wages due; by wounding or killing his stock; by damaging property held in custody; by preventing another from making just gains; by aiding thieves; And by receiving, concealing or buying stolen goods.

13 Q. Is it a grave sin to steal?

It is a grave sin against justice when the matter is grave; for it is most important for the good of individuals, of families, and of society that each one's right to his property should be respected.

14 Q. When is stolen matter grave?

When that which is taken is considerable, as also when serious loss is inflicted on another by taking that which in itself is of little value.

15 Q. What does the Seventh Commandment command?

The Seventh Commandment commands us to respect the property of others, to give the labourer fair wages, and to observe justice in all that concerns what belongs to others.

16 Q. Is it enough for one who has sinned against the Seventh Commandment to confess his sin?

It is not enough for one who has sinned against the Seventh Commandment to confess his sin; he must also do his best to restore what belongs to others, and to repair the loss he has caused.

17 Q. What is meant by repairing the losses caused?

Repairing the losses caused means the compensation which must be made to another for the goods or profits lost owing to the theft or other acts of injustice committed to his detriment.

18 Q. To whom must stolen property be restored?

To him from whom it has been stolen; to his heirs, if he is dead; or if this is really impossible the value of it should be devoted to the poor or to some charity.

19 Q. What should one do who finds something of great value?

He should diligently seek the owner and faithfully restore it to him.

The Eighth Commandment

1 Q. What does the Eighth Commandment, Thou shalt not bear false witness, forbid?

The Eighth Commandment, Thou shalt not bear false witness, forbids false testimony in a court of justice, and it also forbids backbiting, detraction, calumny, adulation, rash judgement and rash suspicion and every sort of lying.

2 Q. What is detraction or backbiting?

Detraction or backbiting is a sin which consists in making known another's sins and defects without sufficient reason.

3 Q. What is calumny?

Calumny is a sin which consists in maliciously attributing to another faults and defects which he did not possess.

4 Q. What is adulation?

Adulation is a sin which consists in deceiving another by falsely praising him or others for the purpose of profiting thereby.

5 Q. What is rash judgement or rash suspicion?

Rash judgement or rash suspicion is a sin which consists in judging or suspecting evil of others without sufficient foundation.

6 Q. What is a lie?

A lie is a sin which consists in asserting as true or false by word or act that which one does not believe to be really the case.

7 Q. How many kinds of lies are there?

There are three kinds: The jocose lie, the officious lie, and the malicious lie.

8 Q. What is a jocose lie?

A jocose lie is that which is told in jest and without injury to anyone.

9 Q. What is an officious lie?

An officious lie is a false statement to benefit oneself or another without injuring anyone else.

10 Q. What is a malicious lie?

A malicious lie is a false statement made to the injury of another.

11 Q. Is it ever lawful to tell a lie?

It is never lawful to tell a lie, neither in joke, nor for one's own benefit, nor for the benefit of another, because a lie is always bad in itself.

12 Q. What kind of sin is a lie?

A lie when jocose or officious is a venial sin; but when malicious it is a mortal sin if the harm done is grave.

13 Q. Is it always necessary to say all one's mind?

It is not always necessary, especially when he who questions you has no right to know what he demands.

14 Q. Is it enough for him who has sinned against the Eighth Commandment to confess the sin?

It is not enough for him who has sinned against the Eighth Commandment to confess the sin; he is also obliged to retract whatever he said when calumniating another, and to repair as far as he can the harm he has done.

15 Q. What does the Eighth Commandment command us to do?

The Eighth Commandment commands us to speak the truth at the proper time and place, and, as far as we can, to put a good interpretation upon the actions of our neighbour.

The Tenth Commandment

1 Q. What does the Tenth Commandment, Thou shalt not covet thy neighbour's goods, forbid?

The Tenth Commandment, Thou shalt not covet thy neighbour's goods, forbids the wish to deprive another of his goods and the wish to acquire goods by unjust means.

2 Q. Why does God forbid even the desire of another's goods?

God forbids the unregulated desire of another's goods, because He wishes us to be just even in thought and will, and to hold ourselves completely aloof from unjust acts.

3 Q. What does the Tenth Commandment command?

The Tenth Commandment commands us to be satisfied with the state in which God has placed us, and to bear poverty patiently should God have placed us in that condition.

4 Q. How can a Christian be content in a state of poverty?

A Christian can be content in a state of poverty by reflecting that our greatest good is a pure and peaceful conscience; that our true home is heaven; and that Jesus Christ made Himself poor for love of us and has promised a special reward to those who bear poverty patiently.

THE PRECEPTS OF THE CHURCH

The Precepts of the Church in General
[The current regulations are given after each chapter.]

1 Q. Besides the Commandments of God what else must we observe?

Besides the Commandments of God we must also observe the Precepts of the Church.

2 Q. Are we obliged to obey the Church?

Undoubtedly we are obliged to obey the Church, because Jesus Christ Himself commands us to do so, and because the Precepts of the Church help us to observe the Commandments of God.

3 Q. When does the obligation to observe the Precepts of the Church begin to bind?

As a rule the obligation to observe the Precepts of the Church begins to bind us as soon as we come to the age of reason.

4 Q. Is it a sin to transgress a Precept of the Church?

Knowingly to transgress a Precept of the Church in grave matter is a mortal sin.

5 Q. Who can dispense from a Precept of the Church?

Only the Pope, or one who has received from him the power to do so, can dispense from a Precept of the Church.

6 Q. Name the Precepts of the Church.

The Precepts of the Church are: 1. To hear Mass on all Sundays and on Holydays of obligation. 2. To fast during Lent, on Ember Days and appointed Vigils, and not to eat meat on forbidden days. 3. To confess our sins at least once a year, and to receive Holy Communion at Easter each one in his own parish. 4. To contribute to the support of the Church, according to local custom. 5. Not to solemnise marriage at forbidden times, that is, from the first Sunday in Advent until the Epiphany, and from the first day of Lent until Low Sunday.

The First Precept of the Church

7 Q. What does the First Precept of the Church: To hear Mass on all Sundays and on Holydays of obligation, order us to do?

The First Precept of the Church: To hear Mass on all Sundays and on Holydays of obligations, orders us to assist devoutly at Mass on all Sundays and on Holydays of obligation.

8 Q. At which Mass does the Church desire us to assist on Sundays and on Holydays of obligation?

The Mass at which the Church desires us to assist, if possible, on Sundays and Holydays of obligation is the Parochial Mass.

9 Q. Why does the Church recommend the faithful to assist at the Parochial Mass?

The Church recommends the faithful to assist at the Parochial Mass: (1) In order that all the parishioners of the same parish may unite in prayer together with their Pastor, who is their head; (2) In order that the parishioners may participate more abundantly in the Holy Sacrifice of the Mass, which is applied principally for them; (3) In order that they may hear the truths of the Gospel, which Pastors are bound to explain during Mass; (4) In order that they may learn the regulations and notices which are published at that Mass.

10 Q. What is meant by the Lord's Day?

The Lord's Day means the day of the Lord, that is, the day specially consecrated to divine service.

11 Q. Why in the First Precept of the Church is special mention made of the Lord's day?

In the First Precept of the Church special mention is made of the Lord's Day, because it is the principal Christian festival, as the Sabbath was the principal Jewish festival, and because it was instituted by God Himself.

12 Q. What other festivals have been instituted by the Church?

The Church has instituted Feasts of our Lord, of the Blessed Virgin, of the Angels and of the Saints.

13 Q. Why did the Church institute other Festivals of our Lord?

The Church instituted other Festivals of our Lord in memory of His divine Mysteries.

14 Q. And why have Festivals of the Blessed Virgin and of the Saints been instituted?

Festivals of the Blessed Virgin and of the Saints have been instituted: (1) In memory of the graces which God has given them, and to thank His divine goodness; (2) In order that we may honour them, imitate their example, and be aided by their prayers.

[The universal law of the Church reckons ten Holydays of obligation: the feasts of Christmas, the Circumcision, the Epiphany, the Ascension, Corpus Christi, the Immaculate Conception, the Assumption, St. Joseph, Sts. Peter and Paul, and All Saints (CIC 1917: Can.1247; CIC 1983, Can. 1246). In many countries, by local concessions, they are reduced.]

The Second Precept of the Church

15 Q. What is commanded by the Second Precept of the Church in the words, To fast on the days prescribed?

By the words, To fast on the days prescribed, the Second Precept of the Church commands us to observe the fast: (1) During Lent; (2) On certain days of Advent, where this is prescribed; (3) On Ember Days; (4) And on certain Vigils.

16 Q. In what does fasting consist?

Fasting consists in taking but one meal a day and in abstaining from prohibited kinds of food.

17 Q. On fast days may a collation be taken in the evening?

Through the concession of the Church, a collation may be taken in the evening on fast days.

18 Q. What is the good of fasting?

Fasting serves to dispose us better to prayer; to do penance for past sins; and to preserve us from sinning again.

19 Q. Who are bound to fast?

Every Christian over twenty-one years of age who is not dispensed, or excused for some good reason, is bound to fast.

20 Q. Are those who are not bound to fast, exempt from all mortification?

Those who are not bound by the obligation of fasting are not exempt from all mortification, because all are bound to do penance.

21 Q. For what purpose has Lent been instituted?

Lent has been instituted to imitate in some way the rigorous fast of forty days undergone by Jesus Christ in the desert, and to prepare us by penitential exercises to celebrate the feast of Easter devoutly.

22 Q. Why has the Advent fast been instituted?

The Advent fast has been instituted to prepare us to celebrate devoutly the Feast of our Lord's Nativity.

23 Q. Why has the fast of Ember Days been instituted?

The fast of Ember Days has been instituted: (1) To consecrate each of the Four Seasons of the year by some days' penance; (2) To beg of God the preservation of the fruits of the earth; (3) To thank Him for those already given us; (4) And to beseech Him to give good priests to His Church, the usual days for ordaining priests being the Ember Saturdays.

24 Q. Why has fasting on Vigils been instituted?

Fasting on Vigils has been instituted to prepare us to celebrate the principal Feasts devoutly.

25 Q. What is forbidden on Fridays, and also on Saturdays where not dispensed?

On Fridays, and also on Saturdays where not dispensed, it is forbidden to eat meat, except in case of necessity.

26 Q. Why does the Church wish us to abstain from eating meat on these days?

In order that we may do penance each week, and especially on Friday, in honour of the Passion, and on Saturdays in memory of the burial of Jesus Christ, and in honour of the Blessed Virgin.

[From the Code of Canon Law of 1917, with the modifications approved in 1949, (complete) abstinence only is to be observed on all the Fridays throughout the year. Fast and (complete) abstinence is to be observed on Ash Wednesday, the Fridays of Lent, Ember Fridays, the Vigils of the Assumption and Christmas, and Holy Saturday. Fast only (and partial abstinence) is to be observed on: all weekdays of Lent, Ember Wednesdays and Saturdays, and the Vigils of Pentecost and All Saints.

On the days of fast, only one full meal is allowed. Two other meatless snacks, sufficient to maintain strength may be taken according to each one's needs, but together they should not equal another full meal. Meat may be taken at the principal meal on a day of fast except on the days of complete abstinence. Eating between meals is forbidden, but liquids including milk and fruit juices are allowed.

On holydays of obligation, except in Lent, there is neither fast nor abstinence.

The laws of abstinence binds all who have completed their seventh year of age; the law of fasting binds all persons from the completion of their twenty first year until the beginning of their sixtieth. (The completion of the seventh year means the day after the seventh birthday).

According to the 1983 Code of Canon Law, "All Fridays through the year and the time of Lent are penitential days and times throughout the universal Church. Abstinence from eating meat . . . is to be observed on Fridays throughout the year unless they are solemnities; abstinence and fast are to be observed on Ash Wednesday and (Good) Friday. All adults who have completed their fourteenth year are bound by the law of abstinence; all adults (from age 18) are bound by the law of fast up to the beginning of their sixtieth year." The Episcopal Conference can modify these general rules.

In the United States, "Catholics are obliged to abstain from the eating of meat on Ash Wednesday and all Fridays during the season of Lent. They are also obliged to fast on Ash Wednesday and on Good Friday. Self-imposed observances of fasting on all weekdays of Lent is strongly recommended. Abstinence from flesh meat on all Fridays of the year is especially recommended to individuals and to the Catholic community as a whole."

In Australia, "Abstinence from meat, and fasting, are to be observed on Ash Wednesday and Good Friday. On all other Fridays of the year the law of the common practice of penance is fulfilled by performing any of the following: (a) prayer, as for example Mass attendance, family prayer, . . . (b) self-denial, e.g. not eating meat, not eating sweets or dessert, . . (c) helping others, e.g. special attention to someone who is poor, sick, elderly, . . ."

Since a clarity and precision in a law helps for its fulfilment, the faithful are strongly recommended to follow the traditional rules, though only the recent regulations oblige under pain of mortal sin.]

The Third Precept of the Church

27 Q. What does the Church command us in the words of the Third Precept: To go to Confession at least once a year?

By the words of the Third Precept: To go to Confession a least once a year, the Church obliges all Christians, who have come to the use of reason, to approach the sacrament of Penance at least once a year.

28 Q. What is the best time to satisfy the precept of annual Confession?

The best time to satisfy the precept of annual Confession is Lent, in accordance with the usage introduced and approved by the whole Church.

29 Q. Why does the Church say that we are to confess at least once a year?

The Church uses the words at least to let us see her desire that we should approach the sacraments more frequently.

30 Q. Is it useful, then, to go often to Confession?

It is most useful to go often to Confession, especially as it is difficult for one who goes only rarely to make a good Confession and to avoid mortal sin.

31 Q. What does the Church command us to do by the other words of the Third Precept: To receive Holy Communion at Easter, each one in his own parish?

By the words of the Third Precept: To receive Holy Communion at Easter, each one in his own parish, the Church obliges all Christians who have come to the age of discretion to receive the Blessed Eucharist every year at Paschal time in their own parish.

32 Q. Are we bound to go to Holy Communion at other times besides Easter?

We are also bound to go to Holy Communion when in danger of death.

33 Q. Why is it said that we are to receive Holy Communion at least at Easter?

Because the Church earnestly desires us to approach Holy Communion which is the divine food of our souls, not only at Easter, but as often as we possibly can.

34 Q. Is this Precept fulfilled by a sacrilegious Confession or a sacrilegious Communion?

This Precept of the Church is not fulfilled by sacrilegious Confession and Communion, because the intention of the Church is that we receive those Sacraments for the end on account of which they were instituted, that is, for our sanctification.

The Fourth Precept of the Church

35 Q. How are we to observe the Fourth Precept: To contribute to due support of the Church?

The Fourth Precept is satisfied by paying the dues or making the offerings which have been established in recognition of God's supreme dominion over all things and as a means of providing for the becoming support of His ministers.

36 Q. How are these dues and offerings to be paid?

They are to be paid in the way and manner customary in the place in which we live.

The Fifth Precept of the Church

37 Q. What does the Church forbid in the Fifth Precept: Not to solemnise marriage at forbidden times?

In the Fifth Precept the Church does not forbid the celebration of the sacrament of marriage; but only the nuptial solemnities, from the first Sunday of Advent until the Epiphany, and from the first day of Lent until Low Sunday.

38 Q. What are the nuptial solemnities which are forbidden?

The nuptial solemnities forbidden by this Precept are the celebration of the nuptial Mass, the nuptial benediction, and marriage festivities on a large scale.

39 Q. Why are marriage festivities on a large scale out of place in Advent and Lent?

Pompous displays are out of place in Advent and Lent because these seasons are specially consecrated to penance and prayer.

ON THE VIRTUES AND VICES

The Main Virtues

Theological Virtues

1 Q. What is a supernatural virtue?

A supernatural virtue is a quality infused by God into the soul by which the latter acquires inclination, facility, and promptness to know good and do it towards eternal life.

2 Q. How many principal supernatural virtues are there?

The principal supernatural virtues are seven: three theological, and four cardinal virtues.

3 Q. What are the theological virtues?

The theological virtues are: Faith, Hope and Charity.

4 Q. Why are Faith, Hope and Charity called theological virtues?

Faith, Hope and Charity are called theological virtues, because they have God as their immediate and principal object, and are infused by Him.

5 Q. How can the theological virtues have God for their immediate object?

The theological virtues have God for their immediate object, in this way that by Faith we believe in God, and believe all He has revealed; by Hope, we hope to possess God; and by Charity, we love God and in Him we love ourselves and our neighbour.

6 Q. When does God infuse the theological virtues into the soul?

God in His goodness infuses the theological virtues into the soul when adorning us with His sanctifying grace; and hence when receiving Baptism we were enriched with these virtues and, along with them, with the gifts of the Holy Ghost.

7 Q. Is it enough towards salvation, to have received the theological virtues in Baptism?

For one who has come to the use of reason, it is not enough to have received the theological virtues in Baptism; it is also necessary to make frequent acts of Faith, Hope and Charity.

8 Q. When are we obliged to make acts of Faith, Hope and Charity?

We are obliged to make acts of Faith, Hope and Charity, when we come to the use of reason; often during life; and when in danger of death.

On Faith

9 Q. What is Faith?

Faith is a supernatural virtue, which God infuses into our souls, and by which, relying on the authority of God Himself, we believe everything which He has revealed and which through His Church He proposes for our belief.

10 Q. How do we know the truths God has revealed?

We know the revealed truths by means of the Church, which is infallible; that is, by means of the Pope, the successor of St. Peter, and by means of the Bishops, the successors to the Apostles, who were taught by Jesus Christ Himself.

11 Q. Are we certain of the truths the Church teaches us?

We are most certain of the truths the Church teaches, because Jesus Christ pledged His word that the Church should never be led into error.

12 Q. By what sin is the Faith lost?

Faith is lost by denying or voluntarily doubting even a single article proposed for our belief.

13 Q. How is lost Faith recovered

Lost Faith is recovered by repenting of the sin committed and by believing anew all that the Church believes.

The Mysteries of Faith

14 Q. Can we comprehend all the truths of Faith?

No, we cannot comprehend all the truths of Faith, because some of these truths are mysteries.

15 Q. What are mysteries?

Mysteries are truths above reason and which we are to believe even though we cannot comprehend them.

16 Q. Why must we believe mysteries?

We must believe mysteries because they are revealed to us by God, who, being infinite Truth and Goodness, can neither deceive nor be deceived.

17 Q. Are mysteries contrary to reason?

Mysteries are above, not contrary to, reason; and even reason itself persuades us to accept the mysteries.

18 Q. Why cannot the mysteries be contrary to reason?

The mysteries cannot be contrary to reason, because the same God who has given us the light of reason has also revealed the mysteries, and He cannot contradict Himself.

On Holy Scripture

19 Q. Where are the truths which God has revealed contained?

The truths which God has revealed are contained in Holy Scripture and in Tradition.

20 Q. What is Holy Scripture?

Holy Scripture is the collection of books written under the inspiration of the Holy Ghost, by the Prophets and the Hagiographers, the Apostles and the Evangelists. These books have been received by the Church as inspired.

21 Q. How is Holy Scripture divided?

Holy Scripture is divided into two parts, the Old and the New Testament.

22 Q. What is the Old Testament?

The Old Testament comprises the inspired books written before the coming of Jesus Christ.

23 Q. What is the New Testament?

The New Testament comprises the inspired books written after the coming of Jesus Christ.

24 Q. What is the common name for Holy Scripture?

The common name for Holy Scripture is the Holy Bible.

25 Q. What is the meaning of the word Bible?

The word Bible means the collection of holy books, the Book par excellence, the book of books, the book inspired by God.

26 Q. Why is Holy Scripture called the book "par excellence"?

Holy Scripture is so called because of the surpassing merit of the content as well as the author who inspired it.

27 Q. Can there be any error in Holy Scripture?

There cannot be any error in Holy Scripture since indeed it is inspired by God. The Author of all of the books is God Himself. This does not prevent that in copies and translations that have been made, some errors on the part of the copyists or translators may have crept into it.

28 Q. Is the reading of the Bible necessary to all Christians?

The reading of the Bible is not necessary to all Christians since they are instructed by the Church; however its reading is very useful and recommended to all.

29 Q. May any translation of the Bible, in the vernacular, be read?

We can read those translations of the Bible in the vernacular which have been acknowledged as faithful by the Catholic Church and which have explanations also approved by the Church.

30 Q. Why may we only read translations of the Bible approved by the Church?

We may only read translations of the Bible approved by the Church because she alone is the lawful guardian of the Bible.

31 Q. Through which means can we know the true meaning of the Holy Scripture?

We can only know the true meaning of Holy Scripture through the Church's interpretation, because she alone is secure against error in that interpretation.

32 Q. What should a Christian do who has been given a Bible by a Protestant or by an agent of the Protestants?

A Christian to whom a Bible has been offered by a Protestant or an agent of the Protestants should reject it with disgust, because it is forbidden by the Church. If it was accepted by inadvertence, it must be burnt as soon as possible or handed in to the Parish Priest.

33 Q. Why does the Church forbid Protestant Bibles?

The Church forbids Protestant Bibles because, either they have been altered and contain errors, or not having her approbation and footnotes explaining the obscure meanings, they may be harmful to the Faith. It is for that same reason that the Church even forbids translations of the Holy Scriptures already approved by her which have been reprinted without the footnotes approved by her.

On Tradition.

34 Q. What is meant by Tradition?

Tradition is the non-written word of God, which has been transmitted by word of mouth by Jesus Christ and by the apostles, and which has come down to us through the centuries by the means of the Church, without being altered.

35 Q. Where are the teachings of Tradition kept?

The teachings of Tradition are kept chiefly in the Councils' decrees, the writings of the Holy Fathers, the Acts of the Holy See and the words and practices of the sacred Liturgy.

36 Q. What importance must we attach to Tradition?

We must attach to Tradition the same importance as the revealed word of God which Holy Scripture contains.

On Hope

37 Q. What is Hope?

Hope is a supernatural virtue, infused by God into the soul, by which we desire and expect that eternal life that God has promised to His servants, as well as the means necessary to attain it.

38 Q. What grounds have we to hope that God will give us Heaven and the means necessary to secure it?

We hope that God will give us Heaven and the necessary means to attain it, because the all-merciful God, through the merits of our Lord Jesus Christ, has promised it to those who faithfully serve Him; and, being both faithful and omnipotent, He never fails in His promises.

39 Q. What are the conditions necessary to obtain Heaven?

The conditions necessary to obtain Heaven are the grace of God, the practice of good works, and perseverance until death in His holy love.

40 Q. How is Hope lost?

Hope is lost as often as Faith is lost; and it is also lost by the sins of despair and presumption.

41 Q. How is lost Hope regained?

Lost Hope is regained by repenting of the sin committed, and by exciting anew confidence in the divine goodness.

On Charity

42 Q. What is Charity?

Charity is a supernatural virtue, infused into our soul by God, by which we love God above all for His own sake, and our neighbour as ourselves for the love of God.

43 Q. Why should we love God?

We should love God because He is the Supreme Good, infinitely good and perfect; and also, because He commands us to do so, and because of the many benefits we receive from Him.

44 Q. How are we to love God?

We are to love God above all things else, with our whole heart, with our whole mind, with our whole soul, and with all our strength.

45 Q. What is meant by loving God above all other things?

To love God above all other things means to prefer Him to all creatures, even the dearest and most perfect, and to be willing to lose everything rather than offend Him or cease to love Him.

46 Q. What is meant by loving God with our whole heart?

To love God with our whole heart means consecrating all our affections to Him.

47 Q. What is meant by loving God with our whole mind?

To love God with our whole mind means directing all our thoughts to Him.

48 Q. What is meant by loving God with our whole soul?

To love God with our whole soul means consecrating to Him the use of all the powers of our soul.

49 Q. What is meant by loving God with all our strength?

To love God with all our strength means striving to grow ever more and more in His love, and so to act that all our actions should have as their one motive and end the love of Him and the desire of pleasing Him.

50 Q. Why should we love our neighbour?

We should love our neighbour for the love of God, because God commands it, and because every man is made to God's image.

51 Q. Are we obliged to love even our enemies?

We are obliged to love even our enemies, because they are our neighbours also and because Jesus Christ has made this love the object of an express command.

52 Q. What is meant by loving our neighbour as ourselves?

To love our neighbour as ourselves means to wish him and do him, as far as possible, the good which we ought to wish for ourselves, and not to wish or to do him any evil.

53 Q. When do we love ourselves as we ought?

We love ourselves as we ought when we endeavour to serve God and to place all our happiness in Him.

54 Q. How is charity lost?

Charity is lost by each and every mortal sin.

55 Q. How is charity regained?

Charity is regained by making acts of the love of God, by duly repenting and making a good confession.

On The Cardinal Virtues

56 Q. Name the Cardinal Virtues.

The Cardinal Virtues are Prudence, Justice, Fortitude and Temperance.

57 Q. Why are Prudence, Justice, Fortitude and Temperance called Cardinal virtues?

Prudence, Justice, Fortitude and Temperance are called cardinal virtues because all the moral virtues are founded and hinged around them. (in Latin, cardo means hinge)

58 Q. What is Prudence?

Prudence is the virtue that directs each action towards its lawful end and consequently seeks the proper means in order that the action be well accomplished in all points of view and thereby pleasing to Our Lord.

59 Q. What is Justice?

Justice is the virtue which disposes us to give everyone what belongs to him.

60 Q. What is Fortitude?

Fortitude is the virtue which renders us courageous to the point of not fearing danger, not even death, for the service of God.

61 Q. What is temperance?

Temperance disposes us to control the inordinate desires that please the senses and makes us use temporal goods with moderation.

The Gifts of the Holy Ghost

1 Q. Name the seven gifts of the Holy Ghost.

The seven gifts of the Holy Ghost are, Wisdom, Understanding, Counsel, Fortitude, Knowledge, Piety and the Fear of the Lord.

2 Q. What purpose do these gifts serve?

The gifts of the Holy Ghost serve to establish us in Faith, Hope and Charity, and to render us prompt in the exercise of those acts of virtue necessary towards attaining the perfection of a Christian life.

3 Q. What is Wisdom?

Wisdom is a gift by which the mind is lifted up from earthly and transitory things, enabling us to contemplate things eternal, that is to say, God Himself, the eternal truth, and to relish and love Him, in which consists all our good.

4 Q. What is Understanding?

Understanding is a gift which facilitates, as far as this is possible to mortal man, the understanding of the truths of faith and of the mysteries of God, which we are unable to know by the natural light of the intellect.

5 Q. What is Counsel?

Counsel is a gift by which, amidst the doubts and uncertainties of human life, we are enabled to recognise those things that redound more to God's glory, to our own salvation, and to that of our neighbour.

6 Q. What is Fortitude?

Fortitude is a gift which inspires us with valour and courage to observe faithfully the holy law of God and of the Church, by conquering all obstacles and all the assaults of our enemies.

7 Q. What is Knowledge?

Knowledge is a gift enabling us to estimate created things at their proper worth, and to learn how to use them rightly and to direct them to our last end, which is God.

8 Q. What is Piety?

Piety is a gift enabling us to venerate and love God and His Saints, and to preserve a pious and benevolent mind towards our neighbour for the love of God.

9 Q. What is the Fear of the Lord?

The Fear of the Lord is a gift which makes us respect God and fear to offend His Divine Majesty, and which detaches us from evil while inciting us to good.

The Beatitudes

1 Q. Name the Beatitudes?

The Beatitudes are eight: (1) Blessed are the poor in spirit, for theirs is the kingdom of heaven. (2) Blessed are the meek, for they shall possess the land. (3) Blessed are they that mourn, for they shall be comforted. (4) Blessed are they that hunger and thirst after justice, for they shall be filled. (5) Blessed are the merciful, for they shall obtain mercy. (6) Blessed are the clean of heart, for they shall see God. (7) Blessed are the peace-makers, for they shall be called the children of God. (8)Blessed are they that suffer persecution for justice' sake for of such is the kingdom of heaven.

2 Q. Why did Jesus Christ propose the Beatitudes to us?

Jesus Christ proposed the Beatitudes to us to make us detest the maxims of the world, and to invite us to love and practise the maxims of the gospel.

3 Q. Who are they whom the world calls happy?

The world calls those happy who abound in riches and honours, who lead a pleasant life, and who meet with no occasions of suffering.

4 Q. Who are the poor in spirit whom Jesus Christ calls blessed?

The poor in spirit are, according to the gospel, those whose hearts are detached from riches; who make good use of riches should they have any; who do not seek them too eagerly, if they have none; and who suffer the loss of such things with resignation when deprived of them.

5 Q. Who are the meek?

The meek are those who act tenderly towards their neighbour, bear patiently with his defects, and accept the offences and injuries they receive from him without contention, resentment, or vengeance.

6 Q. Who are they that mourn, yet are called happy?

They that mourn, yet are called happy, are they who suffer tribulations with resignation, and who mourn over sins committed, over the evils and scandals that prevail in the world, over Paradise because it is so distant, and over the danger there is of losing it.

7 Q. Who are they that hunger and thirst after justice?

They that hunger and thirst after justice, are those who ardently desire to increase daily more and more in divine grace and in the exercise of good and virtuous works.

8 Q. Who are the merciful?

The merciful are those who love their neighbour in God and for God's sake, compassionate his miseries, spiritual as well as corporal, and endeavour to succour him according to their means and position.

9 Q. Who are the clean of heart?

The clean of heart are those who retain no affection for sin aqnd keep aloof from it, and who above all else avoid every sort of impurity.

10 Q. Who are the peace-makers?

The peace-makers are those who preserve peace with their neighbour and with themselves, and who endeavour to bring about peace and concord between those who are at variance.

11 Q. Who are they that suffer persecution for justice' sake?

They who suffer persecution for justice' sake are those who patiently bear derision, reproof, and persecution for the sake of the faith and of the law of Jesus Christ.

12 Q. What do the various rewards promised by Jesus Christ in the Beatitudes denote?

The various rewards promised by Jesus Christ in the Beatitudes all denote under different names the eternal glory of Paradise.

13 Q. Do the Beatitudes procure us the glory of Paradise alone?

The Beatitudes not only procure us the glory of Paradise, but are also the means of leading a happy life, as far as this is possible here on earth.

14 Q. Do those who follow the path of the Beatitutdes receive any reward in this life?

Yes, certainly; those who follow the path of the Beatitudes do receive a reward even in this life, inasmuch as they enjoy interior peace and contentment, which is the beginning, even though an imperfect one, of the happiness of heaven.

15 Q. Can those who follow the maxims of the world be called truly happy?

No, because they have no true peace of soul, and are in danger of being lost eternally.

The Main Kinds of Sins

1 Q. How many kinds of sin are there?

There are two kinds of sin: original sin and actual sin.

2 Q. What is original sin?

Original sin is the sin in which we are all born, and which we contracted by the disobedience of our first parent, Adam.

3 Q. What evil effects has the sin of Adam brought upon us?

The evil effects of the sin of Adam are: The privation of grace, the loss of Paradise, together with ignorance, inclination to evil, death, and all our other miseries.

4 Q. How is original sin cancelled?

Original sin is cancelled by holy Baptism.

5 Q. What is actual sin?

Actual sin is that which man, after coming to the use of reason, commits of his own free will.

6 Q. How many kinds of actual sin are there?

There are two kinds of actual sin: mortal and venial.

7 Q. What is mortal sin?

Mortal sin is a transgression of the divine Law by which we seriously fail in our duties towards God, towards our neighbour, or towards ourselves.

8 Q. Why is it called mortal?

It is called mortal because it brings death on the soul by making it lose sanctifying grace which is the life of the soul, just as the soul itself is the life of the body.

9 Q. What injury does mortal sin do the soul?

(1) Mortal sin deprives the soul of grace and of the friendship of God; (2) It makes it lose Heaven; (3) It deprives it of merits already acquired, and renders it incapable of acquiring new merits; (4) It makes it the slave of the devil; (5) It makes it deserve hell as well as the chastisements of this life.

10 Q. Besides grave matter, what is required to constitute a mortal sin?

To constitute a mortal sin, besides grave matter there is also required full consciousness of the gravity of the matter, along with the deliberate will to commit the sin.

11 Q. What is venial sin?

Venial sin is a lesser transgression of the divine Law, by which we slightly fail in some duty towards God, towards our neighbour, or towards ourselves.

12 Q. Why is it called venial?

It is called venial Because it is light compared with mortal sin; because it does not deprive us of divine grace; and because God more readily pardons us.

13 Q. Then little account need be made of venial sin?

That would be a very great mistake, not only because venial sin is always an offence against God; but also because it does no little harm to the soul.

14 Q. What harm does venial sin do the soul?

Venial sin: (1) Weakens and chills charity in us; (2) Disposes us to mortal sin; (3) Renders us deserving of great temporal punishments both in this world and in the next.

The Vices and other Very Grievous Sins

1 Q. What is a vice?

A vice is an evil disposition of the mind to shirk good and do evil, arising from the frequent repetition of evil acts.

2 Q. What difference is there between a sin and a vice?

Between sin and vice there is this difference that sin is a passing act, whereas vice is a bad habit, contracted by continually falling into some sin.

3 Q. Which are the vices called capital?

The vices called capital are seven: Pride, Covetousness, Lust, Anger, Gluttony, Envy and Sloth.

4 Q. How are the capital vices conquered?

The capital vices are conquered by the exercise of the opposite virtues: Thus Pride is conquered by humility; Covetousness by liberality; Lust by chastity; Anger by patience; Gluttony by abstinence; Envy by brotherly love; Sloth by diligence and fervour in the service of God.

5 Q. Why are these vices called capital?

They are called capital because they are the head and fount of many other vices and sins.

6 Q. How many are the sins against the Holy Ghost?

The sins against the Holy Ghost are six: (1) Despairing of being saved; (2) Presuming on being saved without merit; (3) Opposing the known truth; (4) Envying another's graces; (5) Obstinately remaining in sin; (6) Final impenitence.

7 Q. Why are these sins specially said to be against the Holy Ghost?

These sins are specially said to be against the Holy Ghost, because they are committed through pure malice, which is contrary to goodness, the special attribute of the Holy Ghost.

8 Q. Which are the sins that are said to cry to God for vengeance?

The sins that are said to cry to God for vengeance are these four: (1) Willful murder; (2) The sin of sodomy; (3) Oppression of the poor; (4) Defrauding labourers of their wages.

9 Q. Why are these sins said to cry to God for vengeance?

These sins are said to cry to God for vengeance because the Holy Ghost says so, and because their iniquity is so great and so manifest that it provokes God to punish them with the severest chastisements.